Comenzaba a sudar y casi hiperventilar, Giyuu preocupado por no ver a Nezuko perdía el control de su cuerpo, no solo por el veneno o la preocupación, si no que también por su omega (estaba volviendo después de haber sido suprimido por tanto tiempo). No pudo evitar soltar su nichiri y caer. Kyojurou al verlo sintió nervios, pues el culpable de que Giyuu dejara salir a su omega era él.

Tenía que hacerse cargo de su irresponsabilidad, pero Giyuu estaba bastante lejos de él. ¿Cómo podía ayudarlo estando tan lejos?, mirando a todos lados pudo notar que Sanemi estaba algo cerca, gritando su apellido. Este al captar su atención le gritó una orden de proteger a Giyuu.

Sanemi le miró confundido, pero al voltear y divisar al pelinegro chasqueó la lengua con cierta molestia, no entienda su comportamiento, pero tampoco rechazaría ayudarlo ya que era una situación de vida o muerte. De cualquier modo recordó lo que le dijo Genya antes de apartarse de la batalla a petición insistente de Muichiro.

- Ayudar aun que me desagrade... - susurró.

Logrando llegar hasta Giyuu que ni podía sostener bien la nichiri lo cargó antes de ser cortado a la mitad. Teniéndolo tan cerca podía encontrar un olor a omega. Disgustado Sanemi se alejo un poco para que Muzan no lo alcanzará con sus extremidades, y estando apartados desabotono el uniforme de Giyuu, este al sentir la nariz del alfa rozar su piel quería morirse de vergüenza.

Alzando la mirada con el ceño fruncido conecto miradas con el pelinegro que estaba sonrojado - ¿Eres un omega? - preguntó molestó y este asintió tímido -. ¡¿Serás idiota?!

- L-Lo siento...

- ¡Cállate! - utilizo la voz de alfa -. ¡Estás entrando en celo, es mejor que te larges o caeremos todos!

- ¡P-Pero aún puedo...!

- ¡No! ¡Cállate y vete de aquí ahora mismo!

Sanemi molesto lo dejó en el suelo pero Giyuu no iba hacerle caso a un alfa que fue malo con él. Levantándose para ir, el alfa inmediatamente lo lanzó al suelo.

- ¡Si llegas a moverte te mataré yo!

- ¡No me importa! ¡Yo ya estoy muerto! - le gritó conteniendo las lágrimas -. ¡No sabes lo horrible que estar solo!

- ¡Claro que lo sé! ¡Ahora cállate y vete con Shinobu!

- ¡No!

Alzando lo de su uniforme teniéndolo cara a cara le gruñó. - ¡Entonces si tú no te vas te llevaré yo!

- ¡Te dije que no Shinazugawa! - al gritar eso le dió una bofetada.

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Si bien, aún no llegaba hacia su hermano una explosión se escuchó, dando tiempo para acercarse más a su hermano por el aturdimiento.

Hubo un forcejeó entre los dos, casi provocando que Tanjirou la arañara, Nezuko optó por lanzarse a su hermano tirando lo al suelo evitando que siguiera. Tanjirou al ver a su hermana utilizo su técnica para curarla, al quitársela de encima iba a volver a correr, pero, Nezuko fue más veloz para volverlo a tirar.

- ¡Deja de ser tan terco y aléjate de aquí! - mirando como negaba con la cabeza y ponía fuerza para levantarse, lo sujeto de su cabellera aplastado su cabeza al suelo, aún que le doliera hacerle daño a su hermano no pudo evitar llorar -. ¡Entiende que no solo expones tú vida en riesgo! - regañando no logró contener más a Tanjirou, pero de todas formas no se daría por vencida -. ¡¿Has pensado como se sentirá Rengoku-san si llegas a morir y tú bebé?! ¡Siempre has sido egoísta contigo y nunca me has dejado hacer algo por ti!... ¡Y ahora que puedo, no me dejas! - gritó con voz quebrada -. ¡Te odio...! - Tanjirou se detuvo, y Nezuko se tapo la boca con los ojos bien abiertos.

Cerrando con fuerza los puños clavando sus uñas en las palmas de las manos, volteó a ver a Nezuko con una expresión tranquila. Volviendo con ella la abrazó, acercandose un poco a su oreja susurro --. Lo siento Nezuko.

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La expresión de Nezuko cambió al llegar con Muzan. Logró salvar a Kanao antes de que la matara, pidió a uno de los kakushis que la cuidara mientras trataba entenderlo por un tiempo; para que así su hermano se encargará de curar a los demás.

Utilizando el aliento de agua, el cuál dominaba mucho mejor que el original, pensó que no era tan mala, pero también pensó que igual su hermano hubiera sido mejor cazador que ella.

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Tanjirou había utilizado mucho su técnica para curar y retirar el veneno en los pilares e sus amigos, pero aún que ya había curado a la mayoría, faltaban dos personas; Obanai y Kyojurou. Buscando con desespero logró encontrar al omega de ojos especiales, poniéndolo en su regazo, Kaburamaru al ver al pelirrojo inmediatamente se en rollo en el brazo de él.

Tanjirou con sus manos cubrió su rostro utilizando su técnica un poco más casi enterrando sus uñas. Logrando lo esperado Kaburamaru regreso con su dueño ocultandosé en su haori. Obanai al abrir los ojos quedó impresionado al ver a Tanjirou inspeccionando lo, al mostrar una sonrisa dejo al pelinegro para irse a buscar a Kyojurou. En el fondo Obanai sabía que no debía dejar solo al omega de cabellos burdeos, aún que de un lado miró como Nezuko estaba haciéndole frente a Muzan, era difícil decidir lo, pero Tanjirou se había ido.

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Nota: como dije que este será un fanfic de felices por siempre :p ✨
Los pilares no perdieron extremidades ya que al ver la pela de Giyuu y Sanemi pudieron alejarse lo suficiente para no ser ¿Mutilados?, ya que esos dos eran una distracción.