Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

23- Agua.

Aquel día... Stave estaba bastante cariñoso, solo faltaban algunos guardias para abandonar por completo tal oficio, por parte de Dream había sabido oficialmente que también las tropas de la frontera contraria estaban abandonando sus puestos, cada día habían más personas junto al movimiento, podría en tan solo semanas pisar el otro lado con libertad y lograr declararse mejor al rubio.

Ahora solo estaba preso entre sus brazos, debido a que se había sentado entre las raíces y el menor aprovechó de sentarse en su regazo y poner sus manos a cada lado de su cabeza, tenía toques de nerviosismo que le habían hecho preguntarse a qué se debía, y más cuando los días anteriores negaba tales muestras de afecto, nunca se esperaría que ahora Stave estaba besando su rostro.

— ¿A qué se debe esto? —Pudo decir en medio de su ensimismamiento, un poco deseoso de besarlo de vuelta y en los labios.

— Es... Mi agradecimiento. —Farfulló— Y un preparativo para... Decirte algo.

Sus palabras eran rápidas, cada vez que le depositaba un beso en su rostro, Outer al escuchar tales cosas pudo inferir que se estaba esforzando para complacerle, y tomó su cabeza entre sus dos manos para que se detuviera.

— Stave, no quiero de tus besos si así no quieres tú... Estás temblando.

El rubio aguantó la respiración un momento, todo su rostro estaba colorado, sonrió nerviosamente.

— Sí quiero, pero no soy bueno en... esto.

— ¿En besar?

— Sí, pero... Me refiero a... —Rió bajo— Despedidas.

Outer dejó de acariciar con sus pulgares sus mejillas, asustando al menor quien rápidamente separó su torso del contrario haciendo ademán de separarse.

— ¡N-No es para siempre...! Solo es que... no creo regresar como al Stave que tú conoces. —Cerró sus ojos— ¿Has notado como cada vez he dejado de ser... tan misterioso? O... Tocado... Me has vuelto más humano, y-yo creí que era un ánima y que... si habría paz podría descansar también en paz, pero ese no era del todo mi deseo... Era despertar.

Cada palabra salía nuevamente con más lágrimas, el peliazul apenas podía entender, estaba procesando todo cuando unas gotas cayeron a su rostro, alzó la mirada y notó que las ramas también soltaban lo que parecía ser... lágrimas, solo que sin un gusto salado, no sabía si asustarse, no sabía qué decir.

— ¿Quién eres... Stave?

— Un elegido... Solo un enviado para recuperar lo perdido... E-Este árbol necesitaba alguien que... le ayudara... Si la guerra seguía, iba a morir, y como estoy atado a él... también lo haría y-yo.

— Stave...

— No creas que te usé todo el tiempo. —Bajó la mirada, ya no caían lágrimas de sus ojos, sino del árbol— Sigo siendo alguien que creía estar muerto, s-simplemente me enamoré de ti... Yo ya me hubiera ido por lograr la misión al ser un enviado de este árbol, pero algo más me ha atado acá... Y eres tú. —Tuvo que detenerse un poco, pues parecía que los sollozos atacarían su garganta— Aquel beso... Solo ha cumplido con todos los deseos que me han dejado acá como... un espíritu táctil, no sé qué va a pasar conmigo, pero... dudo regresar mañana... ¿Me puedes encontrar?

Outer tragó saliva, no se creía que estaba viviendo algo más allá de la realidad, había estado junto a un espíritu que en un principio solo quería la paz preservar, y ahora gustaba de él, parecía sacado de un mito, más cuando se trataba de un árbol que si estaba vivo, podía unir piezas pero... La idea de que el rubio le abandonara solo hacía más difícil aceptar tal realidad.

— No quiero que te vayas.

—... Ni yo. Pero solo mantiene mis palabras que dije... No puedo decirte directamente quien soy... Quizás de Dream...

—... Stave, me gustas mucho... Si desapareces... No creo tener paz.

Las gotas dejaron de caer, y Stave alzó la mirada hasta él, ante tantos sentimientos encontrados, solo pudo sonreír, ya sabía qué significaba.

— No puedo despertar si no encuentro paz.

Palabras tan fluidas le hizo suponer que tal frase no provenía totalmente de Stave, esos mensajes eran del mismo sentimiento del árbol transmitidas en la boca del menor, se estaba oscureciendo, no quería levantarse y despedirse hasta un futuro sin él, no sabía qué hacer.

En medio de su desesperación, respiró profundo, acercando con sus manos el rostro ajeno para poder darle un beso, uno que no era una presión, se trataba de uno que podía brindar sus sentimientos de amor, añoranza y ruego. Fue correspondido más un abrazo, pero no pudo sentir más cuando un brillo anaranjado lo cegó incluso con los ojos cerrados.

Cuando los pudo abrir, Stave ya no estaba junto a él.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro