2. Comienza el viaje
Tras una infancia entrenando y aprendiendo cosas nuevas cada día, tanto en la biblioteca como en el bosque investigando los alrededores del pueblo, había llegado el momento que estuvo esperando tanto tiempo. Su dieciséis cumpleaños, la edad mínima necesaria para convertirse en aventurero de gremio, el primer paso para su gran sueño. En su día, lo celebró con sus padres y su mejor amiga Mina. Tras cantarle y soplar las velas, Jack se puso serio para hablar con sus padres y su amiga.
- Jack: quiero deciros algo, puede que no estéis de acuerdo o que parezca demasiado peligroso. Pero acabo de cumplir dieciséis y me gustaría ser aventurero.
- Madre: lo sabemos, llevas desde muy pequeño queriendo serlo.
- Jack: ¿Y os parece bien que me vaya?
- Papá: claro que sí, ya eres mayor y tienes un sueño que perseguir.
- Jack: trabajaré muy duro para conseguir mi sueño.
- Mina: un héroe es alguien que supera cada obstáculo que la vida le pone en el camino, y se que tu lo conseguirás.
- Jack: muchísimas gracias.
Jack fue a abrazarlos con gran alegría e ilusión por sus palabras. Y tras eso, el padre le trajo una caja envuelta en papel.
- Padre: hijo, es hora de darte nuestro regalo, tu madre y yo hemos estado ahorrando dinero para poder conseguirlo.
- Jack: no era necesario tanto esfuerzo, no necesito nada.
- Mina: no seas tonto y ábrelo, seguro que te gusta.
- Jack: vale, está bien.
Cogió su regalo y lo colocó encima de una mesa para abrirlo, al quitarle el papel se trataba de una caja de madera que contenía el regalo, la cual abrió y se encontró en su interior una deslumbrante daga y un cinturón donde poder guardarla.
- Padre: sé que no es mucho, no podemos permitirnos una gran espada. Pero al menos es una daga de calidad de un herrero de la cuidad.
- Jack: ¿De la ciudad? Es increíble, os habrá costado mucho. ¿Y esto? Es cuero de calidad, me encanta de verdad.
Los padres de Jack estaban emocionados al ver la ilusión que le había hecho su regalo. Y Mina se sentía muy feliz por su amigo.
- Jack: decidido, mañana iré a la ciudad más cercana con gremio de aventureros.
- Mina: me alegro muchísimo, yo debo marcharme ya a casa, sino se me hará tarde al volver.
- Jack: ¿Ya te vas?
- Madre: Jack, va a anochecer en unas horas y debe darle tiempo a llegar a su casa.
- Jack: bueno, ¿Y por qué no se queda a dormir? ¿Te gustaría?
- Mina: lo siento Jack, pero tengo que volver a mi casa por un asunto.
- Jack: bueno no pasa nada, es que como mañana me iré.
- Mina: tranquilo, somos amigos, nunca va a ser un adiós por completo, así que hasta luego.
Jack se despidió de ella sonriente y sus padres igual, salió de la casa y él fue a su habitación para preparar las cosas para irse, además de probar el cuchillo, es la primera vez que tenía un arma que no fuera de madera, y le hacía feliz al sentirse preparado para partir a otra cuidad.
A la mañana siguiente, mientras Jack desayunaba y cogía todas las cosas que llevaría a su viaje, como comida, agua, dinero y su nueva arma. Llamaron a su puerta, y el extrañado por las horas tan tempranas fue a abrir.
- Mina: Hola, cuanto tiempo.
- Jack: ¿Mina? ¿Qué haces en mi casa?¿Has venido a despedirte?
- Mina: ¿Qué hablas sobre despedidas?
Me voy contigo.
- Jack: espera que, ¿Me puedes repetir eso último?
- Mina: a parte de tonto, sordo. Que me voy contigo.
- Jack: oye, ¿no es un poco temprano para bromas?
- Mina: tienes razón, no eres tonto.
- Jack: no me refería a eso.
- Mina: entonces, ¿Eres tonto?
- Jack: aaahh deja de marearme tanto, quiero saber el por qué estás aquí.
- Mina: te lo resumo, sabía que te ibas a ir temprano y por eso volví antes a mí casa, para preparar las cosas antes de irnos. Tengo tres meses más que tú, por lo que puedo ser aventurera también. Además te dije cuando nos conocimos que vería como te conviertes en aventurero, así que no hay más que hablar.
- Jack: pero es peligroso, ¿tus padres no les preocupa eso?
- Mina: a mis padres les parece bien y a mí también, ¿Alguna pregunta más?
- Jack: pues...
- Mina: te la guardas, y vamos a salir ya que tanto hablar de nos va a hacer de noche. Coge las cosas y vámonos.
- Jack: bueno vale, cojo las cosas y salgo.
- Mina: no hables, vamos, corre.
Entró en su casa y tras coger todo lo necesario para irse, se despidió de sus padres y salió de casa. Entonces, ambos se dirigieron camino a la ciudad más cercana con gremio de aventureros, la gran Vastrolia, una ciudad de unos miles de habitantes y conocida por su gremio "Belcos", famoso por cazar en los bosques de la zona y limpiarlos de monstruos. Durante el camino estuvieron hablando sobre lo que harían al llegar y que les gustaría que fuese su primera misión.
- Mina: espero que nuestra primera misión no sea demasiado peligrosa.
- Jack: tranquila, somos novatos por lo que nos darán misiones básicas. Como hacer recados o cazar algún monstruo que no sea demasiado difícil.
- Mina: eso me tranquiliza un poco. Seguro que poco a poco nos hacemos fuerte.
- Jack: eso espero, quiero poder ser más fuerte.
- Mina: ¿querías ser famoso para que tus padres no tengan que esforzarse tanto trabajando verdad?
- Jack: no solo eso, hay muchas personas inocentes que sufren por el mundo, y quiero ser lo suficientemente fuerte para defenderlos de cualquier ser, humano o desastre.
- Mina: eso ha sido bonito, serás un gran aventurero.
- Jack: para eso aún queda mucho, pero el primer paso es empezar y poco a poco lo conseguiré. ¿Y tu?
- Mina: ¿Yo que?
- Jack: ¿Por qué quieres ser aventurera?
- Mina: siendo sincera solo quería acompañarte, ver mundo y esas cosas. Pero ahora que lo pienso no es tan buena razón como la tuya, quizás debería haber dado una respuesta más "heroica".
- Jack: jajajaja, ¿qué te parece si te pregunto en un tiempo de nuevo cuando pruebes a ser aventurera?
- Mina: ¿ahora eres héroe experto? Que rápido lo has conseguido.
- Jack: no es eso.
- Mina: tranquilo, te tomaba el pelo. Si, me gustaría probar lo de ser aventurera y vivir experiencias, aún así siempre tendré un trabajo en la biblioteca. Pero me gustaría más probar esto contigo.
- Jack: me alegro de que hayas venido.
- Mina: siempre que te pones sentimental y empiezas a ir más lento. ¿Lo sabías?
- Jack: ¿Te vas a meter mucho conmigo?
- Mina: mucho no, lo justo.
Ella se acercó a Jack y le pasó el brazo izquierdo sobre los hombros y su puño derecho en el pecho de su amigo.
- Mina: conviértete en el héroe más grande que pueda existir en el mundo.
- Jack: lo haré, y espero que estés ahí para verlo.
- Mina: lo haré. Pero, ¿sabes cuál es el primer paso antes de ser un héroe?
- Jack: ¿Cuál?
- Mina: comer bien, o no vas a crecer. Así que saca la comida y luego seguimos el camino.
Cada uno sacó su comida y se sentaron en el césped junto al camino de tierra y comieron tranquilos. Tras eso, prosiguieron su camino hasta llegar a la ciudad tras andar varias horas seguidas.
- Mina: ¡Lo conseguimos!
- Jack: estos deseando ver el gremio, debe estar lleno de aventureros y personas fuertes.
- Mina: vamos ya, ahí está la puerta.
Fueron corriendo hacia la puerta de la ciudad en la que haya una cola de personas. Y tras esperar un rato y pagar la entrada a la ciudad lo consiguieron. Llegar a su primer destino, el primer paso para convertirse en aventureros.
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