Pov. Jackson Stewart.

Después de estas unas cuantas horas acostados en la cama jugando con nuestros pequeños, fue el momento de seguir jugando y no es por presumir pero nuestro equipo ganos la gran mayoría de los premios y nos llevamos varias medallas.

Ahora estamos esperando a que el den inicio a la partida individual de papás. Jugaremos asalta al castillo, que básicamente trata en que cada uno esconderá una bandera en algún árbol y los demás tendrán que buscarlas y quitarte el trapo que tienes como vida agarrado en la cintura, el ganador será el que quede de último.

- Bueno papás - dice la maestra encargada de este juego - ya conocen las reglas, nada de mordeduras, empujones, o en general cualquier cosa que pueda lesionar a los demás.

- Listo para que te gane perdedor - escucho que Lía me dice, la volteo a ver y de inmediato se que algo anda mal, pues está sudando mucho y se ve un poco roja.

- ¿Estas bien nena?

- Si ya te dije que solo es el calor.

- Cualquier cosa me dices - no contesta porque el silbato anuncia el inicio del juego y ahí es donde todo se descontrola, todos los papás salen corriendo en dirección a los otros comenzando a quitar vida y banderas, y en menos de diez minutos solo quedamos Lía y yo, ambos tenemos muchas vidas de repuesto y estamos cuidando en exceso nuestra bandera.

- Preparado para perder.

- Nunca fresita. - salgo corriendo hacia ella pero cuando estoy apunto de llegar veo como se desvanece quedando tirada en el césped. - Lía - la llamo cuando llegó a su lado - Hermosa despierta - la tomo en brazos y es cuando todo me cuadra, tiene como 40° de temperatura por eso el sudor y la cara que traía hace rato.

- Seños Stewart ¿La señorita Grey se encuentra bien? - pregunta una maestra.

- No lo sé, pero me la llevaré para que la lleven al médico, regresaría por los niños alrrato, no puedo perder tanto tiempo en lo que arreglan sus cosas.

- No te preocupes Jack - contesta Rick - yo llevo a los niños a casa de tu hermana.

Sin pensarlo dos veces tomo a Lía en brazos y la llevo al auto.

[...]

Tres horas después estoy llegando a mi casa, ya no tiene tanta temperatura pero sigue un poco mal.

- Fresita - la llamo mientras la acuesto en mi cama - cariño despierta, nesecito darte una ducha.

- No, una ducha no - dice mientras se envuelve en las sábanas - hace frío.

- Te vas a poner peor fresita, no te comportes como una niña y déjame bañarte.

- Está bien, pero me tienes que cargar al baño. - cuando por fin accede la cargo en brazos y la llevo al baño, le empiezo a quitar la blusa y el pans dejándola en ropa interior y después la meto en la ducha.

- Ay, está fria

- Es por tu bien hermosa - le empiezo a mojar el cabello con la poca agua que puedo agarrar con mis manos.

- Eres malo.

- No importa, lo que importa es que estarás bien.

- Te pareces a alguien

- ¿Así?

- Si, es un hombre muy guapo, de uno noventa, piel aceitunada, cuerpo fuerte y musculoso, ojos azules como el cielo, cabello castaño y sobre todo muy pero muy bueno. Y lo amo, solamente que nunca se lo he dicho por miedo.

- ¿Y como se llama ese galán? - rio - parece sacado de un cuento Disney.

- Jackson - me paralizó - Jackson Stewart, pero es un idiota y estoy segura que si le digo que me gusta me dejara como alguna de las canciones de Adele ¿Ya te dije que mi cantante favorita es Adele? Me encanta su música, es muy hermosa y dolorosa...

Sigue parloteando un gran rato sobre lo mucho que le gusta Adele, pero no la escucho en nada. Esa mujer, la mujer que he amado desde hace seis años me está diciendo que me ama pero que tiene miedo en dejarse amar. No sé que pensar pero de lo que si estoy seguro es que no descansaré hasta que logre tener algo con ella. Porque la amo.

[...]

Después de un par de horas en el baño con Lía ya por fin le había bajado aunque sea un poco la temperatura, por lo que le llamé a Emilé para contarle que paso.

- ¿Entonces Lía te dijo que te amaba?

- Si, aunque está un poco ida.

- Pero como dicen "los niños y los borrachos siempre dicen la verdad"

- Exacto aunque no se si cuente como borracho.

- Sea como sea, ella ya te dijo que te ama. Mínimo a ti ya te correspondieron.

- ¿Dominic no te ha dicho nada?

- No, sabes que ella me odia por todo lo que pasó. Y ya no se si merezco su perdón.

- Toma el consejo que me diste "no importa lo que ya pasó, lo que importa es que pasará y si no luchas por tener un buen futuro nunca tendrás lo que querías" y pues lucha por Dominic, es cierto que la cagaste, pero no fue todo tu culpa - cuando va a contestar escucho un ruido fuerte en el cuarto por lo que me despido y voy hacia ella.

- ¿Estoy en el cielo? O porque hay tanto hombre guapo entrando a mi habitación.

- ¿Te sientes bien fresita? - pregunto mientras me acerco y todo su frente, como lo supuse ya tiene otra vez fiebre.

- Si guapo, pero me sentiría mejor si me besaras - iba a responder cuando sentí como se tiró sobre mi y unió mis labios con los suyos, cómo siempre un sin fin de sensaciones recorrieron mi cuerpo, pero me retire pues se muy bien que es la fiebre actuando por ella.

- Te amo fresita pero no te dejare cometer una estupidez estando enferma - le digo al separarme al ver que hace un puchero - pero venga, déjate en ropa interior para que te bañes.

Horas más tarde la deje dormida en su cama al cuidado de Mila, necesitaba espacio para no tirarme sobre ella y cumplir todo lo que ambos queremos.

Nota:

Holis.

Yo sé que es un milagro pero ya tengo la inspiración para seguir escribiendo y se hecho intentaré llegar antes de que acabe la semana a la escena que todos esperamos " el frutifantastico " entre Lía y Jackson. Así que no estaremos viendo o leyendo más bien.

Pero enserio voten y comenten porque eso me ayuda a que más personas comenten.

De igual manera les quiero comentar que esa escena entre Emilé y Jackson es planeada porque así se conectará la historia entre ellos dos. Si les gustaría conocer más de la historia de Emilé vayan a leer "hasta que me olvides"