Jiminnie
¿Te queda muchooo oo?
¡Voy a morirme de los nervios!

Hyungie
No, estoy andando por el andén
En nada estoy allí, ni un minuto

El rubio mordisqueó su labio inferior, había perdido la cuenta de cuanto llevaba sin ver a Yoongi. Después de las semanas de exámenes el azabache había decidido venir una semana a Seoul para quedarse en su casa de siempre, decía que echaba mucho de menos a su familia

Pero siendo cien por cien sincero, no lograba sacarse al menor de su cabeza, mucho menos sabiendo las cosas que Taemin estaba comenzando a hacer con el menor

Yoongi confiaba en él, y también lo hacía en Taemin, después de todo lo había ayudado más que nadie en cuanto a Jimin, pero Min sabía mejor que nadie en el puto mundo que era prácticamente imposible el no caer ante la preciosidad que era el pequeño de mejillas regordetas

-Jimin: Ya ha pasado más de un minuto, hyungie me ha mentido

Protestó mirando el gran reloj que había colgado en la pared de la estación, quiso tomar su teléfono para hacer un pequeño berrinche, pero unos labios se posaron sobre su nuca y sus bellos se erizaron después

-Yoongi: Te ha crecido el culo

Aquella frase salió en un susurro desde los belfos de Yoongi hasta el oído del menor, quien no dudó en girarse y empujar a su pareja prácticamente sin fuerza, aunque si bastante avergonzado haciéndole estallar en risas al pálido

-Jimin: ¡Hyung! Podrías haber empezado con un "Te he echado de menos" o algo así

-Yoongi: Pero eso ya lo sabes, te lo digo cada día

Sonrió el mayor acunando las preciosas mejillas contrarias para llevar a cabo su misión de besar los abultados belfos de Jimin tantas veces como este le permitiese. Yoongi había extrañado en demasía el contacto con su vecino/mejor amigo/novio

Park sonreía recibiendo gustoso cada besito, él no iba a ser quien le indicara que parase ni mucho menos, si fuese por él mismo podía seguir toda la vida estirando sus labios para recibir los del azabache

-Yoongi: Eres -besito- lo -besito- más -besito- bonito- besito- que -besito- existe

-Jimin: Hyungie~

Rió nervioso posando sus manitas en la cintura de su pareja, podía sentir como muchas miradas se posaban en ellos. En Corea el hecho de la homosexualidad aún no estaba demasiado bien vista, pero bueno, tampoco es como si nadie los estuviera matando con la mirada, sólo los miraban curiosos, era raro ver a dos homosexuales mostrando su amor en público

Un último beso fue depositado antes de entrelazar sus dedos con los del pequeño y salir andando hacia la parada de buses, iba a ser algo incómodo ya que llevaba la maleta de viaje, pero bueno, tampoco tenían ganas de ir andando desde la estación a casa andando

En algo más de media hora ya ase encontraban en la puerta del Hogar de los Min, ni siquiera le dio tiempo a abrir la puerta cuando un pequeño había abierto desde dentro para poder tirarse a los brazos de su hermano

-Jeongin: ¡Hyuuuuuuuuuuuuuung! Llevo esperándote desde hace una hora en la puerta, mamá decía que te esperase en la sala, pero quería ser el primero después de Jiminnie en saludarte

Yoongi sonrió enternecido, soltando tanto la mano de Jimin como la maleta para poder estrechar entre sus brazos a su pequeño, beso la curvatura de su cuello escuchando las risitas de parte de Jeongin

-Yoongi: Gracias por tu bienvenida bichillo, eres a quien más he echado de menos. Taehyung no me despierta como tú, ni tampoco me hace dibujos en los que salgo vestido como super héroe

-Jeongin: ¡Te he echo muchos más, para que te los lleves! Espera un momentito, enseguida los bajo todos ¡Mamá, Yoongi hyung ya está aquíiiiiiiiii!

Gritó el pequeño azabache corriendo escaleras arriba para buscar la carpeta con todos los dibujos que había ido acumulando para dárselos a su gran querido hermano mayor

La madre de ambos chicos salió de la sala con una dulce sonrisa dibujada en el rostro, besuqueó el rostro de su hijo y además estrecho a Park entre sus brazos, agradeciéndole por haber ido a buscar a Yoon a la estación, aunque aquello fue para nada una molestia para el chico

-Chaeyoung: Hoy cenaremos todos aquí en casa, tus padres también vienen Jimin-ah. Iré ahora a hacer unas compras con Ginnie; y bueno, así os ponéis un poco al día. Seguro que tenéis muchas cosas que contaros

Sonrió comprensiva la mujer acariciando las mejillas de los dos chicos que se habían correteando jugando por aquellas paredes. Ella aceptaba la relación de ambos y por supuesto entendía que ambos necesitaran intimidad, ya no sólo para hacer el tipo de cosas que estáis pensando, también para simplemente hablar y mimarse un rato a gusto

-Jimin: Está bien noona, si Yoon y yo podemos ayudar en alguno no dudes en avisarnos

-Chaeyoung: Gracias, bebé. ¡Jeonginnie, baja y vámonos!

Depositó otro beso en las mejillas de los dos muchachos y después de esperar que su hijo menor le entregara al contrario la carpeta repleta de dibujos, se fue con este a la larga compra que tenían que hacer

Los dos decidieron subir al cuarto del pálido, solían estar bastante cómodos allí siempre

-Jimin: ¿Cómo va todo por allí? Aún tengo ganas de ir a Daegu alguna vez

-Yoongi: Sabes que allí tienes un apartamento, puedes ir cuando quieras, eres más que bienvenido

Musitó acurrucándose con su pareja

La pierna izquierda de Jimin estaba rodeando la cintura del azabache mientras este dejaba caricias por el muslo de este y hablaban tranquilos, con sus rostros cerca y sus orbes brillando por poder tenerse frente a frente sin que sea una pantalla

-Jimin: Te he echado de menos... es un poco más difícil de lo que imaginé el estar lejos de ti

-Yoongi: Lo sé, cariño. No creas que yo lo sufro menos, tus labios y tus manitas, tus ojitos y tu naricita redonda... echo de menos hasta tus murmuros cuando duermes

Park rió tomando con sus manos las pálidas mejillas del contrario, no dudó en acercarse al rostro de este y besarlo lentamente, sabiendo cuanto Yoongi adoraba este tipo de besos

Intercambiaron algunos dulces besos antes de añadir sus lenguas y sentir como el azabache ya se sentía algo desesperado por comenzar a recorrer el cuerpo del rubio con sus manos. Se sorprendió al comprobar como el cuerpo de Jimin había cambiado, habían curvas nuevas que nunca había llegado a conocer, partes que antes parecían de un cuerpo de bebé ahora estaban estilizadas

-Jimin: ¿Quieres hacerlo ahora?

Preguntó entre besos mordiendo el belfo inferior del azabache para tirar de este con suavidad

-Yoongi: Por mi ya estarías desnudo, todo depende de ti

-Jimin: Entonces no sé por qué estamos esperando

Sentenció rodando un poco para acabar sentado a horcajadas sobre el cuerpo tumbado de Yoongi, quien vio desde ese ángulo como el chico que tenía encima se comenzaba a sacar sus prendas superiores, dejando al descubierto aquel abdomen y torso que ansiaba por llenar de besos

Las caderas de Park se movieron de forma circular sobre la entrepierna contraria con sus manos apoyadas en el torso del mayor

-Jimin: Ya estás tan duro...

Rió mordiéndose el labio inferior viendo como Yoon lo miraba de esa forma peligrosa que hacía tanto que no le miraba, no era ningún misterio el hecho de que ambos habían echado en falta estos momentos en los que podían disfrutar del placer que le proporcionaba el contrario

-Yoongi: ¿Dudabas? Se trata de ti, no hace falta que hagas demasiado para que me tengas babeando detrás

En su rostro se dibujo una traviesa sonrisa mientras su diestra desabrochaba el pantalón del contrario y su zurda acariciaba la cintura de este. Pronto el pantalón de Jimin ya se encontraba por el suelo al igual que su suéter; y muy pronto el de Yoongi también

Las manos del pequeño sacaron la polera negra del pálido, no dudó en atacar el cuello y las clavículas de este con chupones y lamidas, sintiendo como las grandes manos del azabache apretaban su trasero con total libertad

-Yoongi: Es cierto eso de que te creció el culo

Rió roncamente alzando su pelvis para hacer fricción con la intimidad de su pareja el cual jadeó al sentir la erección

-Jimin: En tu mesilla, hay condones y lubricante, lo compre nuevos. Ayer entre por la ventana y los dejé ahí

-Yoongi: Uh mi Jiminnie ya es un niño grande y va a comprar ese tipo de cosas a la farmacia, cuando los dos vivíamos aquí me hacías ir a mi

El dedo índice de Yoon comenzó a jugar con el elástico de la ropa interior haciendo el amago de bajarlos, el rubio no queriendo quedarse atrás llevó una de sus manos al botón del pantalón del pálido para desabrochar este y no tener tiempo de hacer nada más, el mayor había hecho que ambos giraran una vez más en el colchón dejándolo debajo ahora

Se estiró un poco y tomó el lubricante y los condones, no es que estuvieran acostumbrados a usarlos, pero hoy no había tiempo de limpiar tranquilamente a Jimin o algo así, por eso era mucho más fácil correrse dentro del condón y ya

-Yoongi: ¿Te preparo?

-Jimin: Estás tardando

Dijo colocándose boca abajo para alzar su trasero un poco y girar su rostro, adoraba ver la cara de Yoongi cuando este se sentía perdido por su cuerpo. Sonrió y relamió sus labios siendo eso lo que le sacara un suspiro placentero al pálido, que no dudó más en bajar la ropa interior del chico

Derramó un poco de lubricante sobre sus dedos y tanto con uno de ellos la estrecha entrada, procuró ser suave al deslizarse hacia dentro aunque no le costó en absoluto; y eso solo le indicaba una cosa

-Yoongi: Parece que alguien estuvo tocándose apenas hará unas horas

-Jimin: P-puede que si...

Jadeó cerrando sus ojitos para centrarse en placer que iba a comenzar a sentir no en demasiado tiempo. Los largos dedos de Yoon entraban y salían de forma fluida de la entrada, dejaba besos en la espalda desnuda del chico y a veces mordía su nuca robándole aún más suspiros

Ya algo desesperado sacó sus dedos y deslizó sus pantalones -junto su ropa interior- hacia fuera

-Yoongi: ¿Te pondrías boca arriba? Me apetece verte...

Susurró dejando un mordisco sobre su oreja de forma lasciva

Park ni siquiera dudó en hacerlo, en cuanto estuvo con su espalda pegada al colchón sonrió admirando el rostro de su novio. Nadie era consciente de que tan enamorados se encontraban, ni siquiera ellos mismos

Con cuidado el mayor alineó su miembro con el orificio contrario para deslizarse con facilidad a su interior, siendo solo el principio de una gustosa secuencia de embestidas

Por suerte las ventanas estaban cerradas y las puertas igual, los gemidos placenteros de ambos y las pieles chocando era todo lo que se podía apreciar allí, ni siquiera ellos mismos se entendían demasiado en estos momentos cuando se susurraban cosas; pero sabían que posiblemente eran palabras llenas de cariño

-Jimin: ¡A-ahí!

Gimió agudo cuando el glande había golpeado contra su próstata

Las manos de Yoongi tomaron la cintura del chico y se fue decidido a embestir a aquel punto que le hacía delirar de tal forma su pequeño que se encontraba arañando su espalda

-Jimin: La puta madre ¡Yoon-mng~~!

Lloriqueó cuando sintió una de las manos de Min comenzar a jugar con su sensible glande, siendo esto lo que terminara por hacer que se corriera un poco tiempo después. Aún así recibió más que gustoso las embestidas del mayor hasta que este se corrió luego quedándose tumbado sobre el cuerpo contrario

El rubio sonrió agitado llevando su manita a los cabellos azabaches para acariciarlos

-Jimin: ¿Mi amor? ¿Sigues vivo?

-Yoongi: ¿Cómo puedes follar tan bien? Tampoco tienes tanta experiencia

Soltó de la nada el pálido haciéndole sentir avergonzado al contrario, quien rió abrazándose al cuerpo de su novio que descansaba sobre el suyo

-Jimin: Serán las ganas que tenía de que lo hiciéramos

Un "hm" se escuchó proveniente de los labios del mayor que permanecía con los ojos cerrados, totalmente tranquilo después de haber descargado lo que hacía meses no hacía

-Yoongi: Intentemos no tardar demasiado en vestirnos y eso... no sé cuando llegará mi madre. ¿Te apetece ver alguna serie? Estuve esperando a estar contigo para ver alguna

-Jimin: Bien hyungie, sólo cinco minutitos más así...

Rogó también cerrando sus ojos terminando de recomponerse después de lo ocurrido

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Kiisssssuuuuuu~~~