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capítulo siete:
¿es una cita?

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Todos se encontraban en el estacionamiento del instituto esperando las indicaciones del profesor para poder subir a los autobuses, mientras este se encargaba de recoger los permisos de salida de los estudiantes.

─ ¿Tú no es que te mudaste sola a Forks? ¿Cómo conseguiste la firma? ─una curiosa Bella se dirigió hacia su amiga rubia. Esta había podido entregar su permiso permitiéndosele asistir a la salida junto a los demás, sin embargo se suponía que el papel debía ser firmado por el tutor.

─ Querida Bella... ─empezó apoyando su brazo en el hombro de la castaña mirándola socarrona─. Muchos años en los que he tenido que pasar por esto mismo, imitar la firma de mi madre es mi pericia.

Su amiga no pudo evitar reír a la vez que negaba, debió de habérselo esperado desde el inicio.

En ese momento ninguna lo pudo evitar, simplemente la atención de ambas se focalizó en los cuatro Cullens que habían llegado. La diferencia entre Bella y Brianna, es que esta segunda no parecía una misma stalker mientras los observaba, en cambio los saludó desde su lugar recibiendo respuesta de la familia. Pero cuando quiso hacer contacto visual con Jasper, una cara conocida se atravesó justo frente al par de chicas.

─ Son ustedes, ¿eh? ─un sonriente Mike llamó la atención las amigas, consiguiendo pequeñas risas de ambas─. Están vivas.

─ Sí, lo sé. Falsa alarma ─contestó Bella.

─ O tal vez no lo fue y sí morimos. Tal vez seamos fantasmas al acecho y vinimos para que te nos unas con nuestro amigos fantasmas del estacionamiento ─terminó con voz macabra a la par de gestos que hicieron reír a ambos.

─ Si es una fiesta tal vez acepte que me lleven a más allá con ustedes ─bromeó Mike antes de dirigir toda su atención a la castaña del trío─. Te quería preguntar si... Digo, falta como un mes... ─Brianna viendo que el chico comenzaba a colocarse tímido y sin saber qué decir, se apoyó en el auto de su amiga con los brazos cruzados sonriendo burlona, más por el hecho de que Bella no estaba prestando atención a lo que estaba diciendo─. ¿Quieres ir al baile... conmigo?

Al ver que esta no contestaba volvió a cuestionar captando así la atención de esta que se había desviado anteriormente por ver a cierto chico Cullen a metros suyo─. Así que, ¿qué dices?

─ ¿Sobre qué? ─y ese fue el momento en el que la risa salió de una divertida Rossier, ganándose un pequeño golpe por parte de la Swan, pero ni funcionó, porque siguió riendo intentando ser disimulada mientras observaba otro punto en el estacionamiento escuchando como luego de Mike repetir la pregunta, una Bella incómoda comenzó a excusarse diciendo algo sobre que iba a viajar a Jacksonville el día del baile.

Al final el chico tuvo que abstenerse a ello y viéndose más positivo volteó a ver ahora a la chica risueña a un lado─. ¿Y tú, Brianna? ¿Qué dices?

Ahora era Bella la que comenzaba a reír de forma disimulada viendo la cara de espanto de la rubia la cual se recompuso al instante.

─ Emm... ¿Yo? ─se señalo a sí misma consiguiendo una afirmación por un esperanzado Newton. Pobre, pensó antes de colocar una sonrisa algo incómoda para proceder a dar la excusa que ya varios alumnos de la preparatoria conocían─. Lo siento. Ese día mi mamá viene y planeamos pasarla juntas.

─ ¿Y no puede venir otro día? ─cuestionó aún con un deje de esperanza. Ok, un poco de orgullo, amigo, pareces urgido.

─ Lo siento. Es mi mamita y el plan ya estaba hecho ─hizo una mueca afirmando con decisión para que ya el chico dejar de insistir.

─ Dile a Jessica ─salvada por la campana. O más bien Bella, que había intervenido cuando Newton iba a volver a abrir la boca─. Se que quiere ir contigo.

Por lo menos Mike pareció un poco convencido, por lo que sonrió con un deje de decepción y caminó hacia uno de los buses cuando el profesor comenzó a llama a todos para que se adentraran a estos.

─ Te quiero, pero te odio ─dirigió una mala mirada a la castaña la cual simplemente rio al entender por qué de lo segundo.

─ Oye, tú te burlaste primero ─dicho aquello ambas subieron a autobús para sentarse juntas, no sin que antes Brianna como toda casi adulta que era le sacara la lengua en reproche.

Brianna es una chica que le encanta a naturaleza, por eso mismo quedó fascinada cuando vio la gran variedad de plantas que había en el invernadero donde el profesor de biología los había llevado.

Caminaba a un lado de Bella siguiendo al resto de alumnos, alcanzando a ver mas delante de ellas a Alice y a Aaron y más cerca a Eric y Tyler, el cual era este último quien aceptaba una especie de té por parte del profesor alcanzando a observar antes de tomar otra dirección cómo este tomaba del líquido para posteriormente escupirlo. Briana no podía callar su risa.

─ Es cruel burlarse de los desafortunados ─murmuró alguien cerca de su oído haciendo que se sobresaltara un poco y su estruendosa risa cesara.

Al voltear pudo encontrarse con aquel rubio de porte elegante que desde el primer instante llamó su atención, correspondiendo a esa mirada burlesca que este llevaba consigo.

─ Puedo ser "cruel", pero por lo menos yo no fui la que consumió abono ─volteó a ver en dirección a donde su compañero se encontraba, ladeando un poco su cabeza en su rostro surcando una interrogante al notar algo en el moreno─. ¿Es imaginación mía o se está poniendo verde?

Jasper que se había notado curioso a lo que la chica observaba siguió su mirada encontrándose con sí... un Tyler con rostro un tanto enfermizo, no pudo evitar hacer una mueca al igual que Brianna al ver aquello.

─ Definitivamente está algo verde.

Ambos intercambiaron una mirada antes de comenzar a reír, para ambos aquello fue como cuando juntas varios instrumentos y una hermosa melodía salía de la unión de los sonidos, una unión perfecta. Ambos se quedaron viendo unos segundos más antes de que Brianna rompiera aquella conexión para dirigirse hacia unos girasoles que se encontraban a un costado, observando de vez en cuando al chico Hale, el cual seguía cada movimiento de ella, como el momento en que esta comenzó a acariciar los pétalos de la flor.

─ ¿Te gustan los girasoles? ─cuestionó al notar los embelesados ojos de la rubia por la flor de pétalos amarillos.

─ Me encantan ─el chico pudo notar como la nostalgia aparecía en la Rossier, sin perder aquella hermosa sonrisa de su rostro─. Mi papá siempre me comparaba con ellas, y con el sol. Decía que podía iluminar incluso la habitación más oscura, que tengo como una especie de energía que influye en la de los otros. Si me encuentro animada la energía en los demás sube, en el caso contrario decrece... O por lo menos era lo que a él y a mamá les sucedía ─una pequeña risa escapó de ella mientras llevaba una mano a su nuca.

» En realidad es algo tonto. Nunca entendí porqué lo decía, supongo que con los únicos que sucedía era con ellos. Ya sabes, por lo del cariño de padres a hijos... ─finalizó con algo de burla.

Jasper las observaba intensamente, no había caído en ello antes, pero ahora que escuchaba a la rubia que lo mantenía pensando en ella a toda hora, recordó todos los momentos que pasó a su lado o en los que su familia lo estuvo, dándose cuenta que había razón en las palabras del difunto padre de la chica. Todos cuando estaban cerca de ella se sentían bien, incluso Edward y sorprendentemente, Rosalie. Aunque el caso contrario aún no lo experimentaba y de cierta forma esperaba no hacerlo; de solo pensar que Brianna se encontrara en mal estado, le hacía sentir mal a él.

─ No es algo tonto.

Brianna lo observó perdiéndose en las lagunas color ámbar del chico. No supo cuánto estuvieron así, posiblemente minutos, o pudieron ser segundos, pero se sintió como si hubiesen pasado horas observando los ojos de los otros antes de que la de menor estatura sonriera siendo a correspondida por el más alto.

Jasper por su parte, cuando la fémina apartó un momento su mirada de él, aprovechó para arrancar uno de los girasoles y extenderlo a una un tanto sorprendida Rossier que comenzó a ver a sus costados esperando que nadie hubiese visto aquel acto, menos el profesor o se llevarían un regaño.

─ Con que infringiendo las reglas ─bromeó al confirmar que nadie los había observado, aceptando gustosa la flor y posteriormente llevarla a su nariz pala oler su exquisito aroma.

─ No se infringen si nadie se ha dado cuenta ─contestó de igual forma el joven junto con un guiño que consiguió una carcajada de la chica, aquella risa que a él tanto le gustaba.

Luego de ello tomaron dirección hacia la salida del invernadero, ambos en silencio, solo disfrutando de la compañía del otro mientras caminaban hacia los autobuses, todo el camino Brianna llevando la flor delante suyo, y Jasper con sus manos unidas detrás de su espalda y con porte recto.

Era algo curioso de ver, parecía todo un sargento o algo por el estilo. La chica no podía dejar de pensar en ello, entre otras cosas que había notado en Jasper, sin embargo, sus pensamientos fueron interrumpidos cuando el de ojos ámbar volvió a hablar.

─ Tienes hoy turno en el Carver, ¿o me equivoco?

Brianna hizo un sonido en señal de afirmación a la par que movía su cabeza de arriba a abajo esperando que prosiguiera con lo que quería decir. El Hale, al ver la pregunta no dicha en los ojos cafés de la chica continuó hablando, ahora sí llegando al punto de su pregunta.

─ Sería un placer para mi si me permitieras recogerte ─había detenido su caminar cuando estuvieron a un lado de los buses tomando lugar frente a la rubia para poder verla mejor─. Me gustaría llevarte a un lugar.

Brianna tuvo que morder su labio inferior para no soltar un chillido, pero no pudo evitar dar un pequeño salto levantando solo un poco sus tobillos ante la emoción al dar cuenta de lo que pretendía.

─ ¿Como ─dio un paso más cerca al contrario bajando un momento su mirada antes de volver a conectarla con los ámbares que tenía en frente─... una cita?

Jasper solo podía sonreír al notar la emoción de las más pequeña, más aún cuando movía su cuerpo de un lado a otro en su propio eje tal como una niña, algo que le pareció de lo más encantador.

─ Como una cita ─asintió hacia ella inclinando un poco su cuerpo antes de volver a su postura inicial.

La Rossier quedó unos segundos en silencio como si se estuviera pensando la respuesta mientras que su labio inferior era apresado por sus dientes, algo que no pasó desapercibido para Jasper, que enfocó su vista a ese punto, teniendo que apartarla cuando obtuvo su respuesta.

─ Me encantaría ─dicho aquello se inclinó teniendo que alzarse en puntillas al ser el rubio más alto, para posteriormente depositar un beso en la mejilla de este.

Cuando se separó ambos sonrieron en complicidad antes de que una personita, pequeña, cabello corto, y muy animada, hizo acto de presencia irrumpiendo el momento.

─ ¡Hola chicos! ─exclamaron detrás de la rubia, la cual tuvo que darse vuelta encontrándose con su encantadora amiga con apariencia de hada y a su pareja que le recordaba a una jirafa.

─ ¡Alice! ─una efusiva Brianna se lanzó hacia su amiga envolviéndola en un abrazo que fue correspondido con la misma emoción consiguiendo risas por parte de los chicos; se notaba el cariño de la una a la otra. En realidad Brianna consideraba a Alice como su mejor amiga, al igual que Alice a ella, y es que ambas coincidían en muchas cosas, al igual que tenían personalidades similares que se complementaban.

─ Hola, tú ─saludó al castaño cuando se hubo separado de la pareja de este, a la vez que ambos chocaban los cinco en un saludo.

─ ¿Entonces, niña? ─respondió Aaron ganándose una queja por parte de la contraria.

─ ¡Hey! No soy una niña ─se cruzó de brazos al mismo tiempo que fruncía el ceño al escuchar como la había llamado.

─ Pues lo pareces. Nada más que con esos cachetes ─acto seguido apretó el izquierdo entre sus dedos escuchando cómo su hermano y pareja reían ante las quejas de la rubia, y la el golpe que el más alto de todos se llevó logrando que la dejara quieta.

Si Brianna lanzara rayos por sus ojos como Superman ya Aaron se encontraría hecho polvo, la chica parecía querer matarlo -en el sentido metafórico de la palabra- con la mirada mientras sobaba su mejilla para calmar el dolor─. Te vas a arrepentir.

El chico simplemente carcajeaba ante aquella amenaza para luego fingir que temblaba sin perder aquella mirada burlona─. Uy, que miedo.

Antes de que pudiese responder, Alice tomó la palabra interrumpiendo esa cómica pelea de niños entre su pareja y mejor amiga.

─ Nos vas a acompañar en el viaje de vuelta, ¿cierto? ─tomó las manos ajenas entre las frías propias esperando que aceptara, aunque en realidad aquello ni siquiera pareció un pedido─. Tú y yo tenemos que hablar.

Brianna entendiendo la mirada que le dirigió y cuando disimuladamente señaló al rubio a su lado con sus ojos entendió a qué se refería con "hablar", más aún con aquella sonrisilla que llevaba consigo.

─ Sabes que no tengo porqué responder a eso, de todas formas me arrastrarás contigo ─burló obteniendo una sonrisa entre satisfecha y orgullosa de su amiga. Brianna desde que conoció a la castaña quedó con ese pensamiento de que tiene el don de la persuasión, siempre sabía cómo obtener lo que deseaba nadie pudiendo rechazarla, y es que ¿cómo hacerlo? Cuando siempre está sonriente y es tan dulce.

La pequeña Cullen iba a jalarla consigo para entrar al autobús, cuando apareció un Edward y una Bella que al parecer estaban discutiendo, teniendo Alice que interrumpir no sin antes intercambiar miradas con la rubia.

─ ¡Hola! ¿Vendrás con nosotros? ─preguntó hacia Bella, sin embargo no obtuvo respuesta por parte de esta ya que Edward fue quien tomó la palabra.

─ El autobús está lleno ─dicho aquello dio un golpe a este para ingresar echando humo por las orejas cuando las puertas fueron abiertas.

Bella luego de darle una mirada a todos también ingresó, pero a bus contrario en el cuál ambas habían llegado.

Ambas amigas, castaña y rubia se miraron con una pequeña mueca sabiendo que no podrían ir juntas, por lo que se despidieron acercando un poco sus rostros y mandando un beso al aire hacia la otra, no sin antes haber dirigido unas últimas palabras a su amiga en un susurro que sabía también los otros dos presentes escucharían.

─ Por cierto, dale a Edward un manotazo en la frente por mi parte. Dile que es con cariño ─bromeó consiguiendo aligerar el ambiente tenso que habían creando el mencionado y la castaña de cabello largo, con risas del trío.

─ Dalo por hecho ─contestó la duendecilla antes de que la Rossier diera vuelta para ingresar al bus contrario no sin dar despedirse de ambos chicos. No obstante, cuando hubo subido el primer escalón dio nuevamente vuelta mientras se guindaba un poco de la baranda que acompañaba los otros peldaños.

─ Por cierto, Jazz ─el rubio que no había apartado ni un instante sus ojos de ella se irguió más prestando atención a lo que diría la chica que lo tenía "hechizado"─. Nos vemos más tarde.

Jasper ante ello y el guiño que le mandó tuvo que controlar sus emociones para no sonreír como niño que le daban un dulce, aunque una sonrisa adornara ahora su rostro.

─ Estoy ansioso con que la hora llegue ─contestó con un ligero tono burlesco que la joven correspondió con una sonrisa, para luego terminar se subir los escalones. Sus hermanos presentes simplemente observaban la escena con emoción que se reflejaba en sus rostros, Aaron dando una palmada en su hombro acompañado de un apretón y así, ellos también ingresar al autobús.

Brianna cuando llegó a su asiento al lado de Bella y vio que esta se encontraba con sus audífonos puestos simplemente se sentó, acariciando con cuidado el girasol que Jasper le había dado y posterior a eso girar su rostro hacia la ventanas a su costado, pudiendo observar cómo Alice cumplía con su pedido y cómo Edward sobaba su frente quejándose. No pudo evitar reír ante la escena.

¡Cita en camino!

¿Qué creen que sucederá? 😄

¿Por cierto, qué opinan de nuestra protagonista?
¿La relación tiene con Jasper y los Cullen que hasta ahora conoce?
¿Y Bella?

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