Prólogo.
Los profesores son personas correctas que dan su vida por el hermoso trabajo de enseñar a los niños a infinidades de cosas, cuando llegan hacia nosotros son indefensas criaturas que a duras penas y saben hablar, luego de un tiempo crecen tanto que apestan cuando pasan por nuestro lado, pero sabemos que ellos, o bueno, algunos de ellos se convertirán en personas de bien e importantes para este mundo, sobre todo aquí en Gangdong-gu, apenas llegué me sentí super acogida por las personas de este hermoso lugar.
Las adolescentes parecían estar felices de que por fin iban a tener a una profesora que estuviera más cerca de su edad que la de sus padres, eran muy educadas y sobre todo detallistas, siempre comportándose a la talla y con hermosas sonrisas en el inicio del día, a pesar de que la materia de historia no es la más emocionante de todas siempre me prestan atención y se les ve felices, como si se hubieran ganado la lotería.
Eso me enorgullece, hace que infle el pecho y me sienta una persona de bien, que soy alguien que si puede contra todo e incluso el aprender un idioma en tiempo record aunque claro hay veces que las chicas me ayudan, son todas un amor de personas.
Gracias al trabajo conseguí una pequeña casa, no muy grande pero si muy acogedora al más estilo coreano, vivo sola, ya que no he conseguido a alguien a quien amar o a una amiga que realmente necesite quedarse en mi casa por más de un día, así que somos yo y butter mi hermoso perrito que me hace compañía en este lugar.
Me adapte bastante bien a la zona y a los comportamientos de las personas a mi alrededor, tanto así que me hice muy amiga de la chica que vive al lado, Myoui Mina, es de los mejores seres humanos que he conocido en toda mi existencia y eso que tampoco es que sea muy corta.
Esa chica japonesa, pelinegra y lindos lunares es la única que me ha apoyado en todas las cosas raras en las que he estado, como la vez en la que decidí meterme en esgrima y las cosas no salieron muy bien o cuando el taekwondo era la opción más viable, según yo, después de dos narices rotas y una expulsión todo cambió.
Aún con todo lo que me pasó ella se mantuvo firme subiendo ambos pulgares y una sonrisa que me transmitía confianza, tal vez por eso le rompí las narices a mis contrincantes, según el profesor, compañeros de clases.
Lo único malo que tiene, que se destaque, es la chica ruidosa que va a su casa todas las noches,una vez se confundió y tuve que gritarle que era la puerta de al lado, su voz es bastante aguda, no he tenido la oportunidad de conocerla y tampoco es como que sea una de las cosas que más quiera que suceda este año, es demasiado insoportable y no se puede quedar quieta ni un solo segundo.
A veces escucho como mantienen sus encuentros nocturnos y es bastante incómodo tengo que ponerme música a todo volumen para conciliar el sueño, ni siquiera piensan en los vecinos para hacer semejantes ruidos que de seguro espantanrian a cualquier gato.
Es toda una escandalosa.
Me cae tan mal que...
Mierda.
La detesto.
Es por eso que agradezco no haberme topado con ella en todo este tiempo y espero que sea así para toda la vida y que Mina consiga a alguien que no parezca que la están matando cuando habla o hace esos sonidos tan...
Insoportables.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro