Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

Capítulo 56

Capítulo 56
Abigail

Luego de un desayuno de tres platos y comer sólo un par de cucharadas de avena junto a Jaden y Mich, Jaden y yo subimos a la habitación donde está Jordan. Él muestra una sonrisa en cuanto nos ve entrar al lugar.

—¡Jaden! ¡Voy a ser papá! ¿Puedes creerlo? ¡Te gané! —¿Qué? ¿Acaso es un concurso de meadas? Cierro los ojos y niego con la cabeza.

—¡¿Qué?! ¡Voy a ser tío-padrino! ¡Felicidades! —Jaden se acaba de auto proclamar padrino de nuestro bebé, pero tiene razón ¿Quién mejor que él para serlo? Jordan se lo propondría con los ojos cerrados, aunque siquiera tuvo que proponerlo, él se adelantó. Esta relación me hace sonreír y pensar que quizás las relaciones de amistad entre hombres resultan ser más sinceras y duraderas, quizás porque lo que ellos buscan es más simple que lo que nosotras queremos, aunque no puedo hablar por todos, hablo por mí, quisiera tener una amiga y ser como ellos dos son, solo hay que verlos reír y pensar acerca del bebé y todo lo que planean hacer si es niño, si es niña otros serán los planes, pero supongo que eso lo sabremos más adelante.

Hoy es el día pautado para el alta de Jordan del hospital, pero antes, tengo que ir a mi cita para hacer el ultrasonido y ver cuántas semanas tiene mi bebé a bordo. Vamos a la sala donde realizan las ecografías. Una asistente me hace beber un montón de agua antes de iniciar la prueba. Mi vejiga va a estallar en cualquier momento. Necesito terminar con esto rápido. Jordan no suelta mi mano y siento como sudan al contacto. Está nervioso porque es la primera vez que vamos a ver a nuestro hijo.

Me gusta verlo así por algo como esto, yo también lo estoy, pero las ganas de ir al baño opacan un poco la emoción de la primera vez. Una chica se acerca a nosotros con amable sonrisa. Pone todo en orden e inicia el proceso. El gel es frío y lo esparce por toda la parte baja de mi vientre, mientras una serie de imágenes en blanco y negro se reflejan.

—¿Ven esto aquí? —señala la joven  con su dedo índice un punto en la pantalla—. Ahí está el embrión —no le digas embrión a mi hijo. Es un ser humano ya—. Ya tienes unas seis semanas de embarazo. Ahora vamos a escuchar su corazón.

—Doctora, ¿cuándo sabremos el sexo? —pregunta Jordan con su voz casi extática por la alegría.

_A las diez semanas quizás podamos ver si es niño o niña.

—Wow, no entiendo nada, pero es hermoso —la ecografista sube el volumen de la consola. Mi propios latidos se aceleran al escuchar la sinfonía acelerada y constante que hay dentro de mí. Es increíble. Es tan hermoso que deja de ser real, me siento en otro mundo, en otra galaxia, en alguna donde tengo súper poderes y me siento completa, no necesito nada más todo lo importante está conmigo y aunque no lo estuve esperando, aunque no planeé esta llegada, siento como si siempre hubiese estado esperándolo, me siento sobrenatural, invencible y súper especial. Sonrío, no creo que haya otra manera de expresar como me siento, plena. Por otro lado, Jordan anda súper sensible, creo que estos días ha soltado todas las lágrimas que no ha derramado en años, su alma se está iluminando y por fin estoy empezando a ver a través de ella. Y confieso que es hermoso.

***

Subimos a la habitación para firmar la salida. Aquí están Daniel y Mich conversando cuando entramos en la habitación.

—Tengo una noticia para ti —dice Daniel dirigiéndose a Jordan-. Te han sancionado con un año de suspensión por subir a competir mientras sufrías una lesión. Tu licencia está inhabilitada.

—Supongo que es lo correcto responde sin ánimo—. Tendré un año sabático para estar con mi familia.

—No te sientas orgulloso de eso. En todos los años que estuve en el ruedo, nunca recibí una sanción. Ni una sola, pero es que no piensas, no piensas en nada, quizás te haya faltado un poco de discernimiento —Mich lamenta.

***

Estamos en nuestro avión, rumbo a Nueva York, devuelta a casa después de tantos meses de estar lejos. Siento alegría de volver y saber que todo está mejor en este regreso. Es como si todo fuese nuevo.

Jordan le marca la ruta al taxi.

—¿Adónde vamos? —pregunto. No sé de quién es la dirección a donde pidió que nos llevaran.

—Me mudé hace unos meses, pero antes de eso tengo que ir a buscar a Snow al refugio. Jaden lo dejó allí, no tenía con quien más dejarlo.

—Wow, no tenía idea. ¿Por qué el cambio?

—Quería estar en un mejor lugar, tu conoces bien como es el vecindario donde vivía. Ya que pude irme a un lugar más seguro, no lo dudé ni un segundo —el taxi se detiene frente al refugio de animales. Jordan me pide que lo espere aquí. Él regresa con Snow sujeto a él con una correa. Está inmenso y hermoso. Lo dejé siendo sólo un pequeño cachorro. Jordan sube junto al perro al taxi y de inmediato está a mi lado, empieza a lamer mi brazo. ¡No me ha olvidado!

_Snow, estás tan hermoso como recuerdo. Jordan te ha cuidado muy bien, ¿verdad? —sigue lamiendo mi mano y ladra en buena lid. Todo lo que sigue del camino, Snow va recostado, con su hocico sobre sus piernas.

La nueva casa de Jordan es un lugar grande, con un buen espacio para jardinería y un gran patio detrás. Él lleva a Snow hasta la parte trasera y éste de inmediato se entretiene espantando a las palomas que están comiendo hormigas en el lugar. Caminamos de vuelta a la puerta principal y él abre la puerta para darme el paso.

Es un desastre aquí. Cajas y cajas en todos lados. Organización no es una palabra que haya pasado por este sitio.

—Lo siento, pero no he tenido tiempo de hacer nada aquí, como mucho hice mi cama allá arriba —se disculpa.

—Está bien. No te preocupes, ya mañana podemos organizar todo esto. Ahora solo tengo ganas de dormir toda la tarde y la noche.

—Bien, vamos arriba. El baño está organizado y el cuarto también, vamos —él toma las maletas y subimos a la segunda planta. Quizás no esté realmente ordenado, como dijo. Pero en estas condiciones y como se sienten mis pies, cualquier lugar resulta ser el paraíso y mucho más si él está cerca.

***

Enfrento el desastre de cajas que hay en la sala. Montones con cosas que no tenía idea de dónde estaban en su casa. Al parecer siempre las tuvo así. Una caja en especial, me llama la atención. Afuera tiene escrito con marcador permanente negro "cosas de mamá" Jordan se acerca en ese preciso instante y se sienta junto a mí en el piso.

—¿Puedo abrir esta caja? —pregunto. Tengo curiosidad de ver qué cosas guarda que pertenecieron a su madre. Él toma la navaja con la que he estado abriendo todas las cajas y rasga la cinta pegante que la protege. Termina de abrirla y me muestra.

Hay decenas de discos. Mucha música, la mamá de Jordan fue amante de la musica. Voy sacando algunos de los discos. Van Morrison, Sinead O'Connor, Enya. No he escuchado nada de ellos, pero si sé que han sido grandes artistas europeos.

—Mi mamá coleccionaba discos de música céltica y jazz, creo que nadie más en este condado y en otros muchos, tiene tantos discos como ella tuvo. A ella le debo mi excepcional gusto por la música —sonríe con nostalgia.

—Qué modesto eres —le sonrío devuelta. Aprovecho la oportunidad de que está disfrutando de los buenos recuerdos para hacer algunas preguntas—. Y, ¿Cómo se llamaba ella?

—Ciara McDonnell, su apellido de soltera luego pasó a ser Ciara King -él se levanta y se acerca a tomar otra de las cajas. La abre y saca un gran álbum de fotografías. Es la boda de sus padres—. El nombre de mi papá era James.

—Así que en realidad tu eres Junior —rio. Empiezo a mirar las fotos del álbum. Una boda rústica en algún valle de Irlanda. Todo luce de ensueño, al fondo hay un hermoso castillo en piedra. La novia luce como una auténtica princesa de cuento de hadas. Más atrás hay una gran foto familiar, lucen jóvenes, pero se nota que es una foto más o menos reciente.
El hermano de Jordan estaba graduándose de High School. Su madre tenía un abundante cabello negro que llega hasta sus caderas y grandes ojos azules, del mismo color que los de Jordan. El padre, en cambio, tiene el pelo rubio dorado y ojos rasgados. Su físico en excelentes condiciones, se puede apreciar a través del traje que luce. El hermano de Jordan es una replica de él, la única diferencia notable es su cabello corto y que fue unos centímetros más alto. Jordan tiene una amplia sonrisa en la fotografía, pocas veces lo he visto así.

—Es una hermosa foto. ¿Qué edad tenías cuando fue tomada?

—Veinticuatro —sigue con tono nostálgico y se incrementa a medida que escarbo más. Termino con unas fotos de ellos siendo bebés y de la inmensidad de fotos desnudos. A estos chicos no les gustaban los pañales y calzoncillos. Es bastante jocoso.

***

Despierto en medio de todas las fotos y el desastre. Nos quedamos dormidos en el sofá. Jordan todavía está roncando sutilmente y durmiendo como un bebé sobre mi vientre. Paso mi mano por su cabello y luego me levanto. Aprovecho la oportunidad y busco uno de los discos que están en la caja de las pertenencias de la mamá de Jordan. Saco el tocadiscos y tomo el primero que está allí. Es el de Sinead O'Connor. Reproduzco el disco de vinilo y las canciones empiezan a sonar. Una canción en especial, desde el inicio empieza a llamar mi atención.

My love
Your love
Has opened up a world I've never known
All hope
Was found

A place I never dreamed I would go
Feels like only yesterday I had locked my heart away
Safe behind a castle of stone
Sure I'd always be alone

Only you know how
To hear me through the silence
You reach a part of me that no one else can see
Forever true there's only me and only you

Only me and you
In your faith I trust
With you beside me I am standing strong
One truth

Two hearts
You took my life and made it beautiful
So you dared to let me shine
Even walk a step behind

Willingly you give yourself to me
Knowing who I was born to be
Only you know how
To hear me through the silence

You reach a part of me that no one else can see
Forever true there's only me
And only you

Only me and you
Only you know how
To hear me through the silence
You reach a part of me that no one else can see

Forever true there's only me
And only you
Only me and you

No tengo que agregar nada acerca de lo mío con Jordan. Allí lo dice todo, más de lo que quisiera que se sepa.

***

Nuestro vuelo aterriza en el aeropuerto Napa County. Hileras y más hileras de las vides que adornan el paisaje hasta el viñedo de papá.

Decidieron pasar un fin de semana campestre, así que nos tocó venir aquí a darles la noticia de que serán abuelos. Mi mamá va a morir cuando se enteré que tendrá un nieto, sentirá que todo el colágeno que se ha inyectado, ha sido en vano. Me da alegría estar haciendo este viaje hasta aquí.

Llevo mucho tiempo sin venir y sé que a Jordan le encantará el paisaje de este lugar, quizás le recuerde la paradisiaca vista irlandesa de Kerry. El gran portón está abierto y nos da paso al largo camino hasta la casa, y el centro de operaciones. Bajamos del auto y tocamos la puerta principal. Una señora mayor, que no conozco, nos abre la puerta.

—Tu debes ser la hija del señor Turner y su novio —nos recibe.

—Así es —respondo con una sonrisa.

—¡Qué placer conocerlos! Llevo 2 años trabajando para los señores y no te había visto —me abraza y luego a Jordan.

—El placer es nuestro. Mi nombre es April y él es Jordan.

—Miranda. Vengan, pasen, ¿Qué esperan? Los señores están en la terraza —ella nos guía allí. Papá nota nuestra presencia y se acerca a nosotros.

—¡Abby! ¡Cariño! Qué gusto volver a verte. Ya si estoy tranquilo que saber que volvieron en una pieza —dice nos saluda con un abrazo.

—Sí, papá. Te dije que estamos bien —mamá se acerca y me da un beso en cada mejilla.

—Abigail. Que bueno verte, hija.

—Sí, hace mucho no los veía. Los extrañé —se acerca a Jordan y le da su mano de forma amable. Se está comportando.

—Que bueno verte a ti también por aquí.

—Gracias por la invitación —responde. Papá nos interrumpe.

—¿Y tú cómo sigues? Luces como nuevo —le pregunta a Jordan.

—Casi estoy listo para salir a la venta, pero supongo que todavía me falta la etiqueta —sonríe. Papá se ríe con el comentario.

—Me alegra escuchar eso. Todo va a estar bien. Vengan, vamos a sentarnos en la terraza —tomamos asiento en la terraza. Mamá acompaña a papá a buscar algo, mi instinto piensa en el vino de inmediato. Pasan unos minutos y, efectivamente, papá viene con una botella en mano y mamá viene junto a la señora que trae la vinera y algunas copas. Papá las sirve de inmediato. Confieso que muero de ganas de probarlo. Es reserva especial. Hablamos acerca del viaje a México y como nos ha ido hasta volver aquí.

No he tocado mi copa, supongo que lo he compensado hablando más que todos. No sé porqué sencillamente no le decimos. No sé quién debe tomar la iniciativa, seguro es él. Quizás está esperando que le dé luz verde.

—Chicos, vamos a mostrarle a Jordan la bodega y la fábrica —nos invita papá. Caminamos hasta el local y papá le habla a algunos de los empleados. Él llama a Jordan y éste entra solo al lugar.

—¿No vamos nosotros? —pregunto algo confundida.

—No, tú y yo vamos a dar un paseo por el valle, padre e hija. Como los viejos tiempos.

Caminamos a través del sendero, yo apoyando mi mano sobre su hombro y él rodeando mi cintura con su brazo. Siento el olor de las plantas que se arrastra por la suave brisa este-oeste que pasa sobre nosotros.

—Cuéntame, ¿Cómo vas? —pregunta papá.

—Supongo que bien. Creo que estoy haciendo las cosas más de la manera que debería hacerlas. Ese viaje a México fue muy revelador, tuve un encuentro conmigo misma y aunque pasaron muchas cosas que no quisiera que hubieran sucedido, pero pasaron cosas tan buenas que cubren lo malo que pasó —le confieso—. Hay una nueva April. Incluso hay un nuevo Jordan, creo que estamos en el siguiente nivel, porque todo antes fue un juego, nos estábamos divirtiendo.

—¿Un juego? Yo no lo veía así. Una cosa es lo que tú querías pensar que era y otra lo que realmente es. Cariño, tienes que dejar atrás todo ese auto control, todas esa limitaciones y esas retenciones que tienes en ti. La vida es demasiado corta como para no decirle te amo a aquellas personas por las que lo sientes. Necesitas darles ese voto de confianza y entregar tu corazón, otra vez.

—Tienes razón. Creo que ya lo hice y él también. Ahora estamos más unidos que nunca, desde que él viajó a Alemania todo cambió, se hizo diferente y supe que si era lo que yo quería y necesitaba. Ahora no me cabe la menor duda.

—Lo es. Luego de un paso tan importante como el que están pasando —me detengo y me pongo frente a él. ¿Cómo dice eso? ¿Acaso sabe del embarazo?—. No pongas esa cara. Te conozco como la palma de mi mano.

—¿Cómo supiste?

—No tomaste de tu vino favorito. La única explicación lógica es que voy a ser abuelo.

—No se te escapa una, en serio no se te va nada —me acerco a él y le doy un abrazo—. ¿Cómo te sientes con ello?

—Estoy feliz. Ya es tiempo de tener un niño corriendo en pañales por mi sala, alguien que me venga a visitar y que yo pueda malcriar. Eso quizás haga que vengas más a menudo a visitar al viejo.

—No estás viejo, papá —rio—. Y claro que vendré más a menudo. Sobre todo porque mamá está más asequible y dejó su plan de búsqueda de alguien "adecuado" para mí.

—El amor no es cuestión de tener a tu lado alguien adecuado para ti, más bien se trata de tener a alguien que te haga sentir. Muchos se preguntarán porqué alguien como yo está con alguien como tu madre, caracteres disimiles, ella es más reservada y todo eso que ustedes ya saben, somos diferentes. Y de eso se trata, ella tiene todo lo que necesito, por eso la amo y trabajo duro para hacerla feliz.

_Tiene sentido y soy testigo de que ha sido así, sé lo que sientes y siempre quise tener un amor así.

—Eso hay que cultivarlo. Luego lo cosechas en el futuro, hay que trabajar para ello. No lo olvides nunca, trabaja duro y verás los resultados. Solo sé paciente, las cosas llegan cuando les toca su momento.

—Eres el mejor. Gracias, papi. Te amo.

—Yo más a ti, nunca lo olvides.

***

El celular de Jordan suena, mientras estoy organizando algunas cosas en el armario. Él se acerca para contestar la llamada.

—Hey —saluda—. Dame un segundo —presiona la pantalla y escucho la voz de Jaden en el altoparlante—. Saluda a April.

—¿Cómo está la madre más sensual de todo Nueva York y Los Ángeles? —no sé cómo es capaz de hacer que su sonrisa atraviese el auricular.

—Ahora que te escucho, mejor, y tú, ¿Qué tal?

—Estoy hablando con mi jefe. Como Jordan necesita algo de ejercicio, pues lo voy a ayudar con eso. Tenemos un asunto pendiente aquí en el bar ¯no tengo idea de qué hablan.

_Oh. ¿De qué se trata?

—Es una sorpresa para ti, cariño. Lo vas a disfrutar, lo prometo —estoy intrigada.

—Si es lo que estoy pensando, ni lo sueñes —dice Jordan.

—Hermano, no lo sueño, lo vivo. Cuida a nuestro bebé y ve pensando en la canción que quieres para tu show. Nada soso por favor. Solo llamé para confirmarte y que sepas que debes estar preparado para cuando vuelvas. Nos vemos, colega. Adiós princesa.

—Adiós  —me despido. Jordan suspira y encojo los hombros a modo de pregunta para que me explique qué con Jaden y esa llamada.

—Ni siquiera quiero mencionarlo. Ya verás de qué se trata. En lo que me meto por mi gran boca —él se lamenta. No sé que tienen entre manos, pero si estoy segura de que será muy divertido.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro