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La soledad de Alyssa era mayor, casi no hablaba con Lincoln, sus padres no habían aceptado vivir en la torre así que casi no los veía, haciéndola sentir cada vez más sola. La presión en su pecho se volvía insoportable en muchos momentos de sus días por el ya no tener a su hermano.

La relación con la comandante era totalmente tensa, nisiquiera se miraban a la cara o se cruzaban a la hora de comer, Anya era consciente de que Lexa quería creerle a Alyssa pero Titus había sido su consejero por mucho tiempo y le parecía que cometería una traición de ese tipo.

Alyssa había preferido salir continuamente de la torre dejando mensajes a través de Anya para la comandante, durante este tiempo había observado de cerca a la gente cielo.

-Anya dile a Heda que salí... al rio-mintió ella al final de la oración.

Se había preparado con su arco y su bolso para ir a visitar Skaikru, era consciente de que si lo hacía tenía que ser con mucho cuidado por lo que había oído todos eran niños que habían cometido delitos algunos más grandes y otros más pequeños.

-Chicos... hay alguien observando entre los arbustos-susurró una chica rubia de ojos azules claros.

La pelirroja se percató de esto por lo tanto decidió escabullirse entre los arbustos escalando a los árboles mirándolos desde las alturas.

-¿Donde estás?-gritó una chica castaña un poco más baja que el resto, de ojos azules.

Alyssa se mantuvo en calma sin atacar a alguno de estos niños los cuales habían bajado a la tierra.

-Era pelirroja! No puede desaparecer así-insistió la rubia mirando a su alrededor.

La chica de ojos color avellana posó su mirada en el chico de ojos oscuros quien apuntaba una pistola hacia los árboles, está sabía quien era pero no estaba segura de que él la recordara.

-Cuidado con los árboles-murmuró el chico prestando atención al árbol donde la chica se encontraba.

La rojiza noto como sus miradas se cruzaron pero al estar entre tantas hojas, el no lograba descifrarla; De pronto el gatillo de un arma sonó, Bellamy había disparado logrando rozar la bala contra el brazo de la chica en los árboles; un gemido de dolor salió de los labios de Alyssa.

-Le di-aseguró Bellamy escuchando a Alyssa a lo lejos.

Alyssa se rehusaba a bajar del árbol, por lo tanto Bellamy apuntó denuevo hacia el árboles haciendo que la pelirroja bajara.

-No dispares...-pidió ella levantando las manos en señal de paz.

Bellamy se acercó con el arma arriba tomando a la pelirroja de las muñecas para llevarla como prisionera a la Dropship.

-Bellamy...-pronunció la chica haciendo que el chico apoyara la punta del arma en la espalda de ella.

-Como sabes quien soy-interrogó el pelinegro haciendo que entrara en el pequeño campamento que habían construido.

Alyssa miró su alrededor como todos ellos habían construido una fortaleza con ramas y algunos metales de la nave, habían pequeñas tiendas hechas con algunas carpas de donde salían chicas a medio vestir; tenían algunos recipientes con agua y una chica con chaqueta roja llamó su atención.

-Por qué sabes quien soy!-gritó el chico llamando la atención de la pelirroja.

-Porque yo también soy del Arca... tú jugabas conmigo cuando eras un niño...-exclamó ella mirándolo a la cara sin muchas expresiones.

-Alyssa?-pregunto el mirándola notando como la sangre en el brazo de ella caía al suelo.

La pelirroja asintió formando una sonrisa ladeada en sus labios, notando que no la había olvido a pesar de haber pasó dieciocho años separados.

-Como llegaste aquí?-preguntó el acercándose a ella y guardando el arma.

-Mis padres robaron una nave... el atlas, ahí llevaron comida... mucha; también tecnología y aparatos médicos junto a medicamentos... y algunas piezas para crear más tecnología-contestó mirándolo para luego quitar un mechón que cubría su vista.

-Donde está Oliver? Nunca estaban separados-comentó con una leve risa.

-Murió... tienen que tener mucho cuidado... Azgeda mato a mi hermano-advirtió ella mirando las barreras de protección.

-Lo lamentó...-susurró el dándole un abrazo oliendo el olor del cabello de la chica, este olía a flores tal como recordaba.

Mientras esté la abrazaba, la pelirroja seguía con la mirada a aquella chica de chaqueta roja y coleta que tanto le llamaba la atención, si se trataba de seguir manteniendo distancia con Lexa hacer amigos no sería mala idea.

-Tengo que volver...-murmuró separándose lentamente de Bellamy.

-A donde?-preguntó con curiosidad el pelinegro de cabello algo ondulado.

-A la capital... antes de que vengan por mi-soltó ella tomando sus cosas acercándose a la puerta.

La chica de chaqueta roja la miro por unos segundos al igual que la rubia y la castaña de ojos azules.

-Quien vendría por ti-preguntó la chica de coleta alta.

-Mi comandante... si no es que ya esta de camino-balbuceo al final de la oración

-Mebi oso na hit choda op nodotaim(Que nos volvamos a encontrar)-murmuró al final dando la espalda a los chicos saliendo del campamento.

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Alyssa tomó el rumbo hacia Polis, subiendo las colinas y rodeando los árboles, pero no contaba con la niebla ácida que corría por los bosque; de pronto un corno sonó detrás de ella, en lo profundo del bosque. la niebla se acercaba con rapidez así que corrió a Polis, cruzándose en la entrada con la comandante.

-Usted...-susurró la chica con ojos avellana, mirando a Lexa.

-Llévensela- exclamó ella dando orden a los guerreros de apresar a la chica.

La chica de cabello rojo giró los ojos ante la acción de la comandante, está sabia que no le pasaría nada pero era molesta que no pudiera hacer nada sin tener avisar.

Los soldados tiraron a Alyssa hacia su habitación donde la encerraron para evitar que saliera otra vez.

-Heda!-gritó la chica golpeando la puerta queriendo salir.

-Te quedarás ahí hasta nuevo aviso-advirtió Lexa alejándose de la puerta un poco.

-Maldita sea!-gritó Alyssa para patear el marco de puerta cerrada.

Lexa no dejaría que algo malo le pasara a aquella chica que amaba desde hacía mucho tiempo, aunque esta jamás hubiera mostrado interés de regreso o por lo menos no en mucho tiempo.

-Lexa por favor!-continuó la pelirroja insistiendo.

La comandante estaba del otra lado de la puerta escuchando a Alyssa sin querer que está se diera cuenta, había notado que estaba herida y no en su afán de querer cuidarla su mejor opción seria encerrarla.

-No-soltó la castaña con las manos en la espalda.

-Bien-murmuró ella alejándose de la puerta para tomar asiento en la cama.

Lexa se quedó unos instantes más, pero al ver cómo Alyssa estaba más calmada decidió retirarse para esta pudiera descansar.

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Habían pasado varias horas en las que Alyssa había visto películas en una de las tabletas que había conseguido de su casa.

-Rapunzel... mi hermana de encierro- bromeó Alyssa mirando la pantalla de su tableta.

Un golpe en su puerta llamó su atención haciendo que se levantara acercándose a la puerta y por esta entró un chico dejándole una bandeja de comida y una bebida de leche de cabra.

-Dile a Heda que quiero hablar con ella-ordenó la pelirroja tomando el vaso.

El muchacho asintió saliendo de la habitación mientras que la pelirroja seguía bebiendo aquella bebida que provocaba placer en sus papilas gustativa; un poco de esta cayó sobre su camiseta haciendo que Alyssa se lamentara.

-No... mi bebida-lamentó para luego cambiarse a una un poco ajustada de tirantes negra que dejaba ver la herida en su brazo.

De pronto la comandante entró en la habitación mientras la pelirroja arregla la camiseta para que se amoldara a su cuerpo.

Lexa bajo la mirada al ver cómo está se acomodaba la ropa para evitar mirar de más.

-Me llamaste Alyssa-mencionó la castaña mirando a un costado de la chica evitando verla directamente.

-Si... que puedo hacer para no estar encerrada-preguntó Alyssa bebiendo del vaso.

-Mantenerte en Polis... acompañarme en las reuniones-sugirió la comandante mirándo a la pelirroja.

Alyssa giró los ojos dejando el vaso sobre la bandeja puesta sobre un mueble grande de madera hecho a mano; miro con atención a la comandante viendo que le parecía mejor.

-Bien...-aceptó la chica tomando su chaqueta negra dispuesta a salir de la habitación.

Lexa sonrió muy levemente de manera poco notoria, saliendo antes que la chica para dirigirse a la sala del trono.

-Tu brazo está bien?-preguntó la castaña al lado de la chica ojos color avellana.

-Si... solo me lastime con un árbol-mintió mirando el camino.

-Un árbol? Enserio...-dudó la comandante dirigiéndose al establo donde subió a un caballo negro.

-A donde va Heda?-preguntó la pelirroja acariciando al caballo.

-Tu... yo... Indra, Anya y algunos soldados iremos a ver el bosque...-exclamó ella.

-No se andar a caballo... usted lo sabe-recordó Alyssa a la comandante - además mi espada esta arriba.

La pelirroja jamás había aprendido a montar caballo, le asustaba el hecho de caerse de él o de lastimar al caballo por lo tanto su hermano siempre la llevaba.

-Sube conmigo-propuso Lexa estirándole la mano a lo que ella aceptó-tu espada está aquí.

Ignorando lo último que dijo, la mente de Alyssa regresó a la primera vez que había montando un caballo, esta había sido con Lexa casualmente.

Flashback

Era una tarde en la que Alyssa se encontraba cazando por el bosque con su arco, de pronto el cielo se oscureció haciendo que un tormenta cayera

-Como llegaré a casa...-pensó la niña corriendo por la tierra mojada.

El relincho de un caballo llamó su atención, al inicio pensó que se trataba de la temida nación hielo por lo tanto corrió alejándose lo más posible.

-Alyssa espera!-gritó una voz infantil un poco lejos.

La pequeña de cabello rojizo se giró mirando que se trataba de aquella niña que tanto quería.

-Lexa!-llamó ella con una sonrisa cubriendo su cabezas con la bolsa que cargaba.

La castaña tomó la mano de su amiga ayudándola a subir al caballo, Alyssa se aferró de la cintura de la chica temiendo caer.

-Jamás te dejaría caer-aseguró Lexa con una sonrisa

-Lo juras?...-preguntó ella mirando el camino enlodado.

-Por lo que más quiero...-respondió está cerca de la entrada de Polis.

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Los bosques rodeaban a los soldados, las grandes copas de los árboles hacían sobra sobre ellos evitando que los rayos del sol tocaran a los viajeros.

Alyssa se encontraba sentada en el mismo caballo que Lexa, el camino se había hecho un poco largo a lo que está se quedó dormida recostada de la espalda de la castaña.

-No te acostumbres...-susurró Lexa mirando levemente sobre su hombro.

-Lo que usted diga-balbuceó la pelirroja quedándose profundamente dormida.

-Heda-susurró Anya aproximándose al caballo de Lexa.

-Si Anya?-habló la chica mirando a su segunda intentando no moverse.

-Ella solo duerme cuando está con usted-comentó la chica de cabello rubio oscuro.

-tambien lo e notado...-respondió con voz tenue evitando despertar a la chica detrás de ella.

-si no... tiene malos sueños...-continuó la segunda mirando a la pelirroja.

De pronto las manos de Alyssa se aferraron de la cintura de Lexa al sentir como el camino estaba lleno de obstáculos. Lexa miro las manos de la chica sonriendo sin ser notada por los demás.

-Heda ya estamos cerca-mencionó Indra señalando a lo lejos el campamento de los chicos.

Lexa asintió haciendo frenar a los caballos para no ser vistos, y en caso de ser atacados poder defenderse de mejor manera.

-Despierto a Alyssa, Heda?-preguntó Anya bajándose del caballo, acercándose al caballo negro.

-No, yo lo hago-contestó está mirando a su segunda.

Anya hizo reverencia en forma de afirmación, al ésta alejarse la castaña puso su mano en el muslo de le pelirroja intentando despertarla sacudiéndola un poco.

-Aly... despierta-murmuró ella aún sacudiéndola.

La pelirroja empezó a tomar conciencia, levantando su cabeza de la espalda de la comandante quien poseía una sonrisa de ternura en su rostros.

-Lo lamentó Heda-balbuceó saltando del caballo para luego empezar a tallarse los ojos.

Alyssa miro a su alrededor notando a los chicos del arca, al notar que estos estaban trabajando en su campamento, miro a Lexa.

-Que hacemos aquí?-preguntó agachándose para esconderse detrás de una roca.

-Veníamos a ver quienes son...-respondió mirando a la pelirroja.

-Son niños Lexa... todos son niños-contestó sin mirarla con su atención en los muchachos.

-Igual pueden ser peligrosos... los conoces?-indagó la comandante.

-No-contestó está levantándose para tomar su espada.

Lexa la miró frunciendo el ceño levemente al ver cómo Alyssa caminaba en sentido contrario de donde se encontraban, la chica de ojos color avellana continuó su camino.

-A donde vas?-preguntó Lexa con un tono de voz firme y alto.

-A casa! No voy a ver cómo matas a unos chicos-respondió alzando la voz y de mala gana.

Los soldados se pusieron frente a ella para evitar que esta pasara.

-Alyssa! te vas a quedar... nadie va a morir-aseguró la castaña mirando a la chica.

La pelirroja giró los ojos regresando a donde la chica se encontraba para luego sentarse recostada de un árbol sin intenciones de moverse.

-Por que te preocupan tanto?-interrogó la chica.

-No me preocupan-mintió esta con seriedad mirando a la cara a la castaña.

-De acuerdo-respondió la comandante para volver a observar a los adolescentes en la nave.

Los adolescentes se encontraban encerrados en su campamento y de pronto salió una chica rubia con un muchacho de cabello castaño y un poco largo quienes hablaban animadamente y visitaban unos montículos de tierra a fuera del campamento, la comandante no los percibió como una amenaza por lo tanto regresó a donde estaban los demás.

-Ya nos podemos marchar-aseguró ella subiendo al caballo.

-Al fin-murmuró la pelirroja levantándose del suelo.

Alyssa estaba a punto de subir al caballo de Lexa hasta que estaba la detuvo mirándola.

-Sube con Anya o con Indra-ordenó la comandante moviendo su caballo.

La pelirroja asintió, sin embargo, en vez de subir con alguna de las anteriores empezó a caminar ignorando a los demás.

-Vas a caminar?-preguntó la comandante acercándose con su caballo a la pelirroja.

-No tengo de otra... solo e subido a un caballo contigo y con mi hermano-comentó esta pasando una mano por su cabello.

-No confías en Anya para montar?-continuó preguntando la comandante.

-No... yo la aprecio pero prefiero caminar-comentó la chica de los ojos avellana.

Lexa le extendió la mano para que esta subiera al caballo pero Alyssa la ignoró del todo, acelerando el paso. La comandante sabía perfectamente que la pelirroja vivía constantemente en tensión con ella y lo más mínimo la alejaba, sin contar el hecho de que por amenazas del guarda llamas estas ya no eran amigas.

-Te creo...-exclamó Lexa con voz alta haciendo que la rojiza frenara.

-Me crees que?-preguntó Alyssa girándose.

-Que Titus te amenazó...Gustus lo escucho hablando con un soldado...-comentó ella mirándola.

Alyssia asintió para seguir caminando, está entendía que Lexa no podía confiar sin pruebas en su palabra pero eso no evitaba que esto la molestara.

-Alyssa...-llamó la comandante pero la rojiza sólo continuó por otro camino.

Si algo estaba claro es que cualquier decisión que Lexa tomara podía afectarla a ella de manera positiva o negativa, su corazón seguía aferrado a la comandante a pesar de todo y de todos, siendo algo que nunca cambiaría pero por elección propia de Alyssa.

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Nota de la autora 🎧
Hola! Espero les esté gustando estos capítulos, estoy en proceso de escribir un fanfic con Raven Reyes a petición de alguien en TikTok.

Espero le den apoyo a este fanfic y al que estoy escribiendo llamado "Evangeline" el cual es con Raven Reyes de The 100.

Si ven alguna falta ortográfica ya sea de palabra o de signo de puntuación, háganla que yo las acepto con muchísimo gusto así puedo aprender más y no cometerlas en el futuro.

Muchas Gracias ⭐️

Atte: thefairyyy