Así que fastidiaremos a los vecinos
en el lugar que siente las lágrimas (en la almohada),
en el lugar donde perder tus miedos.
Sí, una forma de actuar imprudente,
un lugar que es tan puro, tan sucio y tan en carne viva.
En la cama todo el día, todo el día, todo el día,
practicando sexo y peleando.
Es nuestro paraíso y nuestro campo de batalla.
Es nuestro paraíso y nuestro campo de batalla.

Pillowtalk – Zayn Malik

Por fin llegó el cumpleaños de Baek, Chanyeol estaba muy emocionado por esta cena, encargó a sus hijas con Kyungsoo y JongIn para que sea más especial.

Planeó todo a la perfección tenían la casa para ellos solos, lo disfrutarían como nunca. Compró champagne, fresas con chocolate, chocolate líquido para comerlo directo del cuerpo de Baek, le daría la mejor noche de su vida y él se encargaría de eso. Ya estaba en el restaurante y tenía que esperar a su esposo ahí, cuando lo vio entrar casi se queda pasmado. Aquel traje blanco lo hacía lucir como un ángel, pero lo sabía su esposo era un demonio, un pecado, uno que lo llevaría directamente a la lujuria.

—Amor, luces fantástico —él más alto se levanta y le da un beso a su esposo.

—Lo sé –Chanyeol rodó un poco los ojos—. Bueno, tú también Channie y gracias.

 El mesero se acercó a tomar la orden y Chanyeol ordenó por ambos como a Baekhyun le gustaba cuando se trataba de citas. Platicaron de un contrato que le llegó a Baekhyun para grabar un disco y no estaba muy seguro de aceptarlo, por otro lado, a Chanyeol le parecía una buena idea dar a conocer el talento de su esposo. La cena llegó y con ello un poco de silencio, el alto conocía a su esposo, sabía que algo estaba un poco extraño. Terminaron de comer y Chanyeol quiso dar su regalo.

—Yo sé que tienes de todo, pero esto te lo doy con todo el amor del mundo, te amo —Yeol entrega una pequeña bolsita de regalo y obtiene un beso a cambio.

—Amor, te he dicho que no es necesario, me has hecho muchos regalos. Hay cosas que no se compran y me harían aún más feliz —decía Baekhyun mientras veía el increíble brazalete de diamantes.

Algo pasa

—Okay —Chanyeol pone las manos sobre la mesa y ve fijamente a su esposo—. Esto no es normal, me hablaste con amor. ¿Qué hiciste? O ¿Qué quieres?

—Bueno, hay algo que quiero —contesta de manera coqueta.

—Pídeme lo que quieras, Baekkie.

El más bajo se acercó lentamente a su oreja y le susurro lo que quería y en ese momento Cell sintió el verdadero horror. 

Okay solo me emocioné, disculpa lector (a).

Pero sí, Chanyeol trago seco y el rubor subió por sus mejillas, se sirvió una copa más y la bebió de golpe.

—Por Dios yo.... Baek... Amor.

—Tu virginidad, Yeol, eso es lo que quiero —Baekhyun lo miraba y hacia las cejas de arriba abajo.

—¿De dónde sacaste esa idea? —Pregunta casi horrorizado.

—Agradécele a Minseok y a Jongdae, ellos son versátiles, así que —el más bajo empieza a hacer una "caminata" con sus dedos por el brazo de Yeol y sigue hablando de manera coqueta—.  ¿Qué dices?

—¿Puedo pensarlo?

—Chan, es mi cumpleaños, por favor.

—¿Me trae la cuenta por favor? —Dice Chanyeol nervioso.

Baekhyun tenía esa mirada que hacía que Chanyeol quisiera bajarse los pantalones, pero para follarlo, no para ser follado.

La casa estaba ahora decorada y acomodada para una gran noche de pasión, pero no era lo que estaba esperando, así que se estaba muriendo de pena y vergüenza, solo pensar en lo que Baek le había pedido le hacía sentir escalofríos, no era agradable la sensación.

El llegar a su casa lo hizo respirar muchas veces profundamente, necesitaba relajarse, porque aunque no había dicho textualmente "sí" sabía que haría lo que Baek le pidiera, lo tenía en sus manos y podía hacer con él lo que quisiera. Cuando se bajaron del carro y entraron a su casa Baek casi se queda sin palabras de ver que su sala se había convertido en una pequeña habitación, con velas aromáticas y almohadas.

—Channie, esto es...

—Lo mejor para ti, te amo.

—Acerca de lo que te pedí….

—Sí —ni siquiera dejó que Baek siguiera hablando, pues lo beso con mucha intensidad.

Las manos de Chanyeol bajaron hasta la cintura de Byun, era hora de iniciar el juego previo, ese que tanto amaban.

Chanyeol se dedicó a desabotonar uno a uno los botones en la camisa de su esposo. Empezó a bajar de su boca hasta su barbilla, su clavícula, sus hombros, sus brazos, dando pequeñas succiones, mordiendo suavemente. Se puso de rodillas desabrocho el cinturón y el pantalón de su esposo, bajó de un solo movimiento su ropa interior, dejando el miembro de Baekhyun expuesto. Chanyeol se dió cuenta por primera vez que su esposo no era precisamente pequeño tampoco, sin dudas, sin pensar metió el miembro a su boca, regalándole un enorme placer.

—Aah, Chanyeol, me encantas.

Enredaba sus manos en su cabello, exigiendo más, el más alto no dudaba en chupar y succionar, porque los gemidos de su esposo eran su más grande placer. Las exigencias que su voz soltaba y que sus manos mostraban hacían que su cuerpo reaccionara, él también estaba muy duro.

—Chanyeol, yo...

—Shhh... solo hazlo.

Nuevamente se llevó el miembro a su boca, aumentado la velocidad de los movimientos de su cabeza y cuando escuchó el grito que su esposo dió, lo supo, no dudó en tragar todo de él. Byun en un movimiento brusco salió de él y lo levantó para darle un beso, repitió el proceso que su esposo y terminó de rodillas frente a él, Baek llevó las manos al trasero de Yeol exigiendo que le follara la boca, porque amaba sentir que su esposo embistiera su boca, aunque la idea de hacer eso era otra.

Las manos de Baekhyun masturbaron a su esposo aprovechando el pre seminal y lubricándolos, cuando el más alto se dió cuenta sabía lo que pasaría, sin embargo, respiro hondo y trató de relajarse. Nuevamente Byun se llevó el miembro a boca y puso sus manos en el trasero del chico, pero sus dedos se adentraron un poco más, buscando la cavidad de Chanyeol, no tardó en llegar y meter un dedo.

—Ah, Baek —dijo el más alto soltando un respingo.

—Relájate, Yeol.

Así lo hizo, porque después de todo, estaba recibiendo una mamada de su esposo y no es por nada, pero Baek tenía una boca que cualquier esposo pudiera envidiar, sobre todo porque no dudaba en llevarse absolutamente todo a la boca sin ninguna arcada. Ni siquiera se dio cuenta que Baek ya tenía más dedos dentro de él.

—Aah…Baek

—Lo encontré —dijo con una cara que a Chanyeol lo volvió loco.

Baek no dudo en seguir embistiendo con sus dedos ese punto y Chanyeol se estaba deshaciendo de placer, estaba agarrado de uno de los sofás porque las piernas le temblaban, su orgasmo no se hizo esperar estallando en la boca de su esposo con tal intensidad que sintió que todo su cuerpo convulsionaba.

Acabaron acostados en esa sábana blanca, Baek sobre su esposo besándose, tocándose todo el cuerpo y regalándose besos en donde podían. Sus manos se acariciaban con tal parsimonia que ninguno podía creer el nivel de placer que estaban alcanzando, no era común porque Chanyeol se estaba entregando a Baekhyun de diferente manera, pero quería demostrarle que era todo suyo, podía tomar todo lo que quisiera de él.

Cuando sintió que su cuerpo también quería llegar al límite, Chanyeol se dio la vuelta como un ofrecimiento a su esposo, Baek no dudó en besar y dar leves mordidas a su espalda, metiendo nuevamente sus dedos en él. Primero uno, buscando nuevamente el punto de placer de su esposo, no tardó en encontrarlo, aumentó la velocidad cuando metió el segundo, hizo círculos y movimientos de tijeras para dilatarlo.

—Baek, si no lo haces, yo te voy a follar —exigió el más alto.

No necesito más para sacar sus dedos y posar su miembro en la cavidad de su esposo. Entró delicadamente, poco a poco, hasta que entró por completo. Empezó a moverse lentamente, Yeol estaba muy estrecho, era la primera vez que alguien entraba en él y Byun no podía sentirse más orgulloso por eso. Sus embestidas aumentaron el ritmo, haciéndose un poco más fuertes y violentas, tomando las caderas, pero por más que se movía y que sintiera placer, no era el placer que estaba esperando, porque no sentía llegar, no sentía acabar y eso le estaba frustrando.

—¿Baek, porque te detienes? —No era como si Chanyeol también lo estuviera disfrutando al 100 %, pero quería hacer feliz a su esposo, hasta que se detuvo y salió de él.

—Sonará estúpido, pero no me puedo venir.

—¿Por qué? —pregunta Chanyeol.

—Supongo que ser activo, no es precisamente lo mío. —Ambos se quedaron callados y cuando cruzaron las miradas, terminaron riéndose. Baek se acercó a él y nuevamente lo besó ferozmente, poniéndose a horcajadas sobre él—. Chanyeol, necesito que me folles.

—Lo que quieras.

Siguieron besándose, furiosamente y Baek estaba muy desesperado, su erección palpitaba y dolía, no dudo en buscar el miembro de Chanyeol y enterrarse poco a poco sin preparación previa.

—Baek, vas a lastimarte—Chanyeol hablaba como podía, porque la estrechez lo estaba volviendo loco.

—No, yo solo te necesito.

Bajó poco a poco por la extensión de su marido y se quedó ahí sin moverse, pero besando a su esposo. No se dió cuenta en qué momento empezó a rebotar sobre él, tan rápido, tan desesperado, mientras su miembro estaba siendo frotado por ambos cuerpos. Chanyeol se apoderó de su cuello, dejando succiones, no le gustaba dejar marcas, pero estaba tan perdido que no se dio cuenta de la gran marca que había dejado. No importaba, no ahora que ambos estaban increíblemente excitados.

—Baek, yo quiero.

—Yo también, Channie.

—Mierda, Baek, sigue así.

Aumentó la velocidad de sus rebotes y ambos llegaron a su clímax en un estruendoso grito de placer, su sudor estaba mezclado con el del otro, ambos se dieron un último beso y sonrieron, no dudaron en tomarse una ducha y entrar a su cuarto a dormir. La noche había sido mejor de lo que Yeol había planeado.

🌌

Chanyeol no había olvidado que planeó otra fiesta en casa de Soo, así que se levantó más temprano, arregló su sala, preparo desayuno y se lo llevó a la cama a su amor.

—Levántate dormilón, es hora de ir por las niñas.

—¿Podemos fingir que son hijas de Soo y JongIn hoy?

—Basta, Baek, ni tú te crees eso.

—Es verdad, cuando envejezca, necesito quien me limpie el trasero, vamos por nuestras mocosas.

Ambos rieron, desayunaron y se encargaron de ir por sus niñas. En realidad, a la fiesta de Baek. 

Al llegar todos gritaron sorpresa y le dieron regalos al cumpleañero, sus niñas se acercaron a darle un peluche que habían comprado con sus mini ahorros y Baek nunca se había sentido tan dichoso. La alberca en casa de Kyungsoo estaba llena así que todos se metieron en ella.

—No sabía que existían los vampiros —dijo Sehun.

—No entiendo —contestó Baek, pero el menor le señaló el cuello.

—Te dieron tu regalote, Baek.

—No tienes idea, Hun.

Ambos voltearon a ver a Chanyeol y se rieron porque el más alto caminaba extraño, Baekhyun volteó a ver a Sehun nuevamente y le dio un guiño.

—Hey, Yeol ¿Montaste un caballo? —Grito Según a manera de burla.

Chanyeol se puso rojo, pero sonrió, no importaban las burlas. Su Baekkie estaba feliz, además, Baekkie también había montado uno.