Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

26


La noche transcurre demasiado rápido para mi gusto. Es la primera vez que me siento tan cómodo desde que he llegado y creo que todo es gracias a Sophia, porque hace que todo sea más fácil y divertido. Por una vez, ya no pienso tanto en lo penosa que es mi vida y puedo distraerme y pasarlo bien con alguien que me presta atención por cómo soy.

La mayor parte del tiempo nos lo pasamos bailando, abrazados, mientras conversamos, sin percatarnos de que cada vez queda menos gente entorno a nosotros. Cuando ya han pasado varias horas, solo hay un centenar de parejas bailando, balanceándose de un lado a otro vagamente.

Sophia me abraza y bajo la mirada para ver su cara: parpadea un par de veces y en sus ojos puedo detectar cansancio.

—Tienes sueño —le susurro al oído.

—No, estoy bien —me responde. Recobra la compostura para intentar convencerme—. Hay que disfrutar de estos momentos.

—No era una pregunta —contesto—. Anda, te voy a llevar a tu dormitorio.

Veinte minutos después, estamos de pie delante de la puerta de la habitación 203 del bloque tres.

—Bueno —empieza Sophia—, hoy ha sido una noche increíblemente increíble a tu lado. Y has sido todo un caballero acompañándome a mi cuarto teniendo en cuenta que ni sabías cuál era, ni sabes guiarte por la sede.

Aunque se muera de sueño, no deja que su belleza interior desaparezca.

—Igualmente —le agradezco—. Gracias por haberme invitado, ha sido genial poder desconectar un rato y no tener que preocuparme de nada.

No me doy cuenta de que me he ido acercando a ella poco a poco hasta que nuestras caras están a centímetros.

Puedo sentir su respiración.

Me mira, cierra los ojos y después se inclina hacia mí.

No sé si ya estoy listo para dar este paso, pero la verdad es que me da igual porque solo me concentro en ella. Cojo su rostro entre mis manos y nuestros labios están a punto de rozarse.

Alguien se aclara la garganta.

A ambos nos pilla desprevenidos y nos giramos para ver quién es.

Kyle.

—¿Qué tal, hermano?—pregunta como si nada. Se está aguantando la risa.

Pongo los ojos en blanco como nunca antes lo había hecho.

—No, tranquilos, seguid, seguid. Yo solo estaba dando un paseo; ya me iba —comenta haciendo un ademán de volverse al lado opuesto por el que había llegado.

Suspiro fuertemente.

—No, tranquilo, ya hemos acabado —le aseguro fulminándolo con la mirada.

—Pues mejor —dice Kyle satisfecho, como si le hubiera alegrado el día—, así te puedo acompañar a tu dormitorio, porque sospecho que no sabes llegar hasta allí.

Me vuelvo hacia Sophia

—Buenas noches. Nos vemos pronto.

Ella se limita a sonreírme y a asentir. Tiene las mejillas encendidas y parece que se ha despertado de golpe.

Cuando ya estamos casi llegando a nuestras habitaciones, le pregunto a Kyle:

—¿Era necesario?

Sonríe para sí y contesta:

—Te la debía.

Posteriormente, entra en su habitación después de soltar «Buenas noches» con un tono cantarín. 

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro