En un día como cualquier otro, Sakura se encontraba en la sala sentada en el sofá junto a su hermana Nadeshiko. La segunda había llegado de la escuela recientemente, y luego de saludar como de costumbre a su hermana, decidió sentarse con ella para ver un poco la televisión mientras comía una bolsa de patatas fritas.

Era un programa ordinario que de vez en cuando miraban juntas. El programa en cuestión a veces trataba sobre entrevistas a celebridades de temas cotidianos y otra veces, temas un poco delicados. A ambas hermanas les encantaba pasar el rato charlando sobre muchas de las cosas que hablaban en el programa, como una manera de pasar tiempo de calidad como hermanas.

El programa de hoy era un tema algo complicado de abordar entre ellas... El incesto.

"Yo no puedo comprender como hay parientes que deciden tener una relación más allá de lo fraternal, es algo inmoral y destruye familias" dijo la entrevistada del programa.
"Concuerdo contigo, creo que es un tema que no se puede tomar a la ligera, y que debemos cuidar de nuestros hijos, pues no son valores que uno deba formar como infante" agregó el segundo invitado del programa.

Sakura se mostraba indiferente ante las palabras de los entrevistados, pero su hermana no tanto. A pesar de sus mayores esfuerzos, Nadeshiko había cambiado de posición sentada más veces de lo normal. Sakura decidió entonces hablar.
"Te encuentras bien?" preguntó la mayor.
"Oh, si, solo es que... No me siento del todo cómoda escuchando lo que hablan" se sincero la pelirrosa.
"Quieres que lo cambie?" Sakura agarró el mando del televisor, lista para cambiar de programa.
"Oh, no, déjalo... Solo que no estoy del todo de acuerdo con lo que dicen" Nadeshiko jugueteaba con los dedos de sus manos, y se mostraba visiblemente nerviosa.
"Hmm... Y porque?" empezó a cuestionar su hermana.
"Pues... En la escuela, muchos ven mal a una compañera de clase que tiene sentimientos amorosos por su hermano mayor. Siempre la hacen de menos por ello..." dijo Nadeshiko.

Antes que Sakura dijera algo, agregó su hermana...
"Un día me acerqué a ella, y quise saber como había llegado a donde estaba, y después de mucho esfuerzo me contó que era un secreto que le había dicho a una amiga a quien le tenía mucha confianza, y ella lo reveló a todo el salón... Me pareció muy injusto. Luego me explicó que ella se alejó de su hermano cuando era pequeña porque sus padres decidieron separarse y cuidar de ellos por aparte, quedando ella con su madre, y su hermano con su padre"
Su hermana mayor estaba sin palabras, solo expectante ante las palabras de la menor.
"Fue hasta años después que se conocieron, cuando eran adolescentes, y ella empezó a sentir cosas por él, ya que nunca tuvo la oportunidad de convivir apropiadamente como su hermana... Porque entonces debería sentirse culpable por amarlo de esa forma?"

Sakura que aún estaba tratando de procesar toda la historia de Nadeshiko, desvió su tren de pensamientos luego que su hermana le preguntara...
"Que opinas? Debe ser algo malo eso?"
Esa pregunta tomo con la baja guardia a la mayor, quien después de mucha meditación, dijo...
"No creo que deba ser algo malo, si lo pones así..." dijo tenuemente Sakura.
"Verdad que no? Porque debe ser algo malo? Todos los humanos debemos tener libre derecho de amar a quien queramos, sin importar que tipo de relación tengan"
"Wow... Nadeshiko, no sabía que eras tan abierta de mente..." mencionó Sakura, con cierta ilusión en su voz.
"Es algo malo?" preguntó la pelirrosa, con algo de temor que su hermana mayor la viera de una manera rara ahora.
"No, para nada, al contrario... Creo que es algo bueno de ti" Sakura desvió la mirada hacía el televisor, en un intento de calmar el mar de impuros pensamientos que se avecinaban después de toda esta revelación a ella.

Sakura lo sabía desde hace años, pero ella desarrollo sentimientos amorosos no fraternales por su propia hermana, y se castigaba de vez en cuando por pensarla de esa forma. Ha sabido conllevar este oscuro secreto de la mejor manera, pero por dentro era algo que hasta cierto punto le lastimaba, como un bate de alambre y púas agarrándose a su corazón, por saber que nunca podría hacer nada al respecto.
"Puedo decirte algo?" dijo de la nada la pelirrosa luego de un rato largo de silencio entre ambas.
Sakura, que aún se mantenía rígida por toda la situación, dijo un simple...
"Si, adelante"
"Yo a veces he soñado cosas con... Contigo. Sueños como que en otra vida no somos hermanas, y salimos juntas... Románticamente" Nadeshiko desvió la mirada hacía el otro lado, ocultando su sonrojado y vergonzoso rostro.
"Lo sé, es repugnante, no debería tener ese tipo de sueños... Pero los tengo. No significa que haré algo para que sea realidad... Entonces es realmente malo?" finalmente Nadeshiko voltea a ver a Sakura con lágrimas ya formándose por el rabillo de los ojos.

En un acto impulsivo, Sakura solo se acercó y preguntó sin rodeos.
"Son recientes estos sueños?" viéndola como un cazador a su presa.
Nadeshiko después de pensar muy bien su respuesta, solo negó con la cabeza para luego soltar un...
"Son de hace mucho tiempo..."
Sakura solo se acercó más, mientras Nadeshiko empezaba a asustarse un poco...
"Y disfrutas de ese tipo de sueños?" Sakura tenía acorralada a Nadeshiko, pues ella estaba ya pegada al reposabrazos del sofá mientras la mayor ponía un brazo a su lado para evitar su escape.
"L-lo siento onee-chan... Prometo que trataré de contro-" Nadeshiko tenía la cabeza abajo.
"No me vengas con esa porquería ahora" Sakura agarró suave pero firmemente su rostro y la levantó para verla a los ojos. "Solo responde."
"Si... Me gustan esos sueños"

Y luego Sakura, beso en los labios a Nadeshiko. 

Ya no lo estaba pensando más, no después de todo lo sucedido. Llevaba años queriendo hacer realidad este tan reprimido deseo, y fue su propia hermana quien descuidadamente liberó a la bestia que tanto quiso ocultar por tanto tiempo.
Sus labios sabían un poco salados, debido a las patatas que había estado comiendo minutos antes, y se sentían muy suaves. Nadeshiko, aunque muy sorprendida, también decidió corresponder al prohibido beso que estaban compartiendo, solo agarrando ligeramente el suéter de la mayor para encontrar algo de equilibrio. Sakura por su parte, estaba agarrada del costado del sofá con un brazo y del hombro de su hermana con el otro.

Luego de algunos minutos, que se sintieron como una vida eterna, todo el cargo de conciencia empezó a recaer en la mayor al momento que empezó a sentirse sin aire, obligándola a separarse de los labios de la pelirrosa. Un millón de pensamientos empezaron a recorrer su mente, ninguno bueno por lo que ella visualizaba después de dejarse llevar por sus repulsivos deseos. Rápidamente se alejó un poco de la menor, y dijo pobremente...
"Lo siento, Nadeshiko... No sé porque me deje llevar tan fácil... Eres mi hermana, se que no esta bien, yo solo..." sus palabras se quedaron en su garganta, y estaba viéndose a si misma como la peor hermana que existía, ahora con ganas de llorar.
"Onee-chan..." pero era el turno del contraataque de la menor.
"Hehe, eres todo un libro abierto, querida hermana..." Nadeshiko ahora se acercó a ella, y la tomo por la mano.
Sakura solo guardó silencio, cabizbaja.
"Te sientes culpable por haberme besado?" preguntó una sonriente Nadeshiko.
Sakura solo asintió, y justo cuando se volteo para seguir queriendo disculparse por lo que hizo, fue cuando...
"Nadeshiko yo- HM"

Ahora fue turno de la menor para besar a su hermana, y fue con más fuerza que el beso anterior. Nadeshiko rodeó su cuello con los brazos, y aventó todo el peso de su cuerpo para ahora derribar a la mayor hacía abajo en el sofá. Solo se separó para decirle de forma picarona...
"No lo estés, ya que yo también he deseado esto, tanto como tú..." y dicho esto, volvió con más fuerza a sus labios, dándoles un lametón que dejo totalmente paralizada a Sakura. Nadeshiko solo esperó que captara lo que quería hacer a continuación, y así fue. Dándole total acceso a los adentros de su boca, la menor se salió con la suya, ahora frotando su lengua contra la de ella.
El calor rápidamente se empezó a elevar por el repentino acto, y fue cuando Sakura agarró por la cintura a Nadeshiko.

La pelirrosa no se iba a quedar atrás, ahora con una nueva chispa en sus azulados ojos. Con sutileza, fue quitando los brazos del cuello de su hermana, ahora bajándolos lentamente hasta que se acercaban a zonas peligrosas del pecho de Sakura. La mayor por supuesto que no dejo pasar esto, y fue solo cuando volteó un poco hacía abajo para ver las manos de Nadeshiko debatiendo si debían tocar o no esa zona. Sakura solo se separó de los labios de ella para susurrarle al oído...
"Adelante, son todos tuyos, imouto-san..."

Fue cuando en ese momento, la puerta principal de la casa se abrió, revelando a los padres de ambas.
"Sakura-san, Nadeshiko-chan! Estamos en casa!" dijo alegremente la madre, Shizuka.
"Trajimos salmón para la cena!" agregó el padre, Shuichiro.
Las hermanas rápidamente entraron en pánico, se separaron antes que entraran a la sala y las vieran, acomodándose un poco la arrugada ropa para no levantar ninguna sospecha.
"Oh, aquí están, que hacen? Porque se ven tan pálidas?" preguntó su madre luego de entrar y encontrarlas como de costumbre, viendo el televisor juntas.
"No es nada mamá, solo es estrés..." dijo la pelirrosa.
"Estrés? Eso porque?" le preguntó su mamá.
"Nadeshiko esta próxima a los exámenes finales, ya debe prepararse" agregó para salvarla, Sakura.
"Oh, claro, de seguro será otra temporada donde la estarás regañando por no estudiar, o no Sakura-san?" bromeó su madre antes de retirarse a la cocina.
Ambas solo se miraron con nerviosismo en sus ojos. El padre que también se encontraba en la cocina, solo dijo.
"Sakura de seguro estará dispuesta de ayudar a su hermana para sus estudios, o no es así hija?"
"C-claro, eso haré" respondió secamente la mayor.

Sus padres no lo veían, pero ahora bajo un cojín del sofá, las dos estaban agarradas de la mano.