Ya en la planta baja, Harry se acercó a Louis con unos bocetos mejorados de los planes que mando a Liam.

Tony los miraba con recelo desde una esquina, así que se acercó en varias ocasiones intentando distraer a su jefe, pero nada le funcionó. Envió unos mensajes y agradeció al cielo cuando la madre omega volvió a llamar.

El pobre chico estaba muy ilusionado, ya qué el omega cada que llamaba a su hijo siempre lo saludaba diciéndole que estaba seguro de que el alfa no tardaría en invitarlo a salir.

—Señor Tomlinson, tengo una llamada de su madre en espera.

—Dile que la llamo después.

—Está insistiendo mucho.

El alfa bufó tomando el celular llevándolo a su oreja, no se percató que la llamada la recibió desde el celular de su secretario.

Liam se acercó al omega —¿Desde cuándo ella te llama a tu número personal? Y más importante, ¿cómo es que lo tiene? —preguntó cruzándose de brazos.

—Perdone, señor Payne, pero las explicaciones se las debo a mi jefe. —respondió girando para ir tras de Louis.

—Parece ser un grano en el culo. —Niall comentó acercándose.

—¡Niall! —Harry regañó.

—No te preocupes Harry. —Liam le restó importancia—. No sé qué le sucede, últimamente ha estado actuando extraño, anteriormente no era así.

Los trabajadores de Harry llevaban varias cajas con todo lo necesario para iniciar, unos se encargarían de adornar los barandales, otros de poner unos colgantes elegantes y algunas guirnaldas por las gradas, coronas navideñas y otras cosas, ellos ensamblarían el enorme árbol que iría en el vestíbulo.

—Es impresionante que tengas todo tan rápido. —Liam comentó admirando todo, también se unió a sacar unas cosas porque le encantaba participar en las decoraciones.

Zayn estaba junto a Tefy, ya que Harry solicitó su gran ayuda para cuidar de la enorme estrella que iría sobre el gran árbol.

—Ni que lo digas, ayer que llegó a casa se volvió loco y empezó a buscar todo. —El rubio delató.

Liam sospechaba algo y solo para estar seguro hizo una pregunta algo indiscreta. —Me imagino que tienes mucha ayuda para hacer todo esto.

—En realidad solo somos Niall y yo, poco a poco todo fue creciendo nuestra empresa y aquí estamos. —sonrió.

—¿Ustedes son…?

—Noooo —Niall se carcajeó—. Harry es como un hermanito para mí, mi omega quizá llegue a ayudarnos al rato.

—Eso es genial.

—¿Y tú Harry?

—¿Yo qué?

—¿Hay alguien esperando por ti en casa?

—Liam… —su alfa se acercó—. No seas entrometido, amor.

—No te preocupes Zayn y respondiendo a Liam, no, no tengo a nadie en casa.

—Eso es perfecto. —emocionado, dio un pequeño brinco, más llamativo de lo que deseó por las miradas que recibió.

—Digo, que es perfecto todo lo que haces aquí. —comentó sonrojado mientras ajustaba su traje.

Louis se acercaba con el rostro totalmente rojo, Harry, algo preocupado, llegó hasta donde él.

—¿Te encuentras bien?

—No, mi familia me volverá loco un día de estos. —bufó.

—Si quieres hablar cuenta conmigo, si no ven a distraerte necesito ayuda para los adornos del árbol.

Louis, aprovechando la oportunidad de estar con el alfa, lo siguió.

—¿Todo bien Lou?

—Claro, Liam, ¿por qué lo preguntas?

—Es que vas a ayudar y tú… —no terminó porque Zayn le hizo callar con un beso.

—Amor… —Zayn se acercó al oído de su omega —. Solo apóyalo, está tan feliz.

—Louis eres un mañoso. —Liam acusó riendo.

—¿Qué dices Liam? Deja de estar de holgazán, aquí todos amamos la Navidad y todos queremos ayudar, de eso se tratan estas estu… —inquieto se acercó buscar cosas para ayudar sin tener la mínima idea de que hacer con ellas, dejó la palabra al aire al percatarse de lo que diría.

—Estas estupendas decoraciones. —dijo tomando un puñado de bombillos.

Harry se rio y el omega los observaba detenidamente, Niall cómplice de su amigo rizado despejo el área para que solo estuvieran los dos.

El rizado le indicaba a Louis donde poner los adornos. El ojiverde felicitó al alfa por tan linda armonía laboral.

Para llegar a las decoraciones más altas fue necesario utilizar una escalera. Louis le ayudó a subir, cuando Harry se estiró, la camisa se elevó y el castaño tragó fuerte cuando vio un tatuaje asomarse por la orilla de sus pantalones.

Harry subió un escalón más para alcanzar el gran árbol, hasta en ese momento se dio cuenta de que era inmenso. —Ten cuidado, Harry.

—No te preocupes Louis, tengo experiencia en esto.

Al intentar bajar uno de sus pies resbaló, el ojiverde perdió el equilibrio.

Louis actuó rápido poniéndose detrás atrapándolo justamente, el pecho de Harry subía y bajaba, no fue por la caída sino porque estaba entre los brazos del alfa bajo su atenta y preocupada mirada.

—¿Te encuentras bien? —preguntó observando detenidamente su rostro.

—Sí. —fue incapaz de dejar de mirarlo.

—Me alegro.

—Gracias. —sonrió sintiéndose cálido cuando el olor a café lo abrazó.

—Harry, ¿te encuentras bien? —Niall llegó hasta él escudriñándolo detenidamente.

—Sí, Louis me atrapó —sonrojado, peinó un poco sus alborotados rizos.

El castaño se apegó más a Harry cuando el rubio intentó acercarse. —No te preocupes, está bien.

—Harry debes tener más cuidado. —Niall se veía realmente preocupado.

—Tranquilo Ni, de verdad estoy bien. —Se acercó para abrazarlo.

—No me perdonaría si te pasa algo —correspondió. —anda a poner otra cosa y yo me encargo de eso.

Louis fue detrás del rizado. —Niall te cuida mucho.

—Es un gran alfa, nos cuidamos mutuamente.

—Ya veo… —comentó con los celos calando.

—Siempre se preocupa de más, pero no lo puedo culpar.

—Ni yo tampoco. —espetó bufando.

Harry al escucharlo algo diferente se acercó. —¿Estás bien? ¿Te está gustando todo?

—Si no te preocupes, realmente son buenos en lo que hacen.

—Gracias… —le respondió sintiéndose extraño.

Algo cambió y Harry no entendía para nada que sucedía con el alfa, se quedó sumido en pensamientos hasta que Niall saltó de la escalera muy apresurado. Harry lo siguió con la mirada notando a Lucí llegar siendo empujada amablemente por el alfa encargado de la puerta.

La omega lo saludó desde abajo, poco a poco ella se fue incorporando en la empresa, tenía buenas ideas y una visión diferente a la de ellos, así que después de sus terapias siempre pasaba por los lugares donde estaban trabajando.

—Hola, Lucí. —saludó desde arriba viendo cómo el rubio llegaba hasta a ella besando su rostro.

Louis se acercó notando a la chica en silla de ruedas y a Niall besándole los labios. —¿Qué sucede?

—Nada, solo llegó la omega de Niall. —respondió admirando a la pareja.

—No sabía que tenía omega.

—Ahí está, es una chica muy linda, hace tiempo sufrió un incidente y pues Niall se volvió muy protector después de eso. Es un milagro que ella pueda volver a caminar.

—Lo siento tanto…

—Está bien, ella es muy fuerte.

—Yo creí que Niall era tu alfa o algo parecido. —comentó apenado.

Harry se giró totalmente sorprendió encarando al alfa. —¿qué? ¿Por qué pensaste eso?

—Por cómo te trata…

—Eso no quiere decir que esté sentimentalmente con él.

Louis se burló de su actitud infantil, recargado en el barandal de vidrio, bajó la vista notando a Niall presentar a su omega con Liam y Tefy.

—Tú también pesaste lo mismo. —acusó.

—No… yo no.

—Con Liam, tú supusiste que era mi omega.

Harry enrojeció. —Bueno, es que… eso es diferente, Louis.

—Claro que no.

—Mejor ponte a trabajar que me distraes.

Luego de un rato, el rizado se acercó con una caja donde guardaba todo el material para continuar el siguiente día. La empresa ya casi estaba vacía.

—¿Te encuentras mejor? —Harry preguntó con genuino interés.

—Sí, solo es un poco jodida la situación.

—¿Problemas de trabajo?

—No, es mi familia.

—¿Todo bien con ella?

Louis bufó. —Esperan que lleve un omega a casa para Navidad.

El corazón del rizado se hizo añicos. —Ya veo, es difícil complacer a la familia, espero puedas encontrar a alguien. —comentó algo triste.

—¿Con quién pasarás las fiestas, Harry?

—A cómo voy, parece que solo. —rio un poco acomodando uno de sus rizos detrás de su oreja.

—¿Nadie para llevar a casa? ¿Algún omega o algo?

—No y ¿tú?

—Tampoco la verdad es que no me gustan. —volteó a ver a Harry con una gran sonrisa.

Aturdido el de ojos verdes parpadeó en repetidas ocasiones. Entonces… ¿Eso significaba que Louis…?

—¿Qué harás después de salir de aquí? —El ojiazul lo sacó de sus pensamientos.

—Nada, ir a casa, supongo.

—¿Te gustaría ir por un chocolate?

El alfa rizado sonrió. —Me encantaría.

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Buenas

Aquí de nuevo, espero se encuentren bien.

Nalgaditas cariñosas :)