Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

Capítulo 8


- ¿Eso a qué ha venido? - preguntó extrañada.

-Solo quería limpiarte, soy un caballero- dijo irónicamente.

-Los caballeros no secuestran damiselas en apuros.

-No creo que tú lo seas.

-Soy arquera, y en cuanto me libre de esto- dijo moviéndose entre las cuerdas- te rebanaré el cuello con una flecha.

-Tienes una gran imaginación, tú sigue soñando, que es gratis.

Una vez había bebido le dio un par de bayas para que se alimentase.

-Toma anda, come un poco, necesitas coger fuerzas- le metió una baya en la boca, pues ella no tenía manos, pero disconforme con que le tocase por segunda vez los labios giró el rostro- oh, vamos, no seas una cría. Come ahora, porque después no pararemos.

Negó con la cabeza, moviéndola a los lados.

- ¿No quieres? - no contestó- bien.

Cogió su barbilla y la obligó a abrir la boca para luego hacerla comer a la fuerza.

Cuando tenía su dedo dentro de la boca lo mordió por cuarta vez y en esta ocasión, sin paciencia, desistió.

-Si no quieres comer luego no vengas diciendo que soy el malo, te he dado a elegir.

Volvió a llenar la cantimplora y a beber él, dejándola sola para recoger todas las bayas posibles.

De nuevo iban a caballo, esta vez cabalgado, parecía que tenía prisa, tal vez huía de algo, pensaba ella.

-Por cierto- dijo Kate una vez más atada al pecho de su no tan desconocido secuestrador. - Bonitos guantes de cuero.

Él, por un segundo, dejó de respirar, pero se recompuso y contestó.

-Gracias- soltó con naturalidad, haciendo como si nada.

-De hecho, se me hacen conocidos- siguió queriendo que el muy cretino confesara.

-Son muy famosos, seguro que los has visto alguna vez.

-En realidad, se los he visto a alguien en concreto.

-Que bien por él.

-Sí, muy bien- sonrió orgullosa al sentir su agitación en su pecho, su pulso se estaba acelerando- menuda coincidencia- metía cada vez más cizaña- y qué raro que supieras que era un hombre y no una mujer- ahí empezó a temblar.

-Una dama no usa guantes de caballero.

-He dicho una mujer, no una dama, igualmente, solo me parecía curioso que mi secuestrador tuviese los mismos guantes que tenía mi guardaespaldas- ahí su pecho se congelo, dejando de respirar momentáneamente.

-Sí, es bastante curioso.

No insistió más en el tema por lo que quedó disuelto.


Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro