JiMin estaba feliz, parecía que JooYeon lo había aceptado, el niño ya lo saludaba sin timidez y podían conversar de todo lo que le gustaba. YoonGi amaba ver a su novio junto a su hijo adoptivo... el proceso llevaba un buen ritmo, gracias a sus influencias, y que JiMin resultaba ser un doctor bastante reconocido en su rama, no había dudas o conflictos respecto a lo económico.

Dos meses más tarde, JiMin decidió reunirse con sus padres, pidió verlos un día antes de que JooYeon se mudara definitivamente a su hogar. Habían adecuado una de las habitaciones para JooYeon, colocaron ropa, juguetes y en estante donde pudieran colocar sus libros y manualidades del colegio, JiMin se había dado la tarea de buscar uno que le quedara cerca del hospital, incluso habló de ello con la trabajadora social que llevaba su caso.

Sus padres estaban en el resraurante de siempre, era un lugar bastante privado y lo necesitaba para poder hablar con ellos de la manera más tranquila posible. La reacción de ellos le provocaba incertidumbre, no había pasado ni medio año que se había ido a vivir con YoonGi, y ya era papá.

Cuando los vio, lo abrazaron y se sentaron. JiMin suspiró, mientras decidían que comer, hablaron de cosas triviales, JiMin esperaba terminar la comida para hablar seriamente con ellos.

- ¿Quieres decirnos algo?- su madre dice mirandolo solo remover la comida.

- Bueno... sí, pero, prefiero que terminemos de comer...- menciona mirando a ambos, su padre parece estudiarlo con la mirada y su madre trata de ser compresiva y asiente.

Media hora más tarde y JiMin vuelve a suspirar, busca algo en su billetera, la foto de JooYeon con YoonGi, la llevaba porque fue el día que les dijeron que el pequeño se iría con ellos como su hijo oficial. Claro, que llevaría el apellido de YoonGi, pero eso no le quitaba la emoción...

- Quería mostrarles...- desliza la fotografía hasta sus padres, JiMin analiza sus reacciones.

- ¿YoonGi tiene un sobrino?- pregunta su madre dudosa.

- Tiene un hijo...- su padre dijo, de alguna forma su padre siempre era más directo, le gustaba eso de él.

- Sí- JiMin dijo seguro.

- Bien, ya lo sabías, no es sorpresa para ti, por algo nos has citado de esta manera- su padre dijo, mientras su madre seguía observando la fotografía.

- Al principio sí, pero no es lo que te imaginas papá- sonríe y su madre tiene la duda- YoonGi inició un proceso de adopción mucho antes de conocerme...

- ¿Qué?- su madre está sorprendida, su padre regleja asombro pero no dice nada.

- YoonGi habló conmigo al respecto y ese pequeño ya tiene parte de mi corazón, se llama JooYeon, tiene siete años, y de hecho, mira a YoonGi como su figura paterna, estuvo con él desde los dos años...- dice JiMin.

- ¿Pasó cinco años esperando la aprobación?- su madre pregunta.

- Bueno, hubiera sido mucho antes, pero con lo del accidente y sus constantes viajes, me dijo que tuvo que pausarlo... la encargada social que llevaba su caso le dijo que reabrirían su caso, solo actualizaron su información y el hecho de tener a un pediatara de pareja les ha dado confianza...- JiMin menciona entre avergonzado y orgulloso.

- Hijo...

- JiMin, un hijo no es solo porque quieres tenerlo y ya, es responsabilidad emocional, económica, psicológica, sí YoonGi y tu se separan ¿qué pasará con el pequeño?- su padre lo mira.

- No es así, papá, sé que es dificil para ti, pero entiendo completamente, solo denle una oportunidad... es un buen niño, y estoy conciente de todo lo que conlleva ser padre, y aun si YoonGi y yo nos separamos, seguiré siendo una figura paterna para JooYeon...- JiMin dice tan tranquilo que sorprende a su propio padre.

Ambos mayores solo lo observan y asienten, mentirían si negaran que no deseaban ser parte de la vida de su hijo, verlo volver a sonreír como cuando bailaba, su padre supo que JiMin decidió llevar sus carreras de manera simultanea para evitar pensar que ya no volvería a bailar. YoonGi era quien le había devuelto el brillo a JiMin, el estar enamorado JiMin se sentía feliz.

La comida se había alargado lo suficiente para que su madre llamara al mesero y pidiera un postre para todos.

- Le gustan mucho los deportes, creo que es porque su tutora en el hogar le dejaba ver los partidos de YoonGi, y verlos juntos es tan lindo...- JiMin les comenta- He buscado un colegio que quede cerca de mi trabajo, para que cuando YoonGi vuelva a utilizar el auto, poder almorzar juntos, su cuarto ya está preparado, y Holly se ha familiarizado mucho con él, nos permitieron llevarlo al centro y estaba emocionado de verlo...

Sus padres lo escuchaban y se veía casi tan feliz como cuando hablaba de la academia de baile.

Cuando se despidieron, su madre lo abrazó y le dijo que se verían el fin de semana para darle tiempo al niño de adaptarse a otro espacio, JiMin asiente, su padre lo abraza.

- Solo deseo que seas feliz, JiMin, eso es lo que deseo...- le dice, se aleja y lo mira a los ojos- Y yo que pensé que no sería abuelo...

JiMin ríe y asiente, sus padres suben a su auto y se alejan, bien, salió mejor de lo que había esperado. Subió a su auto, y regresó a su hogar. YoonGi lo recibió, lo abrazó y ambos rieron.

- Van a venir el fin de semana...- le comunica, YoonGi sabe que también debe explicarse con sus suegros, pero ver a JiMin tan feliz le hizo sentir también tranquilidad...

Una etapa que anhelaba, estaba por comenzar...