1.- ¿Libres?
Caminó exhausto por el pavimento mojado, por fin los días de grabación habían terminado. Estaba nervioso de lo que dirán los fans, ¿sería bien aceptada su última entrega?
Entró a una cafetería que estaba a unos pasos del lugar de la grabación.
—Un capuchino, por favor —miró al chico frente a él que estaba impactado— S...Sebastian Stan ¡Oh dios! Soy un gran fan.
El adolescente comenzó a llorar emocionado a lo que Seb sacó su celular y se tomó una foto con él—Eres muy dulce —sonrió y lo abrazó.
Se sentó en un salón especial para juntas, quería estar solo y tranquilo como si fuera una persona más del montón y no un hombre rodeado de cámaras y gente gritando.
[...]
Sacó su celular para ver la hora—Hmmm...7pm —suspiró viendo la calle a los lados melancólico, enseguida buscó el número de Chris.
—¡Hey, Seb! —contestó el rubio emocionado del otro lado.
—Hola... escucha —rascó su ceja nervioso mientras mordía sus labios— Hoy terminaron las grabaciones y me preguntaba... me preguntaba si querías que nos viéramos hoy en mi apartamento...
—¡Claro que sí, viejo! —miró la hora en su reloj y habló con la boca llena mientras sostenía una dona— Te parece si voy a eso de las... ¿9?
—Vale, nos vemos ahí —colgó y se fue de inmediato a su casa.
Entró y se acostó en el sofá dando un laaaargo suspiro, apagó su celular y se quedó dormido. A las 9 en punto sonó el timbre.
— ¡Seb! —gritaba el rubio afuera con una botella de champán.
Se levantó de golpe despeinado, acariciaba su cabellera intentando aplacar algunos pelillos sueltos que vivían en rebeldía— ¡Ya voy, ya voy! —abrió la puerta y el rubio se abalanzó contra el besándolo con pasión.
—Chis, para ¡nos van a ver!—susurró el castaño.
Chris lo miró confundido y caminó hacia la cocina como si nada hubiera pasado.
Se sentó de nuevo en el sillón y lo miró preocupado.
—¿Chris...?
—¿Sí?—se dio la vuelta para verlo a los ojos— ¿Qué pasa, amor? —se acercó y se agachó a su altura para tomar su mejilla.
— Mi contrato de Marvel terminó...—miraba sus manos nervioso.
— ¿Se lo diremos a los fans algún día? Es decir... podríamos arruinar nuestras carreras con esto —lo miró a los ojos preocupado.
Chris se paró sin decir algo y dio vueltas nervioso. Después de unos minutos paró en seco— Desde que comenzamos a grabar me enamoré de ti, ya no me importa lo que digan los demás.
Stan se levantó y se sentó en la barra de la cocina— ¿Entonces se lo diremos al mundo? —preguntó preocupado
Asintió y tomó sus manos— Yo estoy listo, en cuanto se lo quieras decir a los medios... lo haremos ¿Ok? —depositó un suave beso en sus labios. Seb asintió con la mirada más relajada.
La noche transcurrió. Veían películas, jugaron, hubo algunos besos, una noche normal para la pareja.
—¿Chris?
—¿Sí?
— ¿Me acompañarás la siguiente semana a la premier? —le dijo mientras jugaba con sus manos de cucharita.
El rubio se acomodó para verlo a los ojos mientras acariciaba su cabello —Si tú quieres, sí— le dedicó una sonrisa pícara.
Seb lo miró unos segundos a los ojos, tomó su mejilla y lo besó cálidamente— Quiero hacerte el amor por primera vez sin tener la mente intranquila, quiero ser tuyo por completo —le susurró escondiendo su rostro en su cuello.
El rubio le sonrió y lo cargó delicadamente hasta el cuarto para depositarlo en la cama. Cerró la puerta y por primera vez dejó que la luna los iluminara, ya no querían correr las cortinas con miedo. Subió lentamente a la cama y besó al castaño con amor y calor.
— Chris... Te amo —volvió a besarlo abrazándolo con las piernas.
Lo besó ligeramente más rápido mientras acariciaba su abdomen haciendo que su playera subiera lentamente haciéndole ver sus abdominales perfectamente marcados.
El castaño dio una vuelta para quedar arriba y se quitó la playera para volver a besarlo mientras apretaba sus mejillas.
Su respiración se aceleró un poco y se quitó la playera haciendo que ambos quedaran con el pecho descubierto.
Bajó dando pequeños besos por su pecho y su abdomen hasta llegar a sus pantalones, viéndolo a los ojos desabrochó el botón y bajó la bragueta.
El rubio lo observaba con los ojos brillantes y una ligera sonrisa.
Bajó la ropa interior y tomó su miembro sin dejar de mirarlo. Decidido metió su miembro a su boca y comenzó a succionar y moverse lento.
—Seb... —gimió bajo mientras acariciaba el cabello castaño del chico.
Lamía como si fuera una paleta sin perder el contacto visual. Lo sacó de su boca y volvió a subir lento.
Chris dio una vuelta y tomando sus manos a los lados de su cabeza lo besó. Comenzó a desabrochar su pantalón haciendo que ambos quedaran solo con las cadenas que se habían regalado.
Ambos masturbaban al otro lentamente mientras se confesaban su amor. El rubio abrió las piernas del chico e introdujo un dedo sin dejar de besarlo.
—C...Chris —gimió bajo al ser penetrado por el hombre.
Introdujo un segundo dedo y comenzó a abrirlos lentamente para aflojar al castaño.
Seb lo tomó por la nuca mientras apretaba su cabello rubio intentando tomar un poco de aire.
Le dio un último beso y se puso de rodillas para abrir las piernas del castaño y pegarlas a su pecho. —¿Estás listo, pequeño? —lo miró tierno.
Asintió cerrando los ojos para dejarse tomar por el hombre que amaba, deseaba por fin gritárselo al mundo.
Chris entró lentamente dando un ligero gemido, dejó caer su pecho y comenzó a embestirlo con delicadeza. —Te amo, Sebastian —le dijo viéndolo a los ojos sin dejar de moverse.
Gimió viéndolo mientras intentaba alcanzar sus mejillas.
Las embestidas se hicieron cada vez más rápidas y el cuarto se llenó de gemidos y jadeos fuertes.
Sebastian lo abrazó con sus piernas y se aferró a su espalda mientras le daba pequeños mordiscos en la oreja.
Los besos eran húmedos y no dejaban de confesar su amor que llevaba años siendo ocultado.
—Ya... ya casi termino —dijo el rubio apretando los ojos mientras le sacaba el aire a su amado.
El castaño terminó al instante llenando de semen el abdomen de ambos.
Chris no pudo aguantar más y terminó adentró. Cayó jadeante en el pecho del castaño y este lo abrazó.
—Tengo miedo, Chris...
— Hemos esperado mucho por esto...yo te cuidaré, no temas —le susurró y se levantó acercándose a la ventana— ¡Te amo Sebastian Stan! —gritó con todas sus fuerzas mientras algunos lobos aullaban a lo lejos. Lo miró por encima del hombro y susurró— Te amo Seb —regresó a la cama y lo abrazó— No importa lo que digan, es hora.
Quiero dedicarle esta historia a No_soy_Carol y Venus_Barnes
ya que siempre me han apoyado y me inspiran demasiado LAS AMO
Espero que les haya gustado este primer capítulo 🥺❤️recuerden votar si les gustó.
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