Toda Alfea esperaba en la zona de reuniones para ver la información que Farah estaba por dar, cada estudiante estaba ansioso, los nuevos y los antiguos, algunos porque conocían la noticia, otros porque esperaban con desesperación la fiesta que vendría después.

Farah caminó segura hasta detenerse frente a sus estudiantes y profesores, a su lado estaban Silva y Ben, dos amigos de juventud que había conseguido volver a tener a su lado, quiénes la habían recibido con los brazos abiertos y la habían ayudado a enviar a Rosalind a Fuente de Nubes junto con los brujos. Porque aunque hubiese nacido hada, Rosalind era la más malvada de todas las brujas.

—Buenos días estudiantes de Alfea. —Se colocó frente al micrófono. —Estamos reunidos hoy aquí, para celebrar, para celebrar cada victoria ocurrida en el último año escolar, para rendir tributo a esos que hoy no están con nosotros, esos que se perdieron en el camino. —Tras ella se alzaron fotos de los tres estudiantes fallecidos en el enfrentamiento con Valtor, Flora había hecho de todo para traerlos de vuelta, pero hasta el hada de la vida tiene límites. —Fue un año duro, triste, pero de él aprendimos muchas cosas. —Miró hacia los rostros ocultos en el pasillo. —En la unión está la fuerza... Alfea es hoy fuente importante de magia y conocimientos, y estoy bastante segura que no serán los últimos ataques, pero estoy segura de que no estamos solos, ni desprotegidos contamos con una fuerza increíble,  la nuestra, la de cada estudiante... Además tenemos a nuestras guardianes, hadas y especialistas que han luchado sin descanso este año por el bien de nuestra escuela, estudiantes que no solo lucharon en Alfea, también lo hicieron en Linphea y en cada lugar víctima de los brujos, ellos explotaron al máximo su potencial y a ellos hoy les agradecemos nuestra victoria. —Farah suspiró. —Qué pase el Winx Club

La escuela rompió en aplausos cuando comenzaron a pasar uno a uno los mencionados.

Primero pasaron los especialistas, luciendo sus mejores trajes de combate y sus armas identificativas.

—Riven. —El mencionado hizo una reverencia. —Jason. —Giñó un ojo. —Sky.Brandon. —Ambos estaban demasiado distraídos riendo entre ellos como para prestar atención, una fuerte amistad estaba naciendo entre los dos, una que sin dudas se volvería de acero. — Timmy. —El rubio acomodó sus espejuelos y se sonrojó, ese tipo de actos no era lo de él. —Y Helia. —El cabello del chico estaba más crecido y le daba un look hippie que traía suspirando a más de la mitad de la escuela, cosa que a Flora no le hacía nada de gracia.

Silva se adelantó con siete estrellas doradas.

—Estos estudiantes lucharon con valor y aunque algunas veces sus principios se vieron difusos. —Miró directamente a Riven. —Supieron encontrar el camino correcto, a ellos hoy le entregamos las estrellas de fidelidad, la más alta condecoración de los especialistas.

—Qué pasen quienes buscaron en lo más hondo de su ser, incluso acariciando la posibilidad de perder su magia para siempre, pero aún así lucharon por conseguir sus objetivos. —Ben miró al grupo de hadas que se encontraban transformadas y le hizo una señal para que pasaran.

—Aisha. —La mencionada entró dentro de ovaciones. —Hada del agua, fiel a sus principios,así como fiel a su amistad, aprendió que romper las reglas está bien, siempre que sea por una buena causa.

Por alguna razón la mirada de la mencionada de concentró en un chico nuevo, Nabu, si mal no recordaba, una hada del viento, que era extremadamente atractivo.

—Musa, hada de la mente que encontró valor y fortaleza para enfrentar lo que sea.

Musa sonrió, pero por alguna extraña razón sus mejillas se sonrojaron cuando Riven le guiñó un ojo, algo había pasado entre ellos, pero por ahora sería un secreto.

—Tecna, única hada que cambió su elemento, que supo combinar quien era con quien se convirtió, sus poderes son absolutamente únicos. —Farah miró a una Tecna con el pelo absolutamente teñido de un rosado fresa. —Es el hada de la Tecnología.

Fue ella quien se acercó para estamparle un beso en los labios a Timmy

—Stella. —La princesa de Solaria apareció usando su propia magia para hacer fuegos artificiales a su alrededor. —Luchó por su pueblo cono toda digna princesa, demostrando que muchos se equivocaron al pensar que era una simple niña mimada, cuando será posiblemente la mejor Reina que alguna vez tendrá Solaria.

—Flora. —El hada de la vida salió con una gigantesca sonrisa en los labios, sonrisa que automáticamente imitó Helia. —Hada de la vida, alguien que supo mantener su rumbo, mantenerse pura, que lo dio todo por cumplir su misión, símbolo de fidelidad y amor por el bien.

—Bloom—La pelirroja apreció con la vista clavada en el publico. —Descendiente directa de Dominio, sangre real corre por sus venas, fiel a si misma y curiosa por seguir descubriendo los misterios de su existencia y ancentral magia. Dueña de la llama del dragón

Las Winx se colocaron cada una junto a su especialista, los dedos de Flora se entrelazaron junto con los de Helia y suspiró alividad, allí junto a sus amigos y novio, se sentía simplemente invencir, sentía que a su lado el camino sería mucho más fácil.

—Te amo. —Susurró Helia dejando una rosa en su mano.

—Te amo. —Flora le guiñó un ojo.

  Fuegos artificiales brillaban sobre sus cabezas, sonrisas fueron pintadas en su rostro, mientras que los estudiantes no dejaban de aplaudir,  de celebrar.

—Con ustedes los defensores de Alfea, el Winx Club.