
XXXIV
Debe existir una especie de truco para dormir, porque llevo demasiado tiempo mirando el techo sin lograrlo. Si no fuera porque Kit e Isis que duermen en las camas de mis dos extremos lo consiguieron diría que es imposible. Era más fácil cuando quedaba inconsciente o me drogaban en mi habitación. Mañana estaremos de regreso, por lo qué, no será un problema por mucho tiempo. Me giro otra vez sobre la cama. Sabía que tenía que inyectarme todo el líquido otra vez, sin importar si me dejaba noqueado todo el día. De cualquier forma Kit se ganó la oportunidad de llevarme, y pensar que es el mismo que intento matarme.
Por más que lo intento, no puedo sacar esa idea de mi cabeza.
"Te odio Ned" las palabras vuelven a mi memoria. En ese momento fue Kit quien me sacó de esa pesadilla y los mantuvo tan alejados que hasta. En la oscuridad de la noche es que puedo traerlos a flote otra vez.
¿Daisy llegó a odiarme? Entonces lo que dice Astra es cierto, ella murió por mi culpa.
Pensar en ello me hace sentir hundido, por lo que salgo de la cama. Necesito tomar aire.
Hace bastante frío afuera, incluso sale aire congelado de mi boca, por suerte el traje es térmico por lo que mantiene mi cuerpo caliente.
La presión del aire es mucho más densa en esta zona que en todo el bosque, pero hasta ahora lo noto. Me giro para ver el árbol gigante. Da la sensación de que es artificial.
—¿Qué haces despierto? —es la voz de Eris. Subo la cabeza para verla sentada sobre el techo.
—No puedo dormir —confieso.
—Ya veo, ¿Quieres subir? —inquiere con una sonrisa en los labios indicando la caja metálica junto a la pared.
No tardo mucho en subir y sentarme a su lado.
—¿Recuerdas la primera vez que vinimos aquí? —pregunta de forma pausada.
El único recuerdo que tengo es mirando una silueta emocionada por ver el árbol por primera vez. Había asumido que era Daisy, pero podría ser Eris. Después de todo no reconozco la voz y de hecho, no sé cómo es Daisy físicamente.
—Sí —miento en voz baja mirando al árbol.
"¡Es increíble Ned!".
—Para ti siempre ha sido un recuerdo incómodo, pero ese día me llevaste hasta aquí atravesando todo el bosque del pesar con esa herida en la pierna —murmura con una expresión dulce— era nuestra primera misión oficial y la fallamos por mi, aunque luego te culpaste Sett diciendo que habías perdido los estribos.
No respondo, intento recrear la escena en mi cabeza colo si fuera algo de mi imaginación y nunca lo hubiera vivido. Estos son los recuerdos que deseo tener, aquellos que me den esperanza en vez de autodestrucción.
Le devuelvo la mirada dulce cuando ella se ríe.
—Siempre hacías ese tipo de cosas y yo en ese momento no era lo suficiente valiente para enfrentarme a él —comenta liberando la tensión en su cuerpo.
Recuerdo cuando el comandante no quería detener la máquina de tortura, ella misma lo amenazó para que lo hiciera y de hecho este aceptó sin discutir. Pensar en una Eris tímida me es un poco chocante.
—Ha pasado un tiempo —murmuro.
Sí... —deja salir Eris en un suspiro—parece que te llevas bien con él.
—¿Por qué no lo he matado? —pregunto intentando sonar divertido, pero sueno tenso. Después de todo esto no es propio de mí, ni siquiera de un nuevo yo que ha perdido sus recuerdos de cómo solía ser en el pasado.
Pará mí sorpresa ella se ríe.
—Hubiera sido de ayuda. No tendríamos a un novato por ahí disculpándose por todo junto con un Nu que chilla cuando no lo ve —responde Eris intentando imitar a Kit y luego al Nu. Hablando del Nu, este salto a la cama de Kit sin dudarlo, aunque yo lo llevaba en brazo.
"Lo siento Ned, pero él me escogió a mí" murmuró Kit sentándose en la cama para que el Nu lamiera sus mejillas.
Pongo una pequeña sonrisa en mis labios que la toma por sorpresa.
—Sí te digo donde duermen no será un problema para ti —digo ella se ríe con fuerza. Es la primera vez que la veo hacerlo.
—¿Y tener a ese monstruo chillando de por vida? —protesta— paso de ello.
Hay un momento de silencio entre nosotros. Ella relaja sus expresiones antes de dar su suspiro natural.
—Es bueno tenerte de vuelta Ned —dice antes de saltar hacia el suelo y entrar en el edificio.
Entiendo a lo que se refiere por mi memoria y la sensación que debo producir de hablar con alguien diferente, yo me siento diferente de alguna forma, así que, es normal que otras personas piensen eso también, aunque, ese comentario me da la idea de que había estado perdido todo este tiempo, tan como figura retórica, como de forma literal.
Subo la mirada hacia las grandes ramas cubiertas de hojas verdes del árbol del comienzo. Levanto mi mano hacia una rama apartada. Empieza con un leve cosquilleo antes de sentir como mis poros sangran. Unas pequeñas burbujas de sangre flotan a mi voluntad encima de mi brazo. Cuando tengo las suficientes burbujas juntas las transformo en una navaja sólida. Compruebo su filo cortando por encima uno de mis dedos izquierdo. Es bastante filosa para haber sido creada con mi sangre.
La lanzo hacia la rama apartada a la que estaba apuntando cuando creé la navaja. Esta corra la hoja generando una chispa. Tomó la rama y navaja en el aire.
La navaja se vuelve deforme hasta que es absorbida por mi mano. Miro la rama, tiene una textura extraña, por dentro está cubierta por dos cables de color rojo y azul. Mi atención se dirige de inmediato hacia las hojas a esta distancia puedo ver claramente los diseños de las raíces en las hojas que pierden color como si de verdad se marchitaran, pero es claro que la rama no es natural. De hecho, todo el árbol es artificial.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro