Dejamos a todos en la casa de Quilla, relajándose y reponiendo energías, salimos a conseguir todo lo que necesita llevar cada vez que va con Joel y compañía, por lo general son víveres premium, desde licor algo costoso hasta lo más lujoso que solo se puede conseguir o en mercado negro o en sitios de plusvalía altísima. Joel es igual que yo, fuma como si fuera chimenea en invierno, conseguir cigarros de la peor calidad que son los que nos gustan más ya que los actuales de marcas permitidas tienen sabores y ni se siente la nicotina porque les lastima la garganta a los señoritos,  perdón perdón pero es que un vicio debe de ser y saber horrendo para matarse lentamente pero con algo de placer... Una disculpa volvamos al tema, hay que conseguir todo eso, tuvimos que ir a Marte a conseguir esos cigarros que por acá no hay y ni loco iba a quedarme sin mi suministro personal que está en la bodega del Girasol. Con viajes rápidos usando el agujero de gusano ya que el lugar de encuentro es en una luna de Neptuno, allí tienen su cabaña de descanso. Bueno al menos Joel y Sveta porque los demás buscan estar más en ciudades tipo de donde me sacó Quilla en Marte. Encontraron una manera de terraformar esa luna pequeña, pero lo que gastaron o favores que cobraron valió la pena. Tener tremenda visual de ese planeta azul, demonios, aunque no le pide nada al lugar de donde venimos.

   Terminamos rápido todos los encargos y algunos obsequios extras para ellos, piden cosas así porque por lo general se la pasan meses fuera del sistema, en cosas que solo ellos saben hacer y se entiende que si pueden recibir intercambio de trabajo por cosas así agradecen el ahorro de tiempo y evitar que la gente los ubique ya que su rama de trabajo les atrae demasiados enemigos, y, vaya que si sabemos de tenerlos. Aunque ellos salieron de la misma armada de la Unión Terrena ellos si fueron capaces de entender lo que pasó y no se dejaron llevar por la mierda "oficial" de lo sucedido. De hecho investigaron y aunque tienen un amigo que es coronel era tan grande el incubrimiento que ni él pudo hacer algo por limpiar el nombre de mis amigos fallecidos. Bueno, llegamos a Neptuno, el último tramo será usando la gravedad e impulso de estar en órbita en ese planeta para que el radar nos de la ubicación de esa luna. Como llegamos con un día de antelación no habrá problema de dejarnos llevar por eso.

- Princesa.

- ¿Qué sucede Dano?

- ¿Estás segura de querer meterlos en esta mierda?

- No tenemos a quien más acudir, aunque no te lleves bien con Joel lo respetas y eso es suficiente para mi.

- A verdad no esperaba llegar a éste punto Cariño.

- Lo sé, solo era una investigación en cierto modo sencilla y localizar indicios de esa civilización antigua.

- ¿Quién diría que fue algo muy turbio no?

- Lo siento Dano, te metí en esto y vamos a arrastrar a más personas.

- No me metiste en nada Cariño, sabes que te seguiría hasta el fin de los tiempos sin que me lo pidas.

- Eres un cabrón.

- Amo cuando sonríes así y es por esa sonrisa que mataría a quien sea solo por verla en tu rostro.

- Si quieres sonar romántico pues no, pero se agradece el esfuerzo Cariño.

- Después de esto ¿Vas a querer que esté cerca de ti?

- Sabes que si pero también sabes el como.

- Lo sé bien, mientras esté cerca y pueda cuidarte no importa si solo somos amigos.

- ¿Te ha sido incómodo estar cerca de mi?

- No, pero siento que en momentos te incómodo cuando te demuestro lo que siento.

- No me incómoda, es que es que...

- Mujeres, quieren que uno sea directo pero ustedes no lo son.

- Me gusta que lo hagas pero en cierto modo no quiero darte alas a algo más, sabes muy bien que por ti daría la vida, ya no quiero cometer el horror de dejarte solo de nuevo.

- Entonces era eso, creí que me evitabas porque no me querías cerca.

- También casi no ha habido mucha oportunidad de hablar solo tu y yo en estos meses.

- Ni que lo digas, hay mucho de que hablar pero poco tiempo en cada oportunidad y eso hace limitado lo que podemos hablar.

- Así es Dano, no sabes lo que disfruto de hablar contigo.

- Si lo sé, no te gusta hablar con la gente por tu problema de habla y conmigo te innives por completo al punto que hasta cantas de felicidad.

- Si lo notaste, voy a llorar.

- No por favor, no llores que soy muy sentimental y no quiero llorar también.

- Ay si, muy macho tu.

- No es eso, sino que tu dolor es mi dolor, tu alegría es mi alegría.

- Tan lindo, pero no sea chillón.

- Vete a la bestia ya te salió lo vato.

- Ha ha ha, eres, eres...

- Debemos de buscar la manera de hablar seguido así, si por mi fuera no me apartaba de ti pero habían deberes y se que te cuidan todos como si yo mismo lo hiciera.

- ¿Por qué eres así conmigo? Solo te he dado dolor.

- Sino sintiera dolor significa que no te amo, si soy así es porque mereces ser tratada así y mucho más, no hay un porqué especifico, solo soy así porque me haces sentir amor y eso se siente bien aquí en mi pecho.

- Al menos debes de esconderlo un poco.

- También tu no lo escondes nada, ambos nos ponemos bobos.

- Hola Quilla - el comunicador de la nave interrumpe la conversación, es Joel.

- Joel, no queríamos molestar porque nos veríamos en 14 horas - responde Quilla muy cordial.

- Vimos que su radar estaba activo con el nuestro así que pensamos que eras tu - responde relajado - Vengan, estarán en unos minutos a la vista de la luna donde estamos.

- Enterados - contesta Quilla - Entraremos a su luna, ¿Tienen lugar para descender en la superficie al lado de su casa?

- Si, está entrando en tu navegador las coordenadas, me da gusto que vengas acompañada - menciona Joel alegre al decir eso último.

- Creo que se te quitará lo contento al saber quien es - dice entre risas Quilla.

- Ah, ya me imagino quien es, avisa antes.

- Bueno Joel, pediste discreción.