Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

Capítulo VII

—¿Ustedes qué? —preguntó el rubio divertido y se volteó hacia ellos.

—NamJoon —empezó diciendo JiMin nervioso a la vez que se levantaba.

—¿Pasó algo entre ustedes? —preguntó el otro sin dejar de mirarlos.

JiMin entró en pánico y a YoonGi se le hizo tan distinto en ese instante al verlo con las mejillas levemente sonrojadas mientras inhalaba y exhalaba con apremio, como si le faltara el aire. Puso la mano sobre uno de sus hombros y lo corrió hacia un costado para tener una mejor visión de NamJoon.

—No pasó nada entre nosotros...

—Es verdad —lo interrumpió JiMin y levantó la cabeza para encarar al rubio—. Fue algo accidental y ninguno de los dos se dio cuenta.

—¿Entonces tienen algo? —preguntó el chico levantando una de sus cejas con aire burlón.

Si NamJoon seguía diciendo esas cosas JiMin acabaría tirado en el suelo de tanto internar controlar su respiración.

—No hay nada entre nosotros —musitó YoonGi y se alejó un poco de JiMin.

—Así que no pasa nada... —NamJoon claramente cuestionó la situación y él se preguntó qué se le hacía tan divertido. ¿Se reía de ellos? 

—No le digas a nadie —exigió JiMin de manera seria y con la mirada tan oscura que dio miedo.

NamJoon solo le sonrió—. Somos amigos. ¿No, JiMinnie? —El chico les envió una de sus últimas sonrisas para luego salir del baño.

Sintió su celular sonar desde un lugar del baño, por lo que se inclinó un poco para alcanzar el aparato que emitía una luz, dándole a entender que alguien lo llamaba. En cuanto leyó el nombre de JungKook inmediatamente contestó.

—Hola —dijo sonriendo un poco. Hablar con su amigo era definitivamente cien veces mejor que hablar con JiMin, quien aún lo miraba reprobatoriamente desde los lavamanos.

—¿YoonGi?

—¿Qué sucede? —preguntó inmediatamente y borró la pequeña sonrisa de alegría que le sacó el chico al escucharlo hablar.

TaeHyung —dijo el otro sin más y sollozó.

YoonGi dio un paso ante la mirada atenta de JiMin, dispuesto a correr si era necesario.

—Dime qué mierda pasa. —Se sorprendió ligeramente al escuchar su voz más ronca de lo normal.

No lo encuentro —susurró JungKook llorando.

—Tranquilízate. —Respiró con más fuerza, aunque no supo si se lo dijo a JungKook o a sí mismo—. Solo búscalo. Debe estar jugándote una broma.

Hace un momento tuvimos una discusión en el departamento, así que salí para tomar algo de aire y cuando volví no estaba. —El chico se ahogó con sus propios sollozos.

—¿Sus cosas están en la casa? —preguntó mientras daba otro paso y luego otro, saliendo por fin del baño café que tanto lo mareó en un principio.

Las cosas están, pero él no y no contesta las llamadas. —Escuchó como su amigo se sonaba y caminaba de un lugar a otro—. Tengo miedo.

—Tranquilo. —Avanzó a paso rápido hacia donde estaban sus padres sentados junto a los de JiMin—. Voy para allá.

—¿Qué sucede? —preguntó su madre cuando llegó a la mesa. Solo hasta ese momento se dio cuenta que JiMin lo seguía.

—Necesito irme —soltó mirándola y pudo notar como su sonrisa se borró de inmediato.

—¿Pasó algo? —preguntó ella girándose un poco para tener una mejor visión de él.

—TaeHyung —dijo sin más y la mujer se sorprendió. Después de todo ella estaba consiente de quienes eran sus amigos.

—¿Tuvo problemas con sus padres? —preguntó asustada—. ¿Está en el hospital otra vez?

—No es eso. —Tenía la atención de todos, incluyendo a NamJoon, quien no dejaba de fruncir el ceño—. Necesito irme.

Hizo una reverencia a modo de despedida y luego se dio la vuelta, pero algo lo detuvo; la voz ronca del padre de JiMin resonó en sus oídos—. JiMin te acompañará. Al parecer vas con prisa y te ves muy alterado como para andar solo. —El hombre le dio una pequeña sonrisa y le hizo gestos a su hijo.

—No es necesario —dijo con sinceridad.

—Te seguiré de igual forma —murmuró JiMin a su lado.

No le contestó y solo caminó con rapidez hasta las afueras del gran edificio siendo seguido por JiMin. Estaba tan preocupado y alterado que no se dio cuenta que azotó la puerta del auto del chico cuando se subió. Si no fuera por que el contrario casi le da una paliza allí mismo nunca se hubiera percatado. No tenía ganas de ir contra JiMin, no en ese momento, así que solo dejó que le diera un golpe desinteresado en las costillas. Aquello no le importó.

—¿Dónde tenemos que ir? —preguntó él contrario después de un momento de silencio que se le hizo incómodo—. ¡Ahh! Espera. Ahora que recuerdo... ¿Esos no son los homosexuales que viven en mi mismo edificio?

—JiMin —llamó cuidadosamente. No tuvo intenciones de pelear—, voy a ir solo. —Tomó la manilla para abrir la puerta, pero esta estaba con seguro.

—Te llevaré —dijo el otro más sereno, quizás al ver lo serio que debía de estar.

Suspiró y cerró los ojos antes de echar la cabeza hacia atrás. JiMin encendió el auto y este empezó a andar. Pasó las manos por su cara con frustración, un sentimiento horrible que crecía en su pecho y lo hacía consiente de lo débil que podía llegar a ser TaeHyung. Sintió que su cuerpo se iba de un lado a otro en cada vuelta que daba el vehículo, cosa que lo hizo sentirse horriblemente enfermo.

—Ya llegamos —le dijo el otro con simpleza e inmediatamente abrió los ojos para mirar a su alrededor.

Estaban a las afueras del departamento que compartía TaeHyung con JungKook, así que bajó del auto lo más rápido que pudo y caminó hacia el edificio. A sus espaldas escuchó a JiMin poner el freno de mano y apagar el motor del vehículo.

—No necesito que me acompañes —soltó cuando sintió unos pasos apresurados a su lado intentando igualar su rápido caminar.

—Quizás necesites ayuda —murmuró JiMin mientras entraba al ascensor junto a él.

—¿Acaso ayudarías a mis amigos homosexuales? —se burló de forma cínica.

El chico no dijo nada, ni siquiera lo miró, pero eso no le importó demasiado porque en ese momento se abrieron las puertas en el piso de sus amigos y YoonGi no hizo más que correr hacia la puerta del conocido departamento. Tocó tres veces de manera fuerte. Sabía que JungKook estaría tirado en el suelo de alguna de las habitaciones llorando y necesitaba que lo escuchara.

Para su sorpresa de inmediato JungKook abrió la puerta con sus ojos rojos y llorosos, sumándole que estaba todo despeinado y sorbiéndose los mocos.

—YoonGi —dijo su amigo haciendo un puchero y abrazándolo. Le correspondió el abrazo y el contrario escondió la cabeza en su cuello, ante lo cual le dio suaves caricias en la cabeza para que dejara de llorar.

Lo separó para entrar, lo llevó al sofá y lo sentó ahí antes de ponerse en cuclillas delante de él—. Dime exactamente qué pasó.

—Yo... yo...

—JiMin —llamó y vio como cerraba la puerta principal y se adentraba al departamento—, ¿le puedes hacer un café?

El aludido asintió y le apuntó con la mano hacia la cocina. Volvió a fijar la vista en JungKook, quien tenía la cabeza gacha y no paraba de llorar.

—¿Qué pasó con Tae? —murmuró y el contrario levantó la cabeza para mirarlo.

—No lo sé. No pasó nada más de lo que te conté.

—¿Por qué discutieron? —preguntó y apoyó las manos en sus rodillas.

—Siempre se enoja por lo mismo —dijo el contrario haciendo una mueca—. No tiene por qué preocuparse si yo salgo o no.

—¿Salir? ¿A qué te refieres? —cuestionó mientras JiMin entraba en escena con una taza en las manos.

—Siempre es lo mismo. ¿Por qué le molesta tanto que salga del departamento? ¡No me puede tener siempre aquí! —JungKook movió los brazos, haciendo que YoonGi se desequilibrara y cayera sentado en la alfombra.

—¿Así que sales de la casa sin avisarle a Tae? —dijo frunciendo el ceño—. Conozco a TaeHyung y sé que no pasó todo esto solo porque sales sin avisarle. —Tomó un poco de aire y fue más delicado la próxima vez que habló—. ¿Qué estás escondiendo, JungKook?

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro