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18. Competición (final)

Tras robar la corona a Dyrk salió corriendo hacia fuera con sus amigos para que le ayudasen mientras el escapaba de allí con la suficiente ventaja para ponérselo difícil a su oponente.

- Jack: ¡Tengo la corona!

- Mina: corre, nosotros te cubrimos.

Corría a toda velocidad saliendo de allí mientras Mina tapaba la salida del interior del castillo para entorpecer a Dyrk. Pero estaba aún más enfadado, destrozó los árboles de un aplauso. Tras salir fuera Emyrson lo bombardeó con numerosas esferas de fuego creando una gran nube de humo a su alrededor, no conseguía hacerle nada pero le dificultaba la vista y los sentidos. Al perder la calma su habilidad era más potente de forma activa pero era menos incapaz de detectar las vibraciones.

- Dyrk: ¡desaparezcan!

- Mina: desaparece tú.

Se había colocado delante de él sin que la viera por el humo espeso, e hizo crecer un árbol mucho más grueso, resistente y grande que los anteriores. Creció en diagonal y le hizo atravesar parte del castillo con Dyrk en su copa.

- Emyrson: buen trabajo, pero debemos tener cuidado.

- Mina: ¡cuidado!

Una rama de gran tamaño iba volando hacia ellos, ambos se apartaron de la trayectoria. Provenía desde la parte superior de ese gran árbol y en el tronco se veía como Dyrk avanzaba a gran velocidad corriendo hacia ellos. Mina tocando la base del árbol hacia que creciera más y más mientras Emyrson le lanzaba esferas de fuego a gran velocidad y no conseguía darle con ninguna. La técnica de Mina surtía efecto pero el árbol colapsó por su tamaño y al estar inclinado cayó destrozando el castillo y dejando que Dyrk tocase tierra.
Saltó sobre ellos y amplificó el aterrizaje al máximo para mandarlos a volar hacia los lados, y con un golpe destrozó el muro exterior del castillo y vio a Jack a lo lejos.

- Dyrk: te tengo.

Salió a correr tras él y antes de darse cuenta, Emyrson desde el suelo envío una bola de fuego que explotó. No entendió el motivo, pero tras eso Jack comenzó a acelerar aún más alejándose del castillo, se trataba de una señal para avisarle de que no habían conseguido pararle. Aún así Dyrk era más veloz que Jack y le perseguía reduciendo el terreno por momentos. Había pasado un poco más de la mitad del tiempo, y debía huir o pelear y en cualquiera de los dos casos era muy complicado conseguirlo, y llegó el momento que le alcanzó y se abalanzó sobre él haciéndole caer.

- Dyrk: ya eres mío.

- Jack: ¿tu crees?

Cuando se fijó en él detenidamente se dió cuenta que no llevaba la corona, y lo puso muy furioso. Se levantó y sujetó a Jack del cuello con una mano elevándolo del suelo, e intentaba soltarse con sus manos.

- Dyrk: si no me dices dónde está la corona, te lo sacaré a golpes.

- Jack: está bien... Te lo diré.

- Dyrk: ¡Suéltalo ya! No pienso bajar al rango básico y menos contra vosotros.

Le apretaba del cuello y le costaba un poco respirar, pero le pudo contestar.

- Jack: la...tiene...Tadera.

- Dyrk: ¿y quien es Tadera?

- Jack: tú, en rango de madera.

Mientras su oponente procesaba lo que acababa de suceder, al decir eso en una situación tan crucial. Sujetando el brazo de su oponente con su manos y con los pies se enganchó al cuerpo de Dyrk y usando toda su fuerza lo tumbó haciendo volcar al contrario y soltándose de su agarre del cuello.

- Jack: igual que lo más complicado confunde al tonto, lo más simple confunde al inteligente.

- Dyrk: te pienso destrozar.

- Jack: sin la corona también perderás. Salí del rango más bajo hace poco pero tú llevas años siendo de los mejores.

- Dyrk: acabaré contigo antes de buscarla, no estará demasiado lejos.

Jack se retiró y Dyrk se levantó rápidamente. Con gran ira en su interior fue contra Jack. Lanzaba grandes golpes amplificando al máximo las vibraciones, cada golpe hacía un gran daño por lo que Jack se dedicó a bloquear, esquivar o desviar cada uno de ellos. Trataba de perder el tiempo hasta que acabara la competición aunque todos tuvieran que perder, pero querían que alguien tan pretencioso y agresivo como Dyrk perdiera todo su prestigio contra los nuevos novatos. Mientras luchaban pasó algo que no se esperaban.

- Baldric: ¡Últimos cinco minutos!

- Dyrk: ¡no perderé! Me harás usar mi última opción contra alguien como tú.

Un poder de presencia oscura rodeaba el cuerpo de Dyrk, sus ojos se habían vuelto completamente negros y la presión que emanaba era mucho más terrorífica. Jack no entendía nada pero sabía que era peligroso. Aún así antes de poder reaccionar le golpeó y mandó volar a Jack, le interceptó en la trayectoria sin dejarle tocar el suelo y con una patada en su espalda fue volando hacia arriba. No podía reaccionar, iba a tanta velocidad que ni podía verlo venir. Cuando Jack estaba en el cielo sin poder hacer nada, Dyrk saltó llegando en un segundo y con un puñetazo creó una onda expansiva que estampó a Jack contra el suelo creando un boquete en él y dejándolo sin fuerzas para moverse.

- Dyrk: desaparece.

Jack en el suelo y Dyrk lleno de ira le lanzó un puñetazo con todas sus fuerzas con intención de matar a Jack, el cerró los ojos esperando lo peor. No pasó nada, Jack abrió de nuevo los ojos y estaba el maestro del gremio con Dyrk en sus brazos.

- Jack: ¿Qué ha pasado?

- Baldric: iba a matarte con ese ataque, ha roto las reglas. Lo he noqueado de un golpe.

- Jack: ¿Qué le ha pasado?¿Cómo era tan poderoso?

- Baldric: ha usado magia prohibida.

Jack recordó lo que le explicó Kaiser sobre la magia prohibida y romper los límites del porcentaje de maná a cambio de tiempo de vida, y comprendió lo sucedido y lo desesperado que estaba Dyrk por ganar.

- Jack: entiendo. Voy a buscarles.

- Baldric: no te esfuerces demasiado, debes estar magullado. Yo me quedaré aquí con él para que no se marche.

Jack iba a su ritmo hasta el castillo donde aún se encontraban sus amigos y volvieron los tres juntos con la corona. Tras el tiempo que habían tardado en volver, Dyrk ya estaba despierto y sentado en él suelo. Al darse cuenta, los tres se pusieron en guardia.

- Baldric: tranquilos, no podrá hacer nada conmigo para impedirlo.

- Jack: hacedle caso. Lo he probado hace un momento.

Estaban más tranquilos y se dirigieron hacia ellos dos.

- Mina: maestro, ¿ahora somos de rango de oro?

- Baldric: así es, habéis ganado y os lo merecéis.

- Emyrson: ¡Genial!

Lo celebraban juntos, sin moverse demasiado por el cansancio y el dolor, hasta que el perdedor habló.

- Dyrk: si no me hubiera descontrolado también habríais perdido.

- Jack: ahí te equivocas, teníamos la corona.

- Dyrk: no es posible que estuviera sin verla. ¿Qué truco habéis usado? ¿Tenías algún poder oculto?

- Jack: si te refieres a mí, yo no la tenía.

- Mina: la tenía yo.

- Dyrk: eso no es posible.

- Baldric: escucha y lo entenderás. Explicarle cómo lo habéis conseguido.

- Jack: de acuerdo.

Le explicaron cómo se tuvieron que sincronizar para lograrlo y en el momento exacto que lo hicieron. Mientras Jack peleaba con él dentro del castillo y sus amigos habían salido, ambos fuera abrieron un hoyo lo suficientemente profundo como para meter la corona. En el momento que Jack salió de allí y les gritó le lanzó la corona a Mina quien la metió en el hueco. No les dio tiempo de esconderla por lo que tenían que entorpecer el camino y bombardear con fuego, para que no se diera cuenta que en unos instantes hizo crecer el césped y plantas que tapaban la corona de allí. Además le daban más tiempo a Jack para huir y servir de señuelo.

- Dyrk: es demasiado enrevesado, ¿Qué hubiera pasado si lo descubría?

- Jack: era un riesgo que teníamos que correr. Lo bueno de tener compañeros es confiar que los planes podamos hacerlos entre todos.

- Dyrk: ¡eso es una estupidez!

- Jack: te han vencido tres novatos.

- Dyrk: ¡Soy de rango de platino desde hace seis años!

- Baldric: y ahora eres rango de madera. Estar en la cima te ha hecho confiado y que te creas mejor a todos los demás. Aprende de todo esto y se mejor persona.

- Dyrk: lo que tú digas.

- Baldric: a vosotros tres, descansad por hoy. Tenéis prohibido aceptar cualquier misión o petición en lo restante de semana.

- Emyrson: Sisi, descansaremos.

Se fueron a casa felices de haber ganado y que su descabellado plan funcionase, algo que ni ellos mismos pensaban que fuera a funcionar en un momento tan desesperado. Cuando llegaron estaban muy doloridos, sobre todo Jack. Los otros dos solo necesitaron un día para recuperarse, pero después de sentir los golpes con los los límites rotos por la magia prohibida y amplificados por su habilidad, acabó con varios huesos rotos por lo que Jack estuvo tres días encamado incluso teniendo factor regenerativo.

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