Jeon llevaba unos días en los que no había visto a JiMin, porque él se encontraba en la promoción de un nuevo álbum que les había llegado y porque Baek le dijo que JiMin se encontraba un poco ocupado.

Suspiro pesadamente mientras tomaba asiento en una de las sillas detrás de la vitrina. Estaba un poco cansado, no había desayunado ese día porque no escuchó su alarma.

La campanilla de la puerta se escuchó mientras le contestaba un mensaje a Chan — Ya lo atiendo — aviso ya que sus amigos habían  hecho el inventario ese día, por lo que lo dejaron solo en la tienda.

Se puso de pie y guardó su celular. Al levantar su mirada se encontró  con Baek y a su lado unos ojos azulados que no paraban de mirarlo ocultos bajo una media luna.

— Hola — Saludo JiMin mientras Baek los miraba a los dos con una pequeña sonrisa.

Era demasiado obvio por parte de su amigo, sus sentimientos se reflejaban en su mirada y en su sonrisa mientras observaba a JiMin.

— Hola, ¿Qué haces aquí? — un carraspeo por parte del peli café — ¿Qué hacen aquí? — se corrigió mientras ocultaba sus manos en sus bolsillos.

— ChanYeol nos contó qué saliste tarde de tu casa, por lo que no tomaste desayuno.

Asintió e hizo un puchero que le enterneció al azabache — Sí, se me paso poner alarma — rasco su nuca con algo de vergüenza.

— Te trajimos unos panqueques y fruta picada, también un poco de jugo — JiMin levanto el bolso de donde saco dos platos y una botella.

— No, le trajiste, yo solo te ayudé  con la mezcla — Baek miro a JiMin quien al dejar todo en la vitrina bajo su mirada avergonzado.

— Gracias, hace especial que me trajeras un poco de desayuno.

JungKook abrió uno de los contenedores viendo a aquellos círculos de mezcla perfectos — ¿Enserio lo hizo él solo? — Le pregunto a Baek, quien asintió — ¡WOW! 

— ¿Qué sucede? — JiMin miró extrañado a Baek y luego a Jeon, queriendo que le den una respuesta.

— Jeon está asombrado, porque ni a él le salen tan perfectos los panqué — Le respondió con una sonrisa.

— Pero...

— JiMin, ¿no quieres casarte conmigo? — Le pregunto mientras masticaba una porción de su desayuno.

— ¿Qué?

— ¡JungKook! 

Tanto JiMin como Baek miraron al castaño, quien solo sonrió. Uno de los dos miraba al de ojos café con una mirada de reproche.

— Estoy jugando — les respondió — o no — susurro en un balbuceo que solo fue entendido por uno de los dos.

— Bien, JiMin y yo nos iremos, tenemos que ir de compras, aprovechando que ChanYeol está cuidando a la niña. Vamos JiMin.

— Sí — JiMin miro como Baek caminaba a la salida, pero él se quedó un poco más — Me alegra que te gustara, nunca había hecho un desayuno, esta es mi primera vez.

— Creme JiMin, aunque no tuviera un gran sabor, yo me lo comería igual — le respondió. Y fue algo que hizo sonreír a JiMin — Pero ese no es el caso, esto sabe muy bien — le dijo con migajas en la comisura de sus labios.

JiMin llevó su pulgar a estos y retiro aquellas migajas, dejando a un shockeado JungKook quien solo miro la acción del azabache.

— Nos vemos luego — JiMin se despidió.

Vaya que Jeon necesitaría un electrochoque para salir de su trance.

JiMin salió del local poniéndose junto a BaekHyun, caminaron hacia un nuevo barrio algo alejado. En realidad irían a investigar a los jóvenes de ese lugar.

— ¿Crees que esta vez encontraremos algo? — BaekHyun le llamó la atención, luego de llegar al lugar.

— No lo sé, mis esperanzas se han ido, creo que al final no la encontraré y me tomará más tiempo en realidad.

Las casas eran algo pequeñas, de dos pisos pero pequeñas, se veían acogedoras. Por el momento los pocos chicos que habían visto eran muy jóvenes, y nadie se parecía a ese chico.

JiMin se detuvo un momento ante un fuerte dolor proveniente de su espalda, el tratar de ocultar sus alas le estaba empezando a facturar. Cada día más su espalda le propinaba un dolor como un pellizco en la zona de donde deberían de estar sus alargadas alas.

— ¿Sucede algo? — negó a las palabras del pelicafe, lo último que quería era que Baek y Chan se preocuparan por su estado.

— Creo que saldré esta noche, necesito estirar mis alas.

Siguieron su camino, yéndose del frente de aquella casa blanca  con rosas en la entrada.

Luego de dar dos vueltas por el lugar decidieron irse, pues se rindieron.

Al llegar cerca de la tienda de música, JiMin se quiso quedar un momento, tal vez podría conocer más a los amigos de Jeon. Quería distraer su mente de la rosa y de sus poderes.

— JiMin — JungKook se acercó a él — ¿Y Baek?

— Se fue a casa, le dije que luego iría — Comentó ante la mirada del castaño — ¿Ha estado así todo el día?

— Sí, este lugar no se llena con frecuencia — Le respondió, de la puerta del fondo salieron tres chicos más riéndose.

— Oh — Uno de ellos se detuvo y ocasionó que los demás también — ¿Tú has de ser JiMin? — le mostró una sonrisa en forma de corazón que hizo sonreír al ojiazul.

— Sí, ese soy yo — se inclinó un poco para saludarlos.

— Kook nos ha hablado mucho de ti — menciono ahora el más moreno de los tres.

— ¿Enserio? — JiMin miro a JungKook, el mencionado agacho un poco la cabeza.

— Sí, no para de hablarnos de ti, por supuesto solo cosas buenas — y ahora respondió el último, el más bajo de estatura — Una disculpa JiMin, al parecer nuestro dongsaeng no te ha mencionado de nosotros.

— Claro que lo ha hecho, me parece que los mencionó en una salida que tuvimos — Y aunque pensaron que era mentira lo siguiente les confirmo que no era así — Me comentó que fueron los que estuvieron para él en un momento muy fuerte. 

— Así es — YoonGi miro a JungKook, quien le sonrió a su mayor, mientras que él estaba un poco asombrado, puesto que Jeon era alguien que se reservaba la muerte de su madre.

— Sí, creo que si él sigue aquí luego de lo que pasó con su madre es gracias a ustedes. Han sido un ancla muy fuerte para él.

— Y así es, ellos han sido mi ancla  — HoSeok miro a JungKook con cariño por esas palabras — Bien, te los presentaré — Ellos son  HoSeok, NamJoon y YoonGi, más que mis amigos son mis hermanos.

— Mucho gusto, ustedes ya me  conocen así que no creo necesario presentarme.

Los cinco se acomodaron detrás de la vitrina. Platicando sobre cualquier suceso de sus vidas.

— Saben, JiMin toca el arpa — JungKook interrumpió un poco la conversación al recordar la conversación que tuvieron — Se imaginan escucharlo.

— Vaya que sí — YoonGi apoyó la idea de Jeon, pero se vio interrumpido por JiMin.

— No soy tan bueno, mi madre lo es — se encogió en su asiento por la mirada de todos sobre él.

— Eso no lo sabremos hasta escucharte — NamJoon le dijo apoyando su mano en el hombro del contrario.

— Deberíamos llevarlo a la academia con nosotros, ahí puede tocar y no pagará nada.

— ¿Una academia? — Pregunto.

— Sí, la academia es el lugar en el que HoSeok y yo entrenamos para las competencias de bailes. Nam y Yoon más que todo van para practicar sus raps.

— Así que son talentos.

— Sí, puedes decirnos así.

— JiMin, ¿quisieras acompañarnos? — YoonGi le preguntó. La verdad que le llamaba cierta atención, pero no sabia que hacer.

— No sé, creo que lo pensaré les daré una respuesta con Jeon.

Antes de que termine el mes les dejo esto por aquí.

Espero les guste, si es así dejen una estrellita y si ven algún error pueden decírmelo, por favor.

I Purple U  💜

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