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18 | lluvia

advertencia +18






















Los toques en la puerta de Victoria la despertaron, bueno, realmente no, Victoria no estaba dormida estaba tirada en su cama intentando dejar de pensar en cierta castaña de ojos verdes.

La platinada se levantó con el ceño fruncido, eran las 3:43am, ¿Quién estaba tocando su puerta a estas horas y debajo de la lluvia?

No había parado de llover todo el día.

Camino hacia la puerta y realmente dudo en abrir, ¿Si era un asesino?

Quito todos los pensamientos de su cabeza cuando su puerta fue una vez más tocada.

Abrió la puerta lentamente y ahi estaba frente a mi, una vez más Lexi. Estaba empapada entera.

—Lexi, pol dio' te va...— fui interrumpida cuando los labios de la castaña me golpearon contra los míos.

Sus brazos se detuvieron en mis hombros acercándome más a ella, mis manos estaban en su cintura y poco me importo que me estuviera mojando toda.

Por la lluvia, claro.

El aire comenzó a ser escaso entre nuestro hambriento beso y nos separamos, ella junto su frente con la mía y cerro sus ojos.

—Lo siento tanto Tori— susurró y fruncí el ceño.

—Lo siento mucho— susurró una vez más y solo asentí.

Lexi la había buscado primero por primera vez y se había disculpado con Vicky.

Victoria sintió una gran paz dentro de ella.

—Vamo' te prestare algo de ropa seca— la jale de la cintura llevándola hacia mi cuarto.

Lexi solo soltaba pequeños quejidos a medida que caminábamos y su cabeza estaba metida en mi cuello.

Se mantuvo de pie cuando me acerque a mi armario, busque alguna sudadera y unos boxers.

—Prefiere' un pantaló' de pij...— no termine mi oración al ver a Lexi desnuda.

Me puse pachosa al verla de esa manera.

Se acerco a mi y acaricio mis brazos descubiertos con sus frías manos, provocándome un escalofrío que subió por mi espina dorsal.

—Quiero sentirte Tori— susurró en mi oído y después mordió el ovulo de mi oreja.

Solté un gemido inconscientemente.

—¿Tu quieres sentirme?— la manera en la que lo preguntó hizo que la ropa interior de Vicky se cayera.

—Fuck, yes— susurró para después lanzarse a ella. Como si de su presa se tratase.

Vicky encima de Lex, acorralando su cuerpo contra la cama.

La castaña dejaba escapar agudos gemidos mientras Tori besaba tu cuello y bajaba hasta tu clavícula, dejando su saliva y algunas marcas. Sus manos se divertían jugando y recorriendo su piel, subían y bajaban por tus curvas.

La rodilla de Vicky apretando y masajeando suavemente su punto más sensible, provocando que salieran gran cantidad de gemidos ahogados.

Las caderas de Lexi se movían inconscientemente contra su rodilla, buscando estar apretada contra ella.

—Está' algo ansiosa, ¿mami? —se burló con sarcasmo, disfrutando los gemidos y jadeos que obtenía de la ojiverde.

Era increíble la forma en la que Vicky ni siquiera necesitaba ponerle un dedo encima para que su coño se mojará de una forma patética y vergonzosa, una vez que los besos y los toques de la puertorriqueña se agregaron, goteaba aún más que antes.

Y ya no era culpa de la lluvia.

La boca de Vicky se dirigió a uno de los pechos blancos de Lexi.

Su cálida lengua chupando y lamiendo, mordisqueando tu pezón, no había control alguno en ella.

Una de sus manos sometía a la contraria, frotando y presionando su pezón sin piedad alguna.

Recorría tus senos con besos que dejaban moretones, era tan intensa como un bebé hambriento que podrías jurar que iba a arrancar tus pezones.

—Ta' suave, ta' deliciosa— murmuró mientras la miraba y masajeaba su pezón.

—Hmm... dios mío Tori— el pecho de Lex subía y bajaba rápidamente.

Sus palabras la excitaban más de lo que deberían.

Tori descendió con besos hasta llegar a su estómago. Pudo sentir como se contraía mientras más besos depositaba, sentía como cada vez estaba más tensa y necesitada.

Sus besos llegaron hasta tus muslos saltandose su coño. Y empezó a chupar y morder un espacio específico en tu muslo.

Lexi sintió como los dientes de Tori se clavaron en su piel y lloriqueó, se sentía increíble era una especie de dolor con placer.

Y estaba segura que dejaría marca.

Bajo su mano hasta su mojado coño, ni siquiera se esperaba que estuvieras tan mojada.

Y apenas la había tocado.

—Diablo' Lex— se burló mientras sus dedos jugueteaban con tu coño, por encima de este sin tocarlo.

—Está' tan mojada... me necesita' tanto, ¿verdad?— preguntó con burla.

—Mhm– asintió con la cabeza, sintiéndose tan avergonzada y sucia.

Dándole esa inocente mirada mientras era provocada por sus dedos.

—Usa tus sucia' palabras, bonita— su ritmo se iba acelerando, sabiendo que sería más difícil para ella formar una palabra

—¿Quieres que siga?— quito su toque.

—Por favor...— susurró.

—Muy bien, baby— una sonrisa sombría apareció en su rostro.

Su ritmo no paraba, querías sentirla más cerca, la querías dentro, necesitabas sus dedos penetrando dentro de ti. Lo notó.

—Abre más tus piernas— ordenó de nuevo.

—Quiero' saborea' tu rico coño— Lexi soltó un jadeo al escucharla.

Lo hizo sin dudarlo, dejando expuesto su coño solo para ella.

—Good girl... —murmuró mientras bajaba y posiciona su cabeza entre su entrepierna.

Estaba tan cerca que podías sentir su respiración generando un cosquilleo.

Tori comenzó a besar tu muslo para provocarte más, haciendo movimientos circulares con su pulgar en tu clítoris ya expuesto.

Los gemidos ahogados y ruidosos de Lexi, era justo lo que necesitaba. Eran tan mágicos, simplemente eran musica para sus oídos.

Eran su maldita canción favorita.

—Tori... por favor —suplico.

Justo lo que Vicky quería.

—¿Está' ta' desesperada por mi, chula? —se burló de nuevo de la castaña.

Dejó los besos de lado para sumergir más su cabeza y lamer.

Su lengua despegando sus pliegues y recolectando todos esos jugos, comenzando a hacer círculos en su clítoris.

Los movimientos cada vez más intensos y rudos que antes.

—¡Oh, dios mío!— gimió.

Sus caderas buscando más, su estómago cada vez más tenso de lo que ya estaba, sus gemidos más ruidosos.

Lexi se sentía en el maldito paraíso, Victoria la estaba llevando al paraíso.

Los movimientos de lengua más rápidos con cada momento que pasaba hacían que el ceño de Lexi se frunciera, sus ojos verdosos entrecerrados y un tanto llorosos, sus puños cerrados hasta el punto en qué se estaba clavando sus propias uñas.

Repentinamente, Tori ya había introducido dos dedos dentro de ella, salía y entraba, los húmedos sonidos de sus dedos golpeando contra tu coño estúpidamente mojado.

La platinada miraba con tanto deseo a Lexi, miraba cada expresión que ponía mientras la devoraba entera. Los ojos se le ponían en blanco cuando comenzó a moverse un poco más rápido.

—¡Tori!— su mano se dirigió a su cabello, enredándose en él para mantenerla lo más cerca que se pudiera.

Su lengua y sus dedos ya la tenían tan indefensa y vulnerable.

—¡Más. Más, más, más!, no te atrevas a parar— gritó echando su cabeza hacia atrás.

—Oh, está' ta' desesperada por ser follada hasta que te destruya— sus velocidad iba aumentando mientras se burlaba de ella.

—No ere' má' que otra nenita perdida y tonta aparentando ser una perra frívola, ¿Quiere' que te folle hasta que mis dedos se rompa'?— Tori murmuró con burla.

—Mierda, sí, joder, sí! —ese tono humillante en el que había respondido Lexi, calentó a Vicky aún más.

—¿Te gusta' cuando me muevo rápido? ¿Te gusta cuando esto' dentro de ti? —la velocidad aceleró aún más de lo esperado, se movía de una forma tan jodidamente rápida dentro de Lex, provocándole lágrimas de placer.

—Voy a correrme— la espalda de la castaña se arqueó mientras lloriqueaba de placer.

Finalmente dejando escapar todo su jugo.

Vicky la miraba como si fuera oro puro, estaba tan excitada como lo estabas Lexi, estaba loca.

La forma en la que gemía su nombre la calentaba de una manera inexplicable, sus ojos suplicantes y llorosos la ponían loca.

Estos días sin verla la habían sacado de juicio. Y ahora, que la tenía a su merced, no podía estar más satisfecha.

—¡Ven aquí Tori!— la jalo  por los hombros para atraparla en un beso antes de que otro chorro de jugos salió sin previsto, salpicando la camisa de Tori.

—Joder...— susurro.

La satisfacción que Vicky sentía no podría describirse, ni siquiera ella sabia que eso podia pasar. Lexi escondió su rostro en su cuello al terminar de correrte, por segunda vez, aquel gesto la hizo reír.

—Te pusiste pachosa, mami?— rió, burlándose de ti.

—Vamos, Lex, date la vuelta y dame una mejor vista— palmeo el trasero desnudo de la castaña.

Lexi se separo de su cuello para mirarla con los ojos entrecerrados.

Estaba tan agitada pero no exhausta, iba a seguir con ella hasta no tener más fuerzas.

Se alejaste y se dio la vuelta, dándole la vista que quería, dándole la vista de su culo suplicando ser tocado.

Vicky sonrió y frotó sus manos en tu trasero antes de azotarlo.

—Good girl...—murmuró, disfrutando de la vista...

🎀

Vicky abrió los ojos, acostumbrándose poco a poco a la luz del día. Estiro su mano hacia su derecha intentando acurrucarse con Lexi.

Pero fue imposible, no había nadie, Vicky se levanto de golpe y sentó en la cama.

¿Se había ido?

Cualquier pensamiento intruso fue interrumpido cuando noto la ropa de Lexi aún en el suelo, dio un suspiro aliviada y se acostó nuevamente.

Supuso que la castaña estaba en el baño o en la cocina.

Estiro su mano tomando su celular, notando que eran la 1pm, puñeta, Mari la mataría por no estar en el estudio a las 9am.

Vicky abrió su cámara, notando la mordida que Lexi había hecho en su hombro.

Sonrió tocándola, aún se podían ver los dientes marcados de la castaña.

Lexi tenia un fetiche con morder o algo así.

Vicky se distrajo metiéndose a TikTok, esperando pacientemente a Lexi.

Pero pasaron 15 minutos y no había vuelto de Lexi.

—Lex— grito la ojiazul desde la cama y no hubo respuesta alguna.

—Lexi— grito una vez más, sin recibir respuesta.

La platinada se levantó de la cama rápidamente y se colocó su hoodie y un boxer, para cubrir su desnudez.

Fue hacia el baño y no había nadie, salió al living y la cocina y no había nadie.

Lexi se había ido.

La molestia, enojo, decepción y desesperación invadieron el cuerpo de Vicky.

Sus ojos picaban y las lágrimas amenazaban con salir, pero las retuvo.

Alexandra Luna, podría joderse perfectamente.

La había llevado al limite y había sido la gota que derramo el vaso.

No iba a soportar más esto.

Vicky caminó hacia su habitación y tomó su celular.

Victoria - Young miko
Lexi - Lexi 🤍

Young miko

Aunque sea hubiera dejado una nota como la primera vez
eso hubiera sido menos cobarde, que solo largarte a hurtadillas
puedes joderte Lexi, no quiero volverte a ver
espero que hayas conseguido la mierda q querías de mi.
ah si
y ojalá llenes tu bodycount!☺️
groupie.
sent






















capitulo 18 ‼️

uhm, hay una delgada linea entre sonar lastimada y ardida y espero no haberla cruzado en los últimos dos mensajes

no busco sonar despectiva con la palabra groupie, en lo mas mínimo, i promise. Solo es parte del fanfic

quería decir algo q igual y les vale kk pero whatever

uhm, nunca había escrito un personaje como Lexi y realmente soy conciente de q no está super estructurado ni nada pq es un fanfic, guys

es raro tmb escribir insultos tan despectivos, pq son 0 mis creencias
si eres una persona q no quiere tener ataduras con nadie y disfrutar tu sexualidad libremente, no te hace una p !! ☺️,  ni nada parecido

solo es raro
todo esta reflexión fue porque lei sus comentarios, lol, btw me encantan sus comentarios, nadie en contra de eso 🙌🏻

no dejen de comentar, amo leerlos

uhm escribí esto muy de madrugada, mi mente divaga mucho

espero q disfruten el capítulo 💓

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