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Loki lame su dedo y pasa a la siguiente página del informe que él y Thor están leyendo durante el desayuno— el aliento de Thor golpea la nuca de Loki con tanta dulzura que él ya puede sentir los primeros indicios de excitación— cuando se da cuenta de que se ha vuelto asquerosamente doméstico.
"Oh, vaya," murmura Loki, apartando la vista del informe mientras la completa revelación se extiende sobre él.
La mano de Thor se desliza más abajo sobre su muslo. Loki puede sentir el miembro de Thor crecer debajo de él, y mueve sus caderas un poco, jugando. "Ahora no, hermano," advierte Loki, a pesar de ser el instigador. "Acabo de tener una epifanía."
"Mm," murmura Thor, colocando una mano sobre el estómago de Loki y tirando hasta que su espalda está al ras contra su pecho. "¿Eso pasó?"
"Así es." Loki suspira suavemente cuando su bata se abre y Thor mete una mano dentro, dejando un rastro de calor mientras recorre su pecho lentamente con las palmas. "Es difícil pensar cuando estás haciendo eso."
"A veces piensas demasiado," responde Thor. "No es saludable. Podrías tomarte un descanso." Frota un dedo sobre el pezón de Loki, y sonríe contra su piel cuando se endurece por su toque.
"Thor." Algo en el tono de Loki hace que Thor se detenga. Quita sus manos y se endereza, un poco, y luego gira a Loki para tenerlo a horcajadas sobre su regazo, de frente. Pone sus manos en las caderas de Loki e inclina su cabeza hacia él.
"¿Qué pasa?" Pregunta, preocupado, y Loki lo ama en una cantidad ridícula, realmente lo hace.
En lugar de responder, Loki se inclina hacia delante, descansa su cabeza debajo de la barbilla de Thor y desliza sus brazos alrededor de su torso. Su hermano responde con amabilidad, acurrucando a Loki en un cálido abrazo que hace que su corazón golpee de forma errática en su pecho. "Creo que," comienza Loki, y la admisión viene más libremente con su rostro oculto, "soy feliz."
***
Ambos son muy jóvenes cuando la mano de Thor, pegajosa por el jugo de las manzanas doradas de Idunn, encuentra la de Loki, apretándola con áspera sinceridad.
"Hacemos un buen equipo, hermano," dice. Parece tan seguro de sí mismo que Loki, joven, ingenuo, adorador, cree que esta es la verdad absoluta; como el niño escéptico que es, la única otra cosa que Loki sabe que es verdad absoluta es la belleza de su madre, su sabiduría, su pasión y su corazón, pero Thor habla con tal determinación que Loki no encuentra razón para dudar de sus palabras. "Cuando gobernemos juntos, ¡tendremos el más mejor de los reinos!"
La cara de Loki se divide en una sonrisa. "El mejor," corrige, apretando la mano de Thor. "No el más mejor. Sólo el mejor."
Pero la semilla se planta. Loki sueña, y se ve a él y Thor, lado a lado, guiando a su gente, trayendo y manteniendo la paz, ve a Thor resplandeciente en armaduras doradas y rojas, y se ve a su lado, brillando con magia, siempre allí para aconsejar, para aliviar sus cargas de la misma manera en que Thor lo hace con las suyas.
Pero el tiempo interfiere, confundiendo poco a poco la visión de Loki hasta que todo lo que queda es el amargo regusto del optimismo. Thor hace nuevos amigos y lo deja atrás; Thor se burla de sus consejos y toma decisiones apresuradas que tienen consecuencias extremas; Odin elige enseñarle a Thor, solamente a Thor, las complejidades de gobernar. Thor lo ama, tanto que ni siquiera parece darse cuenta del creciente abismo entre ellos, y todavía lo folla como si fuera lo único que le importara, pero son un secreto, y Thor corteja a jóvenes doncellas en público, y se ríe de las bromas de sus nuevos amigos, y sigue dejándolo atrás.
Estaba equivocado al pensar que las cosas irían de otra manera.
No es hasta que Thor se folla a Sif, que dice estar enamorada de ella, que Loki explota. Le corta el cabello dorado y se ríe a carcajadas cuando ella se despierta en horror. Él instiga. Aleja a todos los amigos de Thor, bromea con sus inseguridades, se ríe ante la furia que despierta en Thor.
No seré olvidado, piensa Loki, y es por eso que hace que su presencia sea imposible de ignorar.
Él sabotea la coronación de Thor. Es lo que se merece, se dice Loki. Es lo que siempre se ha merecido.
***
Thor no dice nada durante un largo tiempo.
Está tranquilo, debajo de Loki. Frota círculos distraídos en la espalda de Loki, pensativo, casi, mientras considera las palabras de su hermano. Finalmente, justo cuando Loki comienza a sentir la necesidad de escapar, él dice: "Mereces ser feliz, Loki."
Loki resopla con una risa amarga sobre el pecho de Thor. "¿Lo hago?" Pregunta. "Después de todo lo que he hecho, después de—" Se desenreda de Thor y recorre la habitación, sirviéndose airadamente una copa de vino caliente. Piensa en Frigga, piensa en Odín, piensa en Laufey.
Escucha el mover de la ropa, una silla que está siendo empujada hacia atrás, y luego Thor está a su lado y sostiene una copa vacía. Loki le sirve sin decir nada.
"Este es un nuevo comienzo para los dos, hermano," dice Thor. "Deja que tus fechorías mueran con Asgard." Deja el vaso, coloca una mano en la parte posterior del cuello de Loki y lo obliga a mirarlo a los ojos. "Nosotros controlamos nuestro destino ahora, Loki. Y nos convertiremos en más de lo que nuestro padre nos dijo que seríamos."
Loki traga, con la garganta seca. Desvía su mirada, baja su copa de vino y siente que la tensión abandona lentamente sus músculos. "No sé si soy capaz de ser más de lo que soy," confiesa. Su voz es baja, tan baja que no sabe si Thor la oye, al principio, pero luego Thor está avanzando y envolviendo sus gigantescos brazos a su alrededor, y Loki se funde con él.
"Lo eres," promete Thor. "Y ahora tienes la oportunidad de probártelo, Loki, a ti mismo."
***
"No me gusta esto," se queja Loki por enésima vez, cerrando una carpeta que contiene el censo de población más reciente de Asgardia. "Por los dioses, odio el papeleo."
Thor pone los ojos en blanco. "Lo has dejado claro por las últimas tres horas, hermano."
"Estoy destinado a mucho más que esto," continúa Loki. Se inclina hacia atrás en su asiento y suspira. "Hay pinturas que necesitan ser adquiridas de Vanaheim, ¿sabes? No podemos, en buena conciencia, organizar cenas en el gran salón sin las decoraciones apropiadas para mostrar nuestra riqueza."
"¿Qué riqueza?" responde Thor con suavidad. Desliza un informe sobre la mesa. "No somos ricos en nada, Loki. Tenemos absolutamente nada que ofrecer a Vanaheim a cambio de lujosos retratos o pinturas."
Loki se burla. "Estás pensando demasiado pequeño," dice con decisión. Se pone de pie, cepilla la pelusa inexistente de sus ropas. "Debo ir y pensar en grande."
Thor lo observa mientras irse, sonriendo todo el tiempo.
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