Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

24

Andrei después de acomodar a su majestad en una de las habitaciones articuladas del campamento se dirigió hasta donde se encontraba el templo de Odín, necesitaba su ayuda ahora que sentía como se habían complicado las cosas, tenía miedo de fallar y que su gente tuviera que pagar el precio y morir de la mano de aquel hombre que había conocido y parecía despiadado y cruel, no era como lo habían descrito, al menos no lo era cuando se referían a sus buenos sentimientos, este hombre era implacable y tenía una mirada despiadada que podía poner a temblar a cualquiera.

─No temas, acepta el reto de mi hermano porque yo te he dado sabiduría y vas a lograr tu propósito, después de esto guarda a tu gente y deja la guerra y el dominio de Finlandia, porque eres una persona buena pero la ambición los ha hecho llegar hasta aquí, mataron al rey Onni durante un intento de invasión y esto les ha traído desgracia, ahora tienes la oportunidad de redimirte, puedes hacerlo... ─habló Artemisa apareciendo frente al desesperado hombre que caminaba sobre la nieve tratando de encontrar apoyo y palabras de aliento para lo que se venía.

Al verse interrumpido por la diosa y escuchar aquellas palabras Andrei pudo sentir paz, su preocupación disminuyó mucho y entonces Artemisa le mostró lo importante que era su misión, pues le hizo ver como en un espejo como era la vida en Laponia cuando el rey estaba bien, lo noble y bueno que era con las personas y lo cálido y humano de su poder, sus ojos benevolentes que hacían sentir bien a cualquiera que los mirara y que difería mucho del monarca que ahora tenía como huésped en su campamento, esto hizo que el joven Andrei comprendiera.

─Lo haré, pero sabes que es un riesgo, necesito que me asegures que mi gente va a sobrevivir si fallo, porque eso es lo que de verdad me da miedo ya que tu hermano está exigiendo sus vidas si yo llegase a perder esta batalla y no he podido negarme porque si descubre nuestro trato también los va a matar, confío en mi pero debo ver los pros y los contras, creo que eso es lo que me causa temor ─explicó de nuevo Andrei, era evidente que Taehyung se imponía y demasiado, al punto de hacerlo dudar y temer.

Artemisa acepto y aseguró que protegería a los vikingos si el joven Andrei llegaba a perder la batalla, solo así el mencionado desistió de seguir caminando rumbo al templo, desistió de querer ver a Odín y se dirigía de nuevo al campamento, ahora confiando en que debía ser fuerte.

─Sabes que comprendo bien el temor de Andrei, incluso temo perderlo, espero que todo esto no sea en vano porque esos guerreros son excepcionales... ─agregó Odín apareciendo junto a Artemisa para ver a su guerrero irse, ambos estaban preocupados por la situación pero estaban conscientes de que no había otra opción.

─Comprendo tu temor pero por lo mismo es que solo puedo confiar en Andrei, siente un profundo respeto por mi hermano y está cumpliendo una a una las condiciones que plantee, yo le voy a cumplir a él con sus peticiones también. Es un trato mutuo y tú pueblo estará a salvo e incluso tu héroe guerrero va a estar bien porque yo lo protejo, mi hermano no va acabar con él, no lo permitiré, te doy mi palabra ─dijo finamente Artemisa y dejando a un Odín más tranquilo pero sabiendo que Zeus no se iba a quedar de brazos cruzados.

─Tu padre no va a dejar las cosas así, ha logrado mucho hasta hoy, tres aldeas completas fueron destruidas por su creación y ahora le temen. Todo es frustrante y desesperante, una vez conocí a Zafiro y sé que no tenía malos sentimientos, pero este rey que ahora está en mis tierras es diferente, tiene su mismo poder más no la misma presencia y calidez, es un monstruo sediento de sangre que en cualquier momento puede destruir el campamento de mis guerreros, ¿comprendes eso? ─insistió aquel dios que se veía opacado.

Ellos hablaron durante algún rato más, podría decirse que se desahogaron pues la situación era difícil para ambos, pero ahora en el palacio del rey en Laponia, Kiana estaba de nuevo sentada frente a la ventana, tenía miedo de que algo le pasara a su amado Zafiro, aunque no la quisiera o tratara igual que antes ella siempre lo amaba con la misma intensidad y lo quería de vuelta, sin darse cuenta sus lágrimas comenzaron a bajar por sus mejillas, sentía su corazón herido y tenía esa sensación de duelo que queda después de una ruptura amorosa, dolía demasiado todo.

Sus pensamientos empezaron a hacer una revolución en su estómago, sentía que la presión de todo lo que sentía la iba hacer explotar, pensó entonces que podría necesitar aire y salió siendo perseguida por su escolta y mucama, estaba bien abrigada pero su corazón aún dolía y esa sensación de estrés le estaba causando estragos, de un momento a otro corrió a un lado, entre las plantas pues la necesidad de vomitar era demasiado, una tras otra hasta ser tres arcadas la debilitaron, la mucama la ayudó a ponerse de pie, pero todo era tanto que terminó por desvanecerse en los brazos de su escolta.

Fue llevada al interior de palacio, dónde las amas de llaves se encargaron de su cuidado, llamaron a los médicos del rey para que la revisaran pero sabían que ella estaba demasiado triste, muchas de las personas que habitaban en palacio sabían lo que había pasado con Taehyung la noche anterior e imaginaban que era por eso que se había puesto mal, ahora solo tenían que esperar a que despertará para que ella pudiera decir los malestares que había sentido desde su propia boca para saber cómo medicarla, en ausencia del rey tenían que protegerla.


Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro