Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

Capítulo 30

Capítulo 30
Abigail

Creí que se había terminado toda conversación con este señor, pero al parecer no se rinde. Salimos todos de la caravana con nuestras pijamas triples con abrigo y mantas incluidas. Entro en la que es nuestra casa de campaña y Jordan detrás con la linterna encendida.

—Enciende tu luz para terminar de cerrar esto —me pide. Busco a mi lado la linterna y la dirijo hasta él. Jordan termina de cerrar el zipper y entra en su bolsa de dormir.

—Buenas noches —le digo.

—¿No hay beso de buenas noches? Me debes uno de esta tarde.

—Bien —me acerco y le plantó un beso rápido en los labios.

—Ahora sí, buenas noches —está totalmente oscuro así que da igual cerrar o no los ojos, parece como si un agujero negro nos ha consumido, Jordan ya está dormido, lo siento por su respiración, no me queda de otra que seguirle el paso y dormir también.

(...)

Un sonido proviene de algún lugar desconocido, algo se está moviendo allá fuera, al inicio me despreocupo, pero sea lo que sea, está golpeando la débil tela que nos separa del exterior.

Busco mi linterna y alumbro hacia fuera. La sombra imponente de un animal silvestre se ve reflejada contra la casa. Mi corazón se acelera y ni siquiera soy capaz de mover mis miembros. Trato despacio de levantar a Jordan, pero éste no responde. Alzo mi mano hasta él y le llamo:

—Jordan. Despierta —digo en voz baja para no hacer rabiar al animal allí fuera. Él tiene que salir y ahuyentarlo—. Jordan... Jordan... Jordan... — esta última vez abre los ojos un poco y bosteza.

—Por Dios, ¿qué hora es?

—No sé. Jordan escucha habla despacio, ahí un oso salvaje allá fuera tienes que salir y ahuyentarlo, porque sino devorará la casa de campaña — digo.

—Duérmete, no hay ningún oso ni nada. Son cosas tuyas — vuelve a cubrir su rostro y yo lo alumbro otra vez—. Mírame estoy muriendo — pongo su mano en mi frente para que sienta las gotas de sudor que se han concentrado allí.

—Estás sudando. Con este frío. Voy a salir solo para demostrarte que no hay nada aquí. No tienes porque temer —sale de su bolsa y enciende la linterna. Abre el zipper y yo me quedo envuelta en la mía a esperar que regrese. Estoy temblando del frío, y no puedo dejar de balancearme de adelante hacia atrás. Escucho la risa de Jordan al otro lado.

—April —me llama—. Ven tienes que ver esto. Sigue riendo parece que es algo gracioso. Tengo miedo de salir, pero confío en que él no me mostraría nada que aumente mi temor, así que salgo. Él va a mi encuentro y caminamos.

—¿Qué pasa? —siento mi voz temblar.

—Mira, aquí tienes a tu oso feroz — él ilumina una pequeña ardilla comiendo una nuez. Jordan sigue riendo y de paso mi cuerpo se relaja.

—Oh gracias al cielo — respiro.

—Si quieres, dormimos en la caravana. Despierto al chófer y listo.

—No te preocupes. Falta poco para el amanecer. Vamos dentro —enlaza sus dedos con los míos y caminamos hasta el interior de la casa—. Fuiste muy valiente. Gracias por arriesgarte.

—No hay de qué. No le tengo miedo al oso salvaje. Un par de puños y al suelo.

—Sí, claro. Luego dabas la vuelta y el que termina devorado y en el piso serias tú — rio.

—Quizás, pero hubiese muerto como un héroe.

—Mi héroe.

(...)

En la mañana Claire prepara un rico desayuno en la cocina de la caravana mientras rodamos hasta Denali. Está previsto que lleguemos hoy al mediodía. Mientras tanto, los chicos juegan al poker y yo observo el panorama, el cielo azul, acompañado de los matices blancos de las grandes montañas teñidas del blanco espeso del hielo, hacen contraste con la línea interminable de pinos que nos guían hasta nuestro destino.

Es una mezcla entre hermoso y temeroso. Temeroso por los peligros que trae consigo el interior del bosque, animales feroces, plantas venenosas y arena movediza. Me hace recordar que así somos también los humanos, nos arreglamos y nos mostramos ante el mundo como algo precioso e inmaculado, pero cuando ahondamos más allá, encontramos el peligro, la maldad y las malas intenciones de los demás. Sin embargo, nos dejamos guiar por aquello bueno que nos mostró.

Claire anuncia que el desayuno está listo y el chófer se hace a un lado de la carretera para tomar su desayuno también. Todo transcurre entre risas y la suerte que tiene Randall de tener una novia que cocine tan delicioso.

Pasado el mediodía, llegamos hasta nuestro hotel en Denali. Es una hermosa villa construida totalmente en madera, con vista al hermoso sistema montañoso de la región. Un acantilado está justo al lado de nosotros, es lo único que hace esto un poco tenebroso.

Jaden y Jordan han ido a recoger al Four Wheel que nos corresponde para hacer el pequeño tour del día de hoy.

Estando en el pasillo justo frente a la que es nuestra habitación, Igor me detiene.

—Hey, April. ¿recuerdas que quiero hablar contigo?

—Sí, claro.

—Podemos aprovechar que estás sola ahora. Podemos quedarnos en la sala de acá arriba, o donde gustes.

—Aquí mismo está bien — aminamos un par de metros y nos sentamos en el sofá grande color mostaza—. Soy toda oídos. Te escucho.

—Antes que todo, quiero que sepas que quien te está hablando no es el hombre que en algún momento de pretendió, o te pensó como un posible prospecto. No, te está hablando Igor, el entrenador, Igor el amigo de J.J., Igor el campeón del mundo de años atrás. En ningún momento querría que pienses que está conversación está algo contaminada, porque no es así, yo no soy así, sé cuales son mis límites y hacia dónde debo dirigir mi vista. ¿Comprendes esto?

—Claro, te escucho.

—Bien. Déjame contarte una historia. Cuando estaba haciendo mis pininos en el boxeo, tenía una novia, hermosa, una rubia impresionante con más curvas que la carretera hasta aquí, era el amor de mi vida, y que decirte, no han nacido amantes más traviesos que nosotros —vaya comentario—. Recuerdo como hoy a Felipe, mi primer entrenador, que Dios lo tenga en su seno, me decía que qué demonios era lo que hacía, porque no rendía como mi capacidad podía hacerlo. Jamás pensé que lo de tener pareja me afectaría, así que nunca le dije sobre eso. Luego el me vio con ella a la salida del gimnasio y me hizo un reto; me dijo que dejara a mi novia por seis meses, si veía que rendía igual o peor que siguiera con ella, pero si notaba el cambio en mis capacidades físicas, que tomará yo mismo mi decisión.

—¿Qué hiciste? —la historia está poniéndose interesante.

—Yo, un muchacho con ansias de romper el mundo en pedazos y partir un sinnúmero de mandíbulas, acepté el reto. Con el dolor de mi alma la dejé. Al principio fue difícil y la rabia que creció en mí fue tan inmensa que estoy seguro que más que mandíbulas, rompí almas. Y eso está bien, el boxeador no puede perder ese instinto animal de matar, tiene que sentir el vacío de que el mundo está en deuda con él y de algún modo tiene que cobrárselo. Sino es así, no serás campeón del mundo, a menos no por tu propia fuerza. Quizás J.J. tenga un vacío, pero dicen que un vacío llenado con algo parecido, apacigua el dolor y creo que eso ha sucedido con él, pero hasta ahora no ha sido dañino, pero si él quiere el campeonato, necesita más rabia y creo que este es el mejor momento de detenerse. Por lo que sea que sientas por él, debes hacerlo. Al final él te lo agradecerá, porque después de todo, yo no me arrepiento de haberlo hecho, de hecho, pienso que esta ha sido mi mejor decisión.

Nunca me había sentido tan impactada con unas palabras. No quiero ser piedra de tropiezo en la vida de nadie, mucho menos en la vida de Jordan, él tiene metas que lograr y yo no quiero ser la culpable de troncharlas en el camino. Y sí, también tiene razón, la sensibilidad ha vuelto a su corazón, aunque él no esté seguro de que sea así, yo sí lo sé y lo siento cada vez que estamos juntos. Sus palabras rondan en mi cabeza y hay cosas que debo poner en marcha, solo tengo que buscar la mejor manera para hacerlo, aunque se lleve parte de mi corazón.

—Tienes razón —le respondo. Respiro profundo y me levanto para irme hasta nuestro cuarto, que podría dejar de convertirse en nuestro desde esta misma noche. 

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro