04
Las horas pasaron, el rey descansó lo suficientemente como para renovar sus energías ahora estaba en la terraza de su gran palacio bebiendo chocolate caliente mientras hablaba con su escolta y amigo Elyas.
一 Izak fue a verificar que todo estuviera saliendo bien, confío en que así haya sido, pronto estará de vuelta, pero creo que se preocupa mucho por mi, yo no estoy indefenso aún, solo debo controlar mi poder... 一 insistió su majestad ante la atenta mirada de su protector.
一 Claro, crees que las fiebres que sufres son solo porque si, admite que tu padre te está consumiendo, que cada vez que le pides ayuda usa tu poder para darle energía y protección al ejército, entiende que no nos levantamos en armas en su contra solo porque tu le eres leal... mi señor 一 terminó de hablar con un poco de sarcasmo Elyas, se sentía impotente ante lo que pasaba con su rey.
一 Un día las cosas van a cambiar, te lo prometo Elyas, pero debes confiar en mí... no el Zeus, yo tomaré lo que venga de él mientras sea necesario pero un día le voy a demostrar que puedo llegar a cambiar el rumbo de las cosas, lo haré... o moriré intentándolo... 一 respondió Taehyung esta vez poniéndose en pie para hablar más firme a su protector, estaba sereno al hablar, seguro de si mismo, sus ropajes negros eran azotados por la brisa al igual que su cabello, su porte lo hacía verse más elegante y distinguido.
一 Mi señor... ese es nuestro temor, que mueras en el intento, que ese maldito te supere y que no podamos hacer nada para evitarlo, que los vikingos se adueñen de nuestra tierra coronando se con tu sangre como pasó antes y que tengamos que ver a nuestros hijos y mujeres morir en sus manos, comprende nuestro temor... 一 volvió a replicar Elyas ahora con desesperación marcada en su voz, se sentía frustrado.
一 Elyas, soy tu rey, siempre he cumplido mi palabra desde que mi padre, el rey Oni se fue de estas tierras, comprendo tus temores y créeme que me duelen y me marcan como a ti, pero te doy mi palabra que los vikingos no van a tocar nuestra tierra ni lo que amamos, eso debes tenerlo seguro 一 Taehyung se acercó a su guardián y lo tomó por los brazos para que se calmara mientras él hablaba.
Esto dejó calmado a Elyas, no podía dudar de la palabra de su monarca, más cuando este lo soltó y abrió los brazos a cada lado con las palmas abiertas al cielo he hizo que la nieve comenzará a caer de modo sutil, era la forma en la que su majestad solía hacerlo de esa manera.
一 Espero que este espectáculo sea de tu agrado, Lady Kiana... 一 agregó Taehyung delatando a la joven que había asomado justo cuando el hacía aquello.
一 Me dijeron que me mandó llamar, Majestad... 一 respondió de mal modo cambiando su expresión de sorpresa.
Entonces Elyas hizo una reverencia y se apartó para darle privacidad a su rey, Taehyung hizo una señal a una de las muchachas que se ocupaban de su servicio para que se acercara con el desayuno de Kiana, no le preguntó si quería hacerlo porque ya antes le había dado la oportunidad de dejarla sola y no podía continuar así pues podría caer en depresión.
La joven se acercó, afortunadamente aquella terraza contaba con un bello techo esculpido al parecer desde hacía mucho tiempo atrás, siglos quizá sólo al frente no había protección alguna pero el poder del rey hacia que el viento corriera en otra dirección.
一 Creo que no tengo opción... 一 dijo con resignación la joven cuyas emociones ahora estaban cegadas por los sentimientos de odio que se le habían generado a raíz de la tristeza y el dolor de saberse sola en el mundo.
一 Ayer ya no te quise molestar porque sabía que estabas pasando por una situación muy difícil, pero quiero que sepas que no voy a dejarte sola, aunque en este momento no comprendas, se que un día lo harás y entonces estarás bien 一 intentó explicar Taehyung.
一 No me importa nada que venga de ti, voy a comer y a obedecerte, pero ten claro que nada será por mi propia voluntad, habría preferido morir junto a mi familia, luchando que vivir a tu lado, un desconocido que solo me trajo para tomarme por esposa sin importar nada, pero ahora no tengo un hogar ni familia, tengo que someterme a tu voluntad... 一 reprochó Kiana con enojo marcado en su voz y en su expresión facial.
Taehyung estuvo a punto de insistir en defenderse pero entendía que ella hablaba por el dolor de la pérdida, tenía que darle tiempo a superarlo.
Así el desayuno transcurrió en silencio, el joven rey ahora no sabía cómo manejar aquella situación, pero no podía culparla, en su interior también entendía que él se sintió igual cuando los vikingos mataron a su padre, la frustración lo hizo odiar al mundo pero fue sanando paulatinamente y ahora comprendía que era parte de su destino, tuvo que aprender todo solo pero lo había hecho bien, al menos eso era lo que e tendía porque su gente le era leal en todo, su pueblo que era lo que más amaba siempre le había dado apoyo.
一 Por favor, Kiana, espero que me perdones algún día, no voy a someterte ni a obligarte a nada, no pienses eso nunca más, yo hubiera querido hacer todo por salvar a tu gente, a tu tribu pero... 一 la voz de Kiana interrumpió al rey quién ya no pudo seguir implorando clemencia.
一 Te dije que no me interesaba, si ya no tienes nada que decir o ya no me necesitas, por favor déjame ir a mis aposentos... 一 pidió la joven y espero a que Taehyung respondiera.
El joven rey asintió y dejó que la chica se fuera, comprendía que tenía un reto que conquistar.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro