Dicen que "gustar" es una cosa, "amar" es otra. Claro. Yo aún soy joven para saber sobre eso. No sé si alguien me gusta y a otra persona amo. Es difícil para mí averiguarlo. Acabo de cumplir 15 años y aún no he madurado. He llorado por amor y por amistad. He llegado a pensar en la muerte. No culpo a los que me hicieron llorar, me culpo a mi misma por no saber ser fuerte.

Hoy he pensado en mi futuro. Si sigo así de débil nunca afrontaré mi pasado. Seguiré siendo igual de débil, igual de sensible. No habrá nadie que quiera estar conmigo, porque siempre veo lo negativo. Nunca pensaría en mi felicidad. Después, pensé en como sería, si yo fuera feliz. Tendré personas a mi alrededor, que me quieran sin rencor. Siempre lo veré todo positivo. Siempre haré las cosas que me hagan feliz.

Me llegué a deprimir, porque pensé que nunca encontraría aquella felicidad. Después pensé en los de mi alrededor. Los que siempre estuvieron a mi lado aceptando como soy. Haciendo que cada lágrima desapareciera sustituyendolas por una gran sonrisa.

Soy una simple adolescente, a los que muchos odian y pocos quieren. Me dijeron que no me preocupe. Que yo nací para ser feliz, no para complacer a nadie.