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02| Lo que provocas en mí

-Puedes quitarte la ropa cuando te sientas listo para hacerlo.

Taehyung tomó la iniciativa de hablarle al Omega luego de que este no diera señales de querer hacerlo por su cuenta. Desde que le comunicó lo que haría, el chico calló y se mantuvo en una especie de trance sombrío, mirando al vacío y respirando superficialmente, incluso sus ojos redondos como los de un búho y los labios entreabiertos, le demostraron lo lejos que el chico se encontraba de allí.

-¿Jungkook?

El rubio parpadeó varias veces pareciendo volver a la realidad y en un segundo estuvo de pie, parado en el centro de la habitación, en una pose inmóvil y frígida, digna de una estatua. La misma expresión invariable permaneciendo en su rostro.

¿Pero qué le sucedía?

-¿Todo bien? -Taehyung inquirió, comenzando a extrañarse con la actitud de aquel Omega.

Como ginecólogo que era, había atendido a Omegas de todo tipo, pero ninguno era como ese rubio frente a él.

Enseguida en el medio de las cejas de Jungkook surgió un diminuto pliegue propio de la confusión que manifestaba; le dirigió una mirada muy contrariada al Alfa, como diciendo: ¿Me hablas a mí?

-¿Por qué no habría de estarlo? -preguntó con tono irónico, pero la diversión no llegó a brillar en sus ojos negros opacados por algún sentimiento ajeno al Alfa-. ¿Me quito toda la ropa o cómo hago, doctor Kim? Porque hasta donde mis escasos conocimientos llegan, las revisiones mamarias solo requieren de la parte superior de mi cuerpo, es decir, pecho. -Se inclinó al rostro de Taehyung y susurró las próximas palabras sin dejarse amedrentar por la condición dominante que este representaba-. ¿Por qué tendría que desnudarme completamente?

El Alfa retrocedió a medida que el Omega acortaba la distancia entre sus cuerpos, la parte trasera de sus piernas chocó con la madera del escritorio cuando no hubo otro lugar a donde ir. Jungkook ya estaba acaparando todo el espacio, acorralándolo con la más engreída de las composturas y Taehyung se sintió extraño, inclusive intimidado. Su nuez de Adán danzó con el vaivén de la saliva; por la Diosa Luna, ¿por qué razón temblaba de esa forma? ¿Por qué su lobo estaba más que regocijado con aquella atención? ¿Por qué esa necesidad de mostrarle el cuello en señal de sumisión, de dejarse llevar por sus verdaderos deseos y anhelos, de dejar de suprimirse?

-¿Qué trama, eh? -le cuestionó Jungkook con voz baja, mas no desprovista de autoridad.

Entonces algunas preguntas surcaron fugazmente la mente del Alfa: ¿sería ese Omega el que tanto había pedido? ¿Quien ejercería esa dominación tan culposa? ¿El que cumpliría su fantasía más sucia de ser jodi...?

¡No! Alejó esos pensamientos de inmediato, era imposible y absurdo. Él ni siquiera conocía al chico y ya se estaba inventando cuentos en su cabeza ilusoria.

-N-nada... -Taehyung se interrumpió momentáneamente ante su tartamudeo y carraspeó, mirándolo fijamente, aparentando decisión y valentía. No debía bajo ningún concepto mostrarse tímido-. No tramo nada, Jungkook. Lo que haré es una revisión normal y rápida, se le realizan a todos los Omegas, por lo tanto no debes alarmarte.

Jungkook sonrió y agachó sus labios, pocos fueron los centímetros para tocar la boca del Alfa.

-¿Lo de no alarmarse me lo dice a mí o trata de recalcárselo a sí mismo? -murmuró suavemente.

Taehyung se paralizó. ¿Era posible que él adivinara cómo se sentía realmente?

-Mírese, está temblando -continuó diciendo el Omega.

Y no mentía, las extremidades del doctor Kim se agitaban producto a los pequeños espasmos que involuntariamente hacía, incluso su regordete labio inferior fue prensado entre los perlados dientes cuando también comenzó a castañear.

-Es por el aire acondicionado -contestó él, pero a oídos de ambos sonó como una excusa poco creíble.

-Mhm, ¿en serio? -comentó entretenido y el Alfa asintió con gesto inocente de desespero-. Qué raro, porque frío no es precisamente lo que yo siento.

-El organismo de los Omegas varones segrega más calor que el de cualquiera, tal vez por eso tú...

Jungkook intercedió con brusquedad.

-¿Es que busca verme desnudo?

Taehyung quedó en blanco.

-¿Qué? ¿A qué viene esa pregunta?

Jungkook murmuró una afirmación.

-¿Para qué me pidió que me desnudase entonces? -Su tono de repente se tornó oscuro, un filo denso en el fondo, la amenaza era clara-. ¿Quiere aprovecharse de mí, doctor Kim? ¿Es eso?

El espacio entre ambos era tan reducido que fue fácil respirar del mismo aire. El olor limpio y masculino del Omega se fundió con las leves feromonas que el Alfa reprimía y el peso de esa pregunta flotó sobre ellos. Taehyung se empezó a marear con la intensidad del acercamiento y Jungkook estuvo muy satisfecho al verlo de esa manera.

-¡No, no! -El doctor se apresuró en responder exaltado, a lo que Jungkook lo acusó con una ceja en alto-. So-solamente retira la camiseta... Eso sería todo.

Jungkook lamió su labio inferior mientras meditaba y Taehyung tragó nuevamente, sin poder apartar la vista de aquellos belfos húmedos, apetitosos e incitadores a cosas pecaminosas. Fueron largos los segundos y el Alfa se avergonzó ante la media sonrisa que el Omega dibujó después, haciéndole saber que el chico conocía sus pensamientos lujuriosos demasiado bien.

-De acuerdo, doctor Kim.

Jungkook apenas se apartó del cuerpo de Taehyung, ya que concibió que este debía disfrutar al máximo de la escena que le brindaría a continuación. Y fue allí, justo frente a los ojos expectantes del Alfa, donde se levantó la camiseta con la galantería que solo un modelo poseería, revelando al instante una hilera de músculos bien definidos y duros, además de dejarle ver ese rastro de piel lechosa y suave que invitaba a ser acariciada y profanada. Por si fuera poco, los rayos del Sol provenientes desde los ventanales a su costado incidieron sobre él en un contraste perfecto, pintando patrones desiguales y cálidos a lo largo de su pecho y hombros atléticos. Aquella imagen merecía ser inmortalizada con una fotografía, por lo menos así lo concibió Taehyung.

Oh, ¿y qué sucedió con Taehyung?

Tal vez que su cerebro hubiese hecho cortocircuito era una nimiedad respecto a la seriedad de su condición actual; el Alfa sentía que se desmayaría en cualquier instante. Ver toda esa perfección de músculos y pensar solamente que pronto los estaría tocando...

<<¡Cielos no! ¿Ahora me convertí en un pervertido? ¿Pero cómo es posible que a mi lobo y a mí nos atraiga tanto este Omega?>> Lo cierto era que ningún Omega le había hecho sentir esa atracción inmediata y arrolladora antes, menos un paciente. Taehyung tenía límites y no involucrarse con las personas que atendía era uno muy fundamental e irrevocable. Ahora él debía mantener esa íntegra compostura que lo caracterizaba, comportarse, aparentar; era un profesional después de todo, no un perro en celo.

-Jungkook...

-¿Sí? -susurró el Omega y luego sus brazos -que se mantuvieron a cada lado de su cuerpo- cambiaron de posición. En un movimiento imprevisto encarceló al Alfa entre ellos y se acercó. Taehyung, aunque trató de evitarlo, acabó jadeando cuando el rubio se reclinó tanto sobre que él que por poco sus pechos hicieron contacto.

La calentura subiendo por la piel del Alfa podía confundirse fácilmente con fiebre, ¿pero cómo no?, si aquel Omega era el más sexy que hubiese visto, también el más provocador.

-Deberíamos empezar. -Rehuyó su mirada mientras se controlaba para no tartamudear nuevamente.

Hubo un breve período de silencio entre ellos y, cuando estimó que no le respondería...

-Como quiera -le soltó y Taehyung creyó oír algo parecido a la irritación subrayar su tono. <<Quizás él esperaba escuchar otra cosa>> Aunque descartó la idea inmediatamente, ya suponía demasiado.

Jungkook no tardó en alejarse, entonces el lobo de Taehyung emitió un quejido parecido al de un cachorro desconsolado. De inmediato se sobresaltó, inseguro de por qué la acción lo había sacudido de esa manera. <<¿Qué me sucede? No puedo estar así por un simple Omega que acabo de conocer. Por la Diosa Luna, ¡es mi paciente!>>

-¿Empezará o no? -increpó Jungkook aparentemente impaciente desde su apartada posición. El Alfa lo evaluó y pudo notar la irritación tensándole los músculos; asintió-. De acuerdo, porque no tengo todo el día, doctor Kim.

-Primero deseo disculparme por la confusión que causé, no supe expresarme correctamente y eso creó molestias y malentendidos entre ambos. Perdóname, Jungkook. -Taehyung se inclinó en modo de respeto. Enderezándose, continuó su mantra-: Aunque si lo prefieres y te resulta más cómodo, puedo pedirle a Jihyo que esté presente mientras hago la revisión.

El Omega no disimuló la mueca de desagrado que le generó la simple mención de ese nombre.

-No es necesario, solo acabe con esto.

El Alfa le ofreció una sonrisa y le indicó amablemente al Omega que tomara asiento en la silla apartada en una esquina. Cuando este así cumplió, Taehyung se paró frente a él y enfocó la luz de la lámpara para auxiliarse. El tórax y los hombros de Jungkook se encontraban en notable tensión.

-Necesito que te relajes.

-Estoy relajado -contrarió rápido para luego bufar y hacer un mohín.

Taehyung rio muy bajito. <<Testarudo y obstinado>>.

No obstante, Jungkook cooperó y el doctor Kim procedió con la inspección estática que consistía en evaluar las areolas y los pezones, los cambios de coloración de la piel o si había indicio de red venosa alrededor; aunque todo en el Omega se hallaba en perfecto y sano orden. Entonces proseguiría con la tan temida palpación.

El Alfa inhaló vacilante, millones de veces la había realizado, pero en esta particularmente se sentía nervioso. Extendió sus manos con detenimiento, sus dedos incluso temblaban, la piel nívea dándole vía libre a sus impuros pensamientos y...

-¿Por qué lo hará? -La pregunta de Jungkook lo retuvo de ser tocado.

-¿Mhm?

-Tocar mis pezones, ¿por qué?

-No sé si estás al tanto de las complicaciones que conlleva administrarle tantos supresores a tu organismo -Jungkook negó y Taehyung prosiguió a explicarle-: Los supresores son fármacos que se gestionan para reducir la intensidad de las hormonas durante el período de celo; en otras palabras, es como ese muro de concreto que no le permite al organismo expandir sus funciones correctamente. Usarlos con frecuencia aumenta el riesgo de adquirir alguna anomalía, ya sea cáncer o nódulos, y donde primero empieza a dar señales es en los senos, por eso recurro a la palpación.

Jungkook profundizó lo expresado, comenzando a transitar por el puente quebradizo del caos mental. Taehyung hizo la pregunta, aunque ya intuía la respuesta.

-¿El doctor Seokjin no te lo explicó cuando te recetó los supresores la primera vez?

Jungkook negó muy despacio, apretando los labios en una dura línea.

-¿Por lo menos realizó las pruebas para saber si eras apto o no?

El Omega mostró su negación de nuevo, el Alfa se pasó una mano por la cara.

-Ya entiendo por qué los atrasos en tus ciclos de celo -suspiró-. No todos los Omegas están capacitados para ingerir supresores, algunos pueden sufrir fuertes cambios hormonales que desencadenan la pérdida o subida espontánea de peso, alteración de los hábitos alimenticios, sangrados, crecimiento anormal del vello, entre otros agravios. Sin duda es una negligencia, Seokjin tuvo que explicártelo antes de recetarlos.

-Pero no lo hizo -declaró con dureza el Omega, su cuerpo regresó a la peligrosa tensión de antes. A Taehyung le pareció más grande e intimidante-. Doctor Kim, seamos sinceros, ¿a quién demonios le importa que la vida de un Omega peligre? -Rio agriamente, sin pizca de humor-. Solo somos incubadoras vivientes, personas vacías e inútiles que no tienen ni voz ni voto en esta estúpida jerarquía. Si todavía no nos hemos extinguido es porque los Betas y Alfas así no lo han dictado, pero créame que el día que les estorbemos, no dudarán en masacrarnos y hacernos desaparecer. -Luego lo observó con suma frialdad-. Porque nadie lloraría la pérdida de un Omega.

Taehyung guardó silencio, el odio y el asco que se reflejaron en las palabras de Jungkook fue tan denso y crudo que pudo sentirlo suyo.

-A mí no me interesaría desaparecer.

Al Alfa le costó unos segundos comprender si lo que oyó fue real o producto de su imaginación. ¿Existía la mínima posibilidad de que el Omega tuviera esa clase de pensamientos negativos? Por como los trataban, no lo dudaba; por ello recordó como en las noticias comunicaron que la tasa de suicidios solo aumentaba considerablemente. La fea sensación que manifestó antes trepó su pecho, sus manos se helaron. ¿Él estaría pensado en...?

-J-Jungkook, tú...

El chico no le permitió seguir, -estaba cansado de condolencias y lástima, de que dijeran que sentían su dolor cuando era una verdadera farsa- en cambio agarró las manos del Alfa entre las suyas y las colocó sobre su pecho. El contacto fue cálido, más allá de que Taehyung temblara de frío, más allá de que Jungkook se congelara en el azul oceánico de su mirada por primera vez.

-Continúe -le dijo y Taehyung acató sin resistirse a la mirada perdida en sus ojos negros.

Eran como dos pozos insondables de dolor y furia, lo incitaban a hundirse en esos abismos, a calmar esos lamentos, descubrir los enigmas ocultos tras sus pupilas galácticas.

No, Taehyung no lo conocía, pero quería hacerlo.

Tanto.

El Alfa se impresionó con lo suave y sedosa que era al tacto la piel del Omega, pero no dejó que eso lo entorpeciera en su tarea. Sus dedos planos bordearon el lado del pecho izquierdo. Jungkook se tensó como una cuerda al advertir la intromisión y Taehyung se detuvo de inmediato, aunque pudo seguir cuando Jungkook tomó un respiro y miró hacia otro lado. El Alfa giró los dígitos en patrón de espiral y le propinó un suave pellizco al rosáceo pezón antes de alejarse y repetir la acción en el pecho contrario.

Todo el proceso transcurrió bajo el pesado e incómodo manto del silencio y Jungkook parecía compartir su criterio, porque no dudó en vestirse nada más que Taehyung le comunicó que todo iba bien con su cuerpo, aunque debía dejar de tomar supresores por un tiempo.

El Alfa se apresuró en alcanzar al Omega cuando este salió casi corriendo de su oficina.

-¡Jungkook, espera!

Él volteó a mirarlo, Taehyung vio que sus mejillas estaban muy pálidas, como si toda la sangre lo hubiera abandonado de súbito.

-¿Qué quiere? -Jungkook fue mordaz, sabía que el doctor Kim no tenía la culpa ni debía pagar su mal genio, pero estaba al límite de sus pensamientos, agobiado de su miserable vida.

-Aún queda una revisión pendiente, tú... ¿vendrás?

El Omega se quedó callado.

-¿Volverás, cierto? -Taehyung insistió y los ojos le resplandecieron, esta vez de un tono azulado igual al del cielo despejado de verano. Y Jungkook no estuvo seguro si se debió a esa etérea mirada o a la calidez en ella, pero le hizo una promesa al hombre frente a él con la seguridad de quien no la rompería:

-Lo haré.

Taehyung sonrió tan bonito y brillante que Jungkook se sintió repentinamente extraño.

Solamente esperaba no defraudarlo, tal vez por eso evitaba hacer juramentos desde un principio.

-¿Y... Jungkook?

El chico lo encaró nuevamente, su rostro menos marcado por el enojo, más vivo.

-Ustedes no son el error, esta sociedad lo es. Aunque sea difícil resaltar entre miles de estrellas, tú resplandece siempre por encima de todas ellas. No permitas que nadie apague tu brillo. No desaparezcas en la oscuridad.

N/A: Hi, hi! ¿Cómo están?

Yo preparándome para los exámenes de ingreso a la Universidad, ya estoy deprimida de tanto estudio que conlleva a estrés. Pero dejando los lamentos a un lado, saqué tiempo (de donde no hay) para continuar la historia. Espero que les haya gustado este segundo cap ^^

He aquí unas pequeñas aclaraciones:

1. Jungkook no tiene pechos como los de una mujer (sorry, aquí no encontrarán bp o bt). En esta sociedad, aunque sean Omegas varones, se les considera y trata como a chicas, por eso la mención de senos en vez de pectorales, vientre y no abdomen, etc. Pueden ocurrir casos donde sus pechos se hinchen y luzcan más pronunciados, como por ejemplo en las etapas de celo, de embarazo o durante el proceso de amamantamiento; solo ahí.

2. Sí, los Omegas varones son fértiles y capaces de gestar como una mujer, pero su anatomía y genitales se mantienen como los de un hombre. Lo explico únicamente para este fic, para que estén más claros a la hora de leer y les sea fácil interpretar.

PD: denle mucho amor a SEVEN porfis, nuestro Jungkookie se lo merece 💗

¡Nos leemos pronto! Les tkm <3

-taeryenn

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