Dos meses...

Las cosas seguían casi igual, sólo que ahora con mucho más estrés.

Las clases eran pesadas y muy exigentes. Antes pensaba que el estudio en Corea y los estándares eran muy difíciles, que todo tenía que ser perfecto, pero ahora, viviendo la situación en su nueva escuela y con sus nuevos profesores, se dio cuenta que las cosas no eran como él las pintaba.

A pesar de eso, no era algo imposible. Estaba dando lo mejor de sí y eso lo notaban sus maestros y compañeros.

Ahora era "el chino de bonita voz". ¿Le molestaba? En su principio no, pero ahora, cuando usaban ese apodo de más era molesto y mucho. En primera porque a los ignorantes no les entraba en la cabeza que era coreano y que había mucha diferencia en ser chino, incluso físicamente.

Al momento de tener que aguantar cosas como estas los ignoraba o simplemente sonreía falsamente, pero por su cabeza pasaban miles de insultos. Derek lo notaba y siempre le decía que no les haga caso, que eran unos idiotas.

Se encontraba saliendo del salón de Armonía; aunque era domingo y todos estaban seguramente descansando, Jungkook se había levantado muy temprano para ir a ensayar una canción que le habían encargado para su próxima clase de canto.

Sintió su bolsillo de la chaqueta vibrar y sacó su teléfono, el causante de esto. Sonrió al ver que era una llamada de su Youngie.

— Hey, ¿cómo estás?

Al momento de escuchar la voz de Jinyoung, supo que algo no estaba bien.

— Dime qué tienes, Youngie.

— ¿Tan obvia soy?

— Te conozco, mujer.— Sonrió acompañado de un suspiro. Sí, la conocía y muy bien.

— Jimin apareció...— Dijo en voz baja. Jungkook, quien estaba por bajar las escaleras del edificio, prefirió quedarse arriba y mirar a lo lejos el fuerte sol.— Obviamente discutimos.— Él asintió para sí mismo; era algo obvio.— Y terminó en un beso.

— Deja lo proceso un momento...

Sintió algo romperse dentro de él al escuchar eso último. Alejó el aparato, suspiró fuertemente y tapó la bocina para que Jinyoung no escuchara la fuerte patada que le dio a la pared. Puños apretados. Lágrimas amenazando salir de sus ojos. La estás perdiendo Jeon...

— ¿Por qué me lo dices, por qué mejor no guardártelo?

— Porque no podría ocultarte algo así. Siento que te fui infiel.

Ella te quiere, aún lo hace. Soltó una risita y al escuchar que ella lo hizo también, sonrió y se sintió un poco mejor. Aunque doliera, pensaba que era mucho que le dijera a que se lo guardara. Jinyoung lo apreciaba. Además, no podía reclamarle, su relación ya no era la misma de antes.

— ¿Recuerdas aquellos cinco favores?

— Están marcados en mi cabeza.— Sintió la diversión de su voz y eso lo hizo sonreír de nuevo.— Además de que tengo pegada la carta en mi pared.

— Bueno, con eso me quedo tranquilo.

— ¿Seguro?

— ¿Tú estás segura que volveré por ti?

Él estaba seguro que volvería por ella, pese lo que pese.

— Muy segura.

— Mi respuesta es la misma, princesa.

— Eres lo mejor, ¿lo sabías?

— Lo sería si estuviera contigo justo ahora.

La extrañaba como nunca pensó que extrañaría a alguien.

— Basta, voy a llorar.— Sintió la sonrisa de Jinyoung.

— Vete a dormir, seguro estás agotada.

— De hecho. ¿Hablamos mañana?

— Claro que sí.— Sonrió y cambió su tono de voz a una más cariñosa.— Youngie...

— ¿Sí?

— Haz lo que tengas que hacer. Recuerda que estaré apoyándote y nunca te juzgaré.

La llamada terminó, Jungkook limpió las lágrimas que amenazaban por brotar de sus ojos con fuerza y fluidez. Tomó aire, asimiló todo y se dijo así mismo que ese día llegaría. Derrotado bajó las escaleras del edificio en el que estaba y con Soldier de Taemin inundando sus oídos, volvió a su dormitorio.

Esa fue la primera vez que deseó ponerse ebrio para ahogar su sufrimiento.

Y así lo hizo al caer la noche; aprovechó que Derek había salido con sus amigos, se montó en su moto y fue a la primera tienda que encontró, compró todo el alcohol que le alcanzó y volvió al campus.

Sentado en el piso, ya con tres botellas de licor vacías, abriendo la cuarta... La primera lágrima cayó. Era imposible no llorar con la playlist que se reproducía en ese momento, era la que que había hecho hace mucho... Eran todas las canciones con las que Jinyoung lo saludaba.

Te extraño, Jinyoung, te extraño tanto... No te quiero perder.

••••
bonus;

les dije que los primeros caps serían cortos, so, no me matennn~

les subo éste por lo mismo, porque son cortitos

;; espero les esté gustando ;;