(Advertencia: Mención de TCA. Nos busco romantizarlos ni decir que están bien, a pesar de la forma de actuar/narrar de cierto personaje durante este capítulo no quiere decir que está bien o que hace las cosas de forma correcta, ni mucho menos que sus pensamientos son sanos, si padecen algo parecido, por favor busquen ayuda)

Hannah camino por el enorme pasillo de la casa Black-Weasley, el aroma a kirsch mezclado con tabaco, canela y frambuesa inundo sus fosas nasales, le gustaba demasiado como olía, al igual que lo limpio que era todo lo contrario del cuarto rascuacho donde vivía su tía Samara.

Mientras más avanzaba podía observar algunos retratos de los integrantes de la familia que adornaban las paredes, se detuvo frente a una enorme vitrina donde había unos cuantos portarretratos y diversos premios.

Sin duda era la perfecta familia modelo:

Recortes enmarcados del profeta y reconocimientos a la tienda perteneciente a Fred Black-Weasley por ser la mejor tienda de bromas vista jamás;

Ordenes de Merlín y medallas de honor con el nombre Anirak por todas sus buenas acciones como Auror al igual que diversos arrestos;

Louis-Philippe reconocimientos por participar en diversos concursos de lectura, medallas por sus años jugando Quidditch en Hogwarts al igual que un premio anual;

Los mellizos, ambos resaltaron en deportes: George Sirius en Box y Artes Mixtas, mientras Regulus John en Futbol Americano y Artes Mixtas, sumado el Quidditch, incluso el mellizo menor tenía varios premios por natación y el pelirrojo logros académicos, se veía que de cierta forma eran distintos;

Y, por último, Anired compartía con George Sirius varios premios académicos desde su educación básica, ya que llevaron educación básica en colegios privados antes de entrar a Hogwarts, incluso placas que demostraban su participación en el club de la eminencia, y también varios reconocimientos en el Club de Duelo acompañada de los mellizos y Louis, deportivamente también resaltaba en ballet y gimnasia, para sorpresa de Hannah tenia reconocimientos como pianista.

Sin duda, eran toda una familia de ricos en toda la extensión, todos los miembros resaltaban y tomaban clases privadas desde niños, contaban con una enorme educación académicamente hablando al igual que modales, sabían adaptarse a cada situación y comportarse ante la sociedad para ser bien vistos.

Algo con lo que Hannah siempre soñó.

De niña tuvo que aprender a leer a base de regaños por parte de su tía al no tener paciencia con ella, aprendió un poco de etiqueta por libros que encontraba en el departamento viejo en el que vivía en Bulgaria; sin embargo, nunca fue lo que ella deseo.

Hannah quería ser reconocida, sabía que contaba con una gran belleza y gracias a eso varios de sus compañeros con apellidos importantes se acercaban brindándole atención y regalos, pero eso no era suficiente, al menos hasta que conoció a los Black-Weasley, de inmediato se dio cuenta que al estar con ellos y especialmente salir en público con uno de los mellizos la favorecía, todos la trataban con educación y respeto, incluso todos la trataban mejor y en algunos lugares cedían a sus capricho como por ejemplo, cuando Las Tres Escobas estuvo llena y ella con solo decir que estaba saliendo con Regulus obtuvo mesa sin tener que hacer fila.

Era sorprendente el poder que tenia de esa manera, aparte que Regulus John le daba regalos demasiado caros, tan solo las joyas valían más que todos los galeones que había visto en su vida.

Con todo eso, aparte de obtener su venganza estaba obteniendo bienes materiales que le servirían en un futuro, ya que planeaba vender algunos de los regalos que le dio el azabache para quedarse con el dinero y tal vez de esa forma abandonar a su tía.

Quería la venganza para honrar a sus padres que sufrieron por culpa de Anirak Black-Weasley, y no se detendría hasta lograrlo estando tan cerca.

Tenía a Regulus en la palma de su mano, ahora seguiría con George Sirius, que si bien era difícil no era imposible, más teniendo ese pequeño muñeco en su bolsillo derecho, solo unos días más y todo el control seria de ella.

Desvió la mirada de la vitrina al escuchar algunas risas y se topó con el D'Acanto que llevaba en el hombro a Anired mientras Scorpius se reía de los gritos de la menor diciéndole a Maxence que no la fuera tirar.

Definitivamente la odiaba, era una niña nacida en cuna de oro, todos la amaban e incluso los chicos guapos parecían prestarle más atención a la menor a antes que a ella. Cualquier persona cedía a sus caprichos y si quería algo solo le bastaba con pedirlo mientras murmuraba un suave "por favor".

Anired era lo que ella siempre deseo ser, y era por eso que quería verla hundida, no era justo que la hija de una persona que daño tanto a su familia tuviera todo lo bueno de la vida.

Tal vez, podría ser menos dura con Regulus que era el único que realmente siempre fue amable con ella e incluso, estaba segura que de todos era él más inocente, porque George Sirius la llegaba a tratar como una mierda sin importar herirla, lamentablemente el azabache tendría que pagar por los pecados de esa familia.

—Ya, no te voy a tirar.

Escucho la voz de Maxence que paso a su lado con Anired en su hombro ignorando su presencia por completo.

—Si me tiras, ya no te hablare, Max.

Respondió la menor, Hannah los observo, Scorpius al parecer se quedó platicando con su padre y los otros dos adolescentes se adelantaron, parecían ser más unidos que antes y eso definitivamente a Deyan no le gustaría, quizá era momento de incluirlo a él en su plan.

—Hannah —la voz de Regulus se hizo presente y giro para topárselo mientras salía de una habitación seguido de Denvers y Freddos—...vamos a cenar.

El más alto le sonrió acercándose para tomarla de la mano y guiarla al piso de abajo, la rubia entrelazo sus dedos para seguir cada uno de sus pasos.

El azabache parecía demasiado cansado, y no sabía si era debido al ataque de los magos oscuros o a la magia que ella estaba utilizando en contra de él, realmente lo sentía por él, si no hubiera nacido en la familia equivocada nada de eso estaría pasando.

Al llegar al salón principal observo a Itziar Arwen platicando con una mujer, que supuso que sería su madre, no toleraba a esa pelirroja y mucho menos a su amiga Amalie, amabas eran igual de molestas, pero Arwen sobre pasaba los limites, siempre parecía seguir a Regulus y estar sobre de él tratando de llamar su atención a base de insultos y burlas incluso varias veces lo siguió, al menos se animaba al saber que el Black-Weasley parecía odiarla.

Observo como Itziar los observaba de reojo, así que tomo a Regulus de los hombros para hacer que se inclinara unos centímetros y besarlo de manera profunda, el más alto pareció algo confundido, pero finalmente respondió al beso por unos segundos tomándola de la cintura.

Hannah sonrió para separarse y verlo.

—No sabes lo asustada que estuve durante el ataque de esos prófugos de Azkaban—se pegó al pecho de Reg hablando con una voz melosa—...fue todo tan aterrador, si no hubiera sido por ese Auror que me ayudo estaría muerta.

Regulus la rodeo con sus brazos de manera cálida y acariciándole el largo cabello rubio que caía como cascada sobre su espalda.

—Lo sé, Han, todo fue horrible —le beso la coronilla alzando la mirada y topándose con Itziar que los veía, arrugo el entrecejo y prefirió centrarse en Hannah aún más cuando James se acercó a las dos Arwen—, pero, estas a salvo y eso es lo importantes... ¿estas seguras que no quieres que mi padre llame a tu tía? Tal vez te haga bien verla.

Hannah negó rodeándole el torso con los brazos sin borrar esa mirada de miedo fingido.

—No, mi tía es una anciana —murmuro con sufrimiento y preocupación—, si ella se enterara de lo que me paso seguramente estaría al borde de un paro cardiaco, prefiero no alterarla con eso, es mejor que no lo sepa.

—¿Estás segura?

Cuestiono con la ceja enarcada comenzando a sentirse incomodo por abrazarla durante tanto tiempo y sentir las miradas de algunos aurores e incluso de sus primos sobre de ellos.

—Sí, estoy segura —le sonrió para besarle la mejilla—, aparte tus padres han sido muy amables con dejar que me quede esta noche para volver mañana al colegio.

—Sí, bueno es por seguridad, aún no saben cómo estarán las cosas después de la muerte de Kingsley...

Hannah se alejó con una extraña mueca, Reg llevo las manos a sus propios pantalones para limpiarse el sudor de las palmas de la mano cosa que le pasaba cuando la incomodidad que sentía era demasiada.

—Sí, aunque supongo que no a todos aquí les agrada la idea de que me quede esta noche...

Murmuro viendo de soslayo a George Sirius y Amalie entrando a la cocina tomados de la mano.

—¿A qué te refieres? —la miro de forma seria— ¿Alguien te molesto o algún Auror te dijo algo?

Hannah bajo la mirada mordiéndose el labio inferior.

—No...solo...olvídalo, son tonterías mías.

—Hannah —llamo el azabache cruzando los brazos sobre su pecho causando que las venas de los brazos resaltaran más e incluso la playera azul se cernió a su marcado torso—...dime que paso.

—Es que... no quiero que te enojes con tus hermanos o que discutas con ellos por mi culpa...lo que menos deseo es causar discusiones entre tú y tu familia, Reggie.

El azabache se extrañó de eso, sus hermanos rara vez eran groseros con alguna persona.

—¿Qué te hicieron?

Hannah noto la seriedad en su rostro, al parecer comenzaba a molestarse.

—Es que siento que no les agrado, Anired siempre se comporta de forma grosera conmigo, incluso durante la cena me dijo cosas horrible como que yo era remplazable y que tú te aburrirías de mí, que siempre has sido así y que yo no me sintiera especial porque tú nunca ibas a cambiar— Regulus le habría dado la razón a su hermana, aunque sonara feo era una persona que no sabía mantener una relación estable con nadie, sin embargo al ver la expresión de la rubia se sintió demasiado mal y comenzó a considerar cambiar su forma de ser, solo tal vez era hora de que madura y empezara a pensar en sentar cabeza—...y George Sirius creo que me odia, siempre me habla golpeado y hace rato fui a buscarte a la habitación que comparten y como lo interrumpí cuando se estaba besando con Amalie me hablo feo, tenía una expresión de asco por verme al igual que Lie, y no sé porque son así, yo solo he querido ser amable para tratar de ser amigos porque se lo importantes que son para ti —hizo una pausa para limpiarse las pequeñas lagrimas que escapaban de sus ojos sin importarle quien los viera—, sé que quizá en el baile de navidad no me comporte de la mejor manera cuando te hice un berrinche porque Nired desapareció, pero te juro que estoy tratando de hacer las cosas bien, porque realmente me importa agradarles para que las cosas funciones entre nosotros dos, odiaría saber que se distanciaron por mi culpa o que no le agrado a tu familia.

Regulus soltó un suspiro y la tomó de las mejillas para que lo viera a los ojos.

—Te prometo que hablare con ellos ¿sí? —le limpio las pequeñas lagrimas que adornaban sus mejillas, Hannah solo le acaricio las manos formando un pequeño puchero con los labios—, veras que cambiaran su forma de ser, no me gusta saber que con sus actitudes te dañan.

—Gracias, Reggie, siempre eres demasiado lindo.

El Black-Weasley le sonrió dejando un casto beso en sus labios para guiarla a la cocina, Hannah mientras más conocía esa casa más deseaba tener todo lo que ellos poseían.

Al entrar a la cocina pudieron ver a George Sirius pasando los platos al comedor que se encontraba en la habitación de enfrente con ayuda de Stefan y Freddos, mientras Amalie y Anired platicaban comiendo algunas frituras, su tío George y Zed sacaban del refrigerador el jugo de calabaza y algunos refrescos.

Pero lo que le sorprendió a Regulus fue ver como Maxence ayudaba a su padre en la cena, era extraño ver como a Fred parecía agradarle el rubio, ya que cuando Deyan iba a visitar a su hermana nunca se les vio platicando o llevándose de esa forma, solo hablaban de vez en cuando, pero solo lo necesario y todo fue peor cuando Anired informo que el Granger-Krum era su novio, sin embargo él no se tomó ni la molestia de presentarse de esa forma ante la familia Black-Weasley, era tan extraño que en algunas ocasiones ni siquiera parecía ser el novio de Anired.

—Regulus, lleva las servilletas y cubiertos.

Pidió, el azabache solo soltó un gruñido para dejar de sostener la mano de Hannah y hacer lo que su padre le pidió.

—¿Ya casi esta la cena?

Cuestiono deteniéndose cerca de la estufa, Max parecía cocina con mucha facilidad como si supiera que hacer a la perfección.

—Por más que la mires no se va a cocer más rápido.

Respondió el rubio con la mirada fija en la pasta, le gustaba demasiado cocinar así que decidió ofrecerse en parte como agradecimiento por la amabilidad que les habían demostrado y también para quedar en bien con los adultos, ya que debido a lo que paso con la azabache menor albergaba la esperanza de poder intentar algo más allá de una amistad con ella.

—¿Quién diría que serias tan buen cocinero?

La dulce voz de Anired llamo la atención de los dos varones, para Regulus no pasó desapercibido lo cerca que su hermana se paraba de Max, demasiado cerca para su gusto.

—Dice que aún le falta a la cena —comento Regulus tratando de llamar la atención de la menor que solo le sonrió—...quien sabe cuándo este.

—Mein Herz —llamo D'Acanto tomando una cuchara que estaba limpia — ¿Quieres probar la pasta y decirme que tal esta? —Anired asintió, el más alto tomo de la pasta con la cucharilla y le soplo durante unos segundos para que ella pudiera comerla sin quemarse—...di "aah"

Regulus los miraba sin creer esa escena, Anired nunca se había atrevido a esa clase coqueteo con alguien de la familia viéndolos y para su sorpresa ella hizo lo que pidió Max.

—Aah.

Murmuro la azabache abriendo la boca lo suficiente para que Maxence metiera la cuchara con la comida, Anired la cerro por unos segundos para dejar que la sacara y probar la comida, resultaba demasiado suave y el sabor la mezcla del queso, cúrcuma y la cebolla caramelizada que se deterretia en su boca.

—¿Qué tal esta?

—Esta delicioso, nunca la había probado —respondió ignorando la mirada de su hermano—... ¿Qué es?

—Se llama späztle, es una pasta típica de Alemania...

Regulus frunció el ceño al sentirse ignorado así que decidió emplear medidas más graves.

—¡Papá, Anired está coqueteando con Maxence enfrente de todos!

—Para ti también hay —Max lo volteo a ver —...prueba...

Regulus sintió asfixiarse cuando D'Acanto le metió la cuchara en la boca de manera brusca, Anired se comenzó a reír mientras Fred solo los veía para negar con la cabeza con una pequeña sonrisa y seguir con lo suyo.

Lie recargaba la barbilla en la palma de su mano presenciando la escena de su hermano y los dos azabaches, se alegraba de ver como Maxence parecía ser más sociable poco a poco, y sabía muy bien el motivo de eso, sin duda desde que conoció a Anired, él parecía poner empeño en ser una mejor persona.

—Pareces muy feliz.

La voz de George Sirius la saco de sus pensamientos y giro un poco el rostro para verlo, tenía el cabello despeinado y una sonrisa causando que un pequeño hoyuelo se formara en su mejilla izquierda.

—Si...veía a mi hermano —los ojos grises se dirigieron al menor de los gemelos D'Acanto para observarlo se reía de forma escandalosa junto con Anired mientras Regulus parecía quejarse de algo y fruncir el ceño ganando aún más risas—...parece muy feliz.

—Siempre lo está cuando esta con tu hermana —George recargo el mentón en su hombro viendo la misma escena que ella por más segundos—. Cuando estábamos en Beauxbatons era más alejado de la gente, me refiero a que era sumamente extraño verlo en algo como eso, prefería estar en su mundo y solo hablaba por obligación, pero desde que llegamos a Hogwarts comenzó a cambiar, como que tuvo un interés más fuerte y parece preocuparse por alguien más aparte de él...

El pelirrojo escuchaba hablar a Amalie, le gustaba el tono de su voz, era uno de sus sonidos favoritos al igual que ese aroma a menta que tanto la caracterizaba, lo hacía sentirse en una fresca tarde de invierno, clima que le gustaba demasiado.

—No conozco mucho a Maxence, apenas y hemos hablado en unas ocasiones, pero veo que, a mis padres, a Geori y a Scorpius les agrada mucho —analizo tranquilamente—, y si es así me imagino que es porque suele ser agradable, quizá algunas veces tiene esa cara de que odia a todos, pero al verlo en estos momentos riéndose con Geori parece otra persona.

—Es demasiado sarcástico y su mal humor hace enojar a cualquiera, pero en el fondo sigue siendo un pequeño niño travieso —hizo una pausa desviando la mirada cuando Maxence los volteo a ver con la ceja enarcada, al parecer sintió como ambos lo observaban—...tus padres siempre han sido muy amables con nosotros, sin duda son excelentes personas al igual que Anired y Scorpius que se han vuelto grandes amigos de mi hermano.

—Aunque ambos sabemos que tu hermano no solo quiere ser amigo de mi hermana—murmuro frunciendo el ceño, no tenía nada en contra de él, pero no podía evitar los celos de hermano mayor—...aun así, me resulta más cómodo ver a Geori con él que con Deyan, espero que le haga caso a Max y dejé a Deyan.

Anired solo le había contado de su ruptura a cinco personas: Sus padres, Mon, Louis y Maxence, aún no tenía la oportunidad de decirles a todos que Deyan y ella ya no eran novios.

—¿Cómo te sientes? —cuestiono Amalie, después de frenar el sangrado, George se quejó de un dolor punzante de cabeza, tomo unas extrañas pastillas y descanso por algunos minutos, sin embargo, ella seguía preocupada por su estado se salud.

—Estoy bien, enserio, no te preocupes solo habrá sido por algún mal golpe cuando fue el ataque de aquellos locos —murmuró besándole la mejilla—...estoy bien, lo prometo.

—Me preocupo por ti, no me gustaría que nada malo te pase.

Comento Lie viéndolo de forma sería, no le gustaba que fuera tan despreocupado con su salud.

—Preciosa, no soy tan enfermizo, aparte los magos casi nunca nos enfermamos, así que no hay problema.

Se alejó un poco apretándole los hombros y masajeándolos para relajarla un poco, no le gustaba que se preocupara por cosas insignificante como un sangrado de nariz, aunque si le extraño que su sangre fuera tan oscura, pero a lo mejor era por cualquier tontería que hubiera olido en clase pociones.

—Eso espero...

Murmuró Amalie recordando las palabras de Hannah que aún la hacían sentir incómoda, no comprendía a que se refería y temía que internada algo en contra de ella, últimamente parecía más loca de lo usual.

Después de unos instantes más todos comenzaron a ir al comedor para poder cenar con un poco de tranquilidad, sin embargo, George Sirius y Anired se detuvieron en el pasillo al ser llamados por Regulus, que los veía de una forma extraña, como si algo le molestará.

—¿Qué pasó, Reg? —cuestiono el mayor de los mellizos con la ceja enarcada—...tenemos hambre.

Anired tenía los brazos cruzados sobre el pecho en espera de una respuesta aparte que quería ir para lograr sentarse lo más retirada de Hannah, no quería que su cena se amargara por culpa de esa rubia.

—Yo soy el que debería de preguntar eso —respondió con el ceño fruncido y una mirada de enojo en sus expresivos orbes grises—... ¿Qué les pasa a ustedes?

George y Anired intercambiaron miradas de confusión para ver a Regulus demostrando que no comprendían nada de lo que decía.

—Reg... ¿te sientes bien? —indago la menor—...no entiendo nada de lo que estás hablando, a nosotros no nos pasa nada

—¿Nada? Se han comportado de forma horrible con Hannah —regaño el azabache—... tú le dijiste cosas horribles durante la cena en el restaurante y no entiendo esa actitud que estás tomando con ella, eres mi hermana y me decepciona saber que pareces una niña infantil y celosa armándole esas escenas con la chica con la que salgo.

Anired lo miro molesta al sentir la mirada de decepción de Regulus, él nunca la veía de esa manera y saber que era por culpa de Hannah solo incrementaba su enojo.

George Sirius veía a ambos azabaches, era raro que Regulus tomara esa actitud y especialmente con Anired, ya que la mayor parte del tiempo ella era una buena persona, eran contadas las ocasiones en las que causaba un problema o llamada de atención, por lo regular eran Regulus y él los que siempre tenían ese tipo de "charlas" con sus padres, no podría considerarlos regaños ya que siempre mantenían la calma y paciencia con ellos, pero los hacían notar sus errores.

—¿Qué? ¿Es en serio, Regulus? —cuestiono, el azabache asintió—... ¡Por Merlín! ¡No me llames niña infantil! ¡Y sabes muy bien que nunca he sido celosa con las chicas con las que sales! ¡Te he visto salir con cientos, las he conocido y nunca pasó nada así! Si le dije cosas a Hannah fue porque se las merece, es una mosca muerta, lanza el hechizo y esconde la varita. Siempre está provocándome junto con su amiga Stella, me trata como una niña e incluso se burló de Stefan, yo solo le dije lo que se merecía.

Habló rápidamente apretando las uñas en su brazo para mantener la calma y no comenzar una verdadera discusión con Regulus, ya que algunas veces cuando ellos tres discutían de forma seria—que era raro que eso pasara—, sus magias eran incontrolable como cuando eran unos niños sin control alguno, debido a los caracteres explosivos provocando un descontrol en el lugar que iniciará su pelea.

—Pero, no era necesario que le dijeras esas cosas, Anired, te pasaste.

—¡Ella fue la que se pasó al no mostrar ningún respeto por nuestros padres durante la cena, viste como les hablaba— escupió con enojo—...dile a ella que aprenda algo de educación y modales, y espero abras los ojos para que te des cuenta que solo te usa como si fueras un perro de concurso, exhibiéndote como un caniche que hace trucos!

—¡Ella no me usa, actúas así porque estás celosa de que esté saliendo de forma sería con alguien!

Anired soltó una sarcástica carcajada.

—¡Eso ni tú te lo crees, solo es tu calentura! ¡Una vez que te aburras de ella la vas a dejar como siempre lo haces porque no sabes tener responsabilidad afectiva y eres un maldito pito fácil!

Regulus la miro ofendido y apretó la mandíbula acercándose a ella, George Sirius estaba seguro que su mellizo no daría el primer golpe, pero decidió acercarse a antes de que Anired lo hiciera y empezarán a pelear en el suelo.

—Al menos yo no me la paso coqueteando con alguien más cuando tengo una relación —Anired lo vio a los ojos, ambas miradas casi iguales brillaban con intensidad—...te la pasas juzgándome y haciéndote la niña ejemplo, cuando tú eres igual o peor que yo, tienes novio y te fuiste a encerrar a tu habitación con Maxence... ¿Ya te lo cogiste también como a Deyan?

Un sonido seco inundo el pasillo y el azabache mayor retrocedió varios pasos cuando el puñetazo de su hermana le golpeó directamente el rostro, Regulus se llevó la mano a la zona herida bajando la mirada.

Anired sintió la mirada nublada debido a las lágrimas por aquellas palabras que le dijo, nunca le hablo de esa manera ni dicho alguna cosa como esa.

—No es de tu incumbencia saber con quién cojo o si estoy o no en una relación—escupió con enojo y aguantando las ganas de llorar, se mordió el interior de la mejilla para seguir hablando tratando de que la voz no se le quebrara—...lo que si podrías hacer es dejar de ser un idiota con tu familia y aceptar que tu "novia" no nos falte al respeto...

Regulus alzó la mirada mostrando un enorme arrepentimiento al darse cuenta de la estupidez que acababa de decirle a su hermana, no quiso hacerlo, pero fue como si no pudiera controlar cada palabra que soltaba al igual que el enojo que lo recorrió cuando ella habló de Hannah.

Anired lo vio por unos segundos y antes de ir al comedor agrego:

—El día que te deje por alguien más no quiero que vengas llorando a contarme como te rompió el corazón porque no voy a estar para ti como siempre, ahora es tu maldito problema...

—Anired...espera...

Pidió, pero fue demasiado tarde ya que la menor se metió al comedor ignorando sus llamados, George Sirius que presenció todo solo negó con la cabeza.

—Sí que eres un idiota, Regulus—vio a su hermano notando su mejilla roja y un poco inflamada—...siempre eres un imbécil, pero ahora sí te pasaste, no puedo creer que le hayas dicho eso a Geori.

Regulus guardo silencio por varios segundos, siempre buscaba la forma de defender a su hermana y ahora saber que él fue el culpable de que se sintiera mal solo aumentaba su culpa y arrepentimiento.

—No quise hacerlo ... ¿Qué habrías hecho tú si comenzará a decir esas cosas de Amalie?

—No metas a Lie en tus problemas —respondió de inmediato a la defensiva—...aparte, hay una gran diferencia porque Amalie nunca ha molestado a Geori ni burlado de nadie de la familia...

—¿Cómo estás seguro de que Hannah molestaba Nired o de qué se burló de alguien de la familia? —Regulus lo vio con enojo al notar que no lo apoyaba—...tal vez solo son inventos de Anired porque Hannah no le agrada, Han desde el inicio se comportó de buena forma con ella, siempre la ha tratado bien e incluso intento ser su amiga y Anired es la que no la deja con esa actitud.

George soltó un suspiro sobándose el puente de la nariz.

—¿Desde cuándo no le crees a Geori? Ella siempre te ha dicho la verdad de todo e incluso, cuando te metes en problemas es la primera en saltar a defenderte y confiar en ti —veía a su hermano con desaprobación—... ¿confías más en alguien que conoces de hace unos meses que en tu hermana? Espero después no te arrepientas de eso y que Hannah en serio valga la pena como para lo que acabas de hacer.

El mellizo menor se quedó en completo silencio y su culpa se hacía cada vez más grande recordando la mirada y voz que utilizo su hermana, en algunas otras ocasiones habían discutido, se terminaban gritando e incluso golpeando, pero nunca se dijeron ese tipo de cosas, temía que Anired no lo perdonara.

Entro al comedor detrás de George Sirius, al parecer nadie escucho su discusión pues platicaban de cosas que a Regulus no le importaban en esos momentos, se sentó a lado de Hannah que le sonrió de inmediato y observo a su hermana que estaba al otro de la mesa en medio de Maxence y Zed, parecía entretenida con ellos dos y con Scorpius que les contaba sobre algo de su profesión a futuro, en algunas ocasiones las miradas de los dos azabache se cruzaron pero Nired solo lo veía con enojo para centrarse en cualquier otra persona.

La cena era tranquila incluso algunos aurores participaron en ella, Regulus al estar tan al pendiente de que su hermana le pusiera atención o tan siquiera volteara a verlo pudo notar algo demasiado extraño en ella, por lo regular Anired era una persona demasiado melindrosa con la comida y sus padres siempre tenían que estarla obligando a comer verduras y carne, en cambio ahora comida demasiado de todo. Incluso eso llamo la atención de Fred, pero la menor se excusó en que ser torturada le había abierto el hambre, algo que sonó demasiado convincente ya que el desgaste físico aumentaba el apetito.

Anired se sentía demasiado frustrada y ansiosa debido a eso su hambre aumentaba provocando que comiera todo lo que pudiera tomar, sorprendiendo a más de uno, al menos podía justificarse que su apetito era debido a que fue tortura dejándola desgastada físicamente, sin embargo mentía, pero se daba cuenta que comer de esa manera de una u otra manera la ayudaba a disipar y distraer su mente del recuerdo de las discusión con Regulus, algunas veces veía al azabache y a Hannah cosa que aumentaba ese sentimiento abriéndole el apetito.

Algunos minutos después Anired sentía un enorme cargo de conciencia por la enorme cantidad de comida que ingirió, escuchaba las voces de todos platicando, pero no lograba llevar el hilo de la conversación, solo en su palabra se repetía una y otra vez la misma oración, como si esa pequeña voz que era su conciencia le gritara para hacerla entrar en razón:

¡La maldita gula es un pecado y tú eres una maldita pecadora!

Esa voz cada vez era más fuerte repitiéndose una y otra vez, la voz la atosigo tanto que se levantó para disculparse por ausentarse por unos minutos durante la cena y salir del comedor, una vez fuera corrió por el pasillo y subió las escaleras dando algunos trompicones hasta encontrar el cuarto de baño más cercano que había en el pasillo.

No era una acción perfecta, pero si demasiado purificadora, un camino a la sanidad de la perfección.

Después de su gran error se encontraba en ese baño, trato de ser lo más discreta que pudo para que nadie sospechara de su pequeña aventura.

Esperaba que nadie la escuchara, porque lo que vendría a continuación sería una especie de ritual que a Anired se le estaba haciendo costumbre.

Se colocó frente al escusado hasta quedar en cuclillas y poco a poco penetro con el dedo su pequeña garganta.

Sintió asco, asfixia e incluso un poco de dolor, pero eso no importaba, era algo que estaba viniendo a salvarla, poco a poco sus culpas se iban, regresararia cada pedazo, porque todo lo que entro tenía que salir. Las primeras veces fueron demasiado difíciles, pero de manera rápida estaba logrando dominarlo.

Toda su vida había sido una cerda, devorar era lo mejor que sabía hacer, sin embargo, ya no quería ser esa forma, anhelaba ser especial, ser perfecta.

Escuchaba el sonido de sus propias arcadas mientras recordaba lo que varias veces Deyan le dijo:

"Estas engordando"

"Comes tanto que ni siquiera te quedara la ropa"

"Mírate, cada vez estas más gorda, cualquiera se dará cuenta"

Y a su mente volvió la escena de hace unas horas, ella encima de Maxence, las manos del rubio recorriendo su abdomen de forma lenta, si engordaba... ¿Él la volvería a tocar de esa manera?

Tosió un poco cuando su garganta ardió, observo todo lo que estaba en el escusado.

Volvió a vomitar.

«Vomitar.»

Una palabra muy fuerte o muy simple, depende desde el punto de vista de donde lo veas.

Hoy vomito. Hace tres días también.

Era una sensación fea y linda al mismo tiempo. Esa sensación de sentirse liviano, liberada.

Plena.

Para Anired no había nada como vomitar.

Sentirse aliviada de que no subiría esos gramos o kilos que se comió y se arrepintió

Fea.

Esa sensación de culpa al comer y luego vomitar, que se siente al hacerlo, pero esa era su penitencia, su castigo.

Escucho una pequeña risa, de inmediato tomo papel de baño para limpiarse la boca y desviar la mirada topándose con unos ojos cafés que la veían con altanería y diversión, Anired de inmediato bajo la tapa del baño y se puso de pie encarándola.

—¿Qué haces aquí? Cuando un baño está ocupado se toca.

Hannah sonrió recargándose del lavamanos.

—Crei escuchar que alguien vomitaba y no me equivoque...pareces enferma, Nired.

Odiaba ese tono que utilizaba, como si siguiera siendo una niña pequeña.

—Lárgate, déjame sola.

Hannah negó viéndola de arriba abajo.

—Deyan tiene mucha razón...eres tan gorda —se acercó a ella para tomar una punta de los negros mechones de cabello—... luces completamente asquerosa y apestas vómito, no entiendo como D'Acanto está siempre detrás de ti ¿No sentirá asco al solo verte?

Anired estaba en su momento más débil, cuando cualquier comentario la hería con facilidad.

—¿Qué? —Hannah enarco la ceja— ¿El gato te comió la lengua? pobre, pobre Nired, creyéndose la mejor en todo, cuando solo eres una porquería, mírate... ¿Qué dirían tus padres y todos los que te rodean al verte de esta forma? ¿Qué dirían de que eres tan gorda? —la lengua de la rubia era afilada ante cada palabra que decía—...Ay, Anired —soltó un suspiro con dolor fingido—...al parecer el vomitar y comer poco no te sirve de nada, sigues siendo gorda, incluso más que antes, tan solo ve tus muslos o como en el abdomen se te forman esos rollos cada que te sientas, deberías de intentar con otra cosa.

MoongBlaxott-Blyley se regocijaba internamente dándose cuenta que encontró una debilidad de Anired, y lo mejor es que ella no tenía que hacer nada para que la azabache sola se dañara, si todo seguía así las cosas parecían ser un buen panorama para ella.

Anired no respondió nada para salir de ahí escuchando la risa burlona de Hannah.

¿Qué se suponía que debía de responder a eso cuando la rubia tenia completa razón?

Era tan gorda que la ropa pronto no le quedaría, si no encontraba una forma de perder peso rápidamente causaría asco ante todos.

En esos momentos era tan vulnerable que tomaría los malos comentarios afectándola cada vez más, solo quería desaparecer de ahí sin escuchar a nada ni nadie.

⚜⚜⚜

La sala de juntas del ministerio era una completa locura, llena de ruidos y gritos, nadie parecía ponerse de acuerdo y debido a la muerte de Kingsley diversas discusiones circulaban sobre si seguiría el Torneo De Los Tres Magos y quien sería el nuevo ministro.

La mayor discusión era sobre si Anirak Black-Weasley tomaría el poder oficialmente, algunos estaban a favor y otros en contra debido a que pertenecía a la familia Black, y varios temían que esa familia tuviera un poder mayor al que ya poseían.

Jerome ya harto de todo eso y que nadie se pusiera de acuerdo decidió llamar la atención de las ministras, funcionarios y directivos.

—Creo que si seguimos de esa manera no llegaremos a nada.

La voz llena de exigencia del rubio causo que todos lo vieran guardando silencio, Anirak solo se sobaba el puente de la nariz buscando mantener la calma, seguía un poco alterada después de todo lo que sucedió esa noche y el saber que Kingsley estaba muerto no era de gran ayuda, solo quería salir y volver con su familia buscando un poco de paz.

—¿Y qué sugieres que hagamos, Delacour? —el marcado centro francés resaltaba en la voz del hombre calvo frente a él, Simon Lefebvre, funcionario del ministerio de magia francesa lo veía con insistencia —...probablemente el ministerio británico se venga abajo si no hacemos un rápido nombramiento del nuevo ministro...

Los demás miembros de la reunión asintieron dándole la razón.

—Definitivamente, es mejor que decidamos quien será el nuevo ministro —apoyo Kai Maseley, funcionaria del ministerio británico—, si me permiten, me gustaría ofrecerme como una candidata para el puesto, conozco muy bien toda la operación del ministerio, puesto que la señora Black-Weasley solo era provisional, dudo que con todo lo que ha pasado tenga cabeza para tan siquiera pensar...

—Aparte, que, con el ataque del día de hoy, hemos visto que tiene varios enemigos que podrían presentar un gran riesgo para la sociedad mágica.

Brandon Pierce, funcionario del Ministerio Francés se ganó una mala mirada por parte de Jerome y Lyssane, que estaban lejos de compartir su pensamiento.

—Los candidatos deberían de ser elegidos por la ministra de Bulgaria y yo —Lyssane rompió el silencio manteniendo la calma para parecer una persona diplomática—, sabíamos que tarde o temprano esta decisión se tomaría, y nosotras dos junto con el Ministro Shacklebolt, la tomaríamos, dadas las circunstancias tendremos que ser solo nosotras.

La cabeza de Anirak era un lio, siempre se había negado a tomar ese puesto de manera oficial, solo accedió de manera provisional por pedido de Shacklebolt, pero ahora sin él no sabía qué hacer.

—Sin embargo, apoyo la noción de la Funcionaria Maselay, deberíamos de tener más candidatos y alguien que brinde seguridad a la sociedad mágica —Nathan Dominique, Director del Departamento de Seguridad Mágica del ministerio Búlgaro tomo el lugar de portavoz, mostrando que los dos funcionarios de Bulgaria: Deslava Angelov y Yasen Radoslav se encontraban en contra de que la Black tomara el puesto—, y con lo suscitado el día de hoy deberíamos de darnos cuenta que con la Señora Black-Weasley no será así.

Una pequeña risa interrumpió la seriedad del asunto, todos voltearon a ver a un rubio que achicaba los ojos cada que reía llamando la atención y generando varios ceños fruncidos.

—¿Qué es tan gracioso?

Hermione enarco la ceja en busca de una respuesta.

—Lo siento, Ministra de Bulgaria —tomo una bocanada de aire tratando de parar su risa—, oh, cierto, varios aquí no me conocen—sonrió con disculpa y educación tomando sentándose de forma recta—, soy uno de los nuevos funcionarios del Ministerio de Magia Británica, me verán muy seguido en estas reuniones o eso espero—hizo una pequeña reverencia para decir su nombre —: Dean Alexandre Roux

Todo los miraban de manera seria y esperando una respuesta por su comportamiento, Alexandre se aclaró la garganta.

—Mi risa es debido a las estupideces que dicen, me resulta gracioso el comentario de mi compañera Maseley y el del funcionario del ministerio Francés—paso rápidamente de una mueca de diversión a una llena de formalidad—, la persona más preparada para tomar el puesto es la señora Black-Weasley, tiene una gran experiencia y conocimientos, todos sabemos de sus logros y también que esos comentarios en contra son debidos al miedo...miedo porque alguien de la familia Black tome una posición de poder como esa, una ridiculez realmente —hizo una pausa para culminar—: y si estamos dando candidatos, yo propongo a Anirak Black-Weasley....

Algunas malas miradas se dirigieron al rubio menor, al no estar de acuerdo con esa decisión ya que nadie quería arriesgarse a darle tal poder a la azabache, Anirak prefería mantenerse en silencio escuchando todo.

—Creo que dado el caso —Hermione se puso de pie decidiendo actuar de forma democrática—, lo mejor sería someterlo a votación.

Observo a Lys, la cual suspiro para asentir.

—Creo que será lo mejor —vio a Anirak que solo asintió con suavidad—, dado esto me tomo el honor de dar el primer voto a favor de Zibelth.

Hermione asintió pasando por cada uno de los miembros del ministerio francés: Anne Moreau; Directora del Departamento de Seguridad Mágica, los funcionarios: Simon Lefebvre y Brandon Pierce; y por último la directora de Beauxbatons: Camille Dubois.

Hermione pronto paso con los británicos.

—A favor —respondió Jerome viendo con disculpa a Anirak, ya que conocía muy bien el hecho de que la azabache no quería ser ministra.

Alexandre y McGonagall votaron al igual que Kai Moseley, Anirak prefirió no participar en esa votación.

Por último, los búlgaros, Hermione de inmediato voto a favor, pero los demás miembros en contra dejando la votación empatada.

—Director Lyubomir —Llamo Granger Krum observando al castaño que se permanecía en silencio y siendo el único en no haber dicho su voto—...solo falta usted.

—Lo siento, Ministra, estaba pensando en todas las variables —respondió con una sonrisa sin mostrar los dientes—, esta es una decisión muy importante, ya que estamos confiando un puesto demasiado importante...

Los ojos grises de Anirak se encontraron con los castaños de Asen Lyubomir, recordando su encuentro en la primera prueba, cuando lo golpeo por tratar de atacar a su hija con la varita, de inmediato supuso la respuesta y al parecer todos los demás pues Kai Moseley parecía irradiar de felicidad.

—Este puesto debe de ser manejado con mano dura, o cualquiera trataría de hacer lo que se le diera la gana. Tener una mente táctica y no tentarse el corazón es una de las principales cualidades —enumeraba viendo a la azabache—, mucho menos de debe poner los conflictos personales sobre la imagen del puesto—la Black-Weasley supo que era una indirecta—...pero, también considero que una mujer de carácter duro sabrá sobre llevarlo sin dejar intimidarse, y la experiencia cuenta mucho —hizo una pausa y las palabras que pronuncio sorprendieron a todos los miembros de esa reunión —: mi voto es para la Ministra Black-Weasley.

—Creo que con esto ya tenemos la respuesta —Hermione sonrió complacida ya que confiaba plenamente en que la azabache sería una buena ministra—...Anirak, todos están de acuerdo en que tú tomes el puesto ahora solo falta saber tu respuesta ¿Aceptas?

Anirak se mordió el interior de la mejilla desenado que fuera la mejor decisión la que estaba a punto de tomar, lamentablemente tenía un gran deber moral por cumplir con los deseos de Kingsley, que desde que presento las pruebas para convertirse en Auror, él confió ciegamente en ella y en su potencial, volviéndose su mentor junto con Alastor Moody y Dumbledore.

—Acepto —respondió de manera seria—, tomare el puesto de manera oficial.

Diversos aplausos inundaron la sala de juntas, algunos suspiros y bufidos de desapruebo los secundaron, a Anirak no le importo nada de eso, solo tenía en mente que debía de ponerse en marcha para detener a Ellie Yaxley, Pierre Delacour y Fenrir Greyback antes de que hicieran más daño del que alguna vez causaron, con la gran mayoría de prófugos arrestados esperaba que todo fuera más fácil, y sumado a eso debía de encontrar algo más que custodiara a Azkaban, confiar en los Dementores ya no era una opción pues volteaban su lealtad de buenas a primeras.

Hablaban sobre la ceremonia de nombramiento cuando la vibración del celular de la Black-Weasley la interrumpió, de inmediato lo tomo para leer un mensaje que al parecer no solo le llego a ella pues Lyssane y Jerome tenían la misma expresión leyendo la pantalla de los teléfonos, sus ojos grises volvieron a la pantalla en búsqueda de que no hubiera leído mal.

"Mónica entro en labor de parto."
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¡Hola! ¿Cómo están?

¿Qué les pareció la actualización?

¿Qué creen que sea el bebé de Louis y Mónica?

Con esto termina el capítulo cuatro que dividí en dos partes.

Arriba les dejé una foto de un nuevo personaje pronto será más recurrente: Dean Alexandre Roux. ¿Qué piensan de él?

¿Teorías?

Sobre el tca que está experimentando a Anired, no busco romantizarlo de ninguna manera o decir que está bien, en los siguientes capitulos se mostrará un poco más así que habrá varias advertencias a lo largo de los capítulos.

Nos leemos.
Las amo❤️