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capítulo diecisiete:
un plan fallido

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El viaje para Brianna fue lo que se podía definir como agobiante, no solo por la situación que estaban viviendo, sino también por Jasper que no había formulado una sola palabra en todo el viaje y por lo tenso que estaba ante la cercanía de Bella. Brianna sabía que estaba aguantando el no lanzársele encima y drenar su sangre, incluso había estado aguantando la respiración en todo el viaje para controlar más sus ansias; por esto mismo la Rossier todo el trayecto pegada lo mayor posible al vampiro, con la cabeza apoyada en su hombro y sus manos entrelazadas con la zurda ajena mientras impartía caricias con uno de sus pulgares.

Estaba preocupada, no por lo que podría hacerle a Bella, pues confiaba en él y sabía que no sería capaz, sino por lo que Jasper podría estar sintiendo en esos momentos, aunque el que el vampiro correspondiera de vez en cuando a sus caricias y a veces apretara levemente su mano le generaba cierta tranquilidad, pues comprendía que al hacer eso quería darle a entender que se encontraba bien.

Además, estaba la angustia e incomodidad que emanaba de los poros de Bella. Por eso, fue un alivio para Brianna cuando finalmente llegaron al hotel en el que se alojarían en lo que Edward, Emmett y Rosalie despistaban a James para alejarlo del lugar donde ellos se encontraban y no pudiese hacerle daño a Bella, pero aquel sentimiento se esfumó así como llegó pues el vampiro descubrió el plan que la familia llevaba y cambió de dirección, según la visión que estaba teniendo Alice -la cual les iba informando- hacia una habitación llena de espejos, que resultó siendo un estudio de Ballet cuando la Swan relacionó el dibujo en la que la chica Cullen plasmaba la imagen con el estudio en el que tomaba clases de niña.

─ ¿Estaba la academia aquí en Phoenix? ─cuestionó Jasper, manteniéndose cerca a sus hermanos con su compañera a un lado suyo.

─ Sí.

Ante su respuesta los tres vampiros y la otra humana compartieron una mirada al comprender lo que aquello significaba, una que la Swan no llegó a ver al momento de alejarse cuando su celular le indicó una llamada entrante de su pareja.

Estaban en problemas.

El nuevo plan consistía en esperar a que Edward llegara y se llevara a Bella con él mientras que el resto de su familia volvía a Forks junto con Brianna, los primeros para darle caza al cazador. Irónico, ¿no?

Alice y Aaron habían terminado de recoger sus cosas y se dirigían a la salida de la habitación que habían escogido para esperar al resto en el lobby. Jasper y Brianna también habían terminado -gracias al primero y la velocidad que el ser vampiro le otorgaba- y se dirigían también a la salida cuando la humana notó que la castaña seguía en la habitación empacando, por lo que detuvo su andar llamando la atención del Hale.

─ Adelántate. Yo esperaré a Bella.

─ ¿Estás segura? ─formuló Jasper, enviándole una mirada que demostraba duda sobre irse sin ella.

─ Sí. Tranquilo, no me sucederá nada. Me volverás a ver en unos minutos ─aseguró, pegándose a su cuerpo y rodeando su cintura con sus brazos mientras depositaba un beso sobre la franela de la camisa que cubría su pecho pudiendo sentir cómo correspondía a su abrazo y posteriormente relajarse cuando alzó su mirada hacia él con aquella sonrisa que la chica siempre colocaba cuando iba a hacer una broma─. Además, no te será tan fácil deshacerte de mi, me tendrás contigo un buen tiempo.

─ Será entonces bastante, pues nunca podría ser capaz de alejarte de mi lado ─sonrió, aprovechando la posición de su cabeza para depositar un beso en sus labios que la rubia gustosa aceptó antes de separarse y que el mayor siguiese el camino de sus hermano.

Brianna por su parte se acercó a la habitación en la que Bella se encontraba viéndose incluso más angustiada que cuando estaban en el auto, llegando a afectarle de manera que se le dificultaba el doblar su ropa para guardarla en la maleta. Al verla en tal estado la rubia se colocó a su lado y la tomó de las manos enviándole una sonrisa reconfortante, para posteriormente quitarle la prenda de las manos indicándole que ella se encargaría y obligándola a sentarse en la cama.

─ Tranquila, estoy segura que todo estará bien. Estarás a salvo.

─ No me preocupo por mi ─dijo, obteniendo una mirada de su amiga indicando que prosiguiera─. Estoy preocupada por Edward, no quiero que por mi culpa le suceda algo.

─ No va a sucederle nada ─aseguró─. Edward es fuerte, y va a estar acompañado del resto que lo respaldarán si tiene que enfrentarse a James.

─ ¿Y si estás equivocada? ¿Y si lo lastima? No se qué haría si le llegara a suceder algo.

Un suspiro escapó de la Rossier, preparándole para darle un discurso sobre porqué debería tranquilizarse y confiar más en Edward y su familia, pero el sonido que salía del celular de Bella la cortó junto cuando cerró la maleta y se daba la vuelta para hablar. Era una llamada de parte de su mamá, la cual no dudó en contestar, la mujer parecía angustiada y el tono en el que hablaba era tan alto que incluso Brianna podía escucharlo desde el lugar donde se encontraba, no parecía ser un problema que Bella no pudiese manejar hasta que vio la mirada de pánico en el rostro de su amiga, la cual a alzar la mirada y encontrarse con el rostro confundido de la rubia movió sus labios sin emitir sonido formulando un nombre: James. Al segundo siguiente tenía el teléfono en altavoz ante las señas que la Rossier le hizo, permitiéndole escuchar lo que el vampiro fuese a decir.

─ Tienes una casa muy linda. Iba a esperarte, pero tu mamá regresó luego de recibir una llamada de tu papá. Todo resultó perfectamente bien.

─ ¡No la toques!

─ Aún puedes verla ─continuó, sin prestar atención a los pedidos de la Swan─. Pero tendrás que alejarte de tus amigos. ¿Puedes hacerlo?

Por un momento ambas amigas cruzaron miradas, la rubia moviendo su cabeza de lado a lado para que a Bella ni se le ocurriera aceptar aquel trato, pero esta hizo caso omiso de ella para responder al vampiro.

─ ¿Dónde nos encontramos?

Y Brianna quiso golpearse la frente pero se contuvo para no delatar su presencia, en el caso que que James no hubiese reparado ya en ella.

─ ¿Qué tal tu antiguo estudio de ballet? Y sabré si trajiste a alguien contigo, tu pobre mamá pagaría por ese error.

Cuando la llamada finalizó ambas chicas se miraron luego de que la rubia suspirara para expulsar el aire que ni sabía había estado reteniendo, la castaña adelantándose a hablar al saber lo que la otra iba a decirle nada más ver el ceño fruncido y la preocupación marcada en su expresión.

─ Tengo que ir.

─ Bella, por lo menos deja que hagamos un plan ─exigía Brianna, siguiendo a Bella por toda la habitación mientras recogía algunas cosas que necesitaría─. No puedes ingresar a la boca del lobo de esa manera, hay que ver las distintas opciones que hay. Podemos decirle a los chicos y...

─ ¡No podemos! James le hará daño a mi mamá si se entera que les dije algo.

─ Pero Bella, es peligroso, no puedes...

─ Brie ─cortó, dándose la vuelta para encarar a su amiga aunque su expresión delataba su angustia y la súplica de un pedido─. Es mi mamá, tengo que salvarla. Si eres realmente mi amiga, me dejarás ir.

Un nuevo suspiro escapó de Brianna, ya ni llevaba la cuenta de la cantidad de suspiros que salieron de ella desde que abandonaron Forks.

─ Soy tu amiga ─inició, observando cómo una pequeña sonrisa esperanzada comenzaba a formarse en el rostro de Bella ante el pensamiento de que podía ir al estudio de ballet y rescatar a su mamá, pero el sentimiento se vio opacado al escuchar lo siguiente─. Así que iré contigo, y lo haremos a mi modo.

─ Pero...

─ Es eso o te amarro a la sofá para no puedas escapar y llamo a los Cullen. Tú decides ─ante la mirada amenazante que la mayor le estaba dando a Bella le tocó aceptar, así que ahora eran ambas las que se dirigían al estudio luego de armar un pequeño plan que podría salvarlas. O más bien que Brianna lo creara.

Brianna no podía extinguir la culpa que se instaló en ella desde que abandonaron el hotel luego de haber visto a Jasper junto a Alice y Aaron en el lobby hablando mientras esperaban su turno en para devolver la llave de la habitación y pagar lo que se debía. Por su mente solo podía pasar la promesa que minutos antes le había hecho y que ahora estaba rompiendo, podía imaginarse su desesperación y angustia cuando volviera a la habitación para buscarla ante su demora y darse cuenta que no se encontraba así, se le oprimía el corazón nada más pensar en eso. Pero no se arrepentía, Bella era su amiga y no iba a permitirle ir sola sabiendo lo que sucedería y luego tener que cargar con el sentimiento de culpa por ello. Por lo menos ahora que ella también va hay más posibilidades de salir vidas de ahí; heridas muy seguramente, pero vivas al fin y al cabo, que es lo que importa.

Al bajar del taxi luego de que Bella pagara por el viaje el par se detuvo un instante frente a la puerta de entrada del estudio para compartir una mirada y un asentimiento para dar inicio a su plan. De su bolsillo Brianna sacó su celular y lo desbloqueó permitiéndoles observar el mensaje que había escrito cuando iban en el taxi con destino al celular de Jasper, en el que se leía: "Estudio de ballet. Ya.", para posteriormente presionar "enviar". En el momento que bloqueó nuevamente su celular y lo regresó a interior de su bolsillo volvió a observar a la castaña dándose entre ambas una última mirada antes de que esta ingresara dando inicio a la parte dos del plan.

Esperó unos minutos afuera de la edificación apretando el fierro que habían conseguido anteriormente entre sus manos preparándose para entrar. El plan era que Bella distrajera a James lo suficiente para que Brianna se acercara y lo golpeara si veía que iba a atacar a la castaña y conseguir un poco más de tiempo para que los Cullen llegaran y acabaran con el cazador, un plan riesgoso pero el único que había que no involucrara a la mamá de Bella herida.

Cuando fue momento de Brianna ingresar, se introdujo por la entrada pudiendo presenciar al instante a James y Bella al fondo de la habitación, el primero dando la espalda a la entrada lo que le facilitaba movilizarse de bloque a bloque sin que el la notara. Por suerte por su olor no la iba a descubrir, pues el olor de Bella era tan fuerte y el suyo tan débil que fácilmente podía camuflarse, así que todo consistía en que la Swan lo distrajera lo suficiente y que la Rossier no hiciese ruido para que el vampiro no descubriera su presencia.

─ ¡Edward no tiene nada que ver con esto! ─gritó Bella, siendo empujada por el rubio para que volviera a su sitio cuando en un impulso se había inclinado hacia adelante, lo que James no sabía es que aquello también hacía parte de la distracción y que ayudó mucho a Brianna, quién ya se encontraba cerca del par esperando el momento adecuado para actuar.

─ Al contrario. Su furia hará de esto algo mucho más interesante que su débil intento de protegerte ─el vampiro se alejó un poco de la castaña, lo que le permitió observar la rápida mirada que esta le dirigió indicándole que era el momento, así que a paso silencioso pero apresurado se acercó a donde el par se encontraba por detrás del cazador apretando todo lo que podía el fierro hasta que sus nudillos se colocaron blancos─. Continuemos.

Nada más terminó de hablar fue que se dio cuenta la mirada que la Swan dirigía sobre su hombro, pero cuando fue a voltear sintió algo sólido y fuerte estrellarse con su cabeza desde su costado derecho. Brianna había empleado toda su fuerza en ese golpe y por un instante sintió una chispa de satisfacción cuando el ataque se llevó a cabo, pero así como las chispas que rápidamente se apagan, el sentimiento no duró mucho cuando alejó el fierro de la cabeza del vampiro que casi ni se había movido por el golpe y lo acercó a ella notando el ángulo de sesenta grados que este había adquirido, para luego alzar su mirada hacia el cazador que comenzaba a darse la vuelta hacia ella con una expresión que reflejaba enojo mientras la observaba.

─ Oh... Rayos. ¡Bella, corre! ─nada más alcanzó a gritar eso a su amiga sin poder dar un paso para alejarse ella también cuando sintió un golpe en uno se sus costados que la lanzó a varios metros de distancia y luego otro más fuerte cuando se sintió chocar contra el suelo, lo último que pudo escuchar con claridad fue a Bella gritando su nombre.

Lo que sucedió a continuación no fue muy claro para ella, pues cierto dolor en su cabeza le impedía prestar atención a su alrededor y moverse, incluso pensar era doloroso, pero pudo lograr darse imaginar que debió golpearse la cabeza y no le sorprendería que estuviese sangrando.

Pudo escuchar gritos y vidrios romperse a su alrededor, luego, en medio de su nublada vista pudo ver a más personas llegar, supo que eran los Cullen y que efectivamente Jasper había recibido su mensaje, y fue ahí cuento lo vio nada más él se acercó a ella de forma veloz al verla tirada a unos metros de la Swan, de la cual ya Carlisle, Edward y Alice se estaban encargando.

Lo sintió recorrerla con la mirada buscando más daños en ella y posteriormente cómo le tomaba la cabeza provocando que un quejido saliera de ella, lo escuchó hablarle y gritar a Carlisle para notificarle que ella también se encontraba herida, pero estaba lo suficiente dolorida como para pensar en responderle, también pudo notar una fogata y cómo lanzaban pedazos de algo que apenas tocaban el fuego comenzaba a calcinarse. Pudo escucharlo pedirle desesperadamente que no cerrara los ojos, pero le era inevitable hacerlo cuando se sentía tan cansada y tenía tantos deseos de evadir el dolor de su cabeza martillándole con fuerza.

Lo último que pudo observar fue a más personas acercándose a donde se encontraba antes de perder toda consciencia en los brazos de Jasper.

¡Nos queda solo uno!Un solo capítulo para finalizar el primer acto y pasamos al segundo. Se va a prender esto... Posiblemente.

¿Quién está preparado?