17 intercambio de información

Jeon Jungkook.

Apenas puse un pie dentro de la casa de Taehyung, él ya lanzó su primera pregunta para empezar el juego.

— ¿Cuando naciste? — mientras se quita el abrigo el perro va a saludarlo. En estos momentos el intercambio de insultos con aquellos chicos en el Mcdonald's, no parece ser relevante para él.

— El primero de septiembre, ¿Tú?

— Treinta de diciembre.

—Wow, justo casi a fin de año ¿Cómo soportas tantas festividades juntas? — debo admitir que esa pregunta salió sola, por puro instinto.

Dejo los croissant en la mesa, más tarde veré de ponerlos al microondas.

— Lo soporto por la comida, no tienes idea de cómo engordo en esas fechas.

Tae cierra la puerta y camina a paso lento hasta su habitación y básicamente se desploma sobre la cama, golpeando el colchón para que me siente a su lado: sus almohadas son muy cómodas, Tae tiene razón, se me bajaron un poco los nervios, quizás hasta hoy por la noche pueda darme el lujo de dormir aquí.

— ¿Hay algo que te guste hacer? — pregunta él, volteando de costado, yo también me volteo, quedamos casi frente a frente. Sus ojos vagan detrás de mí cabeza, pero al final prefiere cerrarlos.

— Leo, soy un friki del anime, pero no tanto como mi mejor amiga. También dibujo, y canto mucho. ¿Tu?

— Esa es una pregunta estúpida. Ya sabes que no hago nada, básicamente existo y espero que un milagro divino me arregle la vista. ¿Sabes? Un "Oculus reparo" no me vendría nada mal.

— Y ahora es cuando me dices que eres un friki amante de Harry Potter.

— ¿En serio no viste el tatuaje que tengo? Es la varita de sauco, lo llevo en el talón izquierdo, luego te lo enseño, no tengo ganas de quitarme las medias por ahora. Sigo yo. ¿Tienes un buen trasero si o no?

La pregunta me toma vagamente por sorpresa.

— Todo el mundo dice que no, pero depende del pantalón que use. — hago una pequeña pausa observando el semblante tranquilo de Taehyung y luego digo:— Oh Dios, ¿Por qué te he contestado siquiera?

Taehyung solo se ríe, abre los ojos sin fijar la vista en ningún lado en particular y dice:

—Vamos, te apetece hablar de cosas picantes, por más que te niegues una parte de ti dice "claro, pues esto me pone" y no me contradigas.

— ¿Te das cuenta que no hay respeto entre nosotros verdad? Soy tu niñero, no puedes hablarme de esas cosas. Ya te lo he dicho.

— No eres mi niñero. —Tae parece frustrado al repetir aquella frase. —eres mi compañía, supuestamente mi fuente de "ánimos", alégrate porque si yo no estuviera ciego seguirías cuidando a niños y recibiendo un salario de mierda.

—No puedo objetar nada, lamentablemente tienes razón. No recibía buen dinero antes de ti. Pero si crees que me estoy comportando amable contigo solo porque me lo exige tu padre, estás equivocado. Lo hago por ti y porque me nace de adentro. Es bueno que te sientas más conforme conmigo, si te soy sincero. — le tomo la barbilla para guiar sus ojos a mi dirección y en ese instante se calma — no creía que ibas a ceder tan rápido, parecidas muy obstinado: pero comenzaste con tu sarcasmo, no se si hice magia o algo por el estilo.

— Jungkook. — Tae hace una pausa, su voz se sincera — solo hizo falta que dijeras que eras gay para que cambiara de opinión y... Ya te dije que tuve un sueño contigo ¿Verdad? Eso también cambió mi perspectiva, pero debes saber que todavía me estoy adaptando. Seguiré teniendo los días de mierda por supuesto.

— No me digas. Seguro el sueño tenía algo que ver con relaciones íntimas...

—No te daré detalles, solo que me desperté en... La mejor parte. Ahora, ¿Me dejas tocar tu trasero? Yo diré si es bueno o no. — intenta guiñarme un ojo pero no le resulta, solo termina guiñando ambos a cualquier parte.

En un segundo la idea se me pasa por la cabeza pero no debería ceder. Eso está mal.

— ¿Te da vergüenza? — vuelve a hablar cuando nota que me quedo en silencio.

— Un poco.

— Lo vas a disfrutar. — declara alzando una ceja, solo un poco.

— Ni te molestes. — bufo poniéndome rojo. Tae me regala una mueca de desagrado.

Pero de un segundo a otro la mano de Tae se posa en el colchón y cuando encuentra mi cintura, se queda allí, acariciándome.

Por un segundo me estremezco.

—Creo que tienes buen cuerpo. ¿Vas al gimnasio? — su mano sigue subiendo por todo mi cuerpo, hasta que llega a mí rostro, allí se queda entre la mandíbula y mi oído. Mi mejilla se siente agradecida de recibir ese calor corporal de alguien más.

— Deje de hacer hace unos meses, no tengo tiempo de nada, solo en verano hago ejercicio.

— Oh... Entonces sí que debes tener un buen cuerpo. ¿Porque no me dejas tocar más... Mmm?

Mis ojos se abren más de lo que ya estaban abiertos. Taehyung mueve su pulgar y acaricia mi mejilla ¿Lo hace para persuadirme?

El silencio se instala en la habitación, Taehyung aquí frente a mí se ve demasiado imponente, su presencia hace que me sienta aún más pequeño.

Pero aún así, suelto una risa y le digo:

—¿Tan necesitado estás, que quieres follarte a tu niñero? — sin querer me acerco a él un poco, coqueteando aún así no pueda verme. 

— Jungkook si vuelves a decir "niñero" juro que haré que mi padre te despida. — y la atmósfera romántica se va al diablo.

— Ah... Yo sé que quieres tenerme aquí, soy genial después de todo — finjo confianza absoluta en modo de chiste, lo se, lo sé.

Tae me sonríe y quita su mano de mi mejilla. Ufa. 

— Vamos, Jeon, dame un poco de diversión, alegra mi oscura vida por unos minutos. — habla con un puchero de dolor fingido.

— Nop.

— ¿Me tienes lastima o que? — no se descifrar el tono con el que lo ha dicho. — ¿Crees que no soy capaz de hacerte sentir bien solo porque estoy ciego? ¿Es eso lo que piensas?

— No, solo pienso en que eres casi un extraño, eres el chico que estoy cuidando, lo que es más: no debería estar en tu cama. Es indebido.

Y eso último es lo que le hace soltar una carcajada soberbia.

— Esa lógica es absurda. Jungkook ni que fuera...

Pero el tono de llamada de mi celular lo interrumpe. Lo quito de mi chaqueta. Es Sehun.

— ¡Hola! — saludo animado y me levanto de la cama de Taehyung para llegar al comedor.

— Oye Kook... ¿Sabes lo que pasó ayer en la fiesta del estúpido de tu crush?

— Si, Lo sé, Ji-Eun me contó.

—Pero... Fue terrible.

—No quiero hablar del tema, por favor.

— Jungkook, no entiendes fue horrible. Literalmente todos se rieron de ti. Te juro que quiero matar a ese par de imbéciles. — mi mejor amigo se escucha realmente enojado. — estoy en tu edificio, ¿Puedes bajar a abrirme la puerta?

— No puedo... Hablemos el lunes..

— No me interesa si estás cuidando al chico, tengo que hablar contigo, por Dios.

— Está bien.

Y él corta primero.

— Oye Tae. — él está apoyado en el marco de su puerta. — ¿Te molesta invitar a pasar a un amigo aquí? Es que quiere hablar conmigo.

— Me da igual.

— Ya vuelvo entonces.