Las gotas de lluvia golpeaban suavemente las ventanas del departamento de Moonbin, haciendo un suave sonido relajante.

Samuel, como buen gato que era, se había echado en uno de los sofás a tomar una siesta. Mientras tanto, su dueño leía un libro sin prestarle mucha atención.
Una taza de café estaba a medio tomar en la mesa, y el ambiente olía a humedad. Un día perfecto para un chico y su gato.

Sin embargo, la lectura de Moonbin se vió interrumpida por los golpes en la puerta. El joven levantó la vista de su libro, poniendo el marcapáginas en él.

¿Quién habría de ir a visitarlo en plena tormenta?

Haciendo esa pregunta a un lado, se levantó de donde estaba para abrir la puerta.

Del otro lado, había un chico ligeramente más bajo que Moonbin. Su cabello castaño estaba escondido en un gorro amarillo, del mismo color que su chamarra impermeable.

Los dos jóvenes hicieron contacto visual, lentamente recorriendo sus facciones. Por fin, Moonbin fue capaz de reconocerlo.

- ¿Jungkook? ¿Que haces aquí?

- También es un gusto verte Moonbin. ¿Puedo pasar?

- Eh, claro.

Los dos chicos entraron a la casa. El "invitado" se quitó su chamarra, dejándola en el perchero junto a la entrada. Debajo de la chamarra, había una camisa negra de manga larga, unos jeans y unas botas Timberland.

- En fin, sé que esto es inesperado y lo lamento por eso, pero debemos hablar.

Moonbin inmediatamente se puso a preparar un par de cafés nuevos. Minutos después, se encontraban en la sala.

- Entonces... ¿Cómo te ha ido?

- Bien, en realidad.

- Ya veo.

Se hizo un silencio incómodo. Sólo se escuchaba el sonido de las gotas de lluvia, y los suaves ronroneos de Samuel, quién no se había inmutado.

- Escucha Moonbin, la razón por la que vine es por que quería pedirte perdón.

- ¿Perdón?

- Si, perdón. Yo... Te culpé por la muerte de mi hermano debido a todo lo que sentí en ese momento. Pero la verdad es que no es tu culpa... Nunca lo fue. Quería disculparme por eso.

- Oh, no hay problema. Tenías todo el derecho a sentirte mal.

- Lo sé, pero no sólo eso. Mi familia te ha tratado mal desde... Pues, siempre. No creo que ellos hayan cambiado su forma de pensar, pero yo lo hice, así que quiero disculparme por todo lo que te dijimos e hicimos.

- Vaya, yo... No pensé que este día llegaría. Gracias, Jungkook, en serio.

El mencionado se relajó por primera vez desde que entró a la casa, dejó su taza en la mesa y se acomodó en el sofá de manera que pudiera ver mejor al contrario.

- Ahora sí, déjame decirte lo más importante.

Moonbin se acomodó igual. Su cuello había empezado a sudar a pesar de que no hiciera calor. Le ponía nervioso saber lo que su ex-cuñado le diría.

- Yo... Creo que encontramos al responsable de la muerte de Jimin.

- Eso es genial, ¿No?

- Lo es, pero no es lo único que debes saber. Escucha, hagamos un trato, ¿Te parece?

- ¿Que clase de trato?

- Verás, es algo muy simple. Necesito que te hagas pasar por mí mejor amigo.

- Espera, ¿Eso es todo?

- Sí. El caso es que tengo una cita con una chica. Pero dijo que sus padres no la dejan ir sola, por lo que va a ir con su mejor amiga. Se supone que yo también debo ir con el mío, pero esta de viaje en Suiza. Sólo será un día, lo prometo.

- Vale, ¿Y yo que obtengo a cambio?

- Te diré quién fue el culpable de lo de Jimin.

- Escucha, Kook -. Moonbin empezó a jugar con su pelo. Temía que el chico se tomara a mal lo que iba a decirle. - Sabes que Jimin me importaba mucho, y es genial que hayan encontrado al culpable, pero no estoy seguro de querer involucrarme más con eso. Está en el pasado, y pienso que con que se haga justicia está bien. En realidad no me interesa mucho saber quién es.

- Ja, sabría que dirías eso -. El contrario se levantó se su asiento. Bajó la vista para ver directamente a Moonbin, y cruzó sus brazos.

- Esa no es la única razón por la que pensé que te interesaría saber quién es. La razón es por que... Creo que puede tener algo que ver con tus padres.

- Te escucho.

🐍🐔

POV. DONGMIN

Nos encontrábamos cenando en familia en un restaurante un poco caro. Resulta que era el cumpleaños de mi hermano, por lo que decidimos ir a celebrarlo. Después de todo, sólo iba a quedarse una semana más.

Tras cantar el feliz cumpleaños, por fin pudimos cenar. El lugar era una mezcla de comida italiana con toques de otros países. Era en verdad un poco raro, pero todo estaba delicioso.

- Este lugar es perfecto, ¿De quién fue la idea de venir?

- De mí, claro -. Eumji levantó la mano orgullosamente. Por primera vez, todos estábamos de acuerdo con sus gustos.

- Como digas, pero yo fui el que descubrí el restaurante en primer lugar.

- Quién lo haya descubierto, es perfecto -. Mi hermano tomó otro bocado de su comida. Su novia reía de la emoción con la que estaba comiendo el tocino.

- Chicos, no sé qué le hayan puesto a esta comida, pero necesito que me den un poco para llevarla a casa... Wow! Tranquilo -. La chica le ayudó a evitar que el aderezo manchara su camisa. Vaya, si que estaba disfrutando la comida.

Y yo no podía estar menos de acuerdo. Se había vuelto mi lugar favorito. El restaurante se llamaba "Inter-talian" y estaba en una plaza comercial bastante lejos de mi casa.

Otro buen punto del lugar era que cerraban tarde. Lo cual nos venía muy bien, por que ya habíamos dado 6 vueltas a la plaza entera. Los taburetes estaban llenos de las bolsas de ropa y accesorios que habíamos comprado.

Entre esas cosas, había una pijama de cuerpo completo de un venado. Mi hermano había insistido en comprármela, y aunque le había dicho que era vergonzosa, en secreto me había gustado mucho.

En fin, teníamos montones de cosas raras como esa. Sin contar el hecho de que Eumji parecía sacada de un anime.

Terminamos de comer y nos subimos a la camioneta después de comprar dulces en una tienda más.

Mis padres hablaban entre ellos en los asientos delanteros, y tanto Eumji cómo la novia de mi hermano se quedaron dormidas, dejándonos hablando a los dos.

- Entonces... ¿Cómo va todo en la escuela?

- Genial, en unos meses vamos a ir a la playa. Lo único que me encanta de ese lugar es que siempre nos están organizando viajes.

- Lo sé, por eso amo es escuela... En fin, ¿Cómo va todo con Moonbin, eh?

Sentí la sangre subir a mi cabeza.

- Pues, bien supongo.

- ¿Que es bien?

- Bien.

Mi hermano soltó una pequeña risa. Hasta la fecha no entiendo por qué.

- Vale, cambiemos de tema. Gracias por estar conmigo. Sé que no le digo demasiado, pero te quiero muchísimo. A ti, y a Eumji, y a papá y a mamá. Nunca lo olvides, ¿Vale?

- Vale. Tu tampoco lo hagas. No le digas a Eumji, pero eres mi favorito.

- Jaja, prometo no decir nada.

Una sonrisa se pintó en nuestros rostros. Supe que la conversación había acabado. Me quedé viendo las luces por la ventana del auto. Me sentía feliz en ese momento. Sólo mi familia y yo, justo como solía ser.

Mis ojos empezaron a pesarme, y finalmente me quedé dormido.

Lo sé, lo sé, soy muy genial por actualizar seguido~ xD
Ok no, pero me aburro al no poder hacer mucho :v

Es extraño por qué odio ir a la escuela pero me aburro si no voy. Es bastante raro la verdad.

En fin, se vienen capítulos intensos, señoras y señores 🌝

Me gustaría ver que piensan ustedes que va a pasar, así que díganme aquí →→

Una vez más, quiero agradecer a todos por apoyarme 💖

Algo que debo aclarar, es que esta no es una historia muy larga. Le calculo que máximo le faltan 10 capítulos.

Y pues nada, eso. Ah! Casi lo olvido! Por si alguien se confundió, Jungkook es el hermano de Jimin (Quien, por si recuerdan, es el ex de Moon). Y pues nada, eso~

Nos leemos pronto, se me cuidan mucho ♥

Mew~