28 de Septiembre de 2012

—¿Por qué discuten?-pregunta Gabrielle bajando los escalones. Su padre estaba sentado en la silla de ruedas, algo agitado por la discusión. La madre de Gabrielle estaba parada con las manos en su cintura, tenia una falda tubo y una camisa blanca. Hace poco la madre de Gabrielle comenzó a trabajar en la alcaldía, pues el tratamiento de las piernas de su padre era bastante costosa, y la posada últimamente no a tenido tantos inquilinos.

Logan se pasa la mano por su barbilla, mientras que Lauren decide cruzarse de brazos con cierto fastidio.

—Tu madre quiere vender la posada y que nos mudemos a una casa mas "apta para mis problemas"—dice el hombre al final. Gabrielle mira a su madre y se acerca.

—No espantes a la niña Logan, lo dije como una sugerencia-dice ella.

—No puedes venderla—dice Gabrielle—En esta casa crecimos Blake y yo...y todos los que vienen disfruta lo hogareño que es la posada, no podemos venderla, prométeme que no la venderás.

—La posada requiere mucho dinero, y yo tuve que buscar otro trabajo debido a que no nos alcanza lo suficiente con la posada, aparte es demasiado grande. Blake vive fuera, podríamos vivir los tres en una casa más cómoda. 

—Por favor, no lo hagas. 

Lauren mira a su hija a los ojos. Aquellos en los que se parecen tanto, pues Gabrielle y su madre son demasiado diferentes. La mujer tiene el cabello rubio y recto hasta la cintura, Gabrielle lo tiene entre ondulado y rizado y corto hasta los hombros, Lauren era alta, hasta con tacones era mas alta. Gabrielle no heredo la altura de su madre, aparentemente la heredo de su tía Michelle quien era una mujer bajita.

Le da una caricia pequeña a Gabrielle en la mejilla.

—Bien, tranquila, no haré nada—suspira besando la frente de su hija menor—Debo irme a trabajar, el alcalde Dustin Rose no le gusta que lo hagan esperar—comenta saliendo, sin despedirse de Logan.

13 de Noviembre de 2014

En los siguientes días de la semana, Kale evitaba todo contacto con Jason, incluso cuando llego el viernes se mostró bastante agradecido por no tener que verlo más por lo menos dos días. Gabrielle era consiente las miradas que Jason le lanzaba a Kale, y aunque su amigo se hiciera el difícil, también lo miraba de reojo.

La chica estaba saliendo del colegio, mentalizándose que esa noche tendría una cita con Quentin de la cual no le apetecía demasiado, sin embargo le apetecía tener respuestas. Y eso parecía bastante importante por el momento. Gabrielle se detiene en seco cuando ve al alcalde Dustin frente a su auto, esperando a Stella, su hija. Dustin mira a Gabrielle, la mirada de ambos encontrándose y él da una inclinación con la cabeza, ella frunce el ceño.

—Mira por dónde vas—dice Stella luego de haberse chocado a propósito con la castaña.

—Adorable como una serpiente—murmura la chica.

—¿Perdona?—dice Stella acercándose a Gabrielle.

—Oh solo resaltaba tu espíritu animal—dice la castaña, Stella alza una ceja rubia mirándola dándole un escaneo de cuerpo completo, seguramente queriendo rebajarla. Pero Gabrielle la mira con completo desinterés.

—No te metas conmigo, Levine—dice ella antes de darse vuelta y caminar a su auto.

—Miau—dice Gabrielle haciendo un gesto como si sacara garras.

—¿Y con ella me pediste que salga para ir a una estúpida fiesta?—dice Harvey, Gabrielle da un salto. Era normal en Harvey aparecer de repente. Ambos observan como la rubia sube al auto, y el vehículo termina por desaparecer de sus vistas.

—Pensé que tuvo un final interesante para ti—habla ella volteándose a verlo, Harvey chasquea la lengua encogiendose de hombros.

—Si, quizás—dice el chico.

—¿Me dirás como es terminar de manera interesante una cita para Harvey Davis?

Harvey sonríe con burla.

—Debes salir conmigo y comprobarlo por tus propios medios—dice antes de acercarse a ella susurrándole en el oído—Al no ser que te asuste lo que puedas descubrír.

Harvey le deja un beso en la mejilla antes de alejarse. 

**

—¿Te molesta si veo tu armario?—pregunta la castaña irrumpiendo en el cuarto de su cuñada abriendo la puerta de par en par. Julianne levanta la vista de las uñas de sus pies para observarla.

—Eh...no, adelante—dice la rubia riendo con diversión mientras veía a la castaña. La pelea con Blake ya se había solucionado luego de una larga conversación donde el chico se disculpo por ser tan cabezota y querer hacer todo solo, lo que los mantuvo un buen rato en otra reconciliación que Gabrielle quería olvidar con todas sus fuerzas.

Pero le alegraba saber que no terminarían por algo tan tonto como eso. 

La castaña comenzó a sacar varias prendas de ropa de su cuñada soltando un bufido molesta.

—Okey, ¿por que te estas enojando con mi ropa?—pregunta la rubia cerrando el esmalte de uñas color rojo. 

—Un chico me invito a salir—dice Gabrielle, casi gruñe cuando lo dice. Julianne rie—No es gracioso ¿si? Falta poco para la función en el cine, nos encontraremos ahí y aun no estoy lista ¡ni siquiera se que se usa en estas ocasiones!, Eris me dijo que use un vestido, Sophie sugirió falda, Kale bueno...dijo que Quentin no es de su agrado así que podría usar una remera que dijera "jodete".

—Bueno, tus amigas no tienen malas sugerencias. Pero estoy segura que tienes algo lindo y bonito en tu ropa que puedes usar.

—Eso es ropa de niña.

—Tienes diecisiete años, Gabi, por favor—dice riendo levantándose—Vamos, debe haber algo que puedas usar. 

Su cuñada estuvo un buen rato rebuscando entre el armario de su cuñada hasta encontrar la ropa perfecta, selecciono unos ajustados pantalones gris oscuro, junto a un crop top de color blanco con palabras grafiteadas en negros y le presto una chaqueta negra para combinar.

La ayudo a maquillarse, y aprovecho que Gabrielle estaba de humor para hacerle algún peinado que le quedara bien en su rostro, se coloco los lentes de contacto los cuales tardo un muy buen rato debido a que todo el tiempo se les caía de los dedos, y cuando se vió en el espejo.

Parecía otra.

—Te ves bonita—dijo su cuñada abrazándola por los hombros antes de bajar las escaleras. 

Gabrielle estuvo esperando un buen rato a Quentin fuera del cine, odiaba que su cuñada no le dijera que llevara una campera. El invierno estaba acercándose, y ella no estaba del todo abrigada para aquel clima. La castaña miro al cielo hasta que el auto negro de Quentin se estaciona. 

—Perdón por hacerte esperar—dice besando su mejilla como saludo—Me entretuve.

Se vio tentada en preguntar, pero no contesto.

—La función esta por empezar, ya compre los boletos—dijo ella, estuvo tentada a recriminarle que eligió sola la película debido a su tardanza. Pero intento ser amable como siempre le recordaban que debía ser. 

—Wow, por lo general no dejo que la chica haga eso en la primera cita

—Las cosas cambian—dice encogiendose de hombros restándole importancia—Se llama Interestellar.

Quentin asintió, lo único que opino es que "Es un titulo algo aburrido".

Durante la función, la castaña estuvo incomoda, Quentin dejaba cada tanto su mano en la rodilla de ella. Gabrielle ya a apartado su mano un sinfín de veces pero él seguía insistiendo, ¿Qué acaso no entendía lo incomoda que le ponía? Y no del incomoda "ojala me bese en algún momento" Si no el incomoda de "ojala esta cita termine pronto". Cuando Quentin intentaba besarla, Gabrielle se ponía un gran puñado de palomitas en la boca, si sus amigas la vieran en ese momento, estarían muy decepcionada de ella. También la Gabrielle de trece años estaría demasiado decepcionada de la Gabrielle de diecisiete.

La Gabrielle de trece años daría lo que fuera para que Quentin la viera y la invitara a salir, la Gabrielle actual de diecisiete quería huir.

—Bueno, algo aburrida—dijo Quentin cuando la película termino—¿Vamos a cenar?

Habían ido a comer al mismo restaurante que ella fue con Harvey hace solo unas semanas atrás, y es que al lado de los otros restaurantes de la ciudad, este parecía el mas informal y tranquilo para una primera cita. También porque hacían las mejores hamburguesas.

Luego de ordenar, la mesera se fue, era una chica de unos veintitantos sin muchas ganas de trabajar en aquel lugar. Pero Quentin le lanzaba sonrisas seductoras de paso.

—Perdón si te incomode en el cine—habla el chico, Gabrielle suspira.

—No pasa nada—responde ella encogiendose de hombros, no quería sentirse aun mas estúpida frente a Quentin confesando que era su primera cita.

—Por lo general todas quieren besarme—dice y ella se vio tentada a poner los ojos en blanco, pero no lo hizo. Solo sonríe con los labios apretados.—Bueno, supongo que tu no eres asi

—¿Por qué querías salir conmigo?—pregunta. Quentín suspira.

—Me gustas.

—Me resulta difícil de creerte. 

—Oh wow, es cierto lo que dicen de ti, eres muy difícil. Deberías relajarte—dice y ella quería golpearle un puñetazo e irse.

—¿Te acuerdas la pregunta que quería hacerte? Bueno, ¿puedo hacerla?—el chico suspira mirándola a los ojos.

—Lo que quieras.—dice, Gabrielle imita su pose apoyando los codos en la mesa.

—¿Tu salías con Aalyiah Davis?—pregunta y Quentin ríe—¿La contagiaste?

La risa de Quentin se remplaza por una cara seria. Parece que incluso aprieta sus dientes.

—Sali con esa niña porque era una apuesta, es cierto, pero que ella este apestada no es mi culpa, soy un chico bastante limpio Gabrielle. Que ella este así, es porque como toda niña, quería divertirse, yo que tu, me andaría con cuidado de lo que quieres averiguar, y tendría mas cuidado con esos Davis. Una chica enferma de VIH, un hermano con TEI

—Harvey no tiene TEI—responde negando. Quentin se ríe.

—¿Ah no? Él se pone violento cuando yo apenas respiro, creo que es bastante obvio, te daré un consejo Gabrielle, no te metas en donde no te llaman. ¿Quieres saber la verdad? Si, anduve con Aalyiah, no se como carajo ella tuvo VIH, me pudo haber engañado o pudo haber nacido así, no tengo ni idea. Solo se que en esa familia todos están enfermos.

—No quería hacerte enojar.

—¿Luzco enojado?—pregunta de mal modo antes de suspirar—Voy al baño—dice sin dejarla responder y se levanta dejándola sola. En ese momento les llega unas fuertes carcajadas, Gabrielle mira a una mesa a unos metros de ella.

Harvey estaba ahí, sentado con Andrew. El rubio teñido reía de manera exagerada, mientras que Harvey le ponía kétchup a sus papas, su mirada se encuentra con la de Gabrielle y la saluda con la mano llevándose una papa a la boca. La chica se levanta caminando hacia ellos.

—Oh linda Gabrielle, no te vi ahí—dice Andrew. Ella mira a Harvey quien sonríe, tenía Ketchup en su labio superior y se vio tentada a sacárselo.

—¿Qué haces aquí?

—Es una ciudad libre, hay mas restaurantes en este pueblo—dice Harvey comiendo—Veo que tu cita es mas divertida que ver a Andrew hacer ejercicio

Andrew le tira a Harvey una servilleta. La chica suspira corriéndose el cabello.

—Esta...bien, supongo. 

—¿Ya anda con mentiras?—dice comiendo. Ella solo se cruza de brazos. Harvey sonríe con diversión—¿Qué te dijo? ¿Qué le vendo drogas a los niños?

—¿Qué su casa fue construida en un cementerio?-dice Andrew.

—Oh esa estuvo genial—dice Harvey, ella niega.

—Mejor vuelvo a nuestra mesa, nuestros pedidos ya deben estar—dice ella alejándose. 

—No te mueras en el intento—dice Harvey a su espalda mientras que ella camina a su mesa donde se sienta en el lugar que estaba antes. Se quedo sola un par de varios minutos que le parecieron una eternidad. 

La mesera trae las hamburguesas y segundo después Quentin aparece. Seguramente estuvo viéndose demasiado tiempo en el espejo.

—Harvey no tiene TEI.

—Cree lo que quieras—dice cansado antes de verle su plato—¿Enserio comerás esa hamburguesa?

**

—Y eso fue toda la cita, un desastre, criticando mi comida y luego hablo un largo rato sobre fútbol y esas cosa. Harvey y Andrew se burlaban de mi fingiendo bostezar. Fueron tan molestos 

Kale ríe, Gabrielle suspira, estaba acostada en su cama, con el celular en altavoz apoyado en su estómago mientras miraba el techo hablando con su mejor amigo.

—También dijo que Harvey tiene TEI—dice, y se quedaron unos segundos en silencio. Hasta que paso.

Escucho la risa explosiva de Kale del otro lado del celular, el chico reía de manera escandalosa. Gabrielle lo imaginaba retorciéndose de la risa y moviéndose en todos lados. Y así estuvo un rato.

—Si Harvey tiene TEI, entonces yo tengo el número de Harry Styles—dice calmando su gran ataque de risa—Será serio y lo que quieras, pero no tiene TEI, de tenerlo ya te hubiera arrancado la cabeza cuando insinuaste que el tenia Sida

Gabrielle pone los ojos en blanco.

—También me pareció ridículo, y Quentin no contesta nada de mis dudas. Solo hablo de fútbol y esas cosas, insinuó que las chicas no deberían comer tanto si no quieren engordar y dijo otras cosas machistas, intento besarme cuando me dejo en casa, por suerte Blake estaba saliendo a tirar la basura.

—Si quieres saber más las cosas, deberías preguntarle a alguien cercano

—¿Quien?

—Ay eres tan lenta para algunas cosas Gabrielle—habla su mejor amigo—¡A Andrew! ¿Quién más?

—Si bueno, creo que es mejor dejar de indagar tanto, ya es obvio que le molesta que lo haga—responde ella, su amigo suelta un bufido, se lo imaginaba negando con la cabeza y poniendo los ojos en blanco.

—Mejor deja toda tu estupidez y vete con el lindo y tatuado de Harvey

—¿Como sabes que esta tatuado?

—Por que lo vi en el verano, duh, su torso esta lleno de tatuajes. O créeme Gabrielle, si el chico no estuviera interesado en ti y no fuera Hetero me habría lanzado.

—No está interesado en mi, y yo no estoy interesada en él—contesta ella poniendo los ojos en blanco ante las palabras de su mejor amigo.

—¡Todas son unas mentiras!—dice su amigo—Estas pensando en como lucen los tatuajes de su torso

—No, no lo hago.

—Oh amiga, eran majestuosos.

—Buenas noches, Kale—responde ella dispuesta a colgar.

—Sueña con Harvey en cuero—son las últimas palabras de su amigo antes de cortar la llamada. 

Y Gabrielle durmió. Pero no soñó con Harvey.

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