En la noche oscura y fría el viento sin piedad aúlla, mientras dentro de una biblioteca con tristeza y emoción... una chica se muere de ternura por un libro que leía.

-Oooow, que lindos -dice la pony de melena rosada al leer una historia llena de magia, fantasía y de ambiente familiar para los jóvenes en adelante. Esta trama trataba sobre un niño que fue criado y agredido por sus parientes, pero una criatura de gran tamaño y de extraña apariencia llega para salvarlo en el momento oportuno, antes de que los familiares de aquél pequeño lo lastimaran gravemente. La criatura sin dudar lo saca de aquél infierno para cuidarlo por si mismo y protegerlo junto con su familia.

La chica seguía pasando pagina por pagina hasta el ultimo capitulo. Sentía que quería llorar al ver como lamentablemente, la criatura que defendió al pequeño niño, murió días después de que un hombre lobo malvado casi lo atacara, y en su lugar, fue a la criatura a quien hirió de gravedad. Y días después, falleció. Dejando al pequeño con sus abuelos; sin una mamá, ni un papá.

-¡No! ¡¿Porqué?!

Se queja la pony de melena rosada con frustración al ver cómo terminó una historia que tenía buen desenlace, pero al menos la criatura antes de irse al más allá le susurro unas palabras bonitas que más que palabras era un consejo de vida para que el niño pudiera seguir adelante y ser feliz, que nunca estaría solo. A Fluttershy le hubiera gustado algo más, un final feliz y no uno agrio que te deja un mal sabor en la boca, pero así fue como el escritor de esa historia lo escribió.

-Que lástima, yo quería ver si había algo más... -dice la pony con pesar, dirige su mirada hacia la ventana y ver que el sol se ocultaba y la luna salía, dando la bienvenida a la noche.

'¡No puede ser, es tarde!'

Sin preámbulos, Fluttershy guardo rápidamente sus anotaciones con sumo cuidado de que no se arrugue las hojas peeero como a veces nos sucede cosas que no tenemos previstas, se le arrugaron sus hojitas.

Fluttershy quería llorar al ver como sus anotaciones se le arrugaron pero ahorita no había tiempo para lamentaciones. verificó que estuviera ordenado y organizado todo lo que desordenó, para luego colocarse su bolso y correr hacía la puerta de la biblioteca. Ahí estaba su amiga Ligth, la pony que la había atendido amablemente y, su amiga y nueva compinche.

-¿Oh, ya te vas tan rápido Fluttershy? -sonríe divertida.

Fluttershy se avergüenza, aunque no pudo evitar fulminarla con la mirada.

-Si, se me hizo tarde y tengo que volver a casa.

Ligth se ríe al ver la expresión de su amiga-Si quieres te acompaño hasta tu casa, Fluttershy. Últimamente los crímenes han aumentado bastante.

-¿Y eso? -la ve en busca de respuestas.

-Los cultivares y agricultores han desaparecido.

-¡¿Desaparecido?! -jadea sorprendida -Pero... ¿Cómo? ¿Qué?

Ligth tampoco podía procesar la información sin que se quedara un momento callada y en completo silencio.

-No lo sé... Muchos conocidos y personas que entran a la biblioteca hablan sobre eso.

-¿Las autoridades no han encontrado alguna pista?

La chica de pelo azul niega con la cabeza -Ninguna.

-¿Ni un rastro mínimo de sangre o alguna prueba?

-Nada -dijo nerviosa.

-Eso es extraño...

-Lo sé -. Concuerda -Pero muchos ya andan rumoreando que puede ser un demonio o, una maldición.

-Ya veo.

¿Será que hay un asesino en serie? No creo que sea un demonio o una maldición, ya que abría alguna pista, así sea mínima. No, me estoy dejando llevar. Probablemente sea un enemigo del reino, tendré que investigar más.

-Gracias, Ligth. Pero puedo correr rápidamente a mi casa, no te preocupes. Además, necesitas cuidar de la biblioteca y atender a los ponies que aun quedan -dice la pony con una sonrisa mirando la biblioteca y la otra pony hace los mismo, suspira para luego sonreír a la pony.

-Supongo que tienes razón... debes tener mucho cuidado Fluttershy, si oyes un ruido, no mires atrás. Recuerda que también hay jóvenes hermosas desapareciendo.

-Esta bien, Ligth -asiente la pony.

-Un día deberíamos reunirnos y tomar una taza de té. ¿Qué te parece?

-Suena tentador -ve que se hizo completamente de noche -Me tengo que ir, ¡Adiós Ligth! -sale corriendo.

-¡Adiós amiga, cuídate mucho! -se despide Ligth, agitando lado a lado su casco derecho.

-¡Lo haré! -contesta la pony de melena rosada, desapareciendo entre la silenciosa noche.

'Cuídate Fluttershy, ojalá no te pase nada en el camino'.

Piensa Ligth con preocupación.

Entre la furia del viento, la pony corría a todo galope rumbo a su hogar para refugiarse entre las cálidas paredes.

'Tengo mucho frió, quiero irme a mi casa'.

Sin embargo, oye un ruido fuerte que la hace detenerse.

'¿Qué fue eso?'.

Preocupada, se queda inmóvil y mira detrás de ella para ver si había otro movimiento. Ella no ve a alguien que sea causante del sonido que oyó. Fluttershy sigue con su camino, pero de repente vio a un pony anciano en un callejón extender su casco hacía ella, para luego jalar a la chica dentro de este, haciendo que Fluttershy retroceda asustada.

-Lo siento por asustarte pequeña niña. Muchos me han ignorado y no puedo soportar más... por favor ¿Podría darme un poco de pan y agua a este viejo semental? Tengo mucha hambre... -dice un semental encapuchado con melancolía y pesar, la chica siente que aquella voz era hueca y bastante fingida.

Probablemente era un vagabundo haciéndose pasar por un viejo anciano para tener algo de comer, más el semental no le inspira confianza a la pony. Por alguna razón sentía miedo y un estado alerta frente a la persona que tiene casi frente a ella.

¡Solamente era ella y él anciano! Sin mencionar los sonidos variantes del viento y la mecedura de los arboles, con el aullido de los lobos del bosque Everefree, acompañando el frió de la noche.

No podía ser peor ¿No?

-L-lo siento señor, pero no tengo comida ni agua en estos momentos -dijo fluttershy con pena. Causando que la expresión del pony se vuelva oscura, para luego pasar de enojada a una loca. Para después sonreír a flor de piel como el peor enemigo de Batman, causando que a Fluttershy se le erice su pelaje como si fuese un gato asustado.

-Que lástima, pero es posible que se arregle este malentendido, si...

-¿Sí...? -desconfiada e insegura.

-Si sacias mi hambre con tu cuerpo.

-¡¿Qué?! ¡Jamás! -alzó la voz enojada y asqueada.

La furia del viento y de la lluvia invernal amenazan con ímpetu a su paso, tentados a destruir a la mariposa para que pueda ser arrastrada y llevada.

!Oh! vivido contraste.

-¡Como tú quieras!

El anciano al pronunciar esas palabras, varias sombras salieron y los rodearon, eran nada más y nada menos que sementales que estaban bajo el mando de aquél anciano, este sonrió malvadamente bajo su capucha y la sujetó.

-¡Suéltame, anciano! ¡Ayuda! -grito la pony pero el anciano la golpeó en la cara.

-¡Cállate escudilla! -le da un golpe bastante fuerte en las piernas y en la cabeza, provocando que saliera hematomas bastantes profundos y sangre por el orificio izquierdo de la nariz.

Fluttershy tenia una expresión desorientada y adolorida.

El malvado semental le causa regocijo ver como aquella endeblucha pony se encontraba en un estado adolorido.

La chica parpadea de a poco hasta no querer hacerlo, dando señal que está a punto de caer en la inconsciencia.

-Que desperdicio de mi tiempo -dijo el viejo con una sonrisa -Lastima. Al menos será un buen espécimen para el mercado de esclavos -lanza a la chica hacia sus hombres para que hagan lo que quieran con ella. Pero estos no la atrapan apropósito, provocando que Fluttershy se golpeé con un tubo y quede en una postura miserable, haciendo que los sementales se rían y adulen al jefe de ellos y mientras lo hacían, pensaban en muchas formas de hacerle daño a esa Pony y sus subordinados no se quedaban atrás, todos tenían la conciencia podrida.

Y sin más, todos se acercaron a ella, pidiendo ser los primeros o seleccionando cuál sería su parte. Pero antes de que le tocasen un cabello a la pony, una figura grande y alargada se interpuso entre ellos y la joven yegua.

-¿Sus padres no les enseñaron que está mal golpear a las mujeres? -dijo una figura encapuchada con voz ronca.

Unos sementales se rieron, mientras que otros entrecerraron los ojos, debido a la voz profunda y gruesa de la figura.

El líder se aproximó y con una risa sin remordimiento le pregunta:

-¿A caso importa, oh gran héroe de damiselas en apuros?

El encapuchado ríe entre dientes sin interés -No soy un héroe, ni un villano.

-Si no eres un héroe, entonces solo eres un tonto al arriesgarte solo -todos los sementales sacaron sus armas, listos para hacer daño a la figura

El viento se arremolinaba alrededor del la figura, para luego enseñarles unos ojos rojos, inyectados de sangre.

La figura sonríe de forma retorcida -Este tonto les hará probar su propia medicina. Pero antes, este hombre pateará a los abusadores y los redundara hasta las cenizas...

Una vez que la figura soltó dichas estás palabras, todos retrocedieron un paso. Pero el jefe de los abusadores sin querer rendirse y con ganas de matar y ahogar con su propia sangre al personaje misterioso, les grita una orden a sus subordinados.

-¡Ataquen!

Los lacayos del anciano gritaron y corrieron para lanzarse encima de la figura encapuchada y apuñalarlo con sus armas. Pero el encapuchado era ágil y rápido al moverse.

El hombre de capucha negra tenía una sonrisa confianzuda que sobresalía su colmillo, los ataca con una cola de dragón como si fuese un látigo ¡Slash! Haciendo que más de uno sea lanzado en el aire y se golpeen.

-¿Pero que mierd...?

Exceptuando a los que no lo lograron, no dudaron en hacer un salto invertido e intentar huir mientras trataban de atacar en vano a dragón que creían tener frente a ellos.

La criatura se burló y eso hizo que hirviera su sangre, pero su ira paso al miedo al ver como la criatura se hizo sombra con la misma Sombra.

-¡¿DONDE ESTÁ?! -grita con ira y miedo el anciano.

Los sementales pegaron sus espaldas la una con la otra, formando un circulo como si fuese un escudo, siendo el anciano el que esta siendo salvaguardado con los cuerpos de sus sementales.

El viento había desaparecido, todo estaba tranquilo. Esperaron un momento, pero nada surgió. Hasta que las sombras de ellos se volvieron en su contra, jalándolos de los pies y alejándolos del anciano.

Un movimiento inesperado.

Bajo las sombras, la criatura salió y agarro a uno con su cola, rodeando su cuerpo y enrollándolo como si fuese una serpiente, mientras que otro semental fue atrapado con la mano derecha hombre misterioso, para luego apretarlos hasta quedar sin aire y, lanzadlos hasta aquél jefe de aquellos sementales.

El viejo al ver como sus hombres eran deborados por sus propias sombras. Se asusta y se lanza a correr fuera del callejón. No obstante, algo lo enrolla y lo lanza contra un tubo de forma brusca, para luego ser tomado otra vez, ahora sintiendo la piel fría de lo que parecía ser una serpiente.

-¿Te ibas a escapar de este encapuchado sin despedirte? ¿Dejando a tus hombres a su suerte? Eso es mala educación, no es digno de un jefe. Vaya pena que su propio jefe sea un misero cobarde que se aferra a las faldas de sus hombres -suelta una risa fría y extrañamente burlona. Causando un escalofrío desagradable en el hombre al sentir la corriente de viente del aliento de la criatura.

-Piedad por favor... -suelta lastimeramente.

-La piedad no es algo que se me haya inculcado.... no hay rastros de este en mi sangre.

El semental lo ve con miedo -¿QuIeN ErEs? -dijo con voz asustada.

-Te lo dejaré como tarea para cuando estés en la otra cara de la moneda.

La criatura no responde a su pregunta. En su lugar, solo se podía oír a un hombre gritar de horror para luego solo hallar silencio en el frío callejón y en las calles del pueblo de Ponyville.

La pony de melena rosada, Fluttershy, solo pudo oír ruidos y peleas, para solo ver con vista borrosa como la luna ilumina la noche desde arriba de ella y una figura acercarse. Asustada, intenta levantarse para escapar. Sin embargo, solo obtiene otra caída, sintiendo como su cuerpo débil no colaboraba con ella.

Bendita sea la suerte que le toco.

Si pudiera, Fluttershy se reiría.

Pero esta tan cansada y adolorida. Antes de zambullirse al mundo de la inconsciencia, pudo ver aquella figura era masculina, alguien de ojos rojos sangre que la sostenía entre sus brazos sin brusquedad.

Supone que aquella figura de aspecto negro era su salvador.

¿Y si la lastima? ¿Y si le hace daño?

Ella intentaba hablar o mover su brazo derecho, pero no puede. Estaba asustada como si se estuviese en el mar y la tormenta la arrastrara

La figura se quita la capucha y la cubre para acunarla entre sus brazos y su pecho, protegiéndola del basto frió que crecía a medida que pasaba el tiempo.

-Tranquila querida, no te haré daño. Estás a salvo-. Dijo el hombre.

Fluttershy se suavizó instante en el momento aquél hombre le habló, su voz era ronca y cortante, pero oía su sinceridad, ninguna mentira en sus palabras toscas y malhumoradas.

Fluttershy en esa fatídica noche pudo hallar hallar la serenidad después de aquella tormenta. A pesar de que no quisiese que alguien la tocase, solo pudo dejar que la criatura misteriosa la alzara y cargara al estilo nupcial hasta su casa.

A medida que la figura masculina caminaba. Podía sentir el rose de esa piel y melena tan suave como si fueran caricias. Sin darse cuenta, se desmaya. Nadando en el mar de la inconsciencia, sabiendo que de alguna manera aquella figura no le haría daño.

'Que pony más inusual...'

Pensó Discord al ver a aquella pony en sus brazos, tan débil y tan frágil la caraba con sumo cuidado, como si en cualquier momento aquella chica fuese a romper.

A medida que caminaba, vio que su melena se veía estaba manchada por el daño que esos sucios rufianes le hicieron a la pobre chica, y eso... le hacia gruñir y hervir la sangre.

Quería volver a destruir a esos tipos otra vez.

-Esos sementales, ¿cómo se les ocurre dañar a una mujer? Y tú pequeña yegua ¿Porqué estabas tan altas horas de la noche cerca de un callejón? Pony descuidada que no ve los peligros -regañó suavemente el draconequus a la chica desmayada, examina nuevamente su cuerpo para ver las heridas.

No evita que un gruñido se escape de su garganta.

'Te cuidare querida, no te preocupes, pronto estarás como nueva'.

Acaricia con su pulgar derecho la mejilla izquierda del rostro de la pony.

Asintiendo con afirmación a esa promesa, la criatura mitológica abre un portal y se adentra en la con la pony en brazos. Dejando aquellos lugares de Ponyville en soledad.