GET ON YOUR KNEES
"De rodillas,ahora"

- Nicole,¿crees que Lando será capaz de ganar la carrera de hoy y conseguir así su primera victoria?- preguntó uno de los cinco periodistas que llevaban siguiendo mis pasos desde que había llegado al paddock.

-Por supuesto que sí,Lando es un excelente piloto,lo hará bien- sonreí de boca cerrada y seguí mi camino hasta que llegué al garaje de McLaren.

Cuando mi pié tocó el suelo de la zona de radios,la mirada de Lily,la novia de Oscar, inmediatamente se dirigió a mí.

-Y la increíble Nicole Beckham,como siempre,llegando tarde- carcajeó acercándose a mí para abrazarme.

-Dicen que lo bueno tarda en llegar,¿no?- respondí divertida, devolviéndole el gesto de saludo.

Y es que una cosa era cierta; si me pagasen por cada vez que llegaba a algún sitio tarde,sería multimillonaria.

-Quizás pero siento decirte que los chicos ya se han subido a sus coches...- me dió un pequeño golpe divertido y me extendió uno de los cascos conectados a la radio.

-Joder,espero que a Lando le vaya bien,no he podido siquiera saludarlo...- dije algo apenada,ya que siempre me suponía una leve preocupación menos cuando Lando se subía a su monoplaza después de desearle buena suerte,era,algo así,como un ritual que ambos teníamos antes de cada carrera.

La británica simplemente asintió y dirigió su mirada a la cámara que apuntaba al coche de su novio,acción que imité,haciendo lo mismo solo que con la cámara de Lando.

-Lando,radio check- escuchamos a uno de sus ingenieros,probando que la radio funcionaba correctamente antes de comenzar la carrera.

-¿Está Nicole en el garaje?- preguntó Lando desde su coche.

Una pequeña sonrisa se formó entre mis labios al escucharlo preguntar por mí; se sentía bien saber que siempre esperaba mi presencia junto a él en todas las carreras para darle todo mi apoyo.

-Si Lando,Nicole está en el garaje con Lily- respondió esta vez Zack,mirándome desde la cabina de fuera con una sonrisa divertida.

-Decidle que no me siento cómodo sin haberla escuchado desearme buena suerte. Realmente,la eché de menos este fin de semana...- añadió el británico con un tono de voz que alegaba un pequeño sentimiento de tristeza que logró encogerme el corazón.

Si bien es cierto que,casi siempre,acudía a todas sus carreras, incluidos los días de práctica y de la qualy,pero esta vez tuve que acudir a una reunión familiar importante a la que,por insistencia de mi padre,no pude negarme a ir. Como consecuencia, había llegado tarde este fin de semana y únicamente me daría tiempo a ver la carrera del domingo.

-Se lo diremos,pero concéntrate en la carrera,por favor- volvió a hablar uno de sus ingenieros.

-¡Copy!- respondió tras un leve suspiro.

Después de esa pequeña conversación,una sonrisa juguetona fué impartida por Lily,mirándome atentamente.

-No pensaba que fuese tan importante ese "ritual de la buena suerte"- dijo la británica mirándome con cierta diversión.

-Para nosotros lo es- respondí yo,por mi parte,en un tono de voz algo más serio y monótono.

Los nervios comenzaron a carcomerme por dentro cuando los semáforos comenzaron a encenderse, y una terrible sensación de que algo malo iba a pasar, comenzó a formar un nudo en mi estómago.

Creo que podéis llamarme adivina... ¡Ojo de loca nunca se equivoca!

La salida fué realmente terrorífica; un Haas había impactado contra un Alpine que,de rebote, chocó contra un McLaren.

¿A que no adivináis el de quién?

-¡El alerón de Lando Norris y la parte delantera de su monoplaza quedan totalmente destrozados después de la colisión accidentada entre Estaban Ocon, Kevin Maggnusen y,como consecuencia,también con el coche del británico!

El alma se me cayó al suelo al escuchar a los comentaristas decir eso y al ver como todos en el garaje de McLaren se llevaban las manos a la cabeza, claramente sorprendidos tras ese inesperado accidente que dejaría a Lando fuera de la carrera.

Por la radio,lo único que se escuchaban eran las palabras malsonantes saliendo de la boca de Lando,el que, claramente,estaba furioso por haber quedado fuera en apenas la salida de la carrera.

La frustración,el enojo y la tristeza formaban una mezcla ciertamente peligrosa de sentimientos,y estaba claro que el británico estaba sintiendo todas y cada una de ellas en ese preciso instante.

Lando se bajó de su monoplaza y se quitó su casco,se cruzó de brazos y esperó pacientemente a que alguien lo fuese a recoger para regresar al garaje de McLaren.

Lo cierto es que resultaba realmente curioso como el estado de ánimo del joven piloto había pasado de ser totalmente perdido en la ira a otro más tranquilo y sereno. Al ver eso,por mi mente solo se pudo pasar una pregunta: ¿Qué diablos estará pensando este hombre ahora mismo para estar tan sosegado?

Probablemente muchos penséis que lo primero que hizo cuando puso la suela de sus zapatos en el suelo del garaje fué comenzar a chillar como un auténtico loco,enfadado por todo lo sucedido.

Bueno... Entonces creo que no os esperaréis lo que realmente pasó...

Sin pronunciar palabra, caminó por el interior del garaje,buscando algo,o más bien,a alguien.

-Lan...- se posicionó delante de mí rápidamente,a lo que yo me limité a mirarlo apenada.

Sin dejarme decir nada más, tomó mi mano con brusquedad y sin ningún tipo de cuidado,algo que, obviamente,me sorprendió bastante.

-Lando, qué...- sus palabras golpearon las mías en el mismo instante en el que tiró de mi cuerpo hasta que me metió en su motor home y cerró la puerta con pestillo detrás de él.

-Cállate,no estoy de humor para que me digas que lo sientes mucho. No quiero que te compadezcas de mí. Ponte de rodillas- dijo con un semblante completamente serio y sombrío.

Mis ojos se abrieron de manera abrupta sin poder creer lo que mis oídos acababan de escuchar.

-Lando,creo que deberías relajarte- dije tratando de acercarme a él y calmarlo.

-Creo que no me has escuchado bien. ¿Te he dicho que me ayudases a calmarme? No creo haberte dicho eso,de hecho,estoy muy seguro de haber pronunciado correctamente todas y cada una de las palabras en la oración ponte-de-rodillas- repitió una vez más,dando otro paso hacia mí y mirándome con los ojos llenos de furia.

Claro que entendía cuáles eran sus intenciones al haberme dicho eso,claro que lo había escuchado bien,pero no estaba dispuesta a darle el lujo de hacer lo que él me ordenaba y mucho menos si su actitud iba a ser esa.

-¡Escúchame bien,no sé qué diablos te pasa,entiendo que estés jodido por haber quedado fuera de la carrera pero no es mi puta culpa que esa colisión haya pasado y te haya afectado así que a mí no me digas lo que tengo que hacer cuando no he tenido nada que ver con esto! ¡Yo no te he hecho nada!- alcé la voz algo furiosa.

-Sabes lo mucho que me importa que me desees buena suerte antes de todas y cada una de mis carreras así que,sí,es tu culpa que esto haya pasado. Ahora,como recompensa,vas a hacer lo que yo te diga, porque creo que lo menos que me merezco después de haber tenido que ver a mi novia pasándoselo bien con su familia lejos de mí todo el fin de semana es que me complazcas y me satisfagas como es debido- me respondió enredando sus dedos en las hebras de mi pelo, ejerciendo una leve presión sobre ellas- de rodillas, ahora.

Su mirada me indicaba que no estaba para bromas ni rodeos; sus preciosos ojos azules estaban completamente oscurecidos,no mostraban ni un solo ápice de clemencia,lo único que se podía distinguir en ellos era una extraña mezcla entre rabia y deseo.

-He dicho que no- dije con firmeza, manteniendo mi mirada puesta en la suya.

¿Sabéis esta mítica frasecita de "No sabes dónde te estás metiendo"?
Bueno,pues en ese momento comencé a entender el significado.

-No te he dado permiso para hablar y mucho menos para desobedecerme- apretó su mandíbula y tiró de mi cabello hasta dejarme de rodillas frente a él en el suelo,plasmando de manera perfecta la idea que él tenía en mente desde que habíamos entrado en su motor home.

Un pequeño quejido de dolor se escapó de entre mis labios al notar la presión de su mano en las raíces de mi pelo,de las cuales tiraba sin compasión ninguna.

-Ahora quiero que bajes mi traje- añadió clavando su mirada en mí,sin perder conciencia de todos y cada uno de mis movimientos y/o expresiones.

-Lando...- en un último y vago intento de hacerlo cambiar de opinión,su nombre salió de mi boca de manera desesperada, intentando apaciguar a la bestia que yo misma había creado al no ceder ante sus deseos desde el principio.

-¿¡Te he dado permiso para hablar!? ¡No! ¡Así que baja la cremallera de mi puto traje de una vez!- gritó furioso,ejerciendo más presión en su agarre sobre mi pelo.

Como tantas veces lo había hecho, comencé a bajar la cremallera de su traje de piloto de manera habilidosa.

-Buena chica- después de todo,una pequeña sonrisa se instaló entre sus labios, claramente disfrutando del poder que tenía sobre mi y la capacidad para dominarme que poseía.

Únicamente separó sus manos de mi pelo para bajarse su traje de piloto y dejarlo caer al suelo.

Dió un pequeño paso hacia atrás sin perder su mirada de mí y se quitó también su camiseta hermética,dejando la exquisita imagen de su perfectamente trabajado cuerpo ante mis ojos.

-Ahora,dime, ¿vas a ser una buena chica para mí y vas a complacerme y a satisfacerme? ¿Harás exactamente lo que yo te pida sin rechistar?- mirándome desde arriba,puso su mano en mi mentón.

Asentí sin pronunciar palabra, completamente perdida en deseo ante la idea de ayudar a Lando a ahogar su ira y sus frustraciones.

-Bien,me alegra saberlo...- atrapó su labio inferior entre sus dientes y me miró, prácticamente,comiéndome con su mirada- abre la boca.

Si hasta ahora aún no sabía cuál era la intención final de todo este show, definitivamente ya la sabía después de escuchar su petición.

Mi corazón comenzó a latir con fuerza ante sus palabras y,dispuesta a complacer a mi novio,hice lo que me pidió.

-Ah,no sabes lo bonita que te ves así Nicole...- murmuró acercándose más a mí,dejando su pelvis a la altura perfecta- pero te ves como una jodida diosa con mi polla entre tus finos labios,así que permíteme...- colocó una de sus manos en mi mandíbula mientras que,con la otra que le quedaba libre,se deshizo de su ropa interior a una velocidad realmente digna de un piloto de Fórmula 1.

Cuando me quise dar cuenta,sus caderas empujaron hacia mi boca,introduciendo su miembro y soltando un placentero gemido por su boca.

Preparada para tomarlo, ahuequé mis mejillas alrededor de su longitud y comencé a crear un balanceo con mi lengua en su punta.

-Eso es...- susurró echando su cabeza hacia atrás,cerrando sus ojos y dejando su boca entreabierta para liberar ligeros sonidos de placer que salían de ella.

Una de sus manos volvió nuevamente a mi pelo y comenzó a guiar mis movimientos de la manera que él quería mientras yo me dedicaba a disfrutar de la increíble imagen que tenía ante mis ojos.

Apenas se mantuvo un par de segundos con sus ojos cerrados,pronto los abrió de nuevo y habló mirándome fijamente,sin perder esa sonrisa orgullosa de su rostro.

-Siempre sabes cómo hacer esto tan bien... Estaría dispuesto a quedar fuera de la carrera más veces si eso significaría tenerte así...- murmuró antes de relamer sus labios.

Resultándome completamente cautivada y excitada tras escucharlo decir eso,un gemido subió por mi garganta, impactando directamente contra su miembro.

-Oh,¿te gusta cuando te hablo así?... ¿Te gusta que tú y tu increíble boquita me volvéis tan jodidamente loco que estaría dispuesto a sacrificar mis resultados en carrera solo para sentir tus labios alrededor de mi polla decenas de veces más?- de manera brusca y tomándome completamente desprevenida, empujó sus caderas más a fondo, obligándome a hacer esfuerzos para aguantar su miembro en mi boca,el cuál se sentía cada vez más profundo.

Una pequeña risita burlona se escapó de entre sus labios al ver como,a pesar de que estaba haciendo grandes esfuerzos para darle placer,yo misma lo estaba disfrutando.

-¿Sabes qué? Creo que aprovecharé que hoy te hayas puesto falda- sonrió de manera arrogante y sacó su miembro de mi boca- al sofá y quítate solo tus bragas.

Sabía perfectamente que sus palabras no eran una petición,sino una orden y,sintiéndome más deseosa que nunca,lo hice sin tan siquiera protestar.

Me quité mis bragas, dejándolas en el suelo y lo miré aún sin pronunciar palabra.

-Ponte en 4 mirando hacia la pared- de nuevo, sus palabras me tomaron por sorpresa- oh,vamos,no me mires así y hazlo,te daré lo que quieres pero para eso tienes que seguir siendo una buena chica...

Mordí mi labio inferior y caminé hacia el sofá. Coloqué mis manos en el cabezal que tenía y me incliné ligeramente hacia delante, colocándome en esa fantástica postura que él mismo había pedido.

Apenas pasaron unos dos segundos cuando sentí como se colocaba detrás de mí y,aún de pié,elevaba mi falda hasta dejarla en mi cintura.

-No grites- susurró contra mi oído antes de hundirse en mi interior.

Un gutural gemido se escapó de entre mis labios al sentir su longitud entrar completamente y sin ningún tipo de dificultad.

Casi sin darme tiempo a adaptarme a su tamaño,me agarró de las caderas y comenzó a moverse de manera brusca,como si aún estuviese descargando toda esa rabia que estaba acumulada dentro de él.

Mis manos se aferraron al cabezal del sofá y mis dientes mordieron mis labios con fuerza,intentando hacer el menor ruido posible.

-Dios... Me vuelves loco Nicole...- gimió moviéndose cada vez más rápido.

En esa pequeña habitación,lo único que se escuchaban eran nuestros gemidos y el sonido que hacían sus caderas al impactar contra mi trasero cuando entraba y salía de mí de manera repetida.

Me sentí a punto de desfallecer en el momento en el que mis piernas comenzaron a temblar y un nudo se formó en la parte baja de mi abdomen.

-Lando...- murmuré tratando de advertirlo.

-Lo sé,Nicole,lo sé- se limitó a decir y siguió moviéndose con fiereza.

Como un animal que estaba atacando a su presa,sus movimientos se iban convirtiendo, paulatinamente,en otros más erráticos y acelerados,siendo éste un indicador de que él también estaba al límite.

Sus dedos se clavaron en mi cintura cuando se vino en mi interior justo a la par al momento en el que yo sentí como mis fluidos se derramaban por su longitud.

-Dios... Si esto vá a pasar siempre que venga a verte solo los domingos,me aseguraré de solo venir ese dia- dije tratando de recuperar el aire.

-Podemos hacerlo siempre que quieras,solo...no me hagas esperar tanto tiempo de manera innecesaria para verte Nic- salió de mi interior y besó mi cabeza.

Una pequeña risita salió de mi boca y me dejé caer desfallecida en el sofá.

-¿Te hace una segunda ronda? Aún queda más de una hora de carrera- tiernamente, apartó el pelo de mi cara y me miró con una sonrisa ladina.

-La duda ofende- carcajeé junto a él.

Un poco atrasado peeeero como dijo Nicole,¡Lo bueno tarda en llegar!

Me presto voluntaria para ayudarlo con su enojo🤭.

¡Nos vemos en la siguiente historia!

Atte y con muchos besos por navidad🎄: Alma<3