ATENCIÓN: A partir de este capítulo, la historia será narrada desde el punto de vista de Harry Styles y en la variación de tiempo ANTES-DESPUES. LA HISTORIA SIGUE SIENDO NARRADA EN TIEMPO PASADO.

Espero no tengan ningún inconveniente a la hora de entender, y disfruten del comienzo del fin.

PD: Releer el final del capítulo Shot out! si es necesario para comprender este.

-Harry-Pronunció aquella dulce voz, llamando mi atención.

Sabía perfectamente de quién se trataba.

Hice un gran esfuerzo por abrir mis ojos, pero me resultaba imposible.

-Harry-Soltó nuevamente y sentí como dejaba una leve caricia en mi rostro.

Con gran dificultad logré abrir mis ojos lentamente, una cabellera castaña alejándose de mí fue lo único que logré divisar. Casi por inercia me puse de pie y emprendí mi trayecto siguiendo sus pasos.

-¡Harry vuelve a tu lugar!-Exclamó.

Observé a mi alrededor, no sabía dónde me encontraba. Todo era demasiado surrealista, las paredes a mi alrededor se encontraban manchadas de rojo, caminaba por un angosto pasillo iluminando por una insignificante luz muy a lo lejos de mí, y tras bajar la mirada me percaté que llevaba puesto un uniforme de recluso.

-¿Qué demon...

De repente un fuerte estallido captó mi atención por completo. Y un grito ensordecedor hizo eco en las paredes de aquel espantoso lugar.
Corrí rápidamente hacia adelante, tampoco tenía otra opción, cada vez que volteaba veía como a mis espaldas todo se oscurecía cada vez más y más.

No sabía dónde estaba, ni a causa de que me encontraba allí, pero estaba completamente seguro que aquello era una maldita locura.

-¡¿Hola?!-Grité fuertemente-¡¿Hay alguien ahí?!

No obtuve respuesta alguna.

-¡Se que no estoy solo, mierda!-Exclamé.

-¡Shhhhhhhhhhh!-Me silenció-Van a encontrarme, Harry.

Aquella voz... era su voz. Tan dulce, pronunciando mi nombre como nunca antes lo había hecho.

Comencé a buscarla con desesperación, y a pesar de que la presencia de tan poca iluminación dificultó mi labor, lo hice. La encontré recostada junto a una pared, temblando y con su ropa toda desgarrada.

-¿Qué está sucediendo?-Pregunté mientras le ofrecía mi mano para ponerse de pie.

No respondió. Pero aceptó mi mano y al tomar contacto con su piel, pude sentir el frío que se apoderaba de su cuerpo.

-¡Maldita sea, te estas congelando!-Solté tratando de capturarla entre mis brazos para brindarle algo de calor.

Pero fiel a su instinto, se alejó de mi velozmente mientras negaba con su cabeza repetidas veces.

-No siento frío, Harry-Informó antes de continuar su camino hacía delante.

-Ahora me llamas Harry- Pensé, en voz alta por supuesto, provocando que volteara hacia mi.

Un rayo de luz iluminaba su rostro, me sobresalté al observarla con atención. Había perdido peso, las bolsas debajo de sus ojos eran casi tan grandes como solían ser sus mejillas, su cabello se encontraba enmarañado y su tez se había tornado grisácea.

Ella lucia moribunda.

-Ese es tu verdadero nombre-Soltó, sus ojos cansados me observaban con la misma dulzura que lo habían hecho años atrás- O prefieres que te llame Eddie.

Y esa fue la primera puñalada que recibí de su parte. Y de alguna maldita forma aquello fue literal.

-¡Oh por Dios, estás sangrando!-Chilló acercándose a mí.

Bajé mi mirada hasta mi abdomen, sobresaltándome al ver mi lado izquierdo repleto de sangre.

-¡Mierda!-Exclamé tras sentir un fuerte dolor en aquel sector-¿Qué esta sucediendo Margot?

Ella negó repetidas veces con su cabeza y llevó una de sus manos a mi abdomen presionando fuertemente pero, de alguna misteriosa manera, culminando tanto con el sangrado como con el dolor.

-No puedes estar aquí Harry-Informó-¿Cómo diablos llegaste?

De repente aquella dulzura en sus ojos se transformó en preocupación y rápidamente dio un salto desde la calma hacia la locura.

-Yo...

Otro fuerte estallido hizo retumbar las paredes de aquel angosto pasillo, y una grieta se formó a nuestros pies.

-¡Basta, por favor!-Gritó Margot a toda voz mientras cubría sus oídos y avanzaba lentamente hacia adelante-¡Basta!

Aquello era jodidamente raro.

Su respiración comenzó a acelerarse y su cuerpo nuevamente a temblar, me apresuré por envolverla con mis brazos y lograr que se calmara.

-Harry, vete-Pidió, alejándose de mí y continuando su trayecto-Estoy perdiendo la concentración.

-¿Qué son esas explosiones Margot? ¿Y por qué te afectan tanto?

-¡Cierra tu jodida boca Harry, no finjas que te preocupas por mí cuando estoy aquí por tu maldita culpa!-Exclamó avanzando cada vez más rápido.

Y ahí llegó su segunda puñalada.

El costado derecho de mi abdomen comenzó a sangrar y doler con muchísima más magnitud que la vez anterior, obligando a Margot a repetir el proceso mientras soltaba una serie de insultos que no logré entender.

-Necesito saber como llegaste aquí-Dijo mirándome fijamente a los ojos.

-Te lo diré cuándo tu me digas que diablos es esto-Respondí.

-¡¿Y cómo se supone que crea en ti cuand...

-¡Margot espera!-La detuve-Por alguna extraña razón cada vez que dices algo sobre el pasado...

-Te lastimo, lo sé-Lanzó un fuerte suspiro-Harry tu no debes estar aquí.

-¿Y tú sí?-Inquirí, y ante mi interrogante asintió con su cabeza-¿Qué está sucediendo, Maggie?

La lejana luz delante de nosotros se oscureció apenas un poco, pero lo suficiente para preocuparla.

-Por favor, no me llames Maggie-Suplicó cerrando sus ojos fuertemente durante unos instantes, logrando que aquella luz volviera a brillar como antes.

Toda esa mierda era excesivamente extraña.

-Harry ¿Cómo llegaste aquí?-Preguntó, recuperando la calma.

Sabía que si no se lo decía, no obtendría información alguna de su parte.
Ya no podía ejercer el mismo poder que tenía sobre ella años atrás, Margot ya no era una niña estúpida.

-No lo sé, lo último que recuerdo es que estuve metido en una pelea. Eran tres muchachos y yo estaba sólo, no fue nada fácil... creo que me desmayé, luego desperté aquí.

-Harry vas a morir-Soltó de repente.

Abrí mis ojos de par en par ¿Qué demonios estaba diciendo? ¡Estaba demente, fuera de sí! Tantos años de manicomios y tras las rejas la habían dañado aún mucho más.

-¿Qué estupideces estás diciendo, Margot?-Pregunté, subiendo el tono de mi voz-¡¿Qué tan imbécil te has vuelto?! ¡Deberías volver a ese maldito manicomio y pasar el resto de tu puta vida allí!

Aquella misteriosa luz brillaba cada vez más y más a medida que aquellas palabras malintencionadas desbordan mi boca. Sentí como un escalofrío recorrió mi cuerpo y un frío abrazante se apoderó de mí.

-¡No son estupideces, idiota!-Gritó-¡Lo que te digo es real, y estoy tratando de ayudarte a pesar que debería dejarte pudrir en la...

Hizo silencio, no quería lastimarme.

-Harry, te sonará estúpido y poco creíble, pero este lugar es una clase de limbo. El espacio entre la vida y la muerte... llegas aquí para luchar por tu vida, te aferras a aquello que te da esperanza y peleas.

Aquello sonaba estúpido, pero todo en ese lugar me había resultado raro desde el principio. Y desde que me encontraba allí, nada de lo sucedido tenía algo que ver con el mundo real. Y de alguna manera, todo lo que Margot decía comenzaba a cobrar sentido.

-Sí yo estoy aquí... y tú estás aquí... ¿Significa que tú también estás luchando por tu vida?-Asintió.

-Te aferras a mí y yo a ti, Harry. Soy quien te da esperanzas, y aunque no lo quiera tu me las das a mí-Sonrió-Y deja que te diga una cosa, aún tienes las de ganar.

-¿Y tú?-No respondió-¿Qué son esas malditas explosiones?

-Electroshocks, los médicos tratan de salvarme. ¿Ves aquella luz?-Señaló la única luz que se encontraba en aquel desastroso lugar, asentí-Es el famoso final del túnel, la luz que ves al morir.

Mierda, aquello era tétrico.

-¿Cómo es eso de que tengo las de ganar?

-Tu cuerpo yace tendido en el callejón donde te enfrentaste con aquellos matones. Nadie acudió a tu auxilio, es por eso que tienes que ser tú quien se salve a si mismo-Dijo-¡Ese es tu camino, Harry!-Señaló con su dedo índice la oscuridad a mis espaldas-Tienes que regresar por donde viniste.

-Estas son puras mierdas-Declaré frunciendo el ceño.

-¿Lo son?-Preguntó Margot, cambiando la dirección de su índice hacia otro sector.

Recuerdos.

La noche que nos conocimos, la vez que salvamos a su hermano, sus sonrisas y aquella forma tan inusual de coquetear, nuestro primer beso aquella navidad en su apartamento, Margot y yo haciendo el amor, la vez que me confesó que me amaba...

Mierda.

-Deja de sonreír y aférrate a ellos-Habló, tratando de ocultar aquella pequeña sonrisita traviesa que se formaba en su rostro-Te llevarán de regreso.

-¿No crees que si nos besamos aceleraría el proceso?-Me arriesgué a pesar de conocer la respuesta.

-Mejor muérete, Harry-Carcajeó.

Sonreí y le di la espalda, dispuesto a seguir sus ordenes para regresar a quien sabe donde, desde quien sabe donde. Sabía que ella no era real, al menos no así, pero no podía dejar de admitir que el verla me había acelerado el corazón, estaba ¿Felíz?

-¡Margot!-Volteé y la observé tomando el camino contrario.

-¿Sí, Harry?

-¿Por qué corres hacía la luz?-Creía conocer la respuesta y no era de mi agrado.

-Ese es mi camino, Harry-Respondió alejándose cada vez más y más.

-No Margot, no lo es-Comencé a desesperarme-¡Margot morirás!-Grité-¡Aférrate a mi Maggie! ¡Aférrate a nosotros!

-Me encantaría poder hacerlo, Eddie.

Pero entonces lo comprendí.

No podía aferrarse a mí, porque siempre había sido una maldita mentira.

Rápidamente traté de seguirla, iba a morir y no podía permitírselo. Pero tampoco podía avanzar, todos mis pasos me dirigían a mi propio camino. Estaba regresando.

Mi cuerpo dolía demasiado, apenas podía moverme sin sentir que me habían arrancado las extremidades.
Mi cabeza daba vueltas y amenazaba con estallar.
Mi respiración acelerada y mi corazón latiendo a la velocidad de la luz, aquel extraño y aterrador sueño me había jugado sólo una mala pasada, pero no había de que preocuparse.

Mi teléfono comenzó a vibrar, lo saqué de mi bolsillo y lo llevé rápidamente a mi oído tras tomar la llamada.

-Hola preciosa-Dije mientras llevaba una mano a mi cabeza.

-Harry, tengo noticias-Soltó Kara.

-¿Pueden esperar a la cena? No estoy en condiciones y...

-Esto es urgente, imbécil.

-Habla-Ordené.

-Margot está muerta-Informó, dejándome estático.

*

Holaaaaa! Este es el primer capítulo narrado desde el punto de vista de Harry, un tanto MUUY diferente a los demás. Quería probar algo nuevo, espero les guste (:

A pesar de que el cap anterior no alcanzó los 100 votos, este capítulo es un regalo a las lectoras que siempre votan y comentan!
Subiré el siguiente cuando los capítulos 20 Y XXI alcancen los 100!

¿Qué les pareció el cap?

No olviden sus votos y comentarios.

Las quiero y gracias x leerme.