#Superbat #OmegaClark #AlphaBruce

Capítulo 7: Noticias.

𝘕𝘰𝘵𝘪𝘤𝘪𝘢𝘴. 𝘚𝘦𝘨ú𝘯 𝘦𝘭 𝘥𝘪𝘤𝘤𝘪𝘰𝘯𝘢𝘳𝘪𝘰, 𝘤𝘰𝘮𝘶𝘯𝘪𝘤𝘢𝘤𝘪ó𝘯 𝘰 𝘪𝘯𝘧𝘰𝘳𝘮𝘦 𝘲𝘶𝘦 𝘴𝘦 𝘥𝘢 𝘢𝘤𝘦𝘳𝘤𝘢 𝘥𝘦 𝘶𝘯 𝘩𝘦𝘤𝘩𝘰 𝘰 𝘶𝘯 𝘴𝘶𝘤𝘦𝘴𝘰 𝘳𝘦𝘤𝘪𝘦𝘯𝘵𝘦. ¿𝘏𝘦𝘳𝘮𝘰𝘴𝘢, 𝘷𝘦𝘳𝘥𝘢𝘥? 𝘓𝘢 𝘯𝘰𝘵𝘪𝘤𝘪𝘢 𝘲𝘶𝘦 𝘵𝘦 𝘥𝘪 𝘦𝘯 𝘯𝘶𝘦𝘴𝘵𝘳𝘰 𝘢𝘯𝘪𝘷𝘦𝘳𝘴𝘢𝘳𝘪𝘰.

Todos estaban mirando a Kal-El con diferentes expresiones, pero nadie se atrevía a decir absolutamente nada sobre el asunto. El omega tampoco quería decir nada, solo se quedó recostado fuertemente contra su silla intentando fundirse con ella y evitando mirar a nadie a los ojos. Cuando la reunión empezó, todos parecieron poner su atención en otra cosa, pero igual podía sentir las miradas de reojo que le echaban de vez en cuando. No los culpaba. Que de pronto el omega más poderoso del universo entrara como si nada en la sala, oliendo totalmente diferente, con una marca de un alfa en su cuello, no era algo que nadie estaba dispuesto a decir en voz alta o eso pensaba.

—¿De verdad no vamos a hablar sobre el elefante en la habitación?

Todos miraron a Green Arrow, sus expresiones estaban entre el cállate y sí, yo también quiero saber. Kal-El lo no hizo más que encogerse en su sitio porque era muy vergonzoso.

—Kal-El y yo nos hemos unido, pero eso es evidente.

—¿Qué?

Incluso Kal-El se giró para ver a Batman. Las miradas comenzaron a ir y venir entre ambos, entendiendo lo evidente, pero sin comprender por qué, de todas las personas, esos dos habían acabado unidos.

—Si eso resuelve sus dudas

Sin tiempo a nada, desapareció por la puerta. Dejó a Kal atrapado allí en el salón con todos los curiosos observando.

—Oh, quiero todos los detalles, Sups.

.

.

Más tarde en la cueva, Bruce seguía trabajando en el caso. Desde los sucesos de la bahía, la droga había desaparecido de las calles. Solo logró hacerse con los restos malogrados que logró recuperar de la escena del crimen y alguna que otra cosas sospechosa que pudo rescatar colándose en el laboratorio de Luthor. Según lo que había descubierto, era gas del miedo alterado con una nueva kryptonita sintética que se había elaborado en los laboratorios de LuthorCorp; si bien parecía que no tuvo efectos en Clark, sí en los humanos normales. Los efectos eran los mismos que el gas, un miedo inocuo a pensamientos y visiones, pero con la kryptonita, lograba alterar el cerebro para obligar a otros a hacer cosas. Algo así como un gas del control mental mezclado con pesadillas; Luthor había llegado demasiado lejos con sus nuevos inventos y sus juegos con la naturaleza.

Al menos, no había logrado funcionar con Clark. No quería saber lo que podría suceder con el omega bajo el control de alguna orden originada de una mente tan perversa como esa.

—¡Me dejaste solo! —Clark se acercó por detrás, pasando sus brazos por detrás del alfa. —Tuve que responder muchas preguntas incómodas.

—Podrías haber no respondido e irte.

—Sabes que no podría haberme ido sin más.

—Podrías, pero eres demasiado blando.

El abrazo dejó de ser un abrazo, cuando las manos de Clark comenzaron a volverse curiosas y comenzaron a bajar por el pecho del alfa con otras intensiones.

—Dentro de un par de semanas será mi celo.

Bruce levantó su vista hacia el omega, poniendo sus manos sobre las de Clark en un gesto de cariño.

—¿Eso es una invitación indecente?

—Puede que sí.

.

.

Después del celo de Clark las cosas habían ido como en un sueño. Todos de pronto habían aceptado la dinámica que se creó entre los dos, Alfred asumió de buen grado el nuevo integrante de la casi inexistente manada y, finalmente, las identidades de todos se habían desdibujado y ahora se conocían en sus vidas civiles también. Después de todo, si Batman fue capaz de dar ese paso ¿Por qué los otros no habrían de hacerlo?

En algún momento de las semanas siguiente tras su celo, Clark se había ido mudando poco a poco con Bruce: Empezó con el cepillo de dientes, una que otra camina, Bruce llevando alguna cosa del apartamento de Clark a la mansión para construir un nido donde sí pudieran entrar los dos cómodamente y habían acabado organizando la línea de 𝘴𝘩𝘢𝘮𝘱𝘰𝘰 de Clark en el baño de la cual solo terminó usando el de uva porque fue el favorito de Bruce. Ahora el alfa también olía a uva, de alguna manera.

.

.

Bruce llenó la copa de 𝘤𝘩𝘢𝘮𝘱𝘢𝘨𝘯𝘦 mientras escuchaba a Clark reír. El omega la tomó entre sus manos mientras miraba al alfa darle un sorbo. El clima de Gotham no era de sus favoritos, pero la mansión tenía ese lugar idílico agradable donde se podía disfrutar de una velada agradable de vez en cuando.

—¿No vas a beber?

Ambos estaban tirados en uno de los sillones de jardín, demasiado pegados ya el uno al otro como para que Bruce no haya podido evitar comenzar a frotarse contra él, demasiado cariñoso para que aquello no acabara en otra cosa.

—¿Por qué hoy hueles tan raro? —Su nariz se pegó a su cuello, olisqueando el olor mezclado de ambos en su omega—Pero no es eso

Se fue recostando contra Clark, deslizándose lentamente hasta dejar su cabeza en el regazo ajeno, rodando la copa vacía entre sus manos.

—Mira que eres el mejor detective del mundo —Clark dejó la copa llena a un lado y movió sus manos solo para pasar sus dedos entre los cabellos de Bruce que cerró los ojos por el toque. —Pero hay cosas que se te escapan.

—¿Olvidé algo? —Volvió a abrir los ojos confundido.

Era su aniversario. Hace un año exactamente se encontró con Clark en la cima de la catedral. Se tomó un momento para pensar en cómo pasa el tiempo y lo mucho que se puede hacer en solo doce meses: Llorar, reír, comenzar un juego errante que había desbocado en todo eso. No podría haber olvidado nada, por eso estaban allí, en el jardín, bebiendo 𝘤𝘩𝘢𝘮𝘱𝘢𝘨𝘯𝘦, para celebrar lo raro e intensa que podría llegar a ser la vida en tan poco tiempo.

—No. Solo que hay algo que no acabas de deducir.

—¿Tengo que hacerlo ahora que me he bebido yo solo casi toda la botella? —Volvió a cerrar los ojos, dejando a un lado la preocupación de lo que sea que estaba hablando su omega.

—Estuve pensando que Jonathan Thomas era muy raro, pero sonaría lindo decirle Jon. Aunque si es niña definitivamente debería ser Martha.

Bruce abrió los ojos de golpe. —¿Qué? —Se levantó del regazo de Clark y se puso en pie entre tambaleos por culpa del alcohol. —¿Me estás diciendo que está?

—Oh, venga, hasta Oliver entendería esa indirecta.

Lo siguiente que supo fue que Bruce lo estaba besando, un poco torpe por la bebida, pero demasiado feliz como para que le importara.

—¿Por qué me haces tan feliz, omega? No te merezco. —Y más besos. —Eres lo que más amo en esta vida, no lo olvides nunca.

.

.

Todos habían estado realmente felices con la noticia. Hasta hicieron una fiesta donde le regalaron a Clark demasiados objetos con motivos de Batman y Superman y cosas de la Liga de la Justicia que Bruce dijo negarse a ponerle al cachorro una vez que naciera, pero Clark estaba emocionado por verlo con con alguna minicapucha de murciélago.

—¿Cuándo sabremos si es niño o niña?

—Solo tengo dos meses, no lo sabremos con seguridad hasta dentro de tres meses más.

—Mientras tanto podemos apostar por adivinar qué es —propuso Hal.

—No vas a apostar con mi bebé —bufó Clark.

—Será niño y será alfa. —Bruce lanzó casi quinientos dólares sobre la mesa, ¿Por qué Bruce tendría tanto a la mano? A saber.

—Niño y beta. —Oliver puso otra cantidad indecente.

—Será una niña, alfa —intervino Diana.

Y así empezó, hubo casi todas las combinaciones posibles y al final Clark también había propuesto su idea apoyado por sus instintos maternos.

.

.

Lo único malo es que los últimos meses se la pasó demasiado protegido por absolutamente todos. Sin embargo, no había dado el brazo a torcer en eso de quedarse en casa tranquilo y, con su cuarto mes de embarazo, todavía salía a patrullar y nadie se había percatado de su barriga aún, porque seguía pudiendo minimizar su olor a su antojo y porque el bebé no parecía querer crecer, por lo cual no se veía exageradamente redondo ni nada. Bruce estaba molesto porque quería verlo con una panza gigante. Es mi sueño dijo, Y el bebé no quiere cumplirlo agregó.

—¿Qué haces?

—Diana me envió esto.

Puso un video en la pantalla de la batcomputadora. En él se mostraban algunas personas cometiendo delitos, pero con una actitud extraña, como que si no fueran ellos.

—Y Barry esto.

La cámara había sido tapada por una nube púrpura, había un hombre en una esquina que Clark reconoció del video anterior, tranquilo, mientras movía sus labios y las personas que habían estado cerca comenzaban a actuar de la misma manera agresiva que en el otro video.

—Creo que ha regresado.

Clark sintió una especie de miedo recorrerlo. Pero intentó calmarse, esta vez estaban todos para ayudar y no pensaba meterse de nuevo con Bruce solo en un problema como ese.

—Tranquilo. Esta vez no pasará lo de la última vez. Esta vez estamos preparados.

¿𝘘𝘶𝘪𝘦𝘳𝘦𝘴 𝘰𝘵𝘳𝘢 𝘩𝘦𝘳𝘮𝘰𝘴𝘢 𝘯𝘰𝘵𝘪𝘤𝘪𝘢, 𝘊𝘢𝘳𝘪ñ𝘰? 𝘎𝘢𝘯𝘢𝘴𝘵𝘦 𝘭𝘢 𝘢𝘱𝘶𝘦𝘴𝘵𝘢. 𝘑𝘰𝘯 𝘵𝘦 𝘮𝘢𝘯𝘥𝘢 𝘴𝘢𝘭𝘶𝘥𝘰𝘴.