Buenas noches, tarde o días y les voy a contar una historia...espero que le guste

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Había una pequeña niña de cuatro años que recién se había integrado a un prejardin su primer día. Cuando entro a su aula y se fue a sentarse en una mesa que estaba al fondo porque las demás ya estaban ocupadas por otros niños que se hablaban felices.

Al empezar las clases todos se presentaron como de costumbre incluyendo a la maestra, pero cuando le tocaba a la pequeña pelinegra presentarse la maestra comenzó a dar las clases haciendo que se siente y hacer los trabajos.

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Pasaron los años y la pequeña de cinco años había entrado a jardín de sala de cinco. Como de costumbre la niña se va al fondo donde estaban los juguetes, llegó la maestra se presentó y comenzó las clases.
Ella simplemente estaba haciendo las cosas. Pasaron los días y sus compañeros la molestaban entre ellos su primera estaban.

Una mañana la pequeña no quería entrar sus clases, lo cual la madre le preguntaba ¿Por qué?, La menor le tuvo que decir lo que sucedía. Al terminar de contarle, la madre se dirigió a la salita de su hija decidida hablar con la maestra de la castaña y así fue; ella esperaba que funcione para que incluya a su pequeña pero no hubo ningún cambio alguno sino fue peor. Hasta que la pequeña encontró una pequeña salada con muchas cosas integrantes que le llamaba a atención.

Pasan los años comienza su primer año de primaria, y la jovencita de ojos-marrones la maltratan incluyendo su propia primera a medida que ella intenta jugar con ellos, pero fue mal; hablaban mal de ella, la golpeaban, le rompían los útiles, le perdían las tareas, la empujaban. Y cuando era su cumpleaños ella estaba sola ya que nadie le deseo feliz cumpleaños pero lo noto su maestra y le regaló un peluche haciendo que se ponga feliz, pero no duró nada su felicidad ya que sus compañeros le quitaron el peluche....

Al regresar a su casa, ella llegaban mostrando una sonrisa como siempre, comía y por las noches se escuchan algunas discusiones de sus padres, como no le gustaba se tapaba los oídos pero aún así se escuchaba.

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Sigue pasando los años y la seguía molestando hasta hacerla llorar hasta que un día la joven explotó con lágrimas en los ojos.

Llega a la secundaria y la joven ya tenía 12 años con un carácter bipolara... Odia llorar en frente de las personas así que se decidió que no iba a llorar.
Fue delegada, la maltrataban porque siempre lo quería ayudar y nadie le gustaba; pero no le interesó, y siguió ayudando. A pesar de eso cuando volvía a casa siempre lloraba porque contenía todo, deseando solo morir... Se sentía una basura de mierda...

Siguió adelante, paso de curso. Llegó el segundo año; veía la vida con otro punto de vista, lloraba cada vez más ya no tenía ganas de comer se encerraba en su pieza con la computadora... se cortó. No le gustaba la vida siempre veía que era un asco en especial la sociedad.

Durante su cumpleaños, su familia se había juntado a festejar el cumpleaños de su primo y de ella, pero quería ir ya sabía que todos le iba a prestar atención a mayor. La obligaron, cuando llegaron las cosas fueron así.
Llegó la hora de brindis esperaba que al menos recordarán, pero no... Cuando sentía un vacío en su débil corazón por como todos festejaban. Ella quería irse de allí rápidamente pero justo su primo (cumpleañero) recordó y quiso festeja, pero ella dijo que "no era necesario", a punto de irse su madre la detiene, estrujaba su alma quería irse a llorar para que no la vean.

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A fines de septiembre sus padres ven la cortadas de su hija la cagaron a pedo, la miraron con decepción... A ella le dolió, la mirada de su familia le hacía que se sintiera más miserable de que ya estaba.
La empezaron hablar pero para ella no le servía solo quería morir era su único deseo que nunca es cumplido.

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Logra pasar de año se cambia de división siguió estudiando, pero está vez, este tercer años; le dió un enojo por profesoras que cambiaban las cosas que decían. Que sus "compañeros" se olvidarán de ella. Cada vez que dormía soñaba su muerte de diferentes formas.

Pero seguía, seguía, seguía, seguía adelante; sintió por primera vez amor pero no cualquiera sino uno que nunca será correspondido....

Fin...