Bien, hoy día era el momento en el que las dos chicas tenían que decirle de una vez por todas a los padres de la menor que iban a tener una cría.

¿Por qué hasta ahora? Por miedo, nervios, pero más importante, porque se les había olvidado, estaban un poco ocupadas estás últimas semanas. Sus trabajos ya no eran tan pesados, seguían con la misma cantidad de clientes casi todos los días pero se empezaron a acostumbrar a la rutina.

Momo ya contaba con siete meses de embarazo, ya faltaba poco para el nacimiento de la cría y todavía no tenían planeado el nombre, puesto que el nombre que inicialmente Momo le quería poner, ya no le pareció una opción, quiso que ese nombre se fuera con aquella desagradable etapa que pasó.

Y ahora, sabiendo el género del cachorro, se les era más fácil aquella tarea.

—Dubu, ya no quiero decirles.—Momo era la que más nervios tenía, al ser ella la hija que sus padres siempre quisieron, temía decepcionarlos, temía que rechazaran a su cría, ya tenía mucho con que despreciaran de cierta forma a su alfa, no permitiría que pasara lo mismo con su hijo, porque si, la cría de la pareja iba a ser un niño, una hermosa copia a la inversa de las dos mujeres.

—Amor, tranquila, ten por seguro que van a amar la noticia, al menos se lo vamos a decir en persona.—Dahyun intentaba hacer que las cosas tuvieran un lado positivo, pero en el fondo ella también tenía miedo, desde que comenzó a salir con la omega, sus padres nunca habían aceptado su relación, y ahora que tenían que ir a comentarles que esperan con ansias a un cachorro, su miedo por confrontarlos aumentó.

—¿Estás segura? No quiero que lo desprecien así como te despreciaron a ti aquella vez.

Ambas chicas estaban listas, nada ni nadie podía hacer algo para que la preparación mental que tenían se esfumara, era la primera vez que Momo presentaba a una pareja sentimental.

Varias veces tuvo la oportunidad de pasar tiempo de calidad en su casa con amigas y algunos de ellos siendo sus vecinas, a sus padres les agradaba el tipo de gente con la que la menor se juntaba, hasta que Dahyun llegó a su vida.

Las chicas se habían conocido en la escuela mientras iban por su respectiva comida del día en la hora del recreo, y como si de una película de romance se tratara, las dos chicas chocaron mientras iban a sentarse a cualquier mesa, Momo terminó con su jugo de mandarina en la cabeza y Dahyun con un mochi manchando su larga cabellera.

—Dios, lo siento, ¿Te encuentras bien?.—La pelinegra se disculpó, más sin embargo la otra chica solo la miraba, no le importaba que aquel líquido estuviera goteando por las dos colas de caballo que tenía Momo, simplemente le interesaba conocer a aquella chica tan linda con la que se había encontrado en el peor sitio posible.

—O-oye, ¿Estás bien?.—Momo la miraba preocupada, la mayor tenía un leve sonrojo que iba desde sus mejillas hasta sus orejas, Momo pensó que aquello era obra del golpe que probablemente tuvo.

—¿Yo? Si, si, estoy bien, ¿Te golpeaste en algún lado?.—Dahyun quería que la conversación no se acabara.

—S-si, pero yo no importo, veo que el golpe del mochi afectó un poco a tus mejillas.—Dijo Momo para que así la situación no empezara a ser incómoda. Las dos rieron bajito gracias al comentario de la pelinegra.

Hablaron por un rato más y con la comida que todavía quedaba en las bandejas de cada una, se fueron a sentar en una mesa ellas dos solas, las amigas de Momo la esperaban pero cuando vieron tal escena, no quisieron interrumpir hasta que la menor les fuera a contar. Supieron entonces que eran compañeras de clase y de igual manera, eran vecinas por solo una cuadra de distancia. Les pareció genial aquello porque así podrían pasar más tiempo juntas.

—Oye, ¿Te parece si este sábado vas a mi casa a ver películas?.—Preguntó Momo, no llevaban tanto hablando y ya quería que sus padres la conocieran.

—No, no creo que eso pase, es diferente y está noticia es más importante que esa.—Respondió Dahyun recordando lo que había pasado en aquel entonces. La historia no se iba a repetir otra vez.

Llegó el Sábado, era un bonito día y las chicas ya tenían todo planeado, los padres de Momo no se encontraban en casa en el momento en que la hora en la que se iban a ver las dos llegó.

Dahyun se encontraba muy nerviosa, no solo la idea de pasar un tiempo con aquella chica que le pareció tan bonita la ponía así, sino que además de todo, era la primera vez que le pasaba esto, nunca pensó que se encontraría con alguien de la misma manera en la que en las películas lo mostraban.

Todo era sumamente irreal. Sin embargo, tenía que ser valiente, Momo no la podía ver nerviosa, le daba más pena que simplemente viéndola desde lejos. Al llegar a la casa de la menor, tocó el timbre y pocos minutos después Momo abrió, vistiendo un vestido de jean con un suéter de rayas por debajo, parte de su cabello recogido y un moñito adherido al peinado, ante los ojos de Dahyun, se veía hermosa.

—Pasa, mis papás no están, y creo que demoran en llegar.—Dijo la menor, dejando que la alfa pasara, al entrar Momo la hizo pasar a su cuarto, había muy poca privacidad en la sala.

—Y bueno, está es mi habitación, bonita ¿No?.—La menor alardeó, sintiéndose orgullosa de sus decoraciones pastel.

Unos cuantos minutos les bastó para que estuvieran hablando sin parar, ya habían pasado dos o tres horas aproximadamente y cada vez se quedaban sin temas de conversación y se empezaba a crear un silencio incómodo. No sabían qué hacer, sin embargo, ya era hora de que la mayor se estuviera yendo, pronto llegarían sus padres y no quería que formaran un escándalo.

—Dios, mira la hora, si llegan mis padres y te ven, nos matan, no les pedí permiso para que vinieras, por lo mismo que no iban a estar.—Habló Momo, con miedo de que las encontraran, no estaban haciendo nada malo pero sin un permiso pedido, estaban muertas.

—Bien, vamos.—Dahyun simplemente aceptó la realidad, no quería que regañaran a Momo por su culpa, se resignó a ponerse sus zapatos e ir detrás de la menor hacia la puerta principal.

—Oye, no es por sonar grosera, pero vete.— La menor al ver que Dahyun simplemente no se iba, aún si la puerta ya estaba abierta, empezó a insistir.

—Disculpa lo que voy a hacer, pero no me puedo aguantar más.—Dahyun se acercó rápidamente hacia Momo, en el camino cerrando la pierta tras de la menor.—Lo siento.—Fue lo último que dijo antes de finalmente juntar sus labios con los ajenos, Momo se tardó en aceptarlo, no sabía besar, pero hacía el intento por seguirle el ritmo a la pelinegra, la que en esos momentos se mantenía sujetando su cintura con su mano izquierda, mientras que con la se encontraba en la puerta. El oxígeno lentamente les empezaba a faltar,  pero eso no fue impedimento para la menor, quien volvío a besar a Dahyun aún si esto implicaba que se tuviera que parar en puntitas para alcanzar los labios ajenos.

Sin embargo, tuvieron que parar el beso. La puerta se había abierto.

—¡¿Pero qué carajos crees que estas haciendo Momo?!—Su madre, aquella a la que tanto odio le tenía a la mayor por los rumores que se escuchaban de esquina en esquina en el barrio, se lazó encima de Dahyun para alejarla de Momo, quien su padre la tomó de brazos, él no entendía por qué tanto rencor hacía la mayor siendo que no le hizo nada nunca. 

—No te quiero cerca de mi hija jamás, asesina. Lárgate, y si puedes, mátate así como lo hiciste con tu padre.—Habló la madre de Momo, casi escupiéndole en la cara a Dahyun cada palabra que salía de su boca con tanto repudio que le tenía. Dahyun tenía miedo, pero más por lo que la menor podía creer de ella según lo que creía su madre.

Después de aquel suceso, las chicas se distanciaron, no por gusto, por obligación. Y hasta años después fue que pudieron verse de nuevo.

—No, no va a pasar lo mismo, te lo aseguro.—Dahyun volvió a la realidad, dejó de recordar aquel momento y simplemente, agarró sus cosas y las llaves del auto, para luego encaminarse hacia el seguida de mi Momo.

Dios, lo sé, merezco que me tiren un ladrillo en la cabeza por demorada ><
Sé que dije que pronto actualizaría, pero como ven, el capitulo salió largo, y más que nada solo fue por contar lo que había ocurrido en el pasado.
Prometo no demorarme tanto de ahora en adelante. 

Espero les haya gustado el capítulo aún si es de medio relleno, no olviden votar y comentar en todas mis historias ^^

—Ann 💫