La atenta mirada de Yuna se posa en la guapa pelinaranja a unos metros de ella, era su objetivo esa noche.

Follar con la única amiga que le faltaba, su linda y tierna Yeji.

Yeji es como un dulce nuevo para Yuna, el cuál no se puede perder probar. La pelinaranja es muy inocente en el ámbito sexual, bueno, eso les hace pensar a todos, y Yuna quería exprimir toda esa dulzura e inocencia. Quería que Yeji la follara tan malditamente bien hasta dejarla sin aliento.

Yuna baila sensualmente en la pista de aquel bar, mientras pasa sus manos por sus caderas y muerde su labio inferior. Siente como una mirada se posa en ella y voltea hacia enfrente topándose con los penetrantes ojos de Yeji. Sin poder evitarlo sonríe sin dejar de bailar al ritmo de la música sintiendo un poco sofocada por la gente.

Al terminar la música, Yuna se dirige hacia Yeji con una sonrisa coqueta.

— ¿Te gusta como bailo, unnie?.— La menor susurra en el oído de Yeji haciendo que ésta se estremezca.

— Bailas muy bien, Nana. — La nombrada ríe.

— ¿Y no te gustaría que baile para ti...?— las traviesas manos de la menor se posan descaradamente en el miembro de Yeji y esta suelta un gemido de sorpresa.— Vamos, Yeye... Follame, demuéstrame que no eres tan inocente como parece.— Yuna acerca poco a poco sus labios al cuello de la mayor comenzando a dejar calientes besos en la zona.

Yeji no se resiste más y toma con un poco de brusquedad los hombros de Yuna y la voltea hacia al frente empujándola hacia atrás para pegar su trasero a su ya duro miembro.

— ¿Te gusta provocarme, verdad? Te encanta ser una calienta pollas, ¿no es así? — la ronca voz y las palabras de Yeji hace que Yuna se caliente aún más, sabía que no todo en ella era dulzura.— Ahora te harás cargo de lo que provocaste, Yuna-yah. Y lo harás a mi manera.

La espalda de Yuna choca con brusquedad en la pared mientras sus labios son devorados por Yeji.

— Te encanta follar, Nana. Te encanta que te metan la polla — la menor suelta un jadeo e intenta acercar más a Yeji a su cuerpo pero ésta lo detiene.— No, nena. Aquí harás lo que yo quiera.

— ¿Y que es lo que quieres?— la voz de Yuna suena agitada.

— Que te atragantes con mi polla.— Yeji hace que Yuna se arrodille ante ella y que su rostro quede delante de su pene — haz lo que te encanta hacer.— Yeji habla demandante, cosa que excita de sobremanera a Yuna.

La menor desabrocha con ansias el pantalón de Yeji y lo baja junto la ropa interior. El pene de la mayor choca con su cara haciendo que pase la lengua por sus labios. Sin dejar pasar más tiempo mete todo lo que puede a su boca comenzando un vaivén de arriba a abajo mientras se sostiene de las fuertes piernas de Yeji.

Sus ojos se humedecen al sentir el pene de Yeji tocar su garganta, pero aún así sigue con los movimientos de cabeza.

— Mmhh mírate, tan necesitada — Yeji suelta gemidos demasiado calientes y roncos. Con una de sus manos toma los cabellos de la menor y lo empuja más hacia su pene, embistiéndola con fuerza, follándole la boca con brusquedad, pero a la menor le encanta eso.

Yeji logra correrse dentro la boca de la menor y este traga todo lo que puede atragantándose un poco con el espeso líquido.

— Follame, unnie...— La pelinaranja toma la barbilla de la menor y hace que suba a sus labios para besarlo nuevamente, probando su propio sabor. Yeji sube la blusa de Yuna y la tira a algún lado de su apartamento.

Yeji termina de quitar toda su ropa y de ahí la de la menor, quedando ambas completamente desnudas. La mayor toma entre sus grandes manos los muslos de Yuna y ésta da un salto para enredar sus piernas en las caderas de ella. Yeji la vuelve a estampar contra la pared mientras simula embestidas, haciendo que Yuna se desespere al querer sentirla dentro.

— Unnie...

—¿Qué es lo que quieres, nena?.— Yeji besa con brusquedad los labios de la menor mordiéndolos un poco. Baja a su cuello y deja pequeñas mordidas y marcas temporales en la lechosa piel de Yuna.

— Qui-Quiero tu polla dentro...— Yuna suelta jadeos al sentir las succiones en su cuello y consigue lo que tanto a deseado; tener la polla de Yeji dentro de ella, tan deliciosa y caliente.

Yuna suelta un gemido y cierra los ojos cuando Yeji la embiste de una sola estocada.

La mayor empuja fuertemente sus caderas hacia la entrada de la menor, marcando sus largos dedos en los rellenos muslos de esta.

Y ¡JODER! Estar dentro de Shin Yuna es malditamente espectacular.

Ambas sueltan gemidos de placer puro, siendo callados por sus sucios y desesperados besos. Las estocadas de Yeji se vuelven más rápidas, dando más placer a ambos cuerpos. Sin duda alguna, esta no sería la única ni la última vez que tendrían sexo.

Sus cuerpos deseosos por más, llenos de sudor, y pequeñas lágrimas de parte de la menor debido al fuerte placer que Yeji le está brindando en esos momentos. Le encantaba la manera en como la mayor la folla, tan delicioso y sin ninguna pizca de dulzura. Yuna entierra sus uñas en la espalda de Yeji y muerde su hombro con fuerza haciendo que esta haga una mueca de dolor, quería dejar una marca en ella, una que dijera que a partir de ahora era suya.

— ¡A-ahh más! — Yeji toma la petición de la menor, embistiéndola aún más rápido y profundo, tocando su punto dulce, el cual la hace gritar de placer.

Yeji sube un poco sus manos hasta llegar al trasero de la menor, para después comenzar a estrujarlo entre sus manos.

Sigue embistiendo con fuerza haciendo que la espalda de Yuna choque una y otra vez con la fría pared, haciendo un sonido sordo.

— Y-ya casi llego, unnie...— Yuna ya no soporta más y se corre violentamente, sintiendo su cuerpo vibrar ante la liberación. De igual manera, Yeji llega a su segundo orgasmo, pero esta vez dentro de la menor.

Yeji sale con lentitud de Yuna para después bajarla. Cuando ya está tocando el suelo une sus labios, pero esta vez con lentitud, disfrutando de su dulce sabor.

— A partir de ahora eres completamente mía, Shin Yuna.

adaptación. todos los créditos corresponden a ©HoJiTae <3