13
-¡Yo no acordé esto!- Exclamó un exhausto Eun-ho, quien se sotenia de sus rodillas.
-¿Cómo que no? Si el dia está precioso.- Dijo Yongmin, tratando de disimular un poco, pero la verdad ambos estaban muertos de frio.
-Idiota.
-¿Cómo Park?
-Idiota, ¿cómo se te ocurre correr con menos de ocho grados? Eres un ser demasiado odioso.- Decía achinando sus ojos, y negando con la cabeza.
¿Y si lo hacia correr más?
-Te doy 3 segundos para que corras, sino te mato- Finjió enojo. Muy buena forma de empezar la mañana, con un Eun-ho cansado desde el primer momento, hoy sin estudios, habian acordado pasar un rato juntos como amigos. Eun-ho contó con sus manitos, tres segundos.
Al ver que Yongmin se preparaba para avalansarse encima salió corriendo, lo más rápido que pudo, pero corria contra un deportista. Sus intentos fueron en vano.
Aunque corrió un par de metros, Yongmin lo agarró de la cintura, elevandolo y haciendolo girar. Eun-ho no puedo evitar reir.
Lo bajó, y le dio un pequeño golpe en la frente.
-¡Ay!- exclamó Eun-ho, a estas alturas consideraba que hasta el pelo de Yongmin tenia más fuerza que él.-¿Y eso por qué?
-Por lo de idiota.
- Pues te lo merecias..- susurraba mientras se sobaba la frente. Yongmin sintió ternura, por primera vez desde que estuvo con Eun-ho.
-¿Quieres seguir corriendo?.- Preguntó divertido.
-¡No! Tengo frio y estoy cansado.- Dijo casi rogando que fueran a casa.- Hay pronóstico de lluvia, y por si no te diste cuanta... bobo.. estaba lloviznando, si se larga con todo le dire a tu madre.- Exclamaba dandole golpecitos en el hombro.
Yongmin sonreia, no creia que se largara a llover tan de repente.
-Está bien, ¿Vamos a mi casa?.- Preguntó mirando como Eun-ho se retorcia del frio.
-Tsk, por favor.- Decía revoleando los ojos. Empezó a caminar rápido, su capucha rebotando a cada paso saltarin que daba.
-¡Ey!- Dijo agarrandolo de la capucha, trayendole varios malos recuerdos a Eun-ho.- Si vamos, vamos despacio.- Lo arrimaba aguantando la risa, Eun-ho todavia con los brazos cruzados, tratando de no tener tanto frio.
-¡A sorete!¡Vos querés que se largue a llover cuando estemos camino a casa!- Reclamaba señalandolo, descubriendo las intenciones de Yongmin. Y este se largo a reir, ¿Sorete?.
-N-no es eso- Decia tentado, realmente no eran momentos forzados como habia dicho su madre.- Es que, yo también me canso. Por eso vayamos despacio.- Dijo cerrando sus ojos y metiendo las manos en sus bolsillos, su campera tenia bolsas termicas. Perfecto.
-En serio eres idiota. Estoy muriendo del frio, ¡por favor apura el paso!- Pedia tirando del brazo de Yongmin.
-¿Mucho frio?.
-Bastante.- Bufó. La idea que pasaba por la mente de Yongmin se podria malinterpretar facilmente... pero con intenciones buenas, nadie pensaria nada fuera de lugar, ¿no?.
Le hizo señas con la mano para que se acercara más a él.
-Estira las manos- Pidió. Y Eun-ho hizo caso. Sintiendo unas bolsas calentitas en su mano, sintió un escalofrio recorrer su espalda, dios se sentia tan bien.-¿Mejor?.- Preguntó volviendo a meter sus manos en los bolsillos.
-Si, gracias.-Decia tímido. Metió ambas bolsas en el bolsillo de su buzo, agarrandolas fuertemente, satisfecho.
Yongmin lo agarró del brazo, atrayendolo hacia él.
-A casa.
ᶠⁱʳˢᵗ ˡᵒᵛᵉ
-Unas cuadras más y podras enrrollarte en mantas- Le decía a Eun-ho. Este asentía feliz, pero esa felicidad acabó cuando sintió una gota caer sobre su cabeza.
-Mierda..- Dijo, sorprendiendo a Yongmin.
-¿Park Eun-ho diciendo palabrotas?.
-¡Si! También te pegaria asi como me lo haces tú si tan solo tuviera fuerza.- Dijo atacante. Rompiendo el cómodo momento. Ambos se quedaron callados, habia empezado a llover con fuerzas.- ¡No me jodas!.
Yongmin volvía a sonreir. Escucharlo "insultar" se le hacia tierno. Un ser tan diminuto diciendo groserias, algo que sin duda, todos querrian ver.
-¡No te quedes alli parado!¡Corre!- Agarró con fuerza el brazo de Eun-ho, haciendolo correr.
-¡Te dije que no queria correr más!- Dijo jadeando. Yongmin volteó a verlo, ambos estaban empapados, no tenian mucho tiempo. Perdón Eun-ho, pero lo tenia que alzar. Tiró despacio de su brazo, para poder alzarlo rápido y empezar a correr nuevamente.
Corrió las calles que faltaban, Eun-ho tiritando de frío, más no queria bajarse.
-Ya casi- Jadeó Yongmin, doblando la esquina, y corriendo más rápido. A nada de llegar a casa.
Lo bajó al pie de las escaleras, subiendo rápido, siendo seguido por Eun-ho. Yongmin sacó las llaves, y abrió apurado. Entrando, y Eun-ho no tardó en estar dentro de la casa. Ambos tiritando, pero si de una competencia hablabamos, Eun-ho estaba al borde del resfriado.
-¡Ahi están!- Decia su madre bajando por las escaleras. -Dios mio, mirense. ¡Empapados! Ya mismo voy por frasadas y toallones.- Avisaba mientras se alejaba.
-¡Al baño ma!- Gritó Yongmin.
Agarró a Eun-ho y subió las escaleras hasta el baño, un rato después, su mamá se asomaba con los toallones y un secador de pelo.
-Te prestaré ropa.- Le decia Yongmin mientras le pasaba el toallón. -Iré por ropa ahora, ya vengo.- Dijo levantandose, corriendo hacia su habitación.
Se metió en ella cerrandola suavemente. Y respiró ondo.
Hace dias su corazón latia fuerte, desde el décimo encuentro en esa biblioteca/café. ¿Por qué? No sabia, pero se sentia bien. Se sentia cómodo, no sabia si era por sus calificaciones que iban en ascenso o por Eun-ho. Sacó una muda nueva de ropa, una para él y otra para Eun-ho.
Antes de salir con la muda para Eun-ho, le puso mucho perfume del que él usaba, y siempre olia a este.
Caminó nuevanente hacia el baño, viendo como Eun-ho estaba sentado en el lavamanos, secandose el pelo con un toallón. Y sonrió, porque simplemente hoy dia se habia levantado de buen humor, o más bien Eun-ho lo habia puesto de buen humor.
-Aquí tienes- Dijo entregandole la ropa, Eun-ho observandola con esos grandes ojos que tenia.
-Gracias- Agradeció con una pequeña sonrisa. Por la cabeza de Yongmin, pasó la conversación de hace rato.
Te pegaria como tú a mi, si tan solo tuviera fuerza.
Un nudo se formó en su estomago. Saliendo de su boca, palabras que mandaba el corazón, mientras que la razón le daba una cachetada de realidad.
-Perdón.- Soltó sin más. Eun-ho volvió a verlo extrañado, cubirendo uno de sus brazos.
-¿Por qué?.
-Lo del colegio... yo-
-Está bien. Te perdono, pero me gustaria que no lo vuelvas a hacer..- Dijo cavizbajo. Puta madre. ¿A él le habia hecho daño?, Lee Yongmin, merecias al menos un buen golpe en la cara.
-Lo prometo.
Y se quedaron en silencio, Eun-ho mirando su mochila, luego su brazo y otra vez la mochila.
-¿Me la alcanzas?- Preguntó señalando la mochila.
-Si. ¿Para qué?- Ladeo la cabeza curioso.
-Lo sabes..- dijo bajando la mirada- Lo dije la última vez.
Mierda, Yongmin en serio eres un idiota. No, más que eso. Miró el brazo de Eun-ho, apartando el toallón. . . Marcas. El no las habia hecho, porque él nunca dejaria marcas tan feas como esas. Era brusco, pero no a tal punto.
-¿Donde te hiciste eso?- Pregunta incorrecta.- Más bien, ¿Quién te lo hizo?- Habló preocupado.
-Emm..- Las palabras no lograban salir, ¿Qué excusa diría?- Matones del barrio.- Articuló con las manos, mordiendo su labio interior.- Eso. Matones del barrio- Dijo seguro de su mentira.
-Pues te lo han dejado peor que yo..- Decía apenado.- Ven.- Estiró sus brazos, aprovechando que él estaba parado y Eun-ho sentado en el lavamanos, intentaria sanar eso que tenia en el brazo.
Eun-ho se abalanzó sobre él, no muy seguro. Yongmin se agachó, quedando de cuclillas, soportando ambos pesos. Buscaba el botiquín de primeros auxilios... ¡Bingo!. Miró a Eun-ho; lo tenia demasiado cerca, al parecer la vergüenza era mutua, porque un color carmesí adornaba las mejillas de ambos.
-¿Sabes que tengo el brazo lastimado y no las piernas verdad? Puedo caminar- Decia avergonzado. Yongmin se paró, con el botiquín y Eun-ho en brazos.
-Es más fácil- Le respondió, lanzandolo un poco alto, para acomodarlo.- Enrolla las piernas, o te dejo caer.- Bromeaba, pero Eun-ho obedeció, con miedo.
Caminó hacia su habitación nuevamente, sus hermanas espiaban desde su habitación.
-Un bebé koala- Reia la mayor, mientras su hermanita sacaba varias fotos.
-Material pal' shipp.
1405 palabras.
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