Narra Chloe:
-Respira hondo Chloe, tienes que estar relajada- me recriminó Alex.
-¿Relajada? Yo creo que no he estado más nerviosa en mi puta vida.
-Solo tienes que buscar a Alonso después de la qualy y decirle lo que pasa.
-Bueno... Así dicho no parece para tanto.
-¿Ves? Es fácil, además, solo tienes que recordar algo muy sencillo.
-¿El qué?
-No te lo tires.
Me puse roja como un tomate de repente.
-¡Eso es lo jodido Alex! Además, si no confiáis en mí...
-¿Quién no confiamos?
-Coño, pues Nico y tú.
La risotada de Alex fue monumental.
-Eso te lo decimos porque te conocemos, guapa.
-Supongo que sí- suspiré.
-Pues ánimo y al toro chica.
Choqué la mano con mi amiga y me puse el casco.
James me ayudó a subir al coche mientras me daba las últimas indicaciones, las luces se encendían y el Red Bull con el número 13 salía a pista.
Estaba tan nerviosa que creo que me pase de velocidad, porque tras dar una vuelta de carga y otra que me salió bastante bien, tuve que decir por radio el mítico "No power, no power".
Un poco como pude llegué a mi box, y allí, mis mecánicos maravillosos toquetearon un poco el coche, y pude salir en Q2, la cual superamos sin problema como era de esperar.
Bebí un poco y me refrescaron con aire antes de salir a la Q3.
Quedábamos los mejores, me jugaba mucho en aquella qualy, mi orgullo, sobretodo.
Tuve que apañármelas para esquivar un Ferrari con el número 5 que se acercaba demasiado.
Vettel... Ya podría acercarse así cuando se bajara del coche...
Hice una vuelta muy ajustada con Lewis, pero al final, oí por radio la voz de James.
-¿Cuál es tu posición favorita Chloe?
-¿De qué mierda me hablas?
-¡La mía es la POLE POSITION! ¡Enhorabuena campeona!
Estaba tan nerviosa que cuando me bajé del coche olvidé por completo mis quehaceres como piloto, y me fui a buscar a Alonso.
Lo encontré en mi habitación del hospitality...
-¡Enhorabuena nena!- dijo él, acercándose peligrosamente para besarme.
Puse mi mano en su pecho, como estableciendo mi propia distancia de seguridad -Tenemos que hablar, Nano-
-¿Se me acaba la prueba gratis?
-¿Qué?
-Que si me tengo que suscribir para seguir viéndote, como en Netflix- rió.
-Eso, eso, si vuelves a ser el imbécil que eras hace un par de meses me lo pondrás más fácil.
-¿Qué pasa Chloe?
-Que esto no puede ser, Fer.
-¿Por qué?
-Porque yo quiero a Vettel, ¿no lo entiendes?
El brillo de los ojos del chico se apagó.
-Escucha, Fer, no quiero hacerte daño, fui para ti un capricho desde el principio, no quiero que te encariñes ahora.
Él se sentó en el sofá, hundiendo la cara en las manos.
-Mierda Chloe, mierda...
-¿Qué te pasa?
-Que sabía que este momento llegaría.
-¿De verdad?
-Sí, joder... Vettel gana.
-No Fer- dije agachándome a su lado -Aquí no gana ni pierde nadie-
El chico clavó sus ojos marrón chocolate en los míos -No lo sé, Chloe, no sé nada, pones en duda todo lo que me han enseñado desde que era un crío-
Suspiré -¿Por ejemplo?-
-Siempre me han dicho que los otros pilotos son rivales, nunca amigos- respiró -Y tú has sido algo más que una amiga-
Intenté hablar, pero él no me dejó.
-Se me ha enseñado siempre que o se gana, o se pierde, y me vienes tú con que no, que aprender, aprenden todos, y que el que aprende, ya gana algo- refunfuñó.
-Bueno, es cierto... - dije.
-Y me vienes con que hay cosas en las que no se puede competir... ¿Sabes qué me decía mi entrenador cuando yo era un crío?-hizo una pausa- La vida es como una carrera Fernando, no dejes de competir jamás - dijo imitando una voz grave -¿Como una carrera? ¿Que no deje de competir? Y luego me vienes tú- me señaló con el dedo- Preciosa, con una sonrisa increíble... -respiró hondo mientras se revolvía el pelo- me vuelves loco Chloe, joder, ¡mírate! Y me abres los ojos- dijo levantándose de golpe -¿Eres un capricho? Pues a lo mejor sí, nena, a lo mejor sí... Pero tú a mí tampoco me quieres para nada más, lo sé-
No sabía qué decir.
-Mira, Chloe, lo siento, ¿vale? Lo siento.
-¿Qué?¿Por qué?
-Por comportarme como un puto troglodita.
-Fer...
-No, ni Fer ni nada. ¿Qué coño me creo? Siento haberte visto como un trofeo, siento que hayas tenido que aguantar eso- dijo apoyando las manos en el escritorio.
-Vete Chloe, vete con Vettel, él te merece más, seguro que va a quererte más que yo.
Me acerqué al chico por detrás y lo abracé con fuerza -Gracias Fer, muchísimas gracias-
-Gracias a ti, por hacer que me diera cuenta de lo imbécil que he sido.
-Espero que encuentres a alguien, Nano.
-Espero que te vaya bien con Vettel- susurró.
Ambos nos miramos a los ojos, y apartándome de él con cuidado, me dirigí a la puerta.
-Nena- llamó él antes de que yo pudiera salir.
-¿Sí?
-Hablaré con Binotto, Vettel puede estar tranquilo- dijo tragando saliva.
-Mil gracias, Nano- le sonreí mientras se me medio saltaban las lágrimas.
-Anda, vete a buscar al alemán, que a este paso me echo a llorar como un niño- sonrió él.
Tras darle un beso rápido en la mejilla, salí corriendo hacia el pitlane, donde tuve que responder ante mis superiores, e inventarme una excusa para explicar por qué no había ido a la rueda de prensa.
En cuanto pude librarme de ellos, corrí hacia el box de Ferrari, donde ya se habían ido todos, aunque Seb seguía allí, metido en el coche, muy serio y con los ojos cerrados, presionándose las sienes con los dedos.
No me había dado tiempo ni a saludar cuando la voz del chico retumbó en el silencio del garaje.
-¿Qué quieres Chloe?