No hace falta mencionar la cantidad de bolsas de hielo que reposaban en los cuerpos extranjeros sumamente cansados como física y mentalmente. Podían escuchar los gritos de Kang y Manoban por las opciones que tenían o más bien que harían con lo ocurrido.

—Manoban —llamó Mina —Qué mierda os paso.

Bambam la miró y después miró a Lisa que abandonó se acercó sentándose en el sofá que quedaba delante del trío.

—Bambam el muy estúpido se creía que Yugyeom se haría de nuestro lado, pero no —miró mal al muchacho que agachó la cabeza —Nos tendió una trampa o como bien dices tú una emboscada.

Las tres adolescentes fijaron su mirada en Bambam que tragó saliva.

—¿Eres tonto o te comes la sopa con tenedor? —lo fulminó con la mirada Momo

—¿Eres tonto o persigues coches aparcados? —Sana hizo lo mismo.

—¿Eres tonto o masticas agua? —continuó Mina.

Una carcajada fue soltada por Manoban.

—Bambam es tonto nos ha quedado claro, pero confío en él. Es como mi hermano —lo miró y éste le sonrió.

—¡Qué pasó ayer! ¡Lalisa Manoban! —se escuchaba gritar a una chica desde la entrada, estaba tratando de ser retenida por otra joven la cual Seulgi al verla corrió rápidamente para abrazarla y besarla.

El temor en el rostro de Lisa apareció, se levantó rápidamente haciéndole señas a su mejor amigo para que la ayudara. El trío japonés la siguió con la mirada.

—Jennie...escucha, se me olvidó avisarte —Kim Jennie comenzaba a golpear con fuerza el pecho de la tailandesa.

Mina observó a la chica ya se había asomado a saludar a las niponas que descansaban mientras Kang la abrazaba por la espalda.

—Necesitas cerrar esa herida —fue lo primero que dijo.

—¿Irene? —fruncieron las tres el ceño a la vez.

—Hola chicas...—le hizo un gesto a Seulgi para que le acercara su bolso.

Ésta obedeció dándoselo enseguida viendo con ternura como su novia comenzaba a curar la herida de Mina en la frente.

—Ahora entiendo por qué estás estudiando medicina —la halagó Sana con una sonrisa.

Irene rió tímida, terminando con su deber. Todas le agradecieron.

—Nadie se esperaba que doña modelo ejemplar Kim Jennie y Bae Joohyun estuvieran de pareja con chicas como Lisa y Seulgi —le susurró Momo a Mina que se encogió de brazos.

—Ahora solo faltas tú para llevarte a Nayeon al lado oscuro —bromeó Sana.

Esta vez Mina no contestó siendo consciente de que tendría que avisar a Nayeon de que habría tenido problemas o más bien sacarle alguna excusa. Cayeron en cuanta de qué tenían que avisar a sus respectivos hogares de que pasarían la noche afuera.

"Estaré en casa de Momo, le ha dado dolor en el estómago por comer demasiado, descansa🐰💓" Escribió para enviárselo, la rubia la miró dudosa.

—¿No le dirás la verdad? —cuestionó Sana.

—Quiero mantenerla al margen por ahora, no quiero preocuparla —guardo silencio pensativa para continuar —Ya tiene suficiente con lo que pasó hoy.

Bambam regresaba con Lisa y Jennie, parecían estar aún enojada entre sí.

—Kang deja de meterle la lengua a Bae y escucha —dijo sacando de su mundo a la parejita.

—Cogí el móvil de Kai para que me comprarme algo desde su tarjeta de crédito, pero me sorprendió ver un mensaje de Jinyoung porque él me dijo que ya ni hablaban —comenzó a explicar —entre en la conversación y vi que se iban a reunir como siempre en el lugar de siempre, es decir donde está la vieja fábrica de la familia de Jinyoung a las cuatro de la mañana.

El rostro de las presentes se llenó de esperanzas, ahora sabían un lugar al que recurría la serpiente resbaladiza de Park Jinyoung.

—¿Tú que dices Lisa? —preguntó Kang.

—Que hay que ir allí y hacerles la misma emboscada que ellos nos hicieron.

Mina sonrió, sus ganas de venganza crecían cada vez más con el paso del tiempo y lo mismo iba para Momo y Sana.

—Nada de sonrisas que vosotras no participaréis —se adelantó a decir Manoban.

—¿Qué? —gritó indignada nuestra protagonista —¿Por qué?

Irene carraspeó y todas las miradas fueron a parar en ella.

—Los hematomas desaparecen normalmente en dos semanas.

—¿Y qué? Nuestras ganas de venganza es más fuerte que el dolor físico —Sana habló completamente seria.

Las otras guardaron silencio sin saber muy bien que decir, la primera en hablar fue Seulgi.

—Por ahora es un no, actuaremos en ocho días para ser exactos. Ósea el siguiente viernes.

—Mejor id a dormir, tengo una habitación de huéspedes con una cama matrimonial cabéis ahí de sobra...y no hagáis cosas raras que os conozco —señaló Lisa al Samo que asentía mientras se levantaban del sofá adoloridas para ir a descansar.

🤔🤔

Volvió a casa al día siguiente, entró a su habitación de puntillas para no despertar a Nayeon la cual estaba durmiendo en la cama de Mina abrazándose a su almohada.

Se pusó de cuclillas un momento para analizarla, beso su frente y luego se dio la vuelta para comenzar a desnudarse, iba a tomar una ducha para despejar la mente.

—¿Mina eres tú? —abrió un poco sus ojos sin llegar a abrirlos por completo.

—Tomaré una ducha, no tardó nada para volver y dormir abrazadas.

Sin decir nada más dejo que solo la coreana volviera a dormir mientras que ella se iba para adentrarse en la ducha. En cuanto el agua toco su cuerpo miró éste, miró los golpes y marcas. No pudo evitar imaginarse las que sus mejores amigas tendrían y la culpa comenzó a llenarla lentamente.

Se había jurado a sí misma que no lloraría, que no lloraría demostrando lo afligida que estaba en realidad.

De la nada, abre los ojos para ver esos característicos brazos delgados enrollarse en su abdomen, Nayeon desnuda apegaba su anatomía a su espalda.
Comenzó a acariciar su piel de su parte trasera viendo las heridas recientes del cinturón ahí, los moretones y más.

Un pequeño sollozo llega a los oídos de Mina.

—¿Momo no estaba enferma verdad?

Mina niega con la cabeza y Nayeon vuelve a sollozar.

—¿Me dirás lo que ha sucedido, Mina?

Volvió a negar.

—Ya sabes que no lo haré. No puedo.

Nayeon tras escuchar esto trata de abandonar la ducha soltando su agarre.
Sin embargo, Mina la toma posesivamente de la cintura.

—Puedes enfadarte cuanto quieras después, pero ahora quédate —la encaró dejándole ver su semblante.

Los ojos de Nayeon se abren como platos. Se abren al ver las ojeras, la herida en su frente y su labio cortado. Las yemas de los dedos de la mayor comienzan a acariciar con sutileza las heridas, bajó su dedo lentamente hasta llegar a sus belfos.

Afectuosa entrega un beso tratando de confortarla.

—Y yo solo te pido que te cuides —llora una vez más escondiendo su rostro en su cuello.

La menor la abraza, sintiendo sus cuerpos completamente apegados bajo las gotas de agua de la ducha. Comenzó a sobar su espalda de manera cariñosa, intentando transmitir o más bien decirle que todo saldría bien.

⭐️⭐️

Los días volaron, en esos ochos días no había ocurrido nada fuera de lo normal excepto que las tres japonesas se habían saltado sus clases para descansar en sus hogares.

Lo único que no fue muy normal o más bien fue difícil para la universitaria, sentía las miradas de asco y de odio de varias personas encima de ella. Lo que nunca pudo imaginar fue que la mismísima Kim Jennie la defendiera frente a Jinyoung que parecía tener un humor increíble, burlándose de la coneja.

Eso fue lo único que le mejoró considerablemente la semana pues, las japonesas no aparecían por Yonsei y una parte de su felicidad siempre estaba con esas descerebradas.

Por fortuna ya había llegado el día, ya era viernes. Ansiado por parte del trío para su venganza y ansiado por parte de Im gracias a que Jennie las invitara a un bar exclusivo.

Ese viernes, Sana y Momo fueron a visitar a Mina informándole de todo acerca de la supuesta venganza y emboscada que harían. El mayor problema fue que se enteraron de que las demás habían tomado la decisión de que ellas no participarían.

Ya eran más de las once de la noche y su grupo de amigas saldría a tomar algo gracias a la propuesta de Nayeon, quien  discutía con sus mejores amigas (seguramente sobre algún asunto relacionado con Mina) mientras Dahyun entraba al hogar coreano-japonés.

Pues minutos antes Nayeon le había dejado la puerta abierta para que entrara la menor al avisarle que ya estaba en el ascensor.

—¿Nayeon unnie? ¿Dónde está el labial que dijiste que me dejarías? —fue lo primero que preguntó y luego se sorprendió al ver a las tres en el sofá

—¡Dahyun! —gritaron al unísono Momo y Sana.

La llamada fue rápidamente hacia las tres japonesas, comenzaron a hablar con ella para después llenarla de mimos como de costumbre.

Jihyo y Jeongyeon que observaban desde la cocina junto a Nayeon comenzaron a molestarla susurrándole cosas al ver como Mina acariciaba la cabeza de la peliazul mientras las otras dos la abrazaban o le daban besos en la mejilla.

—Cuidado con Dahyun, es un imán para las japonesas —rió Jihyo.

—Hasta para Mina —molestó Jeongyeon a la más mayor

Nayeon negó con la cabeza y cruzada de brazos gritó:

—Dahyun venga vamos, te pones el pintalabios en el coche que Jennie ya debe de estar llegando al bar —metió prisa y la menor acató sus órdenes.—Y a vosotras tres os quiero quietas aquí, nada de problemas —amenazó antes de cerrar la puerta.

Se miraron entre sí, conteniendo la risa. Las tres sabían que iban a romper esa órden y en dos horas ya estaban teniendo la dichosa llamada.

—J-line estamos ya en el lugar, ya os contaremos —colgó Lisa sin darles tiempo a que hicieran siquiera una sola pregunta.

La atmósfera por primera vez durante toda su amistad era silenciosa, estaba claro que estaban entre frustradas y sumidas en sus propios pensamientos que las consumía cada vez más y más. Sus cabeza era un rompecabezas en esos instantes.

Aún en silencio comenzaron a pensar en los mismo; ellas eran la jodida J-line, se habían ganado ese nombre a pulso.

Habían tenido tantas aventuras juntas, habían tenido millones de problemas mientras crecían: peleas de todo tipo saliendo ganadoras o teniendo que huir, pero siempre de los siempre, la j-line salía ganando.

Ellas tenían una química única, sus características y habilidades también. En lo que una carecía, la otra fortalecía sus carencias. Básicamente era un grupo completo en todo, un grupo al que no se le podía tocar.

No hacían falta las palabras, con una sola mirada se entendieron. Irían a ese lugar a

Y si Jinyoung les había dicho que nunca nadie se metía con un Park, ellas le enseñarían y le daría una mejor lección:
nadie se metía con la J-line.

🤝
3/4

Corto lo sé, pero creo que la acción queda mejor en el siguiente :)

Cualquier error by sueño

No tengo nada más que decir de este capítulo.