Región de Yamagata, Japón.

Febrero de 2013

La criatura creada a partir de los cuerpos de los dos agentes se movía lentamente, como si no estuviera acostumbrada a usar cuatro patas en lugar de dos. Se veía diferente de otros infectados que Mike presenció anteriormente: su piel aún era bastante suave, solo varios capullos y hojas cubrían su cuello y cabeza. La mayor parte de la ropa aún no se había derretido y trozos de tela colgaban de su cuerpo. El monstruo aulló de nuevo y alcanzó la mano que antes pertenecía a Thomas hacia a Mike y a Jin. Las uñas de la mano ahora eran más largas, más como garras con tierra debajo.

Jin disparó primero; la bala dio directamente al cráneo de Kelly. La cabeza femenina ni siquiera se movió, pero la boca de Thomas se abrió, dejando escapar un grito horrible. Para sorpresa de Mike, pudo distinguir varias palabras.

"¡No... la lastimes!"

Parecía que el monstruo todavía tenía parte de los sentimientos de Thomas hacia Kelly dentro. ¿Thomas siquiera entendió que él y su novia estaban muertos? Mike creía que no lo había hecho.

El monstruo mutó justo frente a sus ojos; cada herida de bala se convirtió en un nuevo capullo hinchado. Al menos era lento, por lo que Mike y Jin usaron su punto débil contra él, disparándole desde dos lados y sin problemas para esquivar sus fuertes ataques. Finalmente, la criatura se derrumbó en el suelo debido a los disparos; la boca de Kelly hizo un sonido lastimero, como si ya no pudiera respirar y se estuviera asfixiando.

¿Fue todo? ¿Se acabó para los dos agentes desafortunados?

Mike se acercó lentamente a la criatura que se retorcía, escuchando los gruñidos de Thomas y los gemidos de Kelly. ¿Estaba muriendo? Jin colocó una mano en su hombro y empujó a Mike hacia atrás lejos del monstruo, que de repente se había levantado sobre sus seis patas. Nada infectado con el Compuesto X muere tan fácilmente. Los capullos del cuerpo de la criatura se abrieron y florecieron, liberando un extraño líquido verde y esporas rojas similares a las del árbol. Todo el cuerpo se hizo más grande y más masudo. El monstruo volvió a gruñir y saltó directamente sobre Mike, quien no esperaba tanta velocidad y agilidad de él y no reaccionó a tiempo. El monstruo doblado era pesado, casi aplastando el tórax del agente. Pero antes de que pudiera atacar, Jin lo salvó de nuevo, apuntando su rifle directamente al ojo de Kelly. El monstruo aulló una vez más y Thomas maldijo en voz alta, suplicando que dejara en paz a su novia. Infectado o no, todavía quería proteger a Kelly. Sería conmovedor si la criatura no intentara matar a Mike y su aliada.

Mike rodó por debajo de la criatura y le disparó varias veces a la cabeza. Por el rabillo del ojo vio que Jin bajaba el arma y desaparecía entre los setos. ¿Adónde diablos iba? El no creía que ella lo dejaría solo después de salvarle la vida varias veces, más aún, el tenía la tarjeta que necesitaba la espía. Pero, probablemente Jin Park tuvo una idea de cómo detener a la criatura que solía ser Thomas y Kelly de una vez por todas. Mike no necesitaba que ella hablara con él para entender su papel en este acto. Tenía que mantener ocupado al monstruo hasta que la mujer regresara para salvarlo una vez más.

O al menos, Mike esperaba haber entendido correctamente a su amiga espía y tendría la fortuna de que ella no iba a recoger la tarjeta de su cadáver después de que el monstruo terminara con él.

Por favor, no hagas que me arrepienta de confiar en ti, Jin. No me falles.

La criatura giró la cabeza en la dirección en la que desapareció la espía y saltó, decidiendo claramente que prefería al objetivo en movimiento.

Rápidamente, Michael volvió a dispararle a la cabeza a Kelly, ya que el monstruo había dejado en claro que esa parte era la que más le molestaba. Funcionó. La criatura se volvió hacia Shepherd y gruñó. Volvió a saltar, esta vez apuntando al agente de la CIA, y Michael tuvo que rodar de nuevo para evitar que lo aplastara. Intentó disparar de nuevo, pero su pistola hizo un chasquido. Ya no tenia balas.

Comenzó a correr en la dirección opuesta a donde había ido Jin, escuchando a la criatura persiguiéndolo y rompiendo arbustos en su camino. Era difícil correr con una máscara antigás y un traje de materiales peligrosos; Mike podía sentir que su piel se humedecía de sudor. En cierto modo fue como en los viejos tiempos cuando entrenaba para convertirse en agente. Una de las pruebas era correr por un estadio con una máscara antigás, así que no era como si nunca antes lo hubiera hecho. La única diferencia es que nadie trataba de matarlo en ese entonces y no había niebla roja que nublara su visión.

¡Vamos, Jin! ¿Dónde carajo estás?

Justo cuando la criatura casi lo aplastaba de nuevo, Mike notó una figura familiar que aparecía entre los arbustos. La espía agitó la mano y Mike se movió en su dirección, con la criatura detrás. En el último segundo, Michael notó una enorme mancha negra en la hierba y saltó sobre ella. En el momento en que la criatura llegó al lugar, Jin arrojó una granada incendiaria allí. ¡Así que esa fue su idea! Funcionó.

La criatura aulló, perdió interés en el americano y comenzó a dar vueltas sobre sí misma, tratando de evitar que el fuego lamiera su cuerpo. Sin suerte, su piel cubierta de brotes y hojas comenzó a volverse gris, luego negra. Un minuto después, el monstruo se derrumbó en el suelo. Esta vez definitivamente estaba muerto.

Solo para confirmar, Mike se le volvió a acercar y les dio dos tiros exactos en ambas cabezas.

Lo siento, chicos. No se merecían esto. Ojalá trajera un lanzallamas...

Jin se volteo hacia Mike y señaló con la cabeza hacia la puerta con el símbolo de la rosa. El asintió. En ese momento (más que nada en el mundo) Michael quería quitarse el traje caliente y respirar al menos un sorbo de aire fresco.

Volvió a mirar al cuerpo monstruoso de sus colegas muertos.

Que descanse en paz. Al menos ya no sufren.

***

Esta vez, Jin lo llevó al sótano. Mike no había estado ahí todavía, fue Kelly quien tuvo que revisar esa área. ¿Se había perdido de algo cuando buscó pistas? Probablemente sí, ya que ella no sabía que buscar. Jin, por otro lado, sabía qué hacer. Abrió la única puerta en el sótano y se detuvo, mirando alrededor de la habitación. Nada extraordinario. Algunas sillas viejas cubiertas de polvo con tapicería sucia. Un piano con una pata rota y teclas faltantes. Una enorme estantería sin libros. Parecía que Kanjero guardó todos los muebles viejos en este lugar. ¿Cómo podría ser útil para ellos?

Michael miró a Jin Park.

-¿Qué sigue?

-Ayúdame a ver si hay algún dispositivo eléctrico.

-¿Qué?

-No sé. Algo para insertar tarjetas – concluyo Jin –

¿Así que ni Jin lo sabía todo? Bien. Ella era solo humana después de todo. Ahora necesitaban encontrar la pista de este misterio.

Mike se rascó la cicatriz de la mejilla. Notó que Jin comenzó a inspeccionar los muebles y decidió revisar las paredes en su lugar. La niebla roja no ayudó en nada a su visión. Finalmente notó algo; varias grietas en la superficie gris de la pared. Los dedos de Mike presionaron con más fuerza en el lugar y una fina capa de pintura se desprendió, abriendo una pequeña consola con un botón en ella. Eso era algo prometedor. Mike presionó el botón y escuchó un crujido detrás de él. La estantería se movió a un lado, revelando una puerta de acero con dos entradas de tarjetas a ambos lados.

Jin se acercó a él en silencio y le tendió la mano. Ahora necesitaba la tarjeta. ¿Debería volver a confiar en ella? ¿Y si esta vez iba a dejarlo solo?

Michael suspiró. Parecía que mostraba algún tipo de paranoia cuando se trataba de Jin Park. Él le entregó la tarjeta. Jin colocó ambos artículos en los agujeros de entrada y dio un paso atrás, dejando que la puerta se abriera. Mike esperaba que algo como el laboratorio de BGP estuviera oculto detrás, ya saben: paredes blancas estériles, equipo químico, incluso pudo haber un par de infectados con batas médicas. No. Este lugar se parecía más a una recepción.

Jin entró y él la siguió, dejando que la puerta se cerrara detrás de ellos. Era una habitación espaciosa con varios escritorios para computadora, estanterías con libros, un par de refrescos... y dos puertas. Una se abrió y condujo a un baño, la otra también estaba hecha de acero. ¿Ahora qué? ¿Cuántas puertas tenían que pasar antes de entrar al laboratorio?

Jin presionó otro botón cerca de la entrada y los ventiladores en el techo comenzaron a girar, eliminando todo rastro de esporas y polen de la habitación. Mike usó su verificador de aire para confirmar que era seguro quitarse la máscara. ¡Finalmente podía respirar normalmente! Podía sentir el flequillo mojado por el sudor pegado a su frente. La espía a su lado también se quitó la máscara y se apartó el cabello de los ojos. Mike notó que Jin no usaba maquillaje. Era una elección inteligente de su parte, ya que la máscara de gas probablemente lo arruinaría.

De todos modos, con maquillaje o sin el Jin era hermosa.

-Ya no necesitarás el traje de materiales peligrosos. Puedes quitártelo – dijo ella, quitándose el suyo. Llevaba un top rojo sencillo sin mangas y pantalones negros ajustados debajo. Mike no pudo evitar perder la vista en el área de su escote. Fue demasiado revelador –

Mientras se quitaba su propio traje de materiales peligrosos, Jin encendió una de las computadoras y comenzó a escribir algo en el teclado. Cuando Michael miró la pantalla, vio muchos números verdes. Parece que lo estaba hackeando. En una de las mesas notó balas. Bien. Las necesitaría pronto. No había nada más útil en la habitación.

Se sentó en el sofá más cercano a Jin, esperando pacientemente a que terminara su trabajo.

***

-Michael... echemos un vistazo a esto – Jin abrió una de las puertas del pasillo. Parecía un almacén; era un pequeño espacio con algunos estantes, una cubeta vacía en el suelo, una fregona, y... ¿una escopeta? A Mike siempre le sorprendió que a veces se pudieran encontrar armas en los lugares más absurdos.

-Bonita – Mike tomo la escopeta. Podría ser útil –

Jin no respondió. Mike se volteo hacia la puerta donde se suponía que su aliada lo estaría esperando, pero todo estaba vacío. Jin se había ido. Michael salió corriendo rápidamente de la habitación y la llamó por su nombre. El corredor también estaba vacío. Ni rastro de Jin Park. Michael maldijo.

Perfecto. Jodidamente perfecto. Ella desapareció de nuevo. Parecía que ella ya no lo necesitaba y ahora lo había dejado solo. La llamó por su nombre solo por si acaso, pero no hubo respuesta.

Mike suspiró y siguió caminando por el pasillo.

¿Por qué (literalmente) todo sobre esta mujer es tan complicado?