SMG4 Mario ABDL. Parte 2
En otro de los días en los que el grupo cuidada a Mario, Smg4 estaba alimentando a Mario, dándole una botellita con leche, su 5ta botella de leche.
Smg4: Tal vez tu mente ahora sea la de un bebé, pero eso no hace que tu hambre siga siendo así de grande, ¿eh?
Mario sólo lo mira con mientras bebe su leche, de todas formas, Smg4 no esperaba que Mario respondiera ni nada.
Smg4: Je, creo que podría acostumbrarme a esto.
Creo...
Más tarde ese mismo día, Meggy justo ahora estaba con Mario, se encontraba en el baño con el fontanero bebé sin ropa apunto de meterlo en la tina.
Meggy: No entiendo porqué todos se niegan a bañarte, todos ya te hemos visto desnudo.
Meggy decía esto mientras ponía a Mario en la tina para darle un baño, el fontanero rojo sólo tomaba esto con calma, mientras chupaba su chupón como era ahora de costumbre de él.
Meggy empezó a bañar a Mario, empezando con su cuerpo.
Meggy no tuvo problema en bañar al bebé grande, ya que éste se dejaba bañar sin problema.
Pero no iba a estar así por mucho tiempo.
Meggy: Muy bien Mario, ahora debo lavar tu cabello.
Justo cuando Meggy le echó agua encima de la cabeza a Mario, éste empezó a inquietarse, empezando a gritar y llorar, soltando su chupete y cayendo a la tina.
Meggy sostuvo a Mario, evitando que él saliera de la tina.
Meggy: ¡Mario, deja de retorserte! ¡Es sólo agua!
Mario seguía llorando, no le gustaba la sensación de tener su cabello mojado, era horrible para él.
Meggy trató de seguir bañandolo, no fue fácil, pero al final lo logró.
Más tarde, Mario estaba en su habitación tomando una siesta en su cuna ya bañado, con un mameluco color rojo suave y caliente.
Su cabello ya estaba seco, Meggy se lo había secado con una secadora de cabello, cosa que tampoco fue muy fácil, ya que al parecer Mario tampoco le gusta los ruidos fuertes por un largo período de tiempo.
Meggy estaba sentada en la silla de la computadora cansada.
Meggy: Vaya Rojo, no pensé que no te gustara lavarte el cabello, mucho menos los ruidos fuertes.
En eso, llegó Luigi a la habitación, mirando a Meggy cansada y a Mario profundamente dormido.
Luigi: ¿Cómo te fue dándole un baño?
Meggy: Al parecer no le gusta el cabello mojado y los ruidos fuertes por mucho tiempo.
Luigi: Oh sí... Desde niño a Mario nunca le gustó lavarse el cabello, y no le gustaba oír a Mamá secarse el cabello por un largo tiempo.
Meggy: Esa información mr hubiera servido antes de bañarlo.
Luigi: Lo siento.
Meggy: *Suspira* Como sea, ¿a quién le toca cuidar a Mario esta noche de todos modos?
Luigi: Bob y Saiko, pero sigo sin estar muy seguro de dejarlo con ellos.
Meggy: Mario necesita convivir con todos, no puede estar sólo con uno de nosotros, se encariñará y no querrá estar con alguien más.
Lo ideal es tener cierto tiempo para estar con él.
Ambos miraron a Mario dormir en silencio, Luigi aún preocupado e inseguro por lo que sucederá en la noche y Meggy simplemente muy cansada.
Llegó la noche, eran las 8:00 pm, Mario se encontraba fuera de su habitación, cerca de las escaleras del castillo.
El chico rojo estaba jugando con unos bloques de construccion y unos peluches que tenía a su alrededor.
En eso, Mario nota que una sombra lo cubre por completo.
Mario mira hacia arriba viendo el responsable de esto, viendo a nada más ni nada menos que Bob.
Bob: HeY Mario, eSpeRo qUe eSTés liSTo pArA esTa nOcHe, pOrqUe esTa nOcHe yO seRé qUién tE cUide.
Mario miró por unos segundos a Bob, paradenado un par de veces, luego empezó a llorar, la apariencia de Bob simplemente le era horrible.
Saiko al oír llorar a Mario, se levantó del sofá y fue a verlo.
Saiko: ¿Podrías no hacerlo llorar? Necesitamos que él se sienta cómodo con nosotros, no aterrado.
Bob: HeY, nO eS mI cULpA qUe éL nO tEngA sEntIdO dEL hUmOr.
Saiko le dió un golpe con su martillo, mandándolo a la pared, su cabeza dentro de la pared y el resto de su cuerpo afuera.
Bob: ¡¡¡AAAAAAAUUUUUCHHHH!!!
Con eso, Mario empezó a reírse por el sufrimiento ajeno de Bob.
Saiko: Tal vez tengas la mente de un bebé, pero sigues teniendo ese sentido del humor.
Saiko levantó a Mario y se lo llevó a la cocina para darle una botella de leche y luego acostarlo, mientras que Bob aún seguía en la pared.
Bob: ¡HeY, qUe aLGUien Me aYude!
¡AúN sIgO aqUÍ!
Más tarde esa noche, a las 9:15 pm, Mario ya se encontraba en su habitación durmiendo, mientras que Saiko oía música con sus audífonos mientras vigilaba al chico rojo.
En eso, Mario empezó a moverse de un lado a otro en la cuna, algo que Saiko empezó a notar.
La chica de cabello rosado quitó su música, se quitó los audífonos y se levantó de la silla, llendo hacia la cuna de Mario, levantandolo y empezando a mecerlo lentamente.
Saiko: Sssshhhhhhh. Sshhhhhh.
Mario de alguna forma, eso lo calmó y pudo estar tranquilo nuevamente. Saiko lo puso nuevamente en la cuna y ella volvió a sentarse en la silla, volviendo a ponerse los audífonos y reproduciendo su música.
Esa noche no pasó nada más.
Durante las semanas, a todos se les notaba las ojeras de cansancio, cuidar a Mario no era nada sencillo.
Meggy: Hombre, estoy muy cansada.
Smg4: No recuerdo la última vez que dormí mis 8 horas.
Boobkins: Cuidar a Mario no ha sido fácil para nada.
Meggy: Luigi, ¿Enserio tus Padres tuvieron que lidiar así con tu hermano?
Luigi: Mamá y Papá siempre fueron pacientes con Mario, él siempre fue el más alguien berrinchudo entre nosotros.
En eso, todos oyen a Mario llorar, todos suspiran pesadamente con una queja.
Tari salió de la habitación de Mario con él en sus brazos.
Mario lloraba de forma descontrolada mientras que la peliazul, con ojeras también, llevaba a Mario en sus brazos caminando hacia Meggy.
Tari: Meggy, creo que Mario quiere estar contigo.
Traté de saber qué le pasaba y ya no se me ocurre qué podría ser.
Meggy extendió los brazos y tomó a Mario, éste apenas fue a los brazos de Meggy y se calmó, dejando de llorar y sólo teniendo hipos, los cuales no duraron mucho tiempo, ya que Mario ya estaba completamente calmado.
Meggy: Hhmmp, que caprichoso eres, rojo, haces un berrinche sólo para estar conmigo.
Luigi: Se ve que le agradas mucho.
Meggy: Sí, pero eso no es excusa para que él sea tan mimado por eso.
Mario calmado, cerró los ojos, empezando a quedarse dormido en los brazos de Meggy.
Luigi: Je... Se ve tan tranquilo cuando duerme.
Smg4: Sí, definitivamente esta es mi parte favorita de Mario, cuando no llora.
Tari: Aaww, se ve adorable contigo, Meggy.
Meggy: Mmm, supongo que sí.
En eso, Mario empezó a moverse en los brazos de Meggy.
Mario: Mmm....
Meggy:?
Mario: Whommy...
Todos: Ah!!!!!????????
Nadie lo podía creer, no podían creer lo que acaban de oír de Mario.
Mario: Whommy...
Meggy: ¿W-Whommy?
Luigi: Dijo tu apodo.
Tari: Aaww, sus primeras palabras, que tierno.
Boobkins: Wow, no lo puedo creer, de verdad Mario dijo sus primeras palabras.
Smg4: La verdad no creí que pasaría.
Meggy sonrió por eso, para ella también le pareció adorable y tierno.
Meggy acomodó mejor a Mario en sus brazos y lo dejó dormir.
Luigi: ¿Crees que Mario logre volver a la normalidad?
Meggy: Por supuesto que sí, tengo fe en ello.
Sólo debemos ser pacientes y dejar que él tome su tiempo, no hay que presionarlo.
Algunos tenían esa esperanza de ello, mientras que otros no, pero él tiempo lo dirá todo, eso es un hecho.
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