Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

19- No quiero perderte

Universo 7
Planeta Tierra.

En casa del Maestro Roshi estaban reunidos Caulifla, Goku, Tenshinhan, Chaoz e incluso Krillin, 18, Gohan y Goten hablando del próximo torneo de artes marciales que llevaría a cabo Mr. Satán en unas semanas, el dueto de saiyajines puros estaba relajado observando el horizonte donde el sol se ponía.

Caulifla estaba contándole acerca de un vínculo muy unido que tenía su hermana con los animales y todo lo que ellas hacían en su planeta para ayudar a los menos favorecidos.

—Vaya, supongo que ella se llevaría bastante bien con número diecisiete — dijo el pelinegro mostrándole una sonrisa a su discípula. —Creo que ustedes hacen las cosas incorrectas por las razones correctas, mientras no mates a nadie no me voy a oponer.

—Sí, también creo eso — añadió la saiyajin volteando a ver a Goten que estaba acercándose a ellos. —¿Tu hijo también puede convertirse en súper saiyajin? — indagó Caulifla mirando al Son menor.

—Sí, él puede hacerlo. — comentó el saiyajin estirando sus brazos.

—En ese caso deberías entrenarlo también. — propuso la saiyajin con una sonrisa. —Oye ¿Goten? — llamó la saiyajin

—Está bien, lo voy a entrenar al igual que a ti. — cerró Goku sonriendo.

El niño pequeño volteó a ver a Caulifla que lo estaba llamando, la chica hizo una seña para que se acercara y el infante obedeció. La saiyajin se puso de pie con la firme intención de observar al niño y pensar en retarlo a un combate.

—Sí, dime. — Goten miró a Caulifla con una cara llena de curiosidad.

—Tu padre me dijo que podías transformarte en súper saiyajin, ¿puedes mostrármelo? — pidió Caulifla poniéndose de pie.

—Por supuesto, también Trunks se puede transformar — informó el niño mientras se transformaba en súper saiyajin. —Listo, hice lo que deseabas.

—Bien, Goten, supongo que también participarás en el torneo ¿o no? — preguntó la chica con sus manos en la cadera.

—Claro que participaré, escuché que habrían peleadores fuertes — expresó con calma el niño saiyajin.

—Así es. — Caulifla colocó una mano al frente y se transformó en súper saiyajin. —Golpea, debes hacerlo con fuerza para que puedas ganar el torneo, Goten — pidió la saiyajin con una sonrisa en los labios.

Goku miró por el rabillo del ojo a Caulifla que estaba dispuesta a entrenar al hijo de su maestro. Goten no entendía porque hace mucho tiempo no entrenaba.

—Goten, golpea. Hace tiempo no entrenas, tal vez te gustaría hacerte fuerte ¿no es así? — le comentó Goku a Goten.

—Pero ¿y si te lastimo? — indagó con preocupación el niño pequeño.

—Vamos, no digas eso. Golpea con fuerza. — intervino Caulifla sorprendiendo al menor dlos dos Son. —Vamos, ataca.

—Si eso quieres — comentó el niño lanzando un puñetazo a la palma de la mano de Caulifla la cual retrocedió un poco.

—Nada mal, enano — felicitó la saiyajin al recibir el impacto del pequeño niño.

—Él pudo transformarse en súper saiyajin sin mucha dificultad. — explicó Goku con serenidad y luego añadió —Tal vez se parezca mucho a los saiyajin de tu universo.

—Lo dudo — comentó Caulifla bloqueando los golpes de Goten con las palmas de las manos.

—¿Por qué dices eso? ¿Hay algún otro saiyajin que se transformó con la ira? — indagó el Son mayor con curiosidad.

—¿Recuerdas a Letty? — preguntó la pelinegra a su maestro. Goku asintió dando pie a que su aprendiz siguiera. —Ni con la energía en la espalda ni haciéndola enfadar pudo conseguirlo. Es sumamente difícil hacerla enfurecer — murmuró la chica con algo de seriedad.

—¡Cielos! Sí que necesita un estímulo fuerte — agregó Goten atacando a Caulifla.

—Sí, tal vez ella tiene que enfurecerse mucho para que desbloquee sus poderes como súper saiyajin. — dijo Goku con seriedad luego miró a los dos con una sonrisa sintiendo un sentimiento cálido en su interior.

El día por fin llegó a su fin y el trío se marchó de la isla del maestro Roshi pero para lo que Goku no estaba preparado era para entender sus sentimientos, si bien no había pasado mucho tiempo o tal vez sí para maestro y alumna sí se había formado un fuerte lazo entre los dos.

(...)

Ya a la mañana siguiente la pareja saiyajin despertaba ambos estaban abrazados aunque ya estaban acostumbrados a eso. Caulifla abrió lentamente los ojos viendo a su maestro abrazarla con calidez, sonrió y dio la vuelta para quedar frente a frente con él.

El rostro de ambos estaba muy cerca que si se acortaba más la distancia terminarían por darse un beso. La saiyajin lo pensó varias veces pero no le importó mucho, en ese instante Goku despertó abriendo lentamente los ojos para hallarse con Caulifla tan cerca.

—Buenos... días. — saludó Goku con un aire de nerviosismo.

—Te ves adorable cuándo te pones nervioso, Goku. Aun así es temprano, quedemonos aquí otro rato. — musitó la saiyajin y lo abrazó más fuerte.

—Está bien. ¿Cuándo se irán a su universo? — indagó el saiyajin con un aire de tristeza.

—No lo sé, ya que Champa posiblemente estaba dormido cuando nos fuimos — murmuró sin darle importancia a aquello.

—Está bien, tal vez hablando con los pequeños Zen los dejen quedarse aquí más tiempo. — respondió el saiyajin con esperanza.

—¿Pequeños Zen? No me digas que eres amigo de Zenosama. — dijo Caulifla con sorpresa en su voz.

—Sí, es una larga historia. Pero si el señor Champa viene, yo llamaré al pequeño Zen para que los deje vivir aquí, ¿de acuerdo? — mencionó el saiyajin muy entusiasta por aquello.

Caulifla lo observó con los ojos muy abiertos y una sonrisa muy tierna el saiyajin estaba hipnotizado por la belleza de la chica mas ella lo sacó de ese pensamiento.

—¿Quieres dejar de verme así, anciano? — preguntó sonrojada la saiyajin volteando su vista a otro punto.

—Perdón, pero es que tienes una bonita sonrisa — comentó el saiyajin con inocencia.

—Eres un tonto muy agradable — añadió sonriente Caulifla con un leve sonrojo y su mirada aún desviada.

Goku rió con calma y tranquilidad observando con dificultad a la joven saiyajin recostada a su lado, Caulifla no pudo evitar sonreír ante ello.

—¿Te pasa algo? — le preguntó Goku a Caulifla.

—Sí... debo admitir que estar contigo es agradable — murmuró Caulifla con una sonrisa —. Eres alguien asombroso y sí, debo aceptar que te quiero — finalizó Caulifla con un leve sonrojo en su rostro

—También te quiero, Caulifla, no me lo perdonaría si algo malo te llegara a pasar — añadió Goku ganando la atención de la saiyajin —. Es por eso que estoy ayudándote a ser más fuerte.

Caulifla le regaló una pequeña y hermosa sonrisa a Goku mientras lo abrazaba aún más fuerte al saiyajin mayor.

No quería irse de ese planeta ni de ese universo porque allí había a alguien a quien quería y esa persona era Goku, el saiyajin más poderoso que ella alguna vez habría conocido.

(...)

El día del torneo de las artes marciales por fin había llegado, todos los guerreros Z estaban reunidos en el sitio donde se llevaría a cabo el evento.

Sin embargo estaban ajenos a lo que estaba aconteciendo en el espacio exterior, Dende estaba mirando hacia arriba en el templo con temor.

—¿Ocurre algo Kamisamas? — inquirió Mr Popo observando al dios de la tierra.

—Siento unas energías muy poderosas en un sitio alejado de la tierra — comentó el pequeño Namekusei —. Míster Popo ¿crees qué sea algo malo? — cuestionó Dendé a su asistente.

—Es probable que sea algo peligroso — mencionó Mr Popo con seriedad.

(...)

Entre el público estaba el dios de la destrucción junto a su asistente, Whis, en la mirada del ángel del universo siete estaba una expresión de preocupación debido a que algo ocurría cerca del planeta Namek.

—Señor Bills, algo está sucediendo en el espacio. Tal vez sea mejor avisarle a Goku y Vegeta — recomendó el asistente a su dios destructor.

—Haz lo que creas pertinente, yo tomaré una siesta mientras da comienzo este espectáculo — murmuró el dios de la destrucción.

—Cómo ordene... señor Bills — murmuró el ángel desapareciendo de la vista Bills.

Whis llegó hasta el salón donde estaban todos los guerreros reunidos observando a todos y cada uno de los peleadores con una sonrisa.

Caulifla portaba un uniforme idéntico al de Goku igual que Kyabe con Vegeta y Gohan con Piccolo.
Goku y su aprendiz calentaban para entrar en combate en unos cuantos minutos.

—Goku, Vegeta — llamó el ángel a los dos saiyajines.

—¿Sucede algo, Whis? — inquirió Goku sin dejar de calentar.

—Sea lo que sea dinos qué ocurre, necesito arreglar cuentas con Kakarotto — murmuró de malagana  el príncipe saiyajin.

—El planeta Namekusei está siendo atacado, ustedes dos deben ir a ese planeta — Comentó Whis con seriedad.

—¿Qué? ¿El planeta de Piccolo está siendo atacado? — indagó Goku preocupado luego miró a Caulifla y alternó con Whis —. Whis, quiero que me hagas un favor. Le prometí a Caulifla alcanzar el súper saiyajin blue, y veo que las cosas van a complicarse. — cerró con seriedad el pelinegro.

—Jum, entonces haz lo mismo con Kyabe. Kakarotto y yo iremos a Namekusei a investigar — acotó Vegeta seriamente.

Caulifla observó distante como los dos saiyajines mayores hablaban con Whis, alcanzó escuchar algo sobre el súper saiyajin blues su mirada se cruzaba con la de Goku, algo sabía él que ella no.

La saiyajin vio de reojo a Kale que estaba meditando de pie con los ojos cerrados ella se acercó a pasos acompasados a su protegida que estaba recostada en una pared.

—Kale, ¿te ocurre algo? — inquirió Caulifla con curiosidad observando a su hermana.

—No debes interrumpirla — intervino Piccolo —. Ella está incrementando su ki para la pelea que tendrá en un rato.

Caulifla produjo un sonido casi gutural denotando desagrado por lo qué hacía la morena, no entendía muy bien qué era lo que quería lograr. Se giró sobre sus talones regresando a su lugar.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro