— Recuerdo que nunca lo mencionamos, solo era como si ambas supiéramos que había algo más ahí, éramos niñas — susurró Mina apretando las manos de Chaeyoung entre las suyas — hoy que vuelvo a ti, he traído algo conmigo

— Sigo sin entender de que hablas — Dijo Cuando tentada a abrir los ojos, luego recordó que era inútil y el impulso pasó — Estoy realmente confundida

— Encontré un doctor en Japón — dijo Mina, Chaeyoung sentía que había un tono risueño en su voz — él ha operado a muchas personas que nacieron ciegas, es capaz de devolverte la vista

— ¿Te fuiste a Japón? — preguntó Chaeyoung consternada ante la declaración — ¿Hace cuanto?

— Solo fui a investigar sobre la cirugía, he tratado de contactar contigo este tiempo, pero tu madre no me ha dejado y Nayeon me tiene miedo — respondió suspirando — una vez la vi, y ella corrió de mi como si fuera el diablo

— Creo que tiene miedo desde que la veas feo

— ¿Y tu como sabes eso?

— Ella me lo dijo, ¿no es obvio? — preguntó Chaeyoung — soy ciega ¿Cómo iba a verte?

— Ahora que te veo, estás más alta — Dijo Mina tocando la cabeza de Chaeyoung — estas más delgada que yo, y tu cabello es largo

— He crecido, Amarillo también creció — dijo recordando a su perro — es un buen chico

— ¿Podrías abrir lo ojos? — preguntó Mina, haciendo caso, Chaeyoung los abrió — siguen igual de hermosos como los recuerdo