Kale y Buu habían iniciado un combate, el ente rosa llevaba la delantera claramente. La saiyajin aun estaba probando la fuerza del amigo de Mr Satán, Majin Buu golpeó a Kale mandando a ésta contra una montaña abriéndose un agujero.

Videl se mostraba preocupada por la chica de piel morena, Buu observaba con la cabeza ladeada creyendo que la había asesinado.

Desde las rocas donde la saiyajin cayó un brillo verde se hace presente en forma de columna rompiendo cada objeto que estuviera cercano a ella. Kale se había transformado en súper saiyajin controlado.

—Ooh. — musitó Buu observando a Kale transformada. —Es emocionante.

Kale aparece justo arriba del ser de color rosa golpeándolo con ambas manos unidas en un mazo lanzándolo contra contra el suelo. Buu vuelve a lanzarse contra la saiyajin intercambiando golpes y algunas ráfagas de ki, instantes después Buu golpea con fuerza el abdomen de la chica.

La saiyajin carga una esfera de energía para lanzársela a Buu la cual acabó destruyendo una parte del cuerpo del ser de color rosa, Kale sonrió para segundos después borrar su sonrisa al ver cómo se reconstruía.

—«No creí que existiera alguien como él» — pensó Kale viendo a Buu moverse de una manera muy extraña para ella. —«Debo tener cuidado sino las cosas se me podrían salir de las manos»

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El tiempo ya había culminado dentro de la habitación del tiempo, Caulifla y Goku salen de la dimensión haciendo sentir que habían incrementado sus poderes. La saiyajin tenía su ropa algo rota por los duros entrenamientos que tuvo con Goku. Dende fue el primero en notar a la pareja saiyajin salir de la habitación.

—Ya salieron. Señor Goku, señorita Caulifla, ¿cómo les fue? — inquirió contento el dios de la tierra.

—Fue complicado, más para Caulifla. — dijo Goku observando a ella que estaba lanzando golpes al aire con rapidez. —Me hizo esforzar mucho, aprende con rapidez. — finalizó Goku con una sonrisa.

—Oye Goku, alguien viene hacia acá. — informó la saiyajin sintiendo varios ki acercándose dejando de lanzar golpes.

Piccolo y Gohan sintieron el incremento de poderes de ambos saiyajin, la chica permanecía seria al borde de la plataforma celeste donde está el templo sagrado.

Minutos después maestro y alumno arribaron al templo de kamisama encontrándose con Goku y Caulifla quienes ahora eran más cercanos.

—Me lo supuse, tenían que ser ustedes dos. — mencionó Goku con una sonrisa observando a Piccolo. —Puedo sentir el ki de Kale, está luchando contra Buu.

—¿Qué? Ese tal Buu es el mismo Majin Buu que me contaste, ¿no? — inquirió Caulifla a Goku.

—Veo que se están volviendo muy buenos amigos. Harían bonita pareja, Goku. — intervino el namekiano con un tono de burla.

—¡Señor Piccolo por favor! — pidió Gohan a su maestro.

—Gohan, dejalo así. No lo dijo de mala manera. — comentó Goku con una sonrisa apaciguando al híbrido.

Sin embargo, Caulifla estaba bastante sonrojada por lo que dijo el maestro de su hermana, miró de reojo al namekiano con el ceño fruncido, Piccolo respondió ignorándola gruñendo por lo bajo.

—Vamos, no se pongan así. No estamos aquí para pelear entre nosotros ¿o sí, Caulifla? — acotó el híbrido mirando a Piccolo y Caulifla.

—Tsk... cómo digas. — la saiyajin murmuró de mala gana restándole importancia a su discusión.

Piccolo ignoró a la saiyajin manteniéndose serio, en ese momento 18 y Krillin arriban al templo con su hija.

—Ah, Krillin y 18. — habló emocionado Goku al sentir el ki de su amigo de infancia y verlo llegar con su esposa.

—Goku, tengo noticias. Míster Satán hará un torneo de artes marciales. — mencionó Krillin con una sonrisa. —Bulma me contó que Míster Satán y Buu fueron a su casa para dar el anuncio.

—Vaya, eso es interesante. Oye Caulifla, ¿quieres participar? — inquirió la saiyajin con una sonrisa a su discípula.

La chica volteó a mirarlo y le sonrió de manera retadora mientras cerraba el puño derecho.

—¡Por supuesto, viejo! ¡Le patearé el trasero a todo aquel que le toque luchar conmigo! — Caulifla vociferó y apretó los puños mirando a Goku.

—Esa es la actitud. — sonrió el saiyajin haciendo una pausa para añadir. —Yo también participaré. — cerró igual de sonriente.

—Yo igual. — murmuró Krillin sonriendo.

—Ya está claro, también participaré yo. — agregó Gohan sonriendo.

—Entonces yo también voy a participar. — mencionó Piccolo.

18 no dijo nada y simplemente asintió al ver como todos decidían ser partícipes de aquel nuevo torneo de artes marciales.

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Lord Voldert y sus secuaces fueron abandonados por el soldado de Feeezer en un planeta desconocido para ellos, no había nada en él tan sólo una base abandonada donde, seguramente, ellos hallarían naves tal vez en buen estado.

Los guerreros mágicos entraron a las instalaciones de aquel edificio, Hermione estaba frustrada por lo que ha sucedido allí.

—Oye, niña ven aquí encontramos una nave, ¿vienes? — llamó con un tono de burla Velse.

Hernione gruñó molesta por la actitud de su compañero y obedeció yendo con sus aliados, Lord Voldert observó con ojos asesinos a su secuaz por la manera tan despectiva de hablarle a la mujer.

—¿Qué es lo que quieres, idiota? — inquirió malhumorada la joven de piel verdosa a su aliado.

—Wow, chica cálmate, no es para tanto. — respondió Velse con sorna.

—No es momento para hablar de esas idioteces, Velse. — sentenció Lord Voldert. —Ese canalla nos dejó aquí abandonados y lo último que necesitamos es un par de mocosos malcriados peleando por cualquier tontería. — exclamó el guerrero con enojo en su voz.

—Mi lord, lo lamento. — se disculpó Hermione cruzando sus dedos detrás de la espalda de una manera disimulada.

—No te preocupes, Hermione, terminaré por acostumbrarme a las tonterías de este tipo. — señaló a Velse luego observó a Dumbler que dormía cómodamente dentro de la nave. —Encárgate de este tipejo, me saca de quicio.

Hermione se tronó los dedos sonriendo con malicia, pasó un segundo para que su puño se estampara contra el rostro de su aliado.

—¡Oye! ¿Qué te pasa? Eso duele. — se quejó Dumbler.

—Eso te pasa, holgazán. — se rió con sorna Velse al ver eso. —¿Habrá guerreros fuertes en el universo? ¡Bah! Ni siquiera Freezer puede con nosotros. — comentó él con indiferencia.

—Tal vez sea así, pero no debes confiarte. — recomendó la chica cruzándose de brazos.

—Hermione, Velse es un caso perdido así que no intentes hacerlo cambiar de opinión. — respondió Dumbler con pesadez. 

Hermione se encogió de hombros dándoles la espalda a ambos mientras en su mente resonaban varios pensamientos.

—«Ojalá te den una buena paliza, infeliz.» — pensó la chica.

Ella no era del todo malvada, no estaba del todo de acuerdo con su jefe acerca de acabar con la vida de todos los planetas de ese universo.

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Universo 7
Planeta Tierra

Los guerreros Z que estuvieron en el palacio de Kamisama se dividieron para ir a buscar a los demás guerreros para aquel torneo, Caulifla tuvo que ir a buscar a Tenshinhan en su dogo a petición de Goku la saiyajin paulatinamente vio una aldea en una región montañosa y algo fría.

Por otro lugar Goku fue a casa del maestro Roshi utilizando la teletrasportación, el anciano se mostraba sorprendido por lo del torneo.

—Hace mucho tiempo no entro a un torneo de artes marciales. — comentó el Maestro acomodando sus lentes.

La brisa marina hizo mover un poco el cabello del saiyajin mientras este permanecía con una sonrisa dibujada en su rostro.

—Sí. — asintió Goku y añade. —También Caulifla va a participar. — comentó el saiyajin alegremente.

—Vaya, veo que los dos se han vuelto muy unidos desde que Milk murió. — dijo el anciano maestro con serenidad.

—Tiene razón maestro Roshi. — contestó el pelinegro con seriedad en su voz.

En ese momento apareció Caulifla usando la teletrasportación acompañada de Tenshinhan y Chaoz.

—Listo, ya llegamos. — anunció Caulifla con una sonrisa.

—Es increíble, Goku ¿tú le enseñaste esa técnica? — indagó Tenshinhan sin dar crédito.

—Sí, yo le enseñé la técnica de la teletransportación. — respondió el saiyajin con seriedad.

—Eso es sorprendente, Goku. — exclamó el pequeño Chaoz con una sonrisa.

—Es una técnica muy útil, aunque no creo que pueda servir en combate. — comentó la chica saiyajin con una sonrisa.

—Vamos, no te pongas así. Sé que tú podrás aprender a usarla en combate, Caulifla. — mencionó Goku con una sonrisa.

Las mejillas de Caulifla se tomaron de un tono carmesí mientras desviaba la mirada para que no fuera observada por los demás. Goku se percató de aquello y se le acercó a la saiyajin lentamente mientras que Tenshinhan y Chaoz se quedan hablando con el Maestro Roshi.

—Oye, ¿te sientes bien? — preguntó Goku a Caulifla.

—Sí, no te preocupes por mí. — respondió a secas la chica pero de reojo vio que Goku no estaba del todo convencido suspiró con pesadez y añadió. —Bien... me siento incómoda cuando tú me elogias, ¿entiendes?

—Ya veo, trataré de hacerlo sólo cuando estemos tú y yo. — respondió Goku con una sonrisa.

Caulifla respiró profundo y rió un poco mirando al pelinegro directamente.

—A veces, sólo a veces eres un tonto pero un tonto muy divertido. — comentó la chica entre risas.

—Creo que tienes razón, Caulifla. — comentó el saiyajin aún riéndose paró y añadió. —Pero Krillin no nos dijo cuándo sería el torneo.

—Sí, ese calvo no dijo nada acerca. En fin... — Caulifla se sentó en la playa con ambas manos detrás de la cabeza. —Veo por qué al anciano le gusta este sitio. — comentó Caulifla con una sonrisa

—Sí, es muy agradable. — añadió Goku igualmente sonriente. —Él también tiene técnicas increíbles. — comentó el saiyajin recostándose al lado de Caulifla.

—¿Ah sí? ¿Si las sabes me las enseñas? Claro, después del torneo... quiero ver qué tal es el torneo de éste mundo. — murmuró con una sonrisa la chica.